Partida Rol por web

(La chica te oyo golpear la puerta y se acercó por el fondo del pasillo)-Toma...(te dio lo que parecía tu cartera)...creo que hay una parejita ahi dentro y no quiere se molestada, han pasado al patio las maletas y al verlas he cogido la tuya y la mia...te apetece que nos vayamos...se por donde salir sin que nos pillen(te señala la joven con el pulgar de su mano hacia una de las escaleras).

(Tal como si de un muñeco de un programa infantil se tratase apareció la figura de Rei, la extraña muchacha de la clase de al lado, Nunzio estaba de espaldas a ella y no la vió, pero Soun sí)-Parece que estais jugando a un bonito juego...entre hermanos...

Entro en la enfermia todo resuelta a ver que me encuentro...

(Me siento en tus piernas)-Bueno...podemos...improvisar...(le besa delicadamente los labios, con sólo un "piquito" rápido)...¿no?.

-ah vale- respondo indeciso a Reiko "vaya sitio para montarselo, al menos el cuarto de escobas es mas discreto"

Bueno, pues será cuestión de marcharse

"¿habrán tirado las carteras de todos por la ventana? esos dos deben de estar mal. ¿quien serán?"

-venga te sigo, vamonos- digo a Reiko y empiezo a seguirla mientras intento adivinar quien puede ser

(Actualmente en la enfermería,solo se halla Megumi,no hay nadie en camilla del centro de la habitación,en el lado derecho cercano a uno de los ventanales había un biombo que tapaba esa sección,la zona izquierda de la enfermería tenía un escritorio y una silla donde se sentaba Megumi,y el armario y dispensario de material sanitario,divididos en dos partes,la superior en estanterías y la inferior en una mesa con un fregadero de lacrada blanca, por la puerta entren Mahiru y Kaito).

Sentirla cerca de mi, tomandome las manos, me alegra, y no puedo esconder mi sonrisa- Me refería a provocarte para que me invitaras, ya se que nos gusta estar juntas a la dos, para mi tambien... es algo apetecible -me pienso esas últimas palabras- Si le digo que "es algo especial" se sentirá presionada, y yo tampoco me sentiría cómoda, soltandolo sin más. Quizás en un momento más... íntimo -nos dan mesa junto a la ventana, nos sentamos y ojeamos la carta, cuando me pregunta, asiento- Definitivamente no quiero pizza, es lo que más comí mientras estudiaba y opositaba como profesora -estoy leyendo aún la carta, y me decido- Pues, quiero... -siento como roza mi pierna, y la veo sacarme la lengua, me sonrojo, aunque logro tranquilizarme cuando se detiene- Quiero pasar más tiempo así, contigo... -me río en voz baja, apartando la mirada- ...y pasta, con carne, una boloñesa -cuando al fin nos toman notas, esperamos a que traigan los platos y, al menos yo, empiezo a comerlo con gusto- ¡Es delicioso, comida de restaurante, y no la tengo que pagar yo! -me sonrío, por ese pensamiento tan tontorrón- ¿Porque no me cuentas lo que averiguaste tú, sobre el profesor o el pervertido aquel? ¿Fuiste buena chica y te mantuviste al margen de esas cosas, como te pedi?

(Seguiste a Reiko hasta el gimansio, entrando por la puerta de chapa que había detrás del mismo y que extrañamente Reiko tenía la llave de la misma tras unas colchonetas se hallaba un armario de material cuya chapa estaba rajada dejando una entrada de unos 2 metros por la que os colasteis y salisteis al parque contiguo a la instalación academica)-Vamos a mi casa, si estamos por aquí quizás nos pillen...o algo así...(una hora es lo que tardais callejeando en llegar a un bloque de pisos de estilo urbano, bastante común nada especial, en la segunda planta hasta la cual subis por la escalera, aunque no sabes bien porque...abre la puerta y te da paso al piso)-Bien, pues hemos llegado...Iro(lo primero que ves es el pequeño recibidor como en casi cualquier casa del Japón, tras ella hay un salón amplio aunque algo oscuro, pues tenía cortinas verde oscuras totalmente cerradas, las luces no eran muy iluminadoras apenas dejaban ver una televisión de unas 40 pulgadas, un sofa gris y un gran armario con libros y fotografias, acompañados de estatuas de diferentes corrientes(es decir, muñeco de procelana, titere de madera,etc..)-Voy al baño, sientate donde pilles...o ponte en mi cuarto como veas...(desde el salón veías una puerta a la izquierda y a la derecha dos pasillos, colocandote desde la primera puerta antes emtnada habría un pasillo a la izquierda del gran mueble y otro a la derecha, Reiko se metio por el pasillo derecho en la puerta del fondo, en ese pasillo había otras dos puertas, una en cada lateral y en el pasillo izquierdo una puerta al fondo y otra a la izquierda, este era algo más pequeño que el derecho, sólo la puerta del salón es distinta, todas son de amdera de caoba oscura, meintras que esta era metálica y de color blanco).

Aya saboreaba una pizza capricciosa cuando Aoki le preguntó si había descubierto algo.

- Pues..en verdad me porte bien. Dijo sonrojándose. Pero eso no quiere decir que no metiera un poco la nariz en el asunto. Un poquitin nada mas, promesa...pero de momento todo son conjeturas, he de ligarlas para aclararme con ellas, ya te contaré... sonrió, esa sonrisa de hacerse la interesante, haciendo entrever que sabía mucho mas de lo que contaba.

Trajeron la carta de postres y Aya eligió una pannacota.

-Se hará tarde y mi casa queda lejos de aquí.. ¿Te..importará acercarme en coche luego?

Al notarla sobre mis piernas levanto las cejas, pero no era ningún tonto y a decir verdad Ishiyama era muy bonita, sobretodo con el cabello rosa, mi debilidad, aunque fuera teñido.

Sonreí al sentir sus labios sobre los míos.

-Bueno...por que no?- me acerqué a sus labios y le di un beso como ella había hecho, pero quedándome más tiempo para ver como reaccionaba, mientras le colocaba una mano en la cintura.

(tras el beso de Sora, puso su mano en mi cadera, yo le seguí con la mia y puse mi mano sobre la suya, para tenerlo vigilado)-¿Alguna vez te han dicho, lo guapo que eres?...(mientras con la mano que le quedaba libre acariciaba la mejilla del chico).

"¿Una puerta de seguridad anti incendios en una casa? que raro"

Pero bueno, si me ha traido a su casa ahora es para soltarme algún rollo mistico, así que mejor si tengo algo de lo que hablar. De modo que me pongo a buscar en su estantería libros esotéricos para leerme la reseña en la contraportada, con suerte eso me dará tema de conversación

"pero espero que no se enrolle demasiado, tampoco quiero perder toda la tarde con esas historias"

(Los libros no erán, ni de lejos lo que te esperabas, los títulos eran: A la caza del octubre rojo, El laberinto rojo, 7 novias para siete hermanos,  la caída de sol, Él decamerón, Alicia en el país de las maravillas o Luna de otoño.En resumidas cuentas ningun libro de esta estantería, al acercarte viste que había unas 17 fotografías en marcos repartidas por el mueble entre los libros y figuras, sólo en una salía Reiko junto con su amiga gótica y una mujer de unos 25 a 30 años de pelo marrón muy ligera de ropa con top y minifalda que era la chica que salía en todas las fotografias, en esta concretamente están tomando un helado en una cafetería, Reiko y la chica gótica no tienen el ceño fruncido, pero tampoco están sonriendo).

Bueno, que pena de libros, como me pregunte ahora por lo que se de magia le voy a tener que contar la de los final fantasy

Miro tambien las fotos, porque tendrá tantas fotos de alguien que no parece caerle demasiado bien, esta bastante buena eso si, pero no creo que sea por eso

"va no te encantes con unas tetas, he de encontrar algo de lo que hablar"

Ya que me ha dado permiso me voy a su habitación, igual usa libros de magia para dormirse, o para ponerse a tono, a saber

Pruebo la puerta metálica sin muchas esperanzas, luego me voy por el pasillo de la derecha por donde se fue Reiko y pruebo a abrir las dos puertas

-No de esa forma al menos- reconocí algo sonrojado- tu también eres muy bonita, tienes una hermosa sonrisa-

Junto a Emma llegan a la cafetería dando un pequeño paseo. Aya elige una de las mesas que dan al exterior para ver llegar a Tokuro. Pide un granizado que le sirven rápidamente.

- Me dijo que estaría sobre esta hora. No creo que tarde. Le dice a Emma mientras le traen su refresco.

Me acerco al oido de Kaito y le digo que:

- Vete por una cámara de fotos o de videos. Nos vamos a divertir con ella además de qeu sea nuestra exclava.

Le digo algo a Kaito al oido y el sale de la sala otra vez...me acerco a ti y con cara tímida y angelical te digo:

- Disculpe, Diadogi-San venia a pedir disculpas ante ustd por mi comportamiento, ya que no supe medir al preocuparme más por un estúpido aparato (el iPad) que por una compañera, y ya que usted presenció mi comportamiento, me gustaria perdirle mis más sinceras disculpas.

Doy un respiro y señalo hacia donde se ha ido Kaito:

-Kaito, está intentando mejorar su comportamiento (algo que intento ayudar, creo en las 2º oportunidades) y quiere pedir disculpas a todo el colegio y ya que usted es una dama totalmente pura de esta intitución, le surgerí que empezará con usted y también vuelve ahora a presentar sus excusas además de traerle un regalo, sensei.