Partida Rol por web

Boku no VILLAIN Academia [+18]

[Spin-Off] Sueños de una Vida Pasada

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04/08/2023, 19:17
Narrador

 El viento cálido se colaba a través del balcón de la habitación, acariciando la piel de aquella joven en los puntos donde las finas prendas no le cubrían: ataviada con una selección preparada por los sirvientes según sus indicaciones, sacaba a relucir su belleza natural a través de una vestimenta ligera, más no innecesariamente relevadora, decorada por abundante joyería dorada creada por los mejores joyeros de aquellas tierras.

 Su largo cabello ondeaba suavemente con el viento a cada paso que daba, y los rayos del sol bañaron su rostro al asomarse al exterior.

Egipto, 2430 A.C.

 El Imperio Antiguo disfrutaba de una larga era de paz. Desde la resolución de los problemas con las otras deidades, el mandato del faraón apuntaba a llevar a su pueblo a una larga vida llena de prosperidad y tranquilidad, siendo esos tiempos donde más podía relajarse aquella chica junto a su amado.

 Tumbado en uno de los muebles del balcón de aquella pirámide que ocupaban como hogar y templo, aquel hombre de cabellos rubios y ojos rubí dedicaría una dulce sonrisa a la recién salida. Vestía ropas propias de un noble, holgadas pero a la vez ligeras dándole esos aires divinos propios de su naturaleza pero sin ocultar la belleza de su humanidad: dicho de otra forma, estaba bueno en estereotipos de belleza antiguos y actuales.

 - Creo que hoy podemos darnos el lujo de probar uno de los licores más antiguos de la tesorería... Nadie tiene porque enterarse, ¿no? - junto a él, en una mesita descansaba la botella con aquella bebida preparada con las más elaboradas técnicas de su imperio, así como un par de copas esculpidas en barro.

 El hombre tenía muchas cosas buenas y malas en su historial, como tomar un licor clasificado como reliquia y decidir bebérselo de un día para otro, pero al final de todo era quién indudablemente más se preocupaba por la vida de su imperio, y por eso todos lo adoraban como el Dios del Sol: Ra.

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04/08/2023, 21:11
Sora Himeko
Sólo para el director

 

Hubo un breve suspiro entre sueños en algún lado, esperando al suyo en ese momento.

-Esposo mío, pareces en buen humor hoy. 

Le observó con ojos gentiles. Era el tipo de esposa que no escondía un momento amar el ser mimada, y ahora mismo había poco más que la vida pudiera ofrecerle. Después de todo, las cosas, las guerras y las arenas del desierto iban y venían, pero el sol permanecía. Y con las épocas, lo importante permanecía. Cuando no estaban en la misma estancia, podía sentir aquellas mismas caricias con solo asomar el rostro al exterior. Estaba convencida de que siempre, en esta u otra vida, podría experimentar sus bendiciones.

-Aún falta para que el día termine, pero si vas a hacer algo así,  ¿desearías que te cuente una historia para acompañar el sabor? -como toda dama noble, las artes finas estaban a su alcance, entre pintura, danzas, poesía y por supuesto, el guardar historias de otros tiempos y distintas fuentes- O quizá un paseo por el borde del Nilo, las ofrendas del pueblo han sido buenas y fueron presentadas con premura, y verían como una señal de bendiciones tu presencia.

Con las brisas suaves de la tarde temprana, el lino de las ropas vaporosas que usaba se agitaba, haciendo que el hilo de oro y plata diera leves destellos que embellecen su figura. Ocasionalmente, los más detallados accesorios se muestran sobre su piel hechos de los metales preciosos más selectos. Incluso ella pensaba que los estándares que él había impuesto para que fueran usados por ella eran un tanto elevados, pero en el final de aquel debato lo acepto dejando los miramientos: gemas y minerales encontrados reposando en el agua soleada, para resaltar su pureza. Gemas que provenían de reliquias dadas en ofrenda de los más nobles de esas tierras, y que fuesen evaluadas en su mayor belleza por los orfebres reales. Y las telas solo podían ser tratadas e hiladas por las sacerdotisas más devotas a Hathor, ojo de Ra, y vigilante esposa del mismo.

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05/08/2023, 02:23
Ra

 - ¿Podría ser de otra forma junto a ti? - respondería al comentario de la chica con una de sus sonrisas. Si bien era una deidad conocida por, entre otras cosas, disfrutar en demasía de los placeres mundanos como la bebida, en el fondo no había nada de lo que disfrutase más que compartir tiempo junto a su amada.

 Fue entonces que el hombre decidió ponerse en pie, acercándose a la baranda para apoyar una mano en ella y mirar el horizonte, momentos antes de voltear nuevamente a dar toda su atención a Hathor.

 - Como siempre, no pierdes oportunidad de recompensar a nuestro pueblo para demostrarles el amor que les tienes, pero cualquiera de las opciones me parece magnificas mientras permanezcas conmigo - dicho eso, Ra invitaría a su alma gemela a acercarse para poder dedicarle una suave caricia en el rostro, recorriendo su mejilla con los dedos mientras su mirada se perdía en la de ella, recitando entonces unas palabras que nunca se cansaba de repetirle. -. "Ya sea en esta vida, o en la otra; en las arenas del desierto o al otro lado del mundo; desde el comienzo hasta el final; mi luz siempre brillará para ti cada mañana".

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05/08/2023, 03:00
Anubis

 - Yo no haría declaraciones sobre la otra vida sin hablarlo conmigo antes... - interrumpiría otra voz masculina que llegaba desde los aposentos a paso tranquilo, pero constante.

 Otra de las grandes deidades de aquellas tierras, tan respetada pero a la vez temida como el propio Dios del Sol, no se cortaba en ir a buscar a su amigo y compañero para tratar cualquier asunto en la mayor brevedad posible, así tuviese que interrumpir un emotivo momento con su esposa. Una mentalidad tan fría pero justa era propia del guardián de las tumbas, aquel que recogía las almas de los caídos y determinaba si merecían renacer en otra vida o caer en el olvido por el peso de su corazón.

 - ¡Anda, Anubis! - el faraón le recibiría con emoción, cuanto menos mucha más que la que reflejaba el rostro del moreno. -. ¿Te enteraste de lo del licor...? ¿Quieres un trago? - Ra desbordaba confianza de forma natural, pero al tratar con aquel hombre lo llevaba a otros niveles para molestarlo un poco de forma amistosa.

 - Me es indiferente lo que haga el faraón con las reliquias: puedes escupir sobre un jarrón y la gente lo venerará como una - por su parte, Anubis resaltaba en esa relación por ser todo lo contrario, siendo alguien particularmente profesional y serio en muchos sentidos. -. Tienen que hacer algo con Seth: se puso de nuevo intenso con los mercaderes y viajeros del desierto...

 - ¿Probaste a darle alcohol? 

 - Eso no resolverá las cosas siempre, Ra... Pero si, ya lo intenté - confirmaría mientras se cruzaba de brazos. -. Vayan a hablar con él antes de que tenga que hacer una lista para usar la balanza, por favor...

 Teniendo en cuenta la naturaleza enigmática y particularmente incontrolable de aquella deidad, no era extraño que cada tanto alguien tuviese que ir a calmarlo para que continuase haciendo bien su trabajo como protector del desierto y de aquellos que recorrían las arenas, aunque, como siempre, la expresión de Ra decía claramente que no quería ir a hacerlo, sobre todo ahora que estaba pasando un agradable momento con su esposa.

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06/08/2023, 00:43
Sora Himeko
Sólo para el director

Los pasos silenciosos le siguieron, y compartió un momento largo de apreciación de ese momento. Los días gentiles que no parecían conocer fin, y una eternidad estable que cada parte divina mantenía. Fácilmente podría haber dedicado la tarde a ello y nada más, pero miró hacia atrás con moderada curiosidad.

-La maat es curiosa hoy, veo que el Señor de la Tierra Sagrada ha decidido dejar su casco formal para traernos su presencia. ¡Y sin su casco formal de chacal! Debes estar o bien frustrado o en ánimos inusuales al menos. -respondió girándose con cuidado, y poniendo las manos en la espalda con tranquilidad- Ahora solo espera a que escriban de esto esos mortales. Está clase de visitas informales hacen que sigan confundiéndolos en sus escritos, ya me han puesto cuatro nombres distintos por lo menos. Pero mientras sea entretenido, está bien. ¿No es así?

Tomó unos momentos para meditar, oyendo plegarias sobre la tierra en una casual velocidad pasmosa.

-En el próximo festival, llenarán el río de flores. Si lo hacen de modo que puedan verse los colores desde aquí, sin duda estaré contenta. Oh, pero eso que mencionas, podría distraerlos un poco si esas caravanas traen las semillas necesarias para sus pequeños planes.

Ladeó la cabeza, curiosa mientras veía a Anubis.

-¿No está teniendo suficiente con Apofis durante el crepúsculo?  -miró a Ra entonces, con gesto indulgente- Se que no es particularmente lejos, pero incluso unas horas sin sol se sienten frías. Por lo cual, te acompañaré si vas. Aunque...quizá arrojando destellos a sus ojos las suficientes veces, Seth mismo venga a reclamar al respecto. A mis ojos, sin embargo, les complacería ver los cultivos de flores para evaluar si la cantidad será suficiente para colorear el Nilo.

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10/08/2023, 03:51
Anubis

  - No es nada  en particular: simplemente pensé que era de mala educación asistir con el rostro cubierto en sus aposentos, donde tengo sabido suelen andar descubiertos, como es el caso - explicaría Anubis, suspirando ante la observación de los escritos mortales, mismo comentario que haría soltar una leve risa a Ra, el que entonces diria. - Que bueno es tener una esposa comprensiva con los errores de los mortales: otras irían por la cabeza de su amado si los papiros hablasen de su romance con una persona de nombre distinto.

 Ambos hombres escucharían con atención la información sobre el festival y los preparativos que hacían los mortales para este, siendo Anubis quien asentiria ante el inconveniente que presentaba el problema comentado con sus intenciones.

 - Ya saben como es: Cada cierto tiempo busca alguna excusa para decir que los mortales se vuelven irrespetuosos con el desierto, y libera su ira sobre ellos... -dicho eso, Anubis miraría momentáneamente la ciudad desde el balcón. - Aunque es cierto que últimamente algunos esclavos se han vuelto revoltosos, y sus amos no hacen el mismo esfuerzo por contenerlos...

 - Oye, oye, oye: un problema a la vez - le detendría Ra viendo por donde iba la conversación, decidiendo dar importancia a lo de Seth antes de que le dieran mas trabajo. - Definitivamente no dejaré que una deidad enfadada arruine nuestro momento juntos: viajemos a ver al protector del desierto y llenar de luz el camino de los mercaderes. Te prometo la mejor vista al río cuando lo decoren para ti.

 Con un chasquido de dedos, el emperador de aquellas tierras consiguió dos cosas: hacer descender desde los cielos su barca solar hasta estacionarla al otro lado del balcón, y hacer aparecer su máscara de ave, misma que de colocaría entonces.

 Malditos mortales: haciéndome usar esta cosa al ser indignos de ver mi verdadero rostro... - se quejaria antes de saltar hacia la barca, y desde allí extender una mano a su amada.

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10/08/2023, 04:54
Sora Himeko
Sólo para el director

-Ra se deprime cuando me ausento más que por unas horas, no lo vería escapando a hacer visitas. -una suave risa cantarina acompañó esto, con tono afectuoso- Sin embargo, creo que está bien por ahora. Ya harán algo digno de castigo considerando como son, por algunos siglos se comportan bien, y en otros...

Se acercó al navío solar, negando levemente.

-Todo sería más sencillo si tuvieran mejor memoria. Pero hay cosas que se les confunden entre generaciones...me pregunto si habría forma de arreglar eso a futuro. -estiró el brazo para que le ayudaran a subir, y suspiró, resignada al mismo destino del que se quejaba su esposo: un casco estilizado, en su caso de vaca, con cuernos de puntas doradas simbolizando sostener el sol.

-Hoy será esta, quizá en otro momento sea la de gato.

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13/08/2023, 02:11
Ra

 El hombre rubio chasquearía muy levemente la lengua ante la declaración sobre lo rápido que decaería ante la ausencia de su amada: no había forma de negarlo, pero igualmente le resultaba algo vergonzoso admitirlo siendo el emperador de aquellas tierras.

 - Solo espero que entre confusión y confusión las cosas no se les vayan de las manos: así terminan formándose nuevas deidades cuyos límites son incomprensibles hasta para ellas mismas... - afirmaría Anubis, viéndoles subir al vehículo mientras se cubrían las cabezas con sus respectivas máscaras. -. Si sirve de algo, Hathor, a ojos de tu esposo siempre te verás perfecta - comentaría entonces mientras de su mano empezaban a brotar una estela de cenizas negras que empezaría a dar forma al casco de Chacal sobre su cabeza.

 - Vaya: ¿el corazón del juez se está ablandando finalmente? - preguntaría Ra, soltando una leve risa.

 - En absoluto: es solo que yo recuerdo bien la historia no contada sobre como calmaste a Sekhmet...

 - ¡HA! Sí... Tal vez me pasé con el vino... - terminaría admitiendo el emperador entre leves risas, antes de terminar de acomodarse sobre la barca y, tras un asentimiento de cabeza a modo de despedida para el chacal, ponerse en marcha a través del cielo hacia su destino: el desierto.

 Desde las alturas, el panorama de la ciudad y sus alrededores se abría a ojos de la pareja. Aquellos seguidores más fuertes, capaces de ver directamente al sol durante un tiempo suficiente, eran capaces de distinguir la forma de la barca y la silueta de sus ocupantes, agradeciendo los ciclos solares venideros y al sol que saldría cada día con ellos.

 A las afueras de la ciudad, los campos gozaban de una cosecha prometedora, y más allá el inmenso desierto repleto de arena. El viento traía consigo nubes de polvo que no llegaban siquiera a rozar a la pareja, al menos hasta que empezaron a descender para adentrarse a su destino: el templo de Seth, aquel al que ningún humano podía llegar sin perderse en el desierto pero que para las deidades no era más que un punto en un mapa.

 Al bajar de la barca y acceder al templo, encontraría que el interior estaba descuidado, asemejándose a una estructura recién caída en ruinas, con la arena recorriendo el interior y las antorchas manteniendo apenas su luz. En ese entorno, Ra mantenía las cercanías con su amada, mostrándose particularmente calmado pero no por ello descuidado, siendo que al llegar al centro de la sala principal darían con aquel al que buscaban.

 De grueso pelaje negro cubriendo gran parte de su cuerpo, del que sobresalían varios huesos de distintas formas así como tallos muertos, flechas, hojas y suciedad varia. Aquella deidad no usaba una máscara como el resto de dioses, sino que su propio cuerpo era la representación de aquello que los mortales percibían de él: un ser destructivo, caótico, imaginado como un perro, un cerdo, serpiente y otros animales varios, concluyendo e una abominación propia para un ser imaginario cuyo aspecto era incomprensible muchas veces incluso para algunos dioses.

 - ¡Ra...! - diría con una profunda voz de ultra tumba.

 Ay, de verdad esta enfadado... - se quejaría en voz baja el emperador. -. ¿¡Qué sucede ahora, Seth!?

 - ¡Los mortales...! ¡Esos idiotas...! ¡Están perdiendo el juicio! ¡No tienen control sobre sus acciones...! ¡No miden los castigos que ejercen...! ¡Subestiman las arenas...! ¡Tragan más de lo que merecen! ¡Hay que enseñarles orden, Ra! ¡Hay que enseñarles...!

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13/08/2023, 20:56
Sora Himeko
Sólo para el director

-Pero Seth... -comenzó a hablar, con tono conciliador, quitándose el ornamento para que su voz fuese menos retumbante- No seas así. Los humanos siempre están haciendo esto y aquello, sus vidas son cortas y frenéticas. Mientras no blasfemen y sus ofrendas y llegarían estén presentes, debería estar bien que hagan lo que sea.

Le dirigió una mirada cargada de curiosidad, acercándose algunos pasos. No tenía particular temor de ninguno de sus colegas divinos.

-Lo que me lleva a pensar que hicieron o te hicieron algo particular. ¿Y bien? -le presionó de forma gentil- ¿Que has visto siendo llevado a cabo para distraer tu atención de la serpiente del ocaso? Mi esposo y tu la derrotan día a día por el bien de los mortales, después de todo. Si no estás motivado puede que te descuides.

Cerró los ojos, sonriente.

-Si hay que ponerlos en línea, estoy segura de que podemos ayudarte a diseñar un mejor sistema que asolar de modo desordenado con tormentas de arena. Necesitan entender por qué son castigados, o solo se resentirán sin aprender nada.​​​​​​

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21/08/2023, 19:23
Ra

 Si bien el dios del sol tenía sus formas de resolver según qué problema, ver como su amada se adelantaba con aquellas palabras hacia la deidad deforme le harían entender de inmediato que aquella no era una de esas veces donde Seth se descontrolaba sin más y había que ponerlo en su lugar a base de fuerza...

 - ¡No lo entiendes, Hathor! - replicaría la bestia caótica. -. ¡Creen que únicamente por cumplir con sus responsabilidades son libres de buscar más allá de sus límites! ¡El deber de los mortales es honrar a los dioses, y vivir con lo que se les ofrece: ninguna exigencia!

 Pero entonces, la cercanía de la chica acompañada de su deducción harían paralizar a la deidad, quién entre leves gestos de apartar la mirada. El hombre se guardaba las palabras momentáneamente, antes de volver su atención a la chica y responder:

 - Ese es el problema... Mi atención no puede ser para otra que no sea ella... - confesaría, provocando que desde su posición a unos metros Ra reflejase sorpresa bajo la máscara.

 - ¿Acaso... Nepai y tú...?

 Las palabras del faraón fueron interrumpidas entonces por un estruendoso rugido de Seth, cuyo pelaje se erizó violentamente mientras sus ojos desprendían un brillo rojizo.

 - ¡NO TE ATREVAS A LLAMARLA ASÍ EN MI PRESENCIA, FARAÓN! - resonaría el eco de su grito entremezclado con el feroz rugido, provocando que Ra tuviese que retirarse el caso para llevarse un dedo al oído en gesto de molestia por el ruido.

 Dejando de lado la falta de tacto de Ra, y que claramente Seth no era alguien a quién fuese bueno provocar, Hathor podía darse cuenta de forma evidente de que no era el trabajo de enfrentarse a la serpiente lo que atormentaba a Seth y pudo alterar la visión que tenían de él los mortales, sino... Algo totalmente impensable para cualquiera, excepto para aquella que de entre todas las deidades representaba el amor.

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22/08/2023, 03:15
Sora Himeko
Sólo para el director

Al escuchar las palabras de Seth y la referencia a Apofis (Nepai) como "ella" de forma tan enfática, Hathor mostró una expresión de sorpresa y comprensión, bajando levemente los párpados. Había entendido la compleja situación en la que se encontraba el dios, ya que Apofis era la serpiente...la entidad, a la que él debía enfrentarse diariamente. Se apenó por Seth, consciente de la carga emocional que llevaba consigo si las cosas iban por dónde creía 

-Creo comprender la difícil situación en la que te encuentras, Seth.-mencionó Hathor con suavidad, dejando que su voz transmitiera compasión y tristeza. -Le ves a diario, la energía del combate es necesaria para el ciclo solar. Inicialmente podía ser de otra forma, pero imagino que con el paso de los siglos comenzaste sea por apreciar su tenacidad y gestos, o por alguna razón que solo tu sabrás...pero, has desarrollado sentimientos complejos, ¿no es así? Del tipo que está en mi jurisdicción.

Hathor se colocó frente a Seth, poniendo ambas manos en la espalda, con aire reflexivo y gentil.

-Lamento ver cómo esa situación te afecta y te crea conflictos internos. Es una carga pesada de llevar y puedo sentir tu dolor. Quiero que sepas que estoy aquí para ti, dispuesta a escuchar y ayudarte en lo que necesites. No debes lidiar con esto en solitario. 

Pensó largos momentos.

-Seth. Para que haya un cambio debes tomar coraje y admitir lo que sucede aquí. ¿Te es molesto acaso ver la libertad que tienen los humanos? Estás por encima de ellos, pero quizá sientas que tienes menos libertades. Es verdad que el balance de la maat necesita el conflicto entre ustedes, pero si se ha vuelto una espina que enturbia tu corazón, quizá haya algo por hacer.

Cerró los ojos.

-¿Que piensas de ella? ¿Qué en eso conecta con los súbditos?

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25/08/2023, 01:48
Ra

 Evidentemente el dios del sol no iba a continuar interviniendo viendo por donde iban las cosas: claramente no tenía ese tacto por el que destacaba Hathor, y en esos momentos prefería dejarle a ella el trabajo de tocar a la deidad y calmar su alma antes de volver a intercambiar palabras con él.

 Seth no tuvo palabras para responder, relajándose un poco mientras el aire se escapaba de sus fauces. Las intenciones de la chica claramente estaban dando sus frutos para conectar con la mente y corazón de la deidad, pero ella misma entendía que no estaba en una situación donde pudiese solucionar el problema fácilmente.

 - Los humanos... No valoran los esfuerzos de ella por el ciclo solar... En cada atardecer, su sangre tiñe los cielos de un hermoso rojo, pero ellos solo ven a una serpiente que intenta derribar a su emperador: nunca se han preguntado que sucedería si ella simplemente decide alguna vez dejar de enfrentarnos, dejar de interrumpir el ciclo... Perderían el hermoso atardecer del que tanto disfrutan, y el recorrido realizado por Ra solo se acortaría más y más mientras los habitantes del caos se rinden con ella... - poco a poco, la figura del monstruo empezaría a hacerse un poco más pequeña, recubriéndose con su pelaje pero aún así siendo significativamente más alto que Hathor. -. Su mal es necesario para que el bien exista, así como mi imagen debe atormentar a los mortales para que no se revelen contra el desierto y busquen su resguardo... ¿Pero como podemos continuar si ninguno valora nuestro sacrificio por ellos...? El destino es cruel, atándonos a una imagen no solo temida sino también fácilmente odiable por los mortales, y para colmo estamos condenados a luchar entre nosotros cada día, cuando somos los únicos que comprendemos el peso que carga el otro...

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26/08/2023, 02:48
Sora Himeko
Sólo para el director

-No estoy segura de que reconocimiento sea específicamente lo que esté anhelando tu alma.

Dijo, evaluando pensativa todo aquello.

-Usualmente el corazon fija un deseo con el que estaría conforme, pero debajo de él otro que sabe que no podría conseguir o no está dispuesto a confesar. -le miró entrecerrando los ojos levemente, suavizando la sonrisa para evitar que lo tomara con una burla- Seth.

Pensó un largo momento.

-Eres un dios. Mereces las comodidades que puedas tener y no afecten la maat de sobremedida. Honestamente diría...ve y hazlo, quizá vaya siendo hora de un nuevo gran evento para las paredes de los templos. -ladeó levemente la cabeza, divertida- Seguro podemos acomodar cualquier cambio con algo de esfuerzo. Si es en el nombre del amor, no me molesta ser importunada con algo de trabajo.

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08/09/2023, 02:40
Ra

 La deidad se quedó sin palabras ante la declaración de la mujer, escuchando entonces sus palabras mientras aquella cálida sonrisa le permitía dejar de lado sus temores y atender al apoyo brindado por tan osada pero amorosa diosa.

 - Hathor...

 Producto de sus palabras y un cambio de ánimos, la imagen del dios monstruoso empezó a cambiar a una de mejor perspectiva: ignorando lo que el resto pudiese pensar de él, y concentrándose únicamente en lo que él quería para si mismo, Seth terminó reduciendo su altura a dos metros, a la vez que su cuerpo se moldeaba a una figura más... humana.

 - Muchas gracias, Hathor... Prometo no darles muchos problemas a ti y a Ra...

 - Nah, nah - negaría el emperador desde atrás, restándole importancia con un gesto de mano. -. Haz lo que dice ella, ya luego nos arreglaremos con lo que pase. No descansará hasta que lo intentes.

 Entendiendo entonces que tenía el apoyo de ambos en la decisión que tomaría, una ligera sonrisa de calma y emoción a partes iguales se dibujaría en el rostro de la deidad deforme, momentos antes de que el templo se viese sacudido por un estruendo.

 Las arenas se levantaron, los escombros volaron, y mientras Ra se ponía en un pestañeo delante de su amada para protegerla, el siseo de numerosas serpientes inundaban la sala. Al asomarse por un costado del hombre, Hathor podría ver aquella escena donde el dios caótico encaraba a la enorme sombra de una serpiente de brillantes ojos rojos.

 - ¡Apofis! ¡Yo...!