Partida Rol por web

Caos en el Mercadona (HLdCN)

Almacén 2 (Eva y Sara)

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09/10/2014, 17:11
Eva Sánchez Banderas

Escuché las palabras de Sara y me sorprendió un poco verla sonrojarse, aunque ni siquiera terminé de entender por qué lo hacía. Sería cosa del ambientador. Por si acaso me llevé las manos a las mejillas para comprobar si estaban calientes.

- Digo de traer a alguien del Lidl porque así todos los del Dia podrían intentar echarle. - Expliqué. - Y sí, molaría más Paquito, pero el Seta tiene dos cosas buenas. La primera, que así creería al vernos a Shakiro y a mí que no está todo perdido para el Lidl. Y la segunda que la otra vez que le despidieron fue cuando Paquito acabó contratado. A lo mejor puede repetirlo con otra persona si le echan.

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09/10/2014, 17:17
Sara López

Lo que Eva le decía tenía cierta lógica, así que Sara asintió con la cabeza.

- Está bien, tía, tráete al seta. Date prisa para que cambien los votos, si es que lo hacen, claro - . Sus labios formaron una mueca al pensar en los que estaban fuera. El único que se salvaba era el Iker, y eso porque era su colega.

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09/10/2014, 17:29
Eva Sánchez Banderas

- Esperemos que sí. - Deseé entonces, mordiéndome de nuevo el labio. Esta no era la primera vez que nos encontrábamos en una situación así, pero eso no lo hacía más fácil. Y en esta ocasión estaba apostando la manera que tenía de ser readmitida sin depender de nadie en un plan casi a la desesperada, pero sentía que era lo mejor que podía hacer. Era una locura, pero quizá funcionase. 

- Bueno, está hecho. - Le informé. - He metido la carta de readmisión por debajo de la puerta del Bulldog para que no sepa que he sido yo.

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09/10/2014, 17:40
Sara López

- A ver qué pasa - . Sara se mordió el labio y miró la hora en el reloj. Empezaba a ser un poco tarde y las cosas estaban muy caldeadas. - De todas formas, si al final son tan hijos de puta para seguir yendo a por ti, convenceré al Mauri para que te traiga de vuelta - . 

Por el Iker no podía hacer nada de todo eso. Él había confesado y nadie aceptaría contratarlo de nuevo. Pero la Eva era diferente y no quería que la jodieran.

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09/10/2014, 20:27
Eva Sánchez Banderas

Poco a poco iba sintiendo la cercanía de las votaciones como si fuera una cuenta atrás. Otra vez. Una y otra vez miraba el reloj, sin saber qué hacer o qué decir para que la situación mejorara. Putos sindicatos. Para una vez que hacían algo y era jodiéndonos.

- Gracias, Sara. - Le dije un poco triste, pensando por un momento en qué pasaría si ella dejaba de venir aquí. A lo mejor conmigo fuera y ella dentro, sin el ambientador como mediador, lo que yo creía que era amistad se iba debilitando poco a poco. Era evidente que con Íker no le había pasado, pero no podía evitar sentir miedo al pensar en perder a la primera amiga que tenía.

Con un nudo en la garganta me acerqué para darle un abrazo, empezando a hacerme a la idea, y al separarme de ella mi labio temblaba ligeramente. Joder, a mí el curro me daba igual, pero aún así no quería pirarme.

- Voy a echarte de menos. - Le dije, y al terminar cerré la boca para no acabar echándome a llorar.

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09/10/2014, 21:16
Sara López

Ver a la Eva así hizo que Sara odiara más a todos ellos. No tenían derecho a hacerla sentir así. Apretó con fuerza los dientes para no empezar a soltar perlas por la boca y abrazó con fuerza a su amiga.

- ¡Eh, tía! Que vamos a salir de esta y se van a joder todos. Vamos a conseguirlo, hostia puta - . Se mordió el labio inferior con fuerza, hasta que brotó un pequeño hilillo de sangre. - Si hacen que vuelva el Pascual, le convenceré y si veo que es un idiota y no entiende, le pediré al Mauri y volverás. Tía, cuando salgamos de aquí verás que todo ha sido una puta pesadilla y lo único que habrá valido la pena es lo colegas que nos hemos hecho - .

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09/10/2014, 21:24
Eva Sánchez Banderas

Abrazada a Sara escuché las cosas que decía, y no sería mentir decir que me emocioné un poco. Al mismo tiempo esas palabras hacían que mi miedo creciese. No quería perder todo aquello por nada del mundo. Si de verdad las cosas salían bien sería genial decirle a mi madre que había hecho una amiga que no se reía de mí, y que no era imaginaria.

- Le... - Empecé sin soltarme de ella, pero la postura era bastante incómoda para hablar, así que me aparté un poco. Y al ver que se había hecho sangre mis ojos se abrieron con sorpresa y miré la pequeña herida con una expresión de intranquilidad. Antes de hablar acerqué mi mano, cogiendo un trocito de manga entre los dedos para limpiarla. - Espera. - Le dije mientras lo hacía, antes de volver a mirarla a los ojos.

- Le he dicho a Shakiro y al Seta que no vayan a por vosotros, que simpatizáis con el Lidl. - Expliqué. - Además van a ir a por Asun esta noche, así que lo más probable es que pronto ya no haya infiltrados del Dia salvo que Pascual la líe. - Comenté antes de tragar saliva, mientras mi cabeza se iba un instante a otro sitio. Joder, tendría que haber apuntado lo de la sangre en mi libretita. Eso quedaría brutal, lleno de naturalidad y Verdad delante de una cámara. - Me da miedo que alguien vaya a por vosotros de noche. - Confesé.

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09/10/2014, 21:35
Sara López

Una suave sonrisa se perfiló en los labios de Sara cuando Eva le limpió la herida del labio. Tras eso lo tocó con un par de dedos y pasó la lengua por la zona. 

- No me había dado cuenta de que me había hecho sangre - Confesó sorprendida. 

- Gracias. Y no te preocupes, si al final esos imbéciles te echan, mañana volverás a estar con nosotros - . Apartó la mirada por un momento. Había algo que quería contarle pero todavía no había encontrado el momento. - Tía, sabes que he estado hablando con el Manuel, ¿verdad? - Le preguntó y sus mejillas se ruborizaron ligeramente. Volvió a mirarla y volvió a bajar la mirada. - Se me ha declarado, tía. Joder, me ha dejado de pasta de boniato. Sospechaba que le podía gustar, pero es amigo del Raúl y no creía que llegara a decirme nada. Me ha propuesto que cuando salgamos de aquí me vaya a vivir con él y, ¿sabes? me sabe tope de mal, pero le he estado siguiendo la corriente para que confiara en mi - . Se sentía mal por lo que había hecho. Volvió a levantar la mirada, sus ojos azules se veían más oscuros, reflejo del tormento que sentía en su interior. - Le he dicho que no quería correr, pero le besé y, joder tía, nunca había hecho nada así y estoy hecha un puto lío. No quiero nada con él, no... No sé... Es buen tío, pero es amigo del Raúl y, aunque estoy casi segura de que me ha puesto los cuernos, nunca había mirado a otro tío estando con él - . 

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09/10/2014, 21:45
Eva Sánchez Banderas

Después de limpiar el labio de Sara froté un poco la manga con mi pantalón. Ya estaba seca de antes, pero así parecía que quedase más limpio. Luego escuché lo que decía y asentí cuando me aseguró que mañana estaría de vuelta. Yo no las tenía todas conmigo, porque si iban a por ellos durante la noche fijo que los dos acababan fuera, pero me guardé mis ideas derrotistas y no dije nada.

Luego me quedé escuchándola y empecé a flipar con lo que me iba diciendo. Joder, eso sí que era una movida.

- Bueno, antes de nada, calma. - Le dije poniendo las manos en sus hombros. - Cuando salgamos de aquí los del Lidl nos darán tanta pasta que te puedes ir a vivir a una casa enorme tú sola si quieres. - Aseguré, antes de darme un par de segundos para pensar en la situación. Antes de hablar mi ceño se funció un poco, extrañada. - ¿Pero a ti te gusta? De gustar, gustar, digo, no de echar un polvo y ya. - Aclaré, dejando de lado de momento el tema de Raúl. Empezaba a ser complicado defender al chico.

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09/10/2014, 21:52
Sara López

Sara miró a Eva sin saber qué decirle. ¿Le gustaba el Manu? Estaba bueno y cuando se reunían el grupo de colegas del Raúl se reían bastante. Pero... ¿Para una relación?

- No sé, tía. Creo que no, bueno, puede... - Le había dicho aquellas cosas tan bonitas que la habían dejado más confundida de lo que ya estaba. - Le he dicho que cuando salgamos de aquí ya veremos qué pasa. Pero tía, no sabía que era tan cariñoso y cuando le he besado. Joder, ha sido la puta hostia - . No había querido reconocerlo hasta ese momento. 

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09/10/2014, 21:59
Eva Sánchez Banderas

Emití un suspiro al seguir escuchando a Sara, y antes de que ella terminara una sonrisa apareció en mi rostro. Era guay que alguien te contase cosas así, como si fuera a tener en cuenta tu criterio. Aunque no es que yo supiera mucho de relaciones, claro.

- Bueno, yo... - Empecé, dubitativa. - No sé. Él siempre va de ligón, y todo esto, y le tira los trastos hasta a la Asun... Pero tampoco le he visto a solas, claro. Aunque si las tiene así a todas supongo que será por algo. - Aventuré, sin terminar de inclinarme hacia uno u otro lado, teniendo miedo de darle una opinión firme y cagarla.

- Bueno, ¿tú no te pilles, vale? Habría que aclarar con Raúl qué narices pasa. De todas formas a mi mi madre tampoco me coge el teléfono, y creo que a los demás tampoco... Así que lo mismo el Bulldog nos ha puesto inhibidores, o algo, vete a saber. - Afirmé antes de acariciar su brazo, tratando de resultar cercana.

- Está bien que estés con él si es lo que quieres. - Aseguré. - Y escojas lo que escojas yo te voy a apoyar. Pero eres una buena tía, sólo tienes que ver que cuando tenías los ambientadores lo primero que pensaste fue en Xekspir. - Le recordé. - No hagas nada de lo que luego te arrepientas, ¿vale? - Pregunté, mordiéndome yo el labio. No tan fuerte como para hacerme sangre, aunque me sentí tentada de empezar a apretar más para probar cómo era. Al fin y al cabo era algo que había que ensayar. Y mientras tanto mis pensamientos se fueron a un par de días atrás, cuando elegí a quién poner ambientadores. Jo, si llego a saber esto lo mismo habría usado el otro también con Sara. ¿Aunque con quién la habría liado? Con Manuel seguro que no. Antes conmigo, sólo por curiosidad. Sólo con que me apoyase como pareja la mitad de lo que me apoyaba como amiga habría sido la ostia. Por un segundo me pregunté cómo habría sido, y una risita se me escapó pensando en mis cosas. Sin embargo no dije nada, y esa misma reacción mía sirvió para devolverme a la realidad.

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09/10/2014, 22:15
Sara López

Al escuchar la idea de los inhibidores para móviles, Sara sintió una especie de vértigo. No se había planteado aquella posibilidad y, si era así, había estado pensando todos esos días que el Raúl la engañaba. Alargó una mano para apoyarse en una caja, mientras respiraba profundamente para recuperar un poco la estabilidad emocional. 

- Hostia, no había pensado en eso. Yo... - Respiró de nuevo, intentando calmar los latidos de su corazón. - Creí que el Raúl pasaba de mi y, joder, tía, la he cagado - . Se sentó en el suelo, cubriendo su rostro con las manos. Siempre había sido una tía muy acomplejada. Su madre la abandonó cuando era pequeña y había tenido que vivir con el alcohólico de su padre. Había crecido creyendo que nadie la quería y, se había pasado parte de su etapa de instituto autodestruyéndose. Pero conoció al Raúl. Él había hecho que creyera que podía ser querida. La había tratado de puta madre y en cuanto había cumplido los 18 le había propuesto que se fuera a vivir con él. Pero en aquel momento de crisis, todos sus complejos habían vuelto, quizás triplicados y había creído que el Raúl la engañaba. - Bueno, sólo ha sido un beso - Dijo, levantando la mirada para clavarla en los ojos de su amiga. - Cuando salgamos de aquí le diré al Manuel que no diga nada. Hostia, hostia, hostia... - Hinchó los carrillos y tras unos segundos dejó salir el aire poco a poco. 

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09/10/2014, 22:32
Eva Sánchez Banderas

Al ver cómo de repente parecía que le daba un ataque de ansiedad o algo así a Sara traté de recordar las veces que había estado practicando para hacer de doctor House en casa, tratando de buscar qué sería mejor hacer en un caso así. Sin embargo no tenía pizarra, ni gente con la que hacer un diagnóstico diferencial, fuera lo que fuera eso, ni mucho menos parecía Lupus. Aunque después de todo al principio nunca lo parecía. Miré a Sara desde donde me encontraba, con cara de "Es una respuesta autoinmune", pero ni yo misma terminaba de creérmelo. Desde luego Gregory me había fallado.

- Tranquila. - Le dije, dejando de lado esas ideas y acercándome simplemente a arrodillarme a su lado y arroparla un poco con mis brazos, apoyando su cabeza en mi pecho. - Tú lo has dicho, sólo ha sido un beso y sin mala intención. Además, de aquí a que salgamos parecerá una tontería. - Afirmé como si supiera de lo que hablaba. - Aunque la próxima vez podrías apuntar mejor, - Añadí intentando bromear. - que con un amigo de Raúl no mola nada. ¿No te gustaba el Lejía? - Pregunté, intentando quitar hierro al asunto.

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09/10/2014, 22:45
Sara López

Sara se dejó abrazar por la Eva. Apoyó la cabeza en su pecho y suspiró. Molaba tanto tener a una amiga así... Era genial. Levantó la mirada cuando dijo que podía apuntar mejor y sus ojos se abrieron como platos cuando nombró al Lejía. Entonces estalló en una carcajada.

- Jajajaja... Tía, ya te vale... Jajaja... El puto lejía... jajajajajajajaja... - Una carcajada, que con toda la tensión que estaba aguantando, le sentó de puta madre.

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09/10/2014, 22:52
Eva Sánchez Banderas

Parecía mentira, pero cuidar de Sara me reconfortaba a mí también. Me daba un poco de cosa pensar que todo esto sin el ambientador no habría pasado, pero no quería darle vueltas a eso, ya habría tiempo para rayarse después.

Al escuchar cómo ella empezaba a reír no pude evitar contagiarme un poco, siguiéndola en sus carcajadas, y aún sin haber abandonado del todo la risa me encogí de hombros.

- Claro, tía. - Le dije. - Sé que preferirías a Damián, pero está complicado. Creo que le van otro tipo de tías. - Expliqué remarcando las últimas palabras para dejar claro que hablaba en coña.

- Oye, ¿tú crees que con los ambientadores esos se puede volver lesbi a cualquiera? Si funcionaron hasta con la Asun y Justina...

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09/10/2014, 23:54
Eva Sánchez Banderas

- Oye, Sara. - Dije cuando ya faltaba poco para que el Bulldog apareciera. - Si Pascual o los despedidos traen a la Sholi, cuidado. Fijo que se coge las hojas de despido de Saray como quería hacer con las de Iker. Y esta noche ya seréis poquitos los que estéis dentro, es fácil que acabe yendo a por ti o a por Mauricio. Si entra Paquito no tienes de qué preocuparte, la gran putada es si es la Sholi o Miriam.

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10/10/2014, 00:01
Mercadona

La fuerza de vuestra amistad os salvó una vez, pero desde entonces el Bulldog os vigilaba de cerca y no permitió que sucediese de nuevo. 

Mauricio salvó a Sara, que debió dejar marchar a Eva sin ella, dejándola con un vacío por la segunda amiga de la que debía mantenerse ahora separada.

Notas de juego

Mientras no estéis las dos dentro del supermercado no podréis comunicaros en privado entre vosotras.

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20/10/2014, 13:46
Mercadona

Tras la vuelta de Eva, las dos amigas vuelven a reunirse en el Almacén 2, sintiéndose con fuerzas renovadas para enfrentarse a lo que tenga que venir.

 

Notas de juego

Podéis volver a hablar en privado. Al haber sido atacadas dos veces con anterioridad (deberíais haber caído juntas, pero a Sara la salvaron por otra parte) las condiciones son las mismas que antes, la fuerza de vuestra amistad os protegerá del primer ataque, pero si hay un segundo, caeréis las dos.

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20/10/2014, 14:00
Sara López

Sara estaba emocionadísima de volver a estar con la Eva. Entró corriendo en el almacén y allí volvió a abrazarla. 

- Tía, ¿cómo estás? ¿qué ha pasado? - Le preguntó un poco aturrullada. - Siento lo que te pasó, hostias. No... No sabía qué hacer para convencer al cabrón del Pascual. Joder, hostias, ¡ya estás aquí! - No terminaba de creérselo y cogió sus manos, temiendo que todo fuera una ilusión y de repente la Eva se desvaneciera.

- Tía, he estado pensando un plan - . Le confesó y sus mejillas se sonrojaron.

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20/10/2014, 18:38
Eva Sánchez Banderas

Recibí el abrazo de mi amiga encantada, y se lo devolví con todas mis fuerzas. Joder, lo que la había echado de menos. Joder, lo aburrida que había estado. Joder, lo que tenía que contarle. Joder, joder, joder.

- No te preocupes, está bien. - Aseguré sin perder la sonrisa. - Así me he enterado de lo que Manuel nos contó ayer... - Empecé antes de emitir una risita, y luego empecé a enredarme el pelo en uno dedo, como si fuera a cambiar de tema. - ¿Tú, del uno al diez, cuántas ganas tienes de casarte? - Le pregunté. Sabía que lo del plan era importante, pero esto tenía que soltarlo cuanto antes.