Partida Rol por web

Capa y Espada

Entre las manos del Diablo

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15/01/2008, 23:02
Director

El extranjero que ha hablado parece sufrir heridas de mayor seriedad. Tiene multitud de cortes y magulladuras, seguramente algun hueso roto y alguna costilla a parte de contusiones de diversa consideracion... dirias que ya conoce el potro de torturas...

En cambio, la dama, parece relativamente sana lo que solo puede significar que ha colaborado con la Santa Orden. Apenas unos rasguños, un feo golpe con restos secos de sangre en la cabeza y poco mas... al menos a primera vista.

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16/01/2008, 19:48
Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo

- Os atenderé en un instante señor. Antes echaré un vistazo a la cabeza de la señorita, si me lo permite. Mientras tanto haced el favor de quitaros la camisa para que pueda examinar mejor vuestras heridas señor...- Hago una parada pensativa antes de continuar hablando- Mi nombre es Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo, estudiante de medicina y cirugía bajo la tutela de don Léjaro Gutiérrez Freisán. Disculpen vuestras mercedes mi descortesía al no haberme presentado según pase, tengo la costumbre de encargarme directamente de mis objetivos, en este caso el alivio dentro de lo posible de sus dolencias. Y no señor, no es mi intención hacerle pasar más penurias.

Mientras digo estas palabras examino la piel bajo los cabellos de la chica, limpiando con alcohol de romero y un trozo de tela la sangre seca para comprobar que el golpe se reduzca a una contusión y una brecha que la naturaleza cerrará por si misma sin más conscuencia.

Antes de haber terminado de hablar, la muchacha ha terminado de recibir mis cuidados.

- Señor, proceded a descamisaros tal como os pedi,- mi tono es firme y autoritario- me temo que atenderos me llevará más tiempo que ocuparme de la muchacha.- Me acerco a él comenzando a disponer algunas vendas.

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17/01/2008, 00:08
Armand Montefiori

Descubro mi camisa, mostrando un cuerpo curtido pero magullado por toda clase de maltratos sufridos.
Son muchas las marcas de peleas que me recorren mas las unicas que duelen son las del fruto del desprecio sufrido en este encierro.
Muchisimas gracias señor Antonio, si me permite llamarle asi.
¿Porque le mandan a usted? No tiene sentido... aunque, nunca entendi bien el plan de Dios

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17/01/2008, 11:46
Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo

-No lo tengo muy claro.- Voy palpando con mano experta costados, espalda y articulaciones.- Por desgracia no cuento con emplastos que os alivien el dolor o la hinchazón.- Comienzo a lavar los múltiples cortes con el alcohol, prestando atención a los más profundos y a los más visibles.- Es dificil establecer relación entre una muchacha, un soldado y los sucesos acontecidos en perjuicio de la Iglesia. Por el momento puedo aseguraros que me trajeron aqui para sanar las heridas sufridas durante los... interrogatorios. Supongo que se tratará de aparentar, ya que desconozco los hechos al respecto. ¿Por cierto, cómo he de llamaros?

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17/01/2008, 14:07
Gabrielle Narvaez

Gabrielle se sintió agradecida de que alguien pareciera serles sincero i agradable en ese oscuro y sombrio lugar.

- Muchas gracias don Antonio, toda ayuda es poco en nuestra situación.Supongo que desconoce usted los hechos, pero no recuerdo que la inquisición se haya molestado mucho en guardar las apariencias hasta ahora.- Penso por un momento en como la habian capturado, en una situación que parecia cierto insólita. -No recuerdo que en el auto de fe los reos lucieran sus mejores galas...

Miró las heridas de Armand, percatandose por las palabras del médico de la profesión de su acompañante en la celda.

-Don Antonio, me permite una pregunta?- Gabrielle no espero contestación del médico. - Conoce algo usted de un tal Hinojosa? Al parecer es por su causa que he acabado aqui.

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17/01/2008, 16:21
Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo

La sorpresa se plasma por unos instantes en mi rostro.

-¿No sois aún muy joven para veros en situaciones con un hombre de semejante calaña, chiquilla?- Continuo atendiendo las heridas del hombre- Disculpad muchacha, bastante tenéis con vuestra situación como para soportar mis chanzas. Sí, algo sé de ese Hinojosa, más no lo bastante. Quizás sean solo rumores, pero al parecer se trata de un asesino. Pero eso no explica porque la Inquisición está implicando a más personas. ¿Podrían vuestras mercedes iluminarme al respecto?

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17/01/2008, 18:25
Gabrielle Narvaez

- Creo que la iluminación es algo que nos vendría bien a todos aqui abajo. - Sonrió Gabrielle con sarcasmo.
- El problema mi buen señor es que ni siquiera se quien es el tal Hinojosa. No se si es asesino o gentilhombre, y por lo que a mi respecta podría ser el mismisimo rey de francia que me daría lo mismo.

Se tocó por un momento la zona de la cabeza donde el medico le había aplicado las curas, escocia como mil demonios, pero su Ama siempre le había dicho que eso era lo mejor para las heridas.

Una mujer moribunda me entrego un anillo para un tal Hino, y cuando fui a informarme de quien era tal hombre, monseñor Angel menciono a este tal Hinojosa y me envió directa aqui.

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17/01/2008, 19:38
Armand Montefiori

Pues mis mercedes yo solo recuerdo que al salir de una taberna cuatro malhechores se nos echaron encima y mataron a mis dos amigos... el que parecia jefe me grito antes de irse que no era por nada personal... esto cada vez tiene peor espina... no se que piensan pero tal vez el Hinojosa este sepa algo mas...

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17/01/2008, 23:08
Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo

- Es curioso eso que dicen ambos. ¿Conocíais de algo a la mujer, joven; conserváis acaso dicho anillo aún con vos? - Termino de aplicar alcohol para desinfectar las heridas del soldado, y comienzo a aplicar vendajes en las heridas más serias para que no queden expuestas. - Ese Hinojosa es un individuo de cuidado, que al parecer ha de estar metido en más problemas que los que nos atañen a cada uno y va salpicando por donde camina. Muchacha, es posible que si que tenga interés en los motivos por los que llegásteis aqui. Y también si el hombre que vos decis, señor, era un matasietes encapado de amplio chambergo que le cubría el rostro, bien diestro en armas. Pues si es como sospecho hay relación entre los hechos que nos han reunido a los tres aquí.

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18/01/2008, 00:06
Director

Mientras hablais en la pequeña e insalubre celda el buen doctor revisa y venda vuestras heridas haciendo que al menos os sintais mejor.

Notas de juego

//Estais mejor de salud pero no pueden hacer mucho mas por vosotros sin un poco de reposo.

Un saludo!

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18/01/2008, 00:46
Armand Montefiori

Pues mi buen doctor lo cierto es que NO parece ser el mismo matasietes... ¿que problema teneis vos con ese hombre?

Notas de juego

MASTER, la descripcion encaja? es que mi recuerdo es ese xDDD

---

//DJ: VA A SER QUE NO PORQUE TU LE VISTE PERFECTAMENTE LA CARA Y PODRIAS DESCRIBIRLE CON LA IMAGEN QUE VISTE (Y PUSE) DEL PJ ^^

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18/01/2008, 12:22
Gabrielle Narvaez

- No, el anillo esta o bien perdido o bien en manos de la inquisición. Lo unico que puedo decirle de él es que mi Ama me obligó a abandonar nuestro hogar en el momento en que lo vió. Solo desdichas me ha acarreado el dichoso anillo.

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18/01/2008, 12:59
Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo

- Con Hinojosa, problemas que puede que acaben en sangre. Con el hombre que os digo, que no sabemos si será el mismo, he de saldar una deuda de honor si mis sospechas fueran ciertas. Sea como sea, necesito encontrar a ambos.

Empiezo a recoger los bártulos y enfundarlos en la bolsa, mientras distraidamente le comento a la muchacha:

- Os agradezco vuestra ayuda, ¿sería muy indiscreta que me pudierais facilitar manera alguna de hablar con vuestra ama? Tal vez ella pueda ayudarme. Encontrar a Hinojosa podría incluso demostrar la posible inocencia de ambos, aunque realmente desconozco de que se les acusa.

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18/01/2008, 15:28
Gabrielle Narvaez

Gabrielle le indico con unas breves explicaciones como llegar al pequeño callejón donde se alojaba, muy a su pesar le pidio que le transmitiera unas palabras a su ama.

- Por favor, decidle de mi situación. Quizas ella pueda hacer algo para sacarnos de aqui.

Gabrielle dudo por un momento de decir algo más, pero se guardo las palabras, no sabía siquiera si su ama seguí con vida despues de la ultima vez que la vio.

- Si habla con ella i ha de volver aqui a tratar algun otro reo, venga por favor a vernos. Me gustaría saber como se encuentra.

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19/01/2008, 11:51
Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo

- ¿Porque nombres he de preguntar a mi regreso?

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19/01/2008, 12:43
Armand Montefiori

Por Armand Montefiori, inocente de todo lo que se le imputa... le esperaremos con muchisimas ganas doctor, si es que no nos han soltado antes o hemos muerto... digo con pesar

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21/01/2008, 18:43
Antonio Juárez de Mendoza y Urquijo

- No puedo prometerles nada, pero en agradecimiento a la ayuda que me han prestado si me es posible hacer más que aliviar sus heridas así lo haré.

Me despido con sendas inclinaciones de cabeza hacia ambos a modo de sucintas reverencias y llamo al carcelero con voz alta.

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21/01/2008, 22:49
Carcelero

Tras un pequeño silencio escuchais el pesado paso del carcelero hasta la puerta y como las bisagras de esta tiemblan por el esfuerzo. La imagen del hombre de aspecto extraño os hace estremeceros nuevamente y el sonrie complacido.

- ya se marcha vuecencia?

Tras dejar salir al buen doctor y cerrar la puerta tras de el os volveis a quedar a solas en la oscuridad de la celda mientras escuchais como los pasos del doctor se alejan.

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21/01/2008, 22:54
Monje

Tras salir de la celda y avanzar unos metros con la compañia del carcelero y ante la amalgama de gritos de dolor que embriagan los pasadizos os topais finalmente con un monje que os detiene.

- Perdonadme buen doctor pero el Inquisidor Francisco Jiménez de Cisneros, Arzobispo y Cardenal de Toledo, quiere veros.

La mirada fria y nerviosa del carcelero te pone los pelos de punta pero no parece que tengas muchas opciones...

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21/01/2008, 23:09
Gabrielle Narvaez

Gabrielle se recostó sobre la pared

- Supongo que solo nos queda esperar...

Se volvió hacia el soldado, no veía si realmente tenían o no alguna conexión todos los hechos sucedidos.

- Y vos, no sabeis de nadie que os quiera muerto que haya podido pagar a los que os asaltaron, don Armand?