Partida Rol por web

Tras terminar todos de desayunar, recogéis vuestras pretenencias y os dirigís nuevamente a la carcel.

Al llegar dos guardias os paran el paso, pero al ver quienes sois, os dejan pasar mientras avisan al capitán con un grito.- ¡Señor vienen a por el elfo... creo!- dice sin entrar y volviendo a ponerse en la puerta.

Cuando pasais, el capitán os dice que os sentéis con un ademán de su mano, mientras termina de escribir unas líneas en una hoja de papel.

Al terminar os mira y os pregunta.- ¿Y bien? contadme a que habéis venido- dice mirándoos a cada uno de hito en hito.

- Venimos a conocer los cargos y la fianza.

Muy sutil, Kili. La elfa estaba pensando cómo llevar aquél asunto, cuando el enano se le adelantó al hablar con el capitán.

-Nuestra intención era marcharnos hoy de aquí, pero necesitamos que Ghiltanas venga con nosotros. Si nos deja llevárnoslo, el elfo no volverá a causar molestias en el pueblo, y se librará de tener que aguantarlo. ¿Qué le parece?

<b>-Se le pasaran las ganas de gastar bromas.</b>

El capitán os mira seriamente y os dice.- El caso es que en este pueblo hay normas.. como en todos. La priemrera vez qeu se te mete en la carcel es un aviso. La segunda una lladada de atención y a la tercera eres un criminal- os comenta-. Vuestro amigo la primera vez se le metió... con usted- dice señalando a Kili-, por disturbios. La segunda ya fue por algo más grave... robo... no es que espere que exista una tercera, es que como exista las medidas serán drásticas, dependiendo del delito.

El capitán os cuelve a mirar y dice.- No nos pongamos drásticos, creo que siempre hay una segundaoportunidad... pero esta vez no será a coste cero, como en la primera ocasión, esta vez saldrá por cinco monedas de plata... eso o un mes en prisión.

El hombre se queda quierto mirándoos y esperando a que decidáis algo.

La elfa saca cinco monedas de plata y se las da al capitán.

-La próxima vez que Ghiltanas se meta en líos, yo no vendré a buscarle, capitán.

El enano carraspea.

- Que conste que la primera vez no fue culpa nuestra, sino de algunos que no saben beber ... pero le agradezco su comprensión. Entre los suyos, Gilthanas es poco más que un niño ... y a veces se comporta como tal, sin malicia pero imprudentemente.

El capitán mira a uno de sus subordinados que tenía cerca y le dice.- Trae al elfo.

Luego recoge las monedas y las mete en una caja metálica cerrada con llave que hay en uno de los cajones que tiene su mesa. Después ecribe en uno de los papeles que tiene delante y después de rubricar su firma le pasa a Laya el papael y la pluma para que firmes.

En el papel, que lees por encima, pone la sentencia por lo que se le encarcela y la pena por el delito. También pone la manera de liberarlo y en ella ves que, efectivamente son 5 monedas de plata. Más abajo pone su nombre y al lado hay un espacio.- Por favor, pon tu nombre y la firma... en común si puede ser.

Al isntante sale el guardia con Ghiltanas. Lo deja avuestro lado y se retira unos pasos.

- La proxima vez puede que te quedes sin mano elfo.

Pero,pero,pero que yo no fui en serio, Laya no pages ni una moneda, estaba a punto de escap.......- Cerró la boca porque si dió cuenta que aun permanecia el guardia-Bueno.......esto, ¿quien gano el campeonato?, Marchamos ya?

-Tienes al ganador delante.

Salís del cuartel de la guardía de Bree y os dirigís hacia las puertas donde habíais quedado con la gente del pueblo que se iba a unir vosotros para luego servir en la fortaleza que os dieron.

Al llegar veis a una veintena de hombres. La myoría están solos, pero varias familias (cuatro) os les acompañan. Todos viajan con sus enseres metidos en seis carromatos, que unidos a los tres vuestros hacen una carabana bastante grande.

Al veros llegar la gente os señala y sonríe. Muchos no creían que la oferta de empleo y tierras fuera en serio y al veros llegar creen más en la misma. Animados os miran y esperan vuestras palabras para iniciar la marcha.

No. No es uno de los que se van con vosotros ni de la gente que está en al guadia cerca de la puerta ni de la gente que vive por esa zona... ya lo siento, hoy no obtendrás tu venganza ;)

De todas formas, con la tirada que hicieste no es que te delatara, es que le pediste por favor si le podías robar... y a los que estaban a su lado les apartaste aludiendo que tenías algo que tratar con el señor...y la tirada de él lo confirmó todo ;PPPP

Arthanatan se sube a su montura y se gira en pos de los allí reunidos.

- El viaje hasta la fortaleza nos llevará varias semanas- comentó-, espero que todos seamos capaces de mantener la calma y llevar la concordia durante el trayecto.

El dunedain hizo una pausa y miró a todos los presentes. Luego continuó.- Lo que allí os encontgraréis es una oportunidad para comenzar una nueva vida. Pero no esperéis que ésta sea fácil y sencilla. Hay muchas dificultades y un mal que asola el norte nos acecha constantemente. Es un viaje para valientes, para intrepidos, para auqellos que quieran ayudar a crear un mundo mejor.

Nuevamente el fornido montraraz hace una pausa y mira a todos los allí reunidos.- Es hora de decidir. Cuando salgamos no habrá marcha atrás. Todo el que quiera quedarse puede hacerlo y nadie le dirá nada. Y todo el que quiera continuar sera bienvenido a la fortaleza.

Revisando las atitudes de la gente Arthanatan ve que todos están con él y quieren inicial el viaje que les llevará a un nuevo lugar cargado de esperanzas.

- Bien marchemos. Yo seré el guía y Troty nuestra retaguardia. Si queréis algo comunicádnoslo a cualquiera de nosotros o a la elfa Laya- dijo señalando a la joven elfa.

Sin más el grupo salió por la puerta de Bree en dirección al camino del este, a la última posada.

Por un momento Laya se quedó sin palabras. Realmente no esperaba que tanta gente acudiera a su invitación. Tharas estaría más que contento, o eso esperaba. Pero aún quedaba lo más difícil. Tenían que volver todos sanos y salvos a la fortaleza. Aunque la elfa disfrutaba con el viaje, temía que hubiera demasiadas personas a las que proteger. Aún así, haría todo lo posible por llevar a cabo su misión. En estas reflexiones se encontraba Laya, cuando oyó a su compañero hablar, con voz tranquila hacia todos los presentes. Agradecida por no tener que cargar sola con las esperanzas de aquella buena gente, se dispuso a emprender el camino. Como sus compañeros vigilaban ya los dos extremos de la caravana, decidió que marcharía por el flanco de la misma, ocupándose de los problemas que fueran surgiendo en el camino. Con un movimiento de su brazo, el halcón Súrion echó a volar, hincando las garras en el guante de cetrería de la elfa para tomar impulso.

-Vamos allá -dijo, alentando a los demás- cuanto antes salgamos antes llegaremos.

Una vez emprendida la marcha, se acercó al Ghiltanas, y le habló en un idioma que no todos entenderían:

-No me causes más problemas, elfo. Ya me has costado bastante tiempo y dinero. Estas personas nos acompañarán hasta la fortaleza y vivirán con nosotros. Tenemos que protegerles, no robarles. No volveré a defenderte ante un incidente de ese estilo, y espero que Kili cumpla su promesa de cortarte esas manos tan largas que tienes si intentas hacer algo de nuevo.

Esto....yo....ehhmmm, entendido my lady-Le dice sonriendo-Aunque...... ya que estamos aqui tu y yo....pues cuando llegemos a la fortaleza....esto......me gustaria invitarte a algo

La primera semana de camino transcurrió en la total normalidad y calma. El camio era recto, llano y no había zonas frondosas de las que preocuparse por si os emboscaban.

A lo lejos apareció la fortaleza de Amon Sûl donde decisís descansar esa noche. Sabíais que a partir de ahí las cosas se complicarían, pues la carretera se volvería más sinuosa, con costantes altibajos y flanqueda por bosques... toda una experiencia.

empiezo a caminar hacia donde estan los aldeanos, sin perder de vista a laya