Partida Rol por web

UNa vez tomada la decisión de ir a Montana, hacéis la maleta y empezáis a reservar vuelos. De Los Angeles a Elena, la capital de l estado, y de allí en coche de alquiler a Browning, una pequeña ciudad del Oeste en la llanura a los pies de majestuosas montañas. La planta química de la ABC es una presencia totalmente ajena al paisaje local, aunque varios carteles que veis en la ciudad parecen indicar que tienen buena relación con los vecinos (haciendo cosas como patrocinar el equipo de fútbol local).

Tras aparcar los dos coches de alquiler que habéis conseguido en el aeropuerto, os registráis en un modesto motel de camioneros (no hay nada más disponible). Habéis tardado unas unas diez horas en llegar de Berkeley. Es hora de comer algo y planear el siguiente paso.

- Bueno amigos, aparentemente esta planta se lleva bien con los lugareños, o eso intenta aparentar. Yo creo que deberíamos ir donde se reúna la gente y averiguar eso. Un bar o algo por el estilo. Si alguien habla mas de la compañía por ahí podría ser. Así mismo vayamos con cuidado para que ellos no se enteren que estamos tras de sus pistas. - Luego de un rato continuo - podríamos hablar con la policía local, aunque podría estar comprada, para averiguar de desapariciones raras o cosas así reportadas. 

Una vez en Montana nos dirigimos a Browning pequeña ciudad donde estaba ABC, tan solo pudimos encontrar un modesto motel para alojarnos, no había mucho donde elegir. Tras escuchar a Bartlet, Sinclair les recordó algunas cosas.-Hay un policía con el que hable por teléfono, con el que tal vez nos podamos reunir más adelante. Pero yo comenzaría por seguir el rastro de Iron Shirt. Tengo la dirección de sus padres y la de su novia y los principales compinches. Supongo que podemos comenzar haciendo una visita a la casa paterna, una vez que comamos en algún restaurante de la zona. Y luego ya veremos, pero ir a casa de los compañeros de aventuras de Iron o a la de su novia, me parece que sería la mejor manera de meternos en materia.-

 - Sí, estoy de acuerdo. Creo que nuestra prioridad debe ser localizar a Iron Shirt. Es una fuente directa, si conseguimos hablar con él adelantaremos mucho. - Fessenden mostró su acuerdo con la idea de Sinclair mientras masticaba un trozo de carne. Estaban comiendo en un restaurante cercano al motel. Aunque el filete a la parrilla no era gran cosa, después del largo viaje cada bocado le estaba sabiendo a música celestial. 

 - De todos modos también Bartlet lleva algo de razón. Este lugar es más pequeño de lo que me imaginaba, así que si ABC hace cosas denunciables algo podremos sonsacar hablando con los lugareños. 

La casa del padre de Thomas Iron Shirt está en completa decadencia, con el jardín lleno de basura, y huele a desesperación rancia. Tras mucho llamar a la puerta, acude el padre, Donald Iron Shirt, desaseado y borracho. A vuestras preguntas responde que hace meses que no ve a su hijo (al que llama "ese mierdecilla"), y al parecer no le importa nada el chico. Su madre murió en un accidente de coche hace varios años. Os dáis cuenta pronto que ese tipo no sabe nada, así que le dejáis en su miseria.

Los padres de Jacob Left Hand tienen una casa pequeña pero bien cuidada, donde viven con dos hijos pequeños. Están claramente preocupados por Jake, su hijo mayor, que se ha juntado con malas compañías, y desesperados de volverle a ver. Le dan la culpa a Tom Iron Shirt, al que consideran un macarra y un granuja. No saben nada de él desde el 3 de agosto, cuando fue a pedirles dinero. El padre le insistió en que volviera a casa y retomara los estudios. Pero Jake le dijo que él y Tommy harían "algo grande" (sin especificar el qué). Tras lo cual se fue.

El padre De Charles Low Horn está en la cárcel. Cadena perpetua por matar a un camionero de un navajazo en una pelea de bar, hará unos seis años. Llamáis a la cárcel y un atento funcionario os dice que su hijo no ha ido a verle nunca. Su madre trabaja de camarera y os dice también que no sabe nada de Charlie desde de principios de agosto. Aunque parece tener miedo de su hijo y no echarlo de menos.

Lynne Crystal Stone, la novia de Iron shirt, vive en un parque de caravanas. A la hora que váis no está. Una vecina os dice que trabaja en la planta química (es decir, en ABC) por turnos. 

Tras ir buscando las diferentes direcciones y hablar con los familiares que fueron encontrando. Pronto les quedo claro, que no iban a obtener tan fácil noticias recientes de Iron Shirt, ni de sus amigos. Estos poca o ninguna relación mantenían con sus padres.

Pero la cosa cambio cuando fueron a la dirección, de la que le habían dicho que era su novia. Esta aun no había regresado del trabajo en la planta de ABC, pero estaba claro que podría estar mejor informada que los padres del investigado o los de sus amigos. Al menos eso esperaba, o habría sido una enorme e inútil pérdida de tiempo.

-Dado que hasta ahora, nada en claro tenemos de donde pueda estar Iron Shirt, creo que deberíamos quedarnos, pero fuera de la vista en un lugar apartado, esperando a que su novia regrese de trabajar. A ver que nos pueda contar.- Había posibilidades de que la chica supiera algo, y encima trabaja en ACB, a saber hasta que punto estaría implicada en sacar de la empresa aquella cabeza de perro que tanto les había impresionado.

Tras esperar un par de horas en el coche, véis como una moto aparca y una chica rubia de unos 18-20 años se baja y se aproxima a la caravana, donde saca unas llaves para abrir la puerta.

- Ahí la tenemos. -dijo Fessenden cuando vieron aproximarse a la chica a la caravana. Había sido una espera larga, y en algunos momentos se preguntaron si también aquella pista conduciría a ninguna parte. 

 Pese al rato que llevaban en el coche habían sido incapaces de pensar una buena tapadera que mantuviera a salvo su identidad como agentes federales. Tendrían que identificarse, aunque al menos en ese caso Jack pensaba que la chica no advertiría de su presencia en la ciudad. O al menos no inmediatamente.

- Bien, es una chica joven y creo que se verá intimidada ante agentes del FBI. Eso sí, sugiero que la dejemos claro que estamos de su parte. Que pensamos que esos de la ABC no son trigo limpio y que su novio, aunque no haya actuado por los cauces legales, ha hecho un importante descubrimiento. ¿Que os parece? -preguntó mirando a sus compañeros. 

- Díaz, tú quédate aquí. Debemos conservar la baza de que puedas infiltrarte en la empresa, así que es mejor que ella no te vea. No sabemos cuánto tiempo puede llevarnos esta investigación… -a continuación miró a Bartlet y Sinclair. - No sé Sinclair, yo creo que tú debes llevar la voz cantante en el interrogatorio, tienes labia. ¿Quieres acompañarle tú Bartlet? 

Si, allí estaba la chica, y tenían que hablar con ella.-Si Fesselden, mejor que vayamos yo y Bartlet, si aparecemos todos de golpe, se podría asustar más de lo debido. ¿Vienes Bartlet? A ver que nos puede contar.-

Y bajo del coche y comenzó a dirigirse hacia la chica, mientras que esperaba a que Darla se le uniese, antes de acercarse demasiado a la chica, pero tampoco quería darle mucho tiempo para pensar. 

La chica se queda rígida de sorpresa cuando os acercáis a ella. 

- ¿Qué... qué quieren?

La chica acababa de terminar su turno en la fábrica, y era de suponer que estaría cansada. Y tal vez también algo asustada al vernos acercarnos a ella. Así que mejor ir despacio y sin darle motivos para asustarse mas.

-¡Buenos días! ¿Es usted Lynne Crystal? Somos los agentes Jack y Dennis y tendríamos que hacerle unas cuestiones. No se preocupe, no es nada que pueda perjudicarle a usted, de hecho podría hacer que este más segura. Si le parece bien, pasamos y hablamos un rato, una vez que se ponga cómoda, y tal vez pueda hacer un poco de café.-Trato de decirlo de forma suave y acompañado de una buena sonrisa, no quería que la joven se asustase, ni tampoco que se pusiera a la defensiva. Y dentro de su "hogar" y una vez quitados los zapatos, seguro que estaría más cómoda y dispuesta a hablar. 

A ver vuestras placas la chica se pone pálida pero abre la puerta.

- Sí, claro... Pasen dentro.

La caravana es bastante pequeña pero encuentra asiento para todos.

La chica os ofrece un café instantaneo que calienta en el microondas. Mientras habla de que viene de un turno doble muy cansada. En cierto momento dice que tiene que ir al lavabo y se mete dentro de esa diminuta habitación.

-¡Muchas gracias por el café!- Le dice a la agotada chica, tras su larga jornada laborar. Y luego, cuando Lynne entra en el servicio, Dennis se levanta sin hacer ruido y se acerca hasta la puerta, no quiere arriesgarse a que intente algo.

- Eso es, contrólala -susurró Fessenden a Sinclair cuando este se acercó a la puerta del baño. Por su parte el ex-soldado se dedicó a echar un vistazo rápido en aquel reducido espacio, buscando algo indicativo que le pareciera fuera de lugar. Tal vez si pudiera fisgar en el bolso de la chica, o en alguna mochila, pudiera encontrar alguna referencia a su novio o el paradero donde se encuentra este. Con un poco de suerte quizá tuviera incluso el móvil a la vista y pudiera espiar sus últimos mensajes o llamadas. 

SINCLAIR

Te das cuenta que la chica está intentando abrir la ventana del lavabo... Así que previsoramente das la vuelta a la caravana. Y efectivamente ves como saca la cabeza por ella, y al verte, vuelve a entrar con un suspiro.

FESSENDEN.

Revisando rápidamente su bolso solo encuentras la cartera, tabaco, tarjeta de identificación de ABC, y el móvil. No está bloqueado. Sale que ha hecho muchas llamadas a un número que memorizas.

TODOS

La chica sale del lavabo y se sienta en la cama:

- ¿Qué quieren?

Una vez sentados todos a la mesa, la chica ya tendría claro que no iba a ser tan fácil escapar de ellos. No había que presionarla demasiado, pero si un poco.-Vaya intento de fuga. ¿Tienes algo que ocultar? 

Y tan solo un momento detrás, el tiempo justo para que tema por su propia seguridad, tal vez incluso se vea presa. Una sonrisa y unas preguntas amables.-No se preocupe, no tiene nada que temer. Estamos buscando a su novio, a Iron Shirt, no sabrá donde se encuentra. Y ya que estamos aquí, si que nos gustaría saber alguna cosa de su lugar de trabajo. Alguien saco algunas cosas, no nos importa quien, y nos gustaría si podría decirnos algo de esas cosas. Así como de lo que hacen en su empresa. Quiero que comprenda que no tenemos ninguna intención de causarle problemas, si nos cuenta lo que sabe, la dejaremos tranquila.-

Con lo que le había dicho, y sabiendo donde trabajaba, ya tendría claro que pensábamos que habría sido ella la que saco la cabeza del perro. Pero también, que si colaboraba, no tendría nada que temer. 

 Fessenden se mantuvo en silencio, esperando una respuesta por parte de la chica. Una vez más echaba en falta ese poder intimidatorio que conseguía siempre que enseñaba la placa del FBI en un interrogatorio, y no se le daba bien improvisar otro papel. Pero Sinclair lo había hecho bien, había sido suave pero claro: no nos iríamos de aquí sin obtener alguna respuesta. 

- No se nada de Tommy. No se donde está ese vago de mierda. ¿Tienen una orden? Si no tienen una orden. Largo de aquí. A tomar por culo. Agentes una mierda. Fuera de mi casa.

Se la ve muy nerviosa, francamente acorralada.