Partida Rol por web

-Respondo a doña Inés y a Serafín. Cierto es que no voté a ningún alcalde, lo cual no me permitían mis votos (se entiende que son votos monacales), más analizando los resultados un voto no hacía peligrar vuestra candidatura, lo cual me congratula, pues, dejando a parte el hecho de la confusión inicial al no elegir el tipo de voto a realizar, estais demostrando ser una alcaldesa entregada a su pueblo. También es cierto que no voté en las primeras elecciones pues muy pronto era para sacar conclusiones, de ningún vecinos tenia dudas o sospechas y mandar a un inocente al patíbulo no me pareció justo para nadie, y menos para el pobre Ramón que Dios le tenga en su gloria. Ésta mañana, respondí a la misma pregunta realizada por don Miguel, y asumo mi culpa, pues quizá de haber votado, siempre basandome en los datos de doña Adela los huesos de los que se alimentó el perro podrían haber sido de bestia y no de niño inocente.-

Dejó caer la vista al suelo.

- Humano soy y errores cometo, no espero el perdón de los que me rodean, pues no creo merecerlo, más intento enmendar mi error dejando de lado mis votos y pidiendo perdón a Dios.-

-En cuanto a mi premura, y con esto ya concluyo, que no quiero molestar de más a esta parroquia, mi voto a Ramiro lo baso en suposiciones, como todos los demás, pero bajo la luz de una lógica que dudo se haya pasado por alto. No sé si es voto oficial u oficioso, pero dejo claro que no lo voy a cambiar. Pues deacuerdo estoy con que escudarse en el voto de la mayoría es cobarde y sospechoso.-

-Y sí señora de Vellí, considero a don Ramiro uno de los suyos, pues en la misma lista que está uno, está la otra.-

Tras la casa mas alta se escondía ya el sol, no sin antes haberle marcado la cara con el ultimo de sus rayos y así mientras se bañaba entre la luz, a sus oídos inquietos le llego algo que sino era raro, al menos era curioso el dato.

-Vaya, no sera que e oído que mientras al resto les parece rara la actitud del frailecillo, ¿A nuestra señora Mireille le ha convencido? La misma que ha luchado con dientes y garras contra Don Miguel y vista superada a optado por rendir culto al pueblo ¿Y evitar votarlo?-Se llevo la mano a la barbilla.-Repasemos... Mucho acuso y lucho contra él y ahora que termina el tiempo, prefiere votar a Ramiro igual que Olegario, no sin antes defender al servidor del señor amante del sufrimiento de los niños en un lugar de nombre purgatorio. ¿Y no sera que ella le protege a él? Y de amantes nada, porque esos eran Pablo y su vieja. ¿Así que sera, que serán lobos de piel?.
-Hizo un respingo, pero no se movió del sitio.-Creo yo que tal vez Don Miguel no erre contra ella y ni aquellos que no entendemos al hombre de dios.

Rodrigo callo en ese momento, sonriente como siempre, sin miedo. Pero paciente, pues aun debía decidir en quien recaería su voto, ya adulto, como prometió ayer.

Adela, no te sientas acusada, necesitamos implicación (que he de reconocer que la estáis mostrando más que ayer) e información, y toda la que se proporcione es poca. He nombrado a quienes estaba observando de cerca y reconozco que tú eres una de ellas, sin que eso implique nada bueno ni malo, pues de hecho hay de quienes sospecho más que de ti. 

Pies oscuros, no intervienes mucho, pero he de reconocer que cuando lo haces me gusta escucharte.

Cuando pueda, padre, resuelve nuestras dudas por favor. Y el resto, id procediendo con los votos. De momento el recuento queda como sigue (si no me equivoco):

2 - Ramiro Benavente: Fray Olegario (1), Mireille de Remu (3)
1 - Rodrigo Belmonte: Bartolomé (2)
1 - Mireille de Remu: Miguel de León (4)
1 - Francisco Fernández de Córdoba: María de Vellí (5)

En ese caso, haré lo que esté en mi mano para disipar sus dudas, Inés. En primer lugar, procedo a la votación. Voto a Mireille de Remu a pesar de que el primer día contó con mi apoyo, pues como ya he dicho, sus últimos movimientos me han parecido extraños y fuera de lugar. Cuenten con mi apoyo también aquellos que fijen su mirada en el fraile y en María de Vellí.

Serafín se había dispuesto a hablar cuando un tropel de intervenciones se le adelanto. Aún así pronunció lo que inicialmente tenía previsto, pues igualmente pudiese ser relevante. Se sintió más confiado al ver que sus sospechas seguían la línea del resto de sus vecinos.

Señora Alcaldesa, siguiendo su petición de irnos pronunciando, y aunque aún no hago oficial mi voto, sí puedo afirmar que actualmente existen 3 personas que me generan ciertas dudas, más que otros:

- Fray Olegario, como ya he dicho, su actitud a lo largo de estas dos últimas jornadas me parece sospechosa. Le agradezco que haya explicado el por qué de su voto, pero aún así, no termina de convencerme.
- María de Vellí y Mireille Remu, es cierto que sus actuaciones no me han parecido tan llamativas como las de nuestro cura, pero si bien otros de los candidatos que vienen siendo propuestos, me inspirar mayor beneficio de la duda, en sus casos, cada vez se me genera mayor desconfianza. No obstante, sigo dispuesto a atenderles e incluso a cambiar de opinión sobre ustedes, pues admito que a estas alturas, aún me falta mucha información.

Existe otra persona, Don Francisco, de la que por su escasa intervención, no sé qué pensar. No sé si atribuirlo a la desgana, por ser un simple aldeano, o se esconde algo más detrás.

Como digo aún no es nada oficial, simplemente hago públicas mis actuales sospechas, que pueden cambiar, si realmente escucho argumentos que me convenzan.

Por otro lado, soy de la opinión, como Doña Inés, de que aquellos que gocen de alguna facultad que nos pueda ser de ayuda no se expongan en demasía tan temprano y sí traten de que de alguna manera velada, nos pueda llegar información, sin que corran ningún riesgo.
 

Afortunadamente, la mayoría ya exponía sus sospechas. Por supuesto, algunas estarían equivocadas e incluso algunas serían mentira, dado que los lobos andaban por ahí. No obstante, sincerarse y pensar en voz alta era, para el artista, la única forma de dar con los lobos. Cuando pidieron su opinión, la dio de nuevo.

-Cuando nombré a Olegario y a Mireille no pretendía acusarlos de forma contundente, sobre todo a la segunda, a la que dije que mis sospechas no eran ni mucho menos infalibles, solo me llamó la atención que hubiera sido menos agresiva ese día, cosa que en realidad podía deberse a otras causas o quizá incluso volviera a ser la misma poco después. Sin embargo, su reacción ha sido, a mi parecer, bastante contradictoria con sus argumentos anteriores, al menos en el caso de Olegario. Don cauto, sin mucha provocación y menos pruebas me ha votado contundentemente sin esperarse siquiera a pedirme explicaciones, donde podría haber demostrado mi inocencia como dije que puedo hacer. Su defensa incondicional a Mireille no ha ayudado para nada, pues no sé si es posible que pueda volver a haber un nuevo romance. Si lo hay, entonces eso sería casi lo único que explicara su comportamiento.

Pero seguía siendo cauto.

-Por desgracia, solo son nuevamente indicios y nada más. Si tuviera que elegir entre ambos, elegiría como más probable a lobo al fraile y solo si éste es culpable, sospechar completamente de Mireille. Por eso, aún en el caso de que pueda venirme mal a mí mismo votar al Fraile en vez de Mireille- hasta ahora ella tenía un voto más- creo que sería mejor probar con Olegario antes que con ella, que creo es más participativa.

Corrijo el recuento (Ramiro, no habías contado el voto de Adela):

2 - Ramiro Benavente: Fray Olegario (1), Mireille de Remu (3)
1 - Rodrigo Belmonte: Bartolomé (2)
2 - Mireille de Remu: Miguel de León (4), Adela Lastra (6)
1 - Francisco Fernández de Córdoba: María de Vellí (5)
1 - Fray Olegario: Ramiro Benavente (7)

Alcaldesa, no me ha quedado clara una cosa, ¿quiere que votemos ya o que hagamos voto de confianza?
Y por favor, repito, es muy difícil seguirles con tanta palabrería. 
Mi votación de hoy se inclina sobre la señorita Remu, porque si ella fuera lobo , creo que igual podríamos matar dos pájaros de un tiro, porque seguramente el fraile sería  su compañero.
Una de las cosas que más me escamó de la señortita Remu, además de las acusaciones que se han dicho, fue su agresivo ataque a Don Miguel con insultos e improperios. Llámenle pálpito, pero sentí demasiada desesperación en su ataque/defensa. 
Alcaldesa, cuando me aclare si votamos o damos confianzas, me pronunciaré.
Y repito, seamos mas concisos, he ido a mear y al volver, aquí se ha hablado hasta de que la tierra es redonda.
 

-¿Que la tierra es redonda?-Sorprendido aquel polluelo, salto del suelo y siguió al enterrador, para preguntar sin temor sobre aquello que dijo, sin miedo tampoco a verlo ocupado.-¿Como sabéis eso? Quien lo dice, no sera la iglesia del fraylecillo...-Dudaba de la palabra del hombre de altura de chiquillo.

-Estoy de acuerdo en que intentemos ser un poco más directos porque con tanta palabrería se pierde el mensaje. Suscribo lo que han dicho algunos: tampoco me gusta la actitud de Don Francisco.Su discurso no tiene mucha lógica ni tampoco ha usado argumentos para rebatir lo que otros dicen. Sé que me lancé a por Miguel por sus celebres comunicaciones pero le daré ese voto de confianza por ahora.

​

¡Cuanta premura! El ebanista, que quería ser de los primeros en votar como se le había pedido, se vió adelantado por varios vecinos que comenzaban a depositar sus votos a la caída del sol. Bueno, no hay daño. Tú mantente en tus palabras Rodrigo, que no se diga.

- Yo, muy a mi pesar y con todo el deseo de estar equivocado, votaré a Fray Olegario. Sería terrible que un ministro del Señor hubiérase corrompido hasta el punto de ser bestia, pero de ser así... tenga a buen seguro que mi mano será la más firme a la hora de disponer de tal infame ser.

Tras votar, Rodrigo añadió:

- Y tengamos a bien recordar que de darse otro empate, el venerable Anciano que entre nosotros se encuentre fuera a resultar muerto, que su manía de llevar siempre la razón le hará intervenir de nuevo y el Capitán no parecía dispuesto a tolerar tal tozudez una segunda vez. Alcaldesa, su voto resultará para esto decisivo, y desconfiemos en sobremanera de quien vote en los últimos momentos para causar un empate.

Inés, me expresé mal si si entendió que la acusó de dictadora. Quiero decir todo lo contrario.

Miguel, espero que tenga a buen acompañarme en el camino por el que me dirije.

Entonces, ¿A nadie más le parece que es razón de que don Miguel diga por quién siente más veneración, puesto que esto nos beneficia más a los aldeanos que a los lobos? Con que cinco almas se sumen a mi propuesta, él se ha comprometido a revelarlo...

- Yo me sumo a su propuesta maestro. De haberle escuchado más ayer quizás mejor hubieren acabado las cosas. Cuéntenos buen Miguel.

Rodrigo apoyó la idea de Diego de Narváez, al que tenía como el más docto del pueblo.

Reintero mi compromiso.

Por otro lado quisiera contestar a doña Mireille que a mi humilde entender lo mejor para ella y para las buenas gentes del pueblo hablaría en su favor contestar, por ejemplo, a la pregunta de cual era su idea al proponer que doña Inés vote entre las primeras, en vez de pensar que con mi voto, pese a haber aclarado que mis razones no son conclusivas pues certezas no tengo, la he condenado indefectiblemente. 

Yo, y tal vez alguno piense lo mismo, me estoy basando en la premisa que la persona que posee las artes de la adivinación ha revisado el alma de nuestra alcaldesa, y es por eso que en principio, aunque no lo doy por seguro, confiaría en ella sabiendo que nadie la ha acusado hasta ahora.

Don Diego se atusa el bigote y cojea hacia el centro de la congregación, dispuesto a compartir sus ideas con sus vecinos. Pero antes hay una aclaración que quiere oír.

En primer lugar corroboro que, tras hacer repaso de lo dicho, Mireille sigue sin aclarar por qué quería que la alcaldesa votase la primera. ¿Para poder votar los lobos al final? Así, si no pueden mandar al cadalso a un inocente, como poco podrían asegurarse acabar con el anciano al forzar un empate. E incluso ambas cosas. ¡Muy hábil! Lo único que me frena de votarla en seguida es que me parece una estrategia demasiado evidente.

Compañeros, esta tarde seguramente no podré estar con ustedes pues mi profesión me va a llevar más tiempo del esperado... Demasiados cuerpos para una sola pala. Así que dispongo mi voto viendo que ya todo el mundo lo está haciendo. Aun así, si alzan la voz, les podré oir desde el cementerio. 

Rodrigo volvió con cara de palo y la cabeza gacha, parecía molesto seguramente porque no obtuvo una respuesta.

"-Enano del demonio, porque se molesta y no responde, que tendrá que yo no tenga para no poder hacer aguas menores conmigo cerca."

De nuevo entre el gentío las votaciones iban y venían y allí estaba Rodrigo que miro a sus nuevos objetivos.
-Pito pito...-Jugo con el dedo y finalmente decidió que seria ella quien recibiera su voto antes que el fraylecillo, pues si ambos llegaban a ser lobos, mas tarde o mas temprano la seguiría.
-Lo siento Mireille pero vos seréis la siguiente.-Era mentira no lo sentía, pero como buen chiquillo no quiso quitar cortesía a esas ultimas palabras.

- Antes di que acabe il tempo di votare señora alcaldesa, ¿puedo pedirle que no haga una moción di confianza? No se si he interpretado bien sus palabras y quiere utilizar ese método di votazione en il próximo día, pero ya lo aclaro que los votos ofrecidos serían secreti, y solo se sabría el resultato, por lo que los lupinos siempre estarían cubiertos entre ellos, pues pueden votar a su compagne al completo y quedarían inmuni ante il resto, dando así con suerte solo con otro aldeano muerto,...

Por otro lado, estoy deseando que caiga la primera bestia no solo para poder alfombrar mi alcoba con su piel sino porque me huelo cierto trapacería entre ellas. O bien porque se defiendan, o bien porque, en fingiendo ofenderse, en realidad pretenden, en sacrificando al uno, proteger al otro.

Don Belmonte, de verdad que me gustaría confiar en vos, puesto que me parecéis buen mozo y creo que sus errores se deben a que todavía es joven. Pero el ser novicio no conlleva el ser cándido, y bien podría ser estrategia suya parapetrarse detrás de su falta de experiencia para cometer todo tipo de tropelías.

Aunque celebro su cambio de actitud respecto a ayer y le animo a que siga por esta senda, me hace sospechar de un toque de atención por parte de viles -y más veteranas- criaturas.

Por otro lado, será que, siendo como soy poeta frustrado, estoy tan acostumbrado a ser ninguneado que cuando alguien me toma en consideración, me cuesta creer que sea sinceridad y no chanza. Y sus palabras hacia mi persona, tan halagadoras por otro lado, me hacen sospechar. ¿No pretenderá, acaso, que a su muerte, si llega, le siga la mía? ¿O ganarse mi confianza para poder comerme mejor?

Me sorprende también que, siendo usted un objetivo tan fácil para las bestias, no haya habido más gente que haya intentado cobrarse su cuello hoy.

No obstante, de momento mantengo mi confianza en vos. Además, por lo anteriormente señalado (si fuérais lobo, hubiera sido raro ver un empate puesto que todos los lobos hubieran votado a Ramón) me parece improbable que seáis lobo. Simplemente quería que esto no pasara desapercibido en caso de que yo no llegase vivo a mañana.