Partida Rol por web

Al cabo de un rato de ir andando por el bosque al fin llegamos Ernestus y yo a nuestro hogar ... ese hogar en el que he crecido desde que tengo recuerdos ...

Aquí es donde nací ... aquí he crecido ... y aquí es donde me quedaré ...

Mientras pensaba esto no dejaba un solo momento de mirar al que ha cuidado y velado por mi durante todo ese tiempo ... Ernestus ...

Ahora el necesita que yo le cuide ... es justo ... el lo hizo por mi ... y yo lo haré por el ...

-Ernestus mañana temprano iré al Pueblo en busca de trabajo ... ¿de verdad estas seguro que no te gustaría enseñar como lo has hecho conmigo durante todo este tiempo? Eres muy sabio y bueno ... las familias mas ricas del Reino les gustaría tener un profesor tan sabio como tu para sus niños ...

-Escucha atentamente Wyric...el conocimiento no es algo que se pueda comprar ni vender...el saber está ahí, tan sólo hay que aprender a verlo y comprenderlo... yo no soy uno de esos maestruchos que reservan sus enseñanzas para las casas señoriales...el saber corresponde a todos...y no sólo a los adinerados...asi que el que quiera aumentar sus conocimientos que acuda aquí...al bosque...

El anciano cierra la puerta de madera mientras resopla.

-No obstante te acompañaré mañana temprano a la biblioteca del castillo...aver si hubiese algo en lo que pudieses ayudar allí, hijo.

Al ver la reacción de Ernestus me doy cuenta que me he equivocado al hacer ese comentario ... Ernestus es un hombre que esta acostumbrado a estar solo, solo mi presencia le ha acompañado todos estos años, y no le gusta tener que enseñar sus metodos y conocimientos ... le gusta que la gente vaya a preguntarle ... porque esa gente es la que tiene el verdadero interes en aprender ... y no la gente a la que se le impone recibir unas enseñanzas ...

-Perdoname Padre ... no queria compararte con esos maestruchos del tres al cuarto ... es verdad ... tu vales mucho mas que eso ...

Me quedo callado unos instantes sin saber como rectificar y prosigo ...

-Estate tranquilo ... no hace falta que trabajes tu ... yo lo haré por tí ... mañana primero iremos a la biblioteca y despues al Pueblo ... y no parare hasta que encuentre trabajo para poder llevarnos algo a la boca cada dia sin tener que sufrir por si nos quedan tan solo dos feudados y tener que pedir comida a nuestros amigos ... ¿de acuerdo?

Una vez dentro de la Choza acompaño a Ernestus hacia su silla y le ayudo a sentarse ... despues empiezo a ordenar las provisiones que hemos comprado en el Pueblo y le digo mientras abro la cecina que nos ha servido Will ...

-Ernestus ... empiezo a preparar un poco la cecina para cuando llegue Minte ... ¿quieres que te prepare algo para comer ahora? Hoy no hemos comido Ernestus ... y casi es la hora de cenar ...

Ernestus agarra las manos de Wyric y le susurra...

-No trabajarás por mí, hijo...sino por tí...tenlo presente, trabajarás por ti y con tus ganancias harás lo que desees...pero no digas que trabajarás por mí...no me gusta como suena...

Una sonrisa desvanece toda duda en Wyric sobre si el viejo le estaba dando una reprimenda o algo por el estilo. Después le deja marchar a preparar la cecina.

-Descuida...yo daré buena cuenta de una de estas mandarinas para reponer fuerzas hasta que llegue Minte...

Pobre Minte...espero que a Hake no le haya pasado nada...más quien va en busca de una gran presa...se arriesga a terminar cediéndole a esta el puesto de cazador...

Minte llega a casa de Ernestus y Wyric

Hola! Ya estoy aquí... digo elevando la voz para que puedan oirme desde dentro mientras llamo a la puerta.

-Ohh, Wyric, Minte ya esta aquí...ve a abrirle la puerta cuando puedas...que mis viejas piernas no responden tan bien como quisiera...

El anciano hace un frustrado intento de levantarse, pero el esfuerzo de haber bajado dos días seguidos al pueblo hace mella en sus huesos.

El pequeño Wyric acude raudo a la llamada de Minte, tras limpiarse las manos con un sucio paño se dirige hacia la puerta y abre sonriente, invitando a pasar a su vecina.

-Ohh, buen chico, obediente como el que más... hola Minte, Wyric estaba preparando la cecina que compramos hoy, acomódate en esta incómoda choza jeje...

La voz del anciano vuelve a sonar apagada, ronca...a Wyric le disgustaba oírle así, para él era como si el viejecito se fuese consumiendo poco a poco...y no quería que eso sucediese nunca.

Minte se adentra en la choza
Oh Ernestus! de incómoda no tiene nada, es más, estoy muy agusto cada vez que vengo a visitaros, ..por lo acogedora que es, pero sobretodo por vuestra grata compañía
Estas palabras no suenan al habitual cumplido, sino que se nota que Minte lo dice realmente de corazón.

-Nosotros también agradecemos el tiempo que pasamos contigo, vecina...y eso que no soy muy dado al trato con la gente...más los que vivimos aquí aislados, en el bosque...tenemos esas pequeñas cosas que nos hacen diferentes al resto de personas...conocemos la importancia de la ayuda entre iguales, así como el respeto a la tierra que nos acoge en su seno...

Mientras el anciano se enrollaba en una de sus habituales reflexiones profundas, Wyric hizo aparición portando unos cuencos llenos de agua y varios trozos de cecina que depositó en la mesa de madera, junto al cuenco, para el postre, depositó varias de las mandarinas que habían comprado durante el curso del día.

El maese cocinero llamó a los comensales a la mesa, y en unos instantes, la vieja choza se convirtió en una entretenida cena de vecinos...Sloderick, Ladruc y...un nuevo y jóven Ladruc compartían mesa y alimentos en esta oscura noche.

-Vaya, esta cecina está deliciosa...con razón valía su peso en feudados...

La cena avanzaba rapidamente ... pues ... la compañia era buena ... y la comida aun mas. Los tres comiamos ansiosamente esa cecina deliciosa y para terminar una mandarina acabo de paliar nuestro apetito ...

Los tres ya habiamos comido lo suficiente y la noche acechaba sobre nuestras cabezas ... me quedo mirando a Ernestus, su rostro retomaba de nuevo un color mas vivo ... mas fuerte ... su voz volvia a sonar como antaño ... pero sabia que se hacia mayor ... y los esfuerzos no le eran buenos ...

Ernestus ... tu has cuidado de mi durante mucho tiempo ... y ahora me toca a mi ... yo te cuidare ... ganare el dinero suficiente para poder comer cada dia como lo hemos hecho hoy ... te lo prometo ...

Cada vez me resultaba mas costoso poder contener los bostezos ... ya habia recogido la mesa y nos disponiamos a acostarnos ... pero en la choza de los Sloderick ninguna luz se habia encendido todavia ... me quedo mirando a Ernestus la cual su miraba reflejaba la oscuridad de la noche al ver que Hake aun no habia vuelto ...

-Minte ... Hake ... aun no ha vuelto ... si quieres ... puedes pasar la noche con nosotros ... ya hemos dormido mas de una vez mas personas ... yo te dejo mi cama y yo dormiria en otro sitio ... ¿que te parece?

Como siempre decia las cosas antes de consultarselas a Ernestus ... por lo que me giro hacia el y le digo ...

-¿Puede quedarse verdad Ernestus?

El anciano sonríe al inquieto muchacho a la par que comienza a realizar todos los preparativos para echarse a descansar.

-Claro que puede quedarse, Wyric, nuestra choza es su casa...¿y bien, Minte...que contestas a la invitación de nuestro cocinero?

Ernestus logró tumbarse con ayuda de Wyric y su bastón, y quedó tendido boca arriba en espera de la respuesta de su vecina...descansando tras el ajetreado día.

Minte sonríe ante la propuesta del joven Wyric

Os lo agradezco de veras, pero es mejor que vuelva a mi casa, tengo algunas tareas que hacer, además no me gustaría que Hake volviera y se encontrara la casa vacía... Quizás otro día de acuerdo?

Ahora será mejor que regrese a casa, pues ya se ha hecho tarde.

Minte se levanta y se acerca al viejo Ernestus para despedirse de él y a continuación se despide del muchacho

Ernestus ya estaba tendido en la cama cuando de repente Minte que parecia abstraida en sus pensamientos en los que seguro que figuraba Hake despierta de golpe como si se hubiera dormido y se despide de nosotros rapidamente para volver a su choza a esperar a su marido ...

-Buenas noches Minte ... que duermas bien!!

Me acerco hacia Ernestus y con una silla me siento a su lado esperando a que se duerma, a veces me gustaba ver como se dormia Ernestus pero hoy no tenia sueño y la noche parecia que iba a ser larga ... repentinamente me acuerdo de algo y le digo a Ernestus ...

-Por cierto padre ... hoy no me has planteado el acertijo! A ver si soy capaz de resolverlo antes de que uno de los dos se quede dormido!

El anciano murmura cosas incoherentes mientras pega un pequeño bote en el montón de paja sobre el que dormía.

-Uhmmm...esto...es verdad, hoy no tuviste ningún acertijo con el que ejercitar tu mente...veamos...aver que tal este...:

"¿Qué fue antes...el huevo o la gallina?" jaja...cuando descifres esto...serás más sabio que yo, hijo.

Las risas fueron bajando de tono más la sonrisa en la cara del viejo no se borró, quedando profundamente dormido junto al inquieto Wyric.

Los dos estábamos tendidos en la cama y Ernestus ya me había dicho el acertijo de ese día ... pero era un acertijo que no tenía solución ... aunque ya lo sabía seguía pensando en si era primero el huevo o la gallina ...

-Primero ... tuvo que ser el huevo ... pero ... el huevo sale de la gallina ... y la gallina del huevo ... Ernestus ... ¿tiene solución?

Pero no recibí respuesta alguna por Ernestus ya que este ya estaba durmiendo ... esos dos días habían sido agotadores y Ernestus estaba abatido ...

Yo seguí pensando en el acertijo hasta que poco a poco el sueño me fue venciendo y me quede dormido en si había sido primero el huevo o la gallina ...

Wyric no solía despertarse por cualquier ruido por las noches, era un niño con el sueño profundo y como terminaba los días bastante cansado pues le era fácil conciliar el sueño. Esa noche estaba durmiendo plácidamente ... soñando con huevos y gallinas ... intentando acertar el último acertijo de su Padre y Mentor ... Ernestus ...

Por mi cabeza pasaban dos huevos para luego dos gallinas ... y discutían sobre quien había nacido primero ... pero ninguno conseguía ponerse de acuerdo hasta que de repente apareció un hombre con barba y todos se detuvieron delante de el ... asombrados por su presencia ... y le llamaban Dios ... levantó la voz por encima de todos y dijo que el había sido quien los había creado a todos ... al huevo y a la gallina ... los dos a la vez ...

En sueños murmuraba -Ernestus ... ya tengo la solución ... fue Dios quien creo que al huevo y a la gallina ...

Pero en un instante la cara de ese hombre benevolente cambio por completo ... enfureció ... y todo empezó a volverse rojo ... las paredes empezaron a temblar ... y la choza empezaba a moverse ... gotas como granizo golpeaban el techo ... los cristales retumbaban ... una ventana se rompió y el agua empezó a entrar dentro de la choza ...

Quería despertarme de esa pesadilla ... pero ... entonces me dí cuenta que ya no estaba soñando ... estaba despierto y eso estaba sucediendo de verdad ... me levanté rápido de la cama y me dirigí hacía donde estaba Ernestus durmiendo ... empecé a sacudirle ... mis piernas temblaban pero debía protegerle ...

-ERNESTUS!! ERNESTUS!! DESPIERTA ERNESTUS!! ERNESTUS!!

Este se despertó del sobresalto y no le hizo falta preguntarme que estaba sucediendo ... a pesar de su limitada visión podía oír perfectamente y sabía lo que estaba sucediendo ...

El techo empezaba a desprenderse ... la puerta se abrió fruto de una ráfaga de viento y empezó a abrirse y cerrarse brutalmente ... hasta que finalmente se arrancó hacía el bosque y bajo surcando las aguas que bajaban de la montaña hacía el pueblo ... descontroladas ...

Colocamos la mesa en un rincón de la Choza y nos refugiamos con mantas debajo de ella ... evitando los golpes del techo que se desprendía ... ahora el agua entraba a raudales ... pero tal como entraba salía ... la choza estaba siendo destrozada ... pero ninguno de los dos nos atrevíamos a abrir tan solo la boca ...

Un relámpago me deslumbró por completo pero una figura hizo que mi corazón se sobresaltase ... la torre del castillo estaba ardiendo ...

-Ernestus ... susurré ... -¿que está pasando? y me abracé a el ... acurrucándome entre sus brazos ...

Finalmente la tormenta se volvió en lluvia ... y esta al fin se detuvo ... aunque los dos aún permanecíamos aún debajo de la mesa ... acurrucados ... temblando por el frío y el dolor que nos provocaba ver nuestra choza completamente destrozada ... el tejado había sido arrancado ... las ventanas y la puerta destrozada ... y las paredes ... poco iban a aguantar ...

Habíamos perdido todo lo que nos quedaba ... no teníamos sitio para dormir ... la choza aparte estaba inundada ...

-¿Que vamos a hacer ahora Ernestus?

Me levanté y me dirigí hacía la ventana ... intentando ver la situación fuera de la choza ... mi rostro empalideció ...

-Ernestus ... el castillo ... Vineloot ... ¿que ha pasado?

El lago donde habíamos pescado esas truchas deliciosas abarcaba ahora todo el pueblo ... las casas y los negocios estaban inundados ... parecía ahora todo un gran lago y ... el castillo ...

-El puente está destruido ... y la torre Ernestus ... la torres ... está ... destruida ...

Por delante nuestro aún un río de agua se dirigía hacía el poblado ... y todo estaba lleno de barro por todos los sitios ... los árboles habían caído ... y muchos animales muertos yacían en el bosque ...

Me dirigí hacía Ernestus y le ayudé a levantarse ... ambos permanecíamos de pie bajo la choza destrozada ...

-¿Que vamos a hacer Ernestus? ¿Que podemos hacer? La choza está destrozada ... y el pueblo inundado ... no tenemos donde ir ...

De nuevo el miedo y la desesperación volvieron a hacerme temblar ... mi rostro estaba pálido ... siempre había sido un niño fuerte ... pero esto me había superado ...

Desde mi casa llego corriendo mientras grito de camino Ernestus! Wyric! Ernestus! !

Cuando alcanzo la puerta (si es que aun hay puerta) entro en ella esperando encontrar a mis vecinos bien

Wyric! Ernestus! ! estais bien??

Y entonces llegó, la ira de la madre tierra, flagelada constantemente por la ambición de los hombres que talaban sus árboles y cavaban en su seno para robar sus riquezas...

La noche se volvió día por momentos, iluminada por enormes rayos que anunciaban el inminente rugir de los cielos sobre la tierra.

La lluvia se convirtió en piedra, el viento en vendaval, y de fondo ese tenebroso rugido, mezcla de llanto y furia...

La choza se agitaba como la fina hierba mecida por la brisa...solo que con brusquedad. La única ventana crujió, estallando en mil pedazos...la puerta, de primitiva construcción, azotaba la casucha con fuerza, fiel mensajera del terror que se estaba viviendo.

Allí estaban ellos, las dos personas más indefensas de entre los hombres...un niño y un anciano.

Acurrucados bajo la mesa, intentaban resistir el azote de los cielos mientras el pánico se iba filtrando en sus carnes...hasta llegar al hueso...

Ernestus no podía ver, pero si sentir...y ello era aún más terrorífico... de no ser por las vagas explicaciones que la voz temblorosa de Wyric clamaba, hubiese jurado que eran los mismísimos titanes de la antiguedad quienes habían vuelto para terminar con el hombre...

Se abrazaba con las pocas fuerzas que podía tener al muchacho, y no podía evitar llorar...él, que creía que ya lo había visto todo...él, que creía conocerlo todo...incluso el viejo Ernestus tuvo miedo cuando los cielos rugieron.

Una vez cesó el caos, el anciano y el niño salieron de la choza, no por la puerta, sino por cualquiera de los otros lados...pues todo había sido consumido.

Seguía sin ver, pero el olor a quemado proviniente de la torre llegaba hasta su fina nariz. Sus pies desnudos se hundían en el barro a cada paso que daba, desorientado, únicamente guiado por su hijo, quien no había soltado su mano en ningún momento.

Según las palabras del chico, la aldea se había convertido en una extensión del lago, en cuyas aguas desembocaban los infinitos riachuelos de turbulentas aguas que brotaban desde los bosques de alrededor...y las lágrimas del viejo.

No había contestado a las preguntas del niño...pues su voz se la había arrebatado la tormenta...estaba completamente aterrorizado...

Entonces apareció ella...su voz rompió el inquietante silencio que se había instaurado tras el tronar...se trataba de su vecina Minte.

-M...min..te...¿estás bien hija?...todo ha temblado...y los truenos no cesaron...la madre tierra ha respondido a tanto dolor... no creo que esto haya terminado...parece la calma que precede a la tempestad...esto solo ha sido el ...comienzo.

Las lágrimas acompañan las palabras del anciano, que se muestra perdido e insignificante ante tamaño desastre.

De repente oí una voz familiar que se acercaba y cada vez sonaba mas fuerte ... sin duda era Minte ...

-Ernestus ... es Minte ... digo mirándole ... -Ernestus ... Minte está bien!!

Mi rostro por un instante se iluminó ... a pesar de lo que había sucedido el hecho de que la gente de mi alrededor estuvieran sanos y salvos me llenaba el corazón de alegría ...

Al verla asomar por donde antes estaba la puerta corro hacía ella y me abrazo fuerte a ella ... como si hubiera hecho años que no la hubiera visto ...

-Minte Minte!! Estás bien por dios!!

Unos segundos cortos pero intensos y prosigo ...

-Estamos bien ... Ernestus y yo estamos bien ... pero la choza ... digo mirando como lo único que quedaba eran las paredes que estaban a punto de caer ... las ventanas y la puerta había sido derruidas ... y el techo ... había volado por los aires ...

-He pasado mucho miedo Minte!! ¿Como estás tu? ¿Y la choza? ¿Y Hake? mis preguntas eran rápidas y mis palabras se atropellaban unas con otras ... estaba muy nervioso y eso se notaba ...