Partida Rol por web

-Vamos, se que tienen sed de información, ahora les cuento, vayan a sus compartimentos y ahora paso a decirles- Dice el profesor una vez que se acerca a donde están todos reunidos, y los conduce hasta el final del vagón. Con las puertas abiertas de los compartimentos para que todos escuchen, dice desde el pasillo -Bueno, hace rato nos detuvimos porque hubo un pequeño problema que el maquinista solo no pudo resolver, pero como ven ya estamos avanzando, les voy a pedir que cuando lleguemos a Londres, no se vayan a bajar del tren, vamos a esperar a que bajen todos los demás alumnos y a que suban los dos personajes que nos van a acompañar-

 Tras el extraño episodio en el pasillo del tren, y la aparición de los diferentes jefes de casas -entre ellos el hermano de Lhirya- durante el cual me mantuvo callado y tranquilo como siempre que me encontraba rodeado por mucha gente, me vio arrastrado por mi compañera de camarote hasta nuestros asientos una vez más. La relación entre los hermanos y la forma en la que se trataban mutuamente me resulto divertida, aunque desaprobé en silencio la falta de respeto que Lhirya mostraba ante su hermano mayor, prefecto de la escuela y premio anual.

No es asunto mío, entrometerme sería solo una falta de respeto y etiqueta como diría mi padre... -por lo que simplemente me senté una vez más frente a la joven, mirándola a los ojos con una sonrisa casi imperceptible por lo acontecido.

De repente la voz del profesor Knight resonó en el pasillo, asegurándonos de que estaba todo bien y dando nuevas instrucciones. Una vez se calló mi sonrisa se extendió en mi rostro.

Te dije que no había de que preocuparse. Deberías tratar de relajarte un poco más Lhirya.

oigo algo estrañado las palabras de profesor, es un profesor, sabe lo que hace pienso mientras regreso a mi compartimento para acomodarme y continuar el viaje. ¿que habra pasado? esa pregunta continua rondando mi cabeza durante el viaje

Lhirya se sienta distraída, mirando por la ventana, cuando escucha de fondo la voz del profesor...

Mira a Saito cuando él le habla: 

-Oh.. Ya... Eso parece...-Sonríe leve, casi distante, cuando contesta. Se sentía indignada por su hermano, quien siempre le ganaba en todo... 

Aunque claro... Él era el perfecto prefecto... Y.. 

Y no valía la pena pensar al respecto... 

Con aire abatido, la joven busca a Pyun, lo saca de la jaula, lo pone en su regazo, y comienza a acariciarle, en silencio. Daba la impresión como si de repente se le hubiesen agotado la batería, y ahora le costase... Funcionar, tal vez... 

Bartholomew no abrio la boca. Se retiro al reservado de viaje que compartia con su hermana y con el otro compañero de casa, les hizo un gesto para que le acompañasen y cerro la puerta.

Con llave.

En cuanto Bartholomew entro en el compartimento del tren, su arisco gato "Salazar" empezo a ronronear intentando acercarse a su amo.

- Vigila la puerta - le indico a su hermana. Esta le respondio con una gelida mirada de desaprobacion recordandole lo poco que le gustaba que su hermano menor le diera ordenes.

A continuacion se dirigio a Francisco.

- Ahora que estamos lejos de oidos curiosos... cuentanos con todo detalle que has visto Francisco....

-Pensé que nunca me lo preguntarían...dice Francisco con actitud suspicaz, mientras se sienta en una poltrona. Acomoda su vestuario de manera elegante, creando un efecto en el ambiente.

-He logrado llegar hasta la locomotora, y pude observar que un tramo de las vias de trenes simplemente había desaparecido. Alcancé a ver al profesor Knight reparando las vías con rocas y troncos. El inepto del locomotorista intentó ayudarlo con no sé quien más, y muy poco pudieron hacer...pausa...

-Evidentemente hemos sufrido el "ataque" de alguien y el profesor no quiere que nos enteremos. El planteo ahora es el siguiente...Quién osaría atacar un tren cargado de alumnos de Howarts y con qué fin?...

-Ah... no le veo mucho sentido a esa explicación... Si el maquinista ha decidido detener el tren de golpe no puede ser un pequeño problema.

Se sienta en uno de los asientos libres del compartimento donde se encuentran sus compañeros.  Hay algo raro en todo eso y que el profesor se haya inventado una excusa tan pobre como esa, se lo reafirma.

-Espero que no nos afecte en estas vacaciones inesperadas.

Mareado por los efectos de la mandragora, me levanto buscando el pasillo y una ventana abierta. El que el tren empiece a andar solo empeora la situación y sin mas remedio vomito en el pasillo, hecho que alivia mi estomago pero no mi cabeza al mareo se suma un fuerte dolor.

Bartholomew se quedo pensando un momento sobre las palabras de su compañero Francisco. Su hermana tambien parecia muy curiosa al respecto y cuando se disponia a preguntar a Serra, Bartholomew se la adelanto.

- un ataque.... - penso en alto Bartholomew - no creo Francisco. No sufrimos una parada brusca ni un accidente, si querian hacernos daño, podian haber hecho lo mismo en una curva sin visibilidad y hubieramos descarrilado. No es un ataque - decia mientras acarciciaba a Salazar - mas bien es un intento para impedir que lleguemos a nuestro destino...

No quedaba muy claro si lo estaba hablando con los otros dos ocupantes del camarote o simplemente pensaba en alto.

-Sì, puede ser,...dice Francisco pensativo, asintiendo al razonamiento de su amigo. Aunque no todos tienen las luces necesarias, sino fijate en esos tarados de Hufflepuff  señalando a Rodriguez mareado y dispuesto a vomitar por los efectos de la mandràgora. 

Tose un poco y volviendo en sí al tema dice -Reformulemos la pregunta entonces...Quièn y porquè querrían evitar que lleguemos a destino?