Partida Rol por web

Nash coje la cámara y la guarda en el bolsillo, no necesita esto para seguir grabando.

Acto seguido echa a correr detrás de Alexei en busca de la salida del complejo.

Billy echa a correr detras de Nash, mientras rebusca en su mochila una de las granadas obtenidas por Alexei.
- ¿En qué lio... en que lio estamos metidos? - Billy jadea mientras corre - ¡No me ... no me jodas!

Como salga de esta, me corro la juerga padre aunque esté yo solo

-¿No pensabas que nos detectarían cuando entramos aqui? Tu corre tio. Corre y salgamos de esta mierda.

Corréis como datos que lleva una IA a la planta alta. Las escaleras son un paso realmente incómodo pues el metal de los peldaños parece ir a engancharse en cualquier momento en las suelas de vuestras botas. Por fin, llegáis hasta el recibidor inicial donde están las escaleras que suben hacia el exterior.

- Los chips... - dice Alexei de forma entrecortada mientras sube las escaleras - Son para implantes creo que húmedos, pasivos, localización y rastreo...

Mantiene el cañón de la pistola en alto y la otra mano extendida cubriendo cualquier obstáculo en el camino, el movimiento es tan acelerado que incluso el pesado abrigo del mercenario se agita cada vez que cambia de dirección.

- Son para uso en masa, control de minorías y cosas similares, ya lo he visto en Eurasia, en una ocasión. El proyecto no ha de estar muerto del todo si han decidido remover este agujero. Hay un radar, Justin está con él. Tengo que ir a recoger el comunicador no puedo dejarlo aqúi o darán con ellos. Subid a superficie y esconderos en las casas, cerca del helicóptero. No asomeis la cabeza hasta que me veais salir. A mi señal corred hacia el vehículo y salimos.

Diciendo esto sale corriendo hasta perderse por uno de los pasillos que quedarón sin explorar la primera vez y que eran, sin duda por donde había estado mirando hacía unos momentos antes de volver a bajar.

Siguiendo las instrucciones de Alexei, Billy corre hacia la salida como alma que lleva el Diablo.
Su intención es esconderse fuera del almacén subterráneo entre algunos arbustos.

Nash para a Billy con el brazo según este comienza a correr.

-Espera... Salgamos. Pero con cuidado Billy. No me fío de nada.

Nash se pone delante y encañona la salida.- Alexei se ha comportado de un modo extraño, o quizá sea mi paranoia. Pero nunca he visto la necesidad de separarnos en esta misión y el ha insistido una y otra vez. No termino de fiarme.

-La verdad es que no nos sirve de mucho salir, ser un blanco fácil y subir a un helicóptero que no sabemos pilotar. Echaremos un ojo al exterior y esperaremos al ruso

En un santiamén estáis asomados a la entrada a ras del suelo. Desde vuestra posición sólo podéis ver parte de la plaza donde dejásteis el helicóptero y el aparato está allí. No se ve a nadie, pero a lo lejos se escucha el inconfundible sonido de dos motores zumbantes acercándose. Motos. No sabríais decir a qué distancia están.

El pasillo parece encogerse mientras avanzas a toda prisa hacia la sala del radar. Allí, donde lo dejaste está el teléfono móvil. No notas estática de ningún tipo, aunque tampoco tienes forma de saber si Justin ha terminado.

- Salgamos antes de que se acerquen mas, tio. Dice Billy desde el interior del bunker.
- No dudo de que Alexei tenga sus motivos para entrar ahí dentro, pero hasta ahora ha sido legal con nosotros. Si quiere contarnos algo, ya lo hará después. Lo que tengo claro es que aquí no tenemos muchas oportunidades de poder contarlo.

Billy se prepara para salir corriendo

- ¿Preparado? ¡Pues vamos! y sale a toda hostia, en una dirección que le parezca adecuada, contraria al ruido de motores, buscando alguna posiblidad de que algún arbol o lo que haya por las cercanías le oculte en su huida.

-Joder, joder, joder...

Nash sale corriendo detrás de Billy sin fijarse en lo que hay detrás. Solamente intenta avanzar en zigzag lo mejor que puede, hasta que alcance una cobertura con el batería.

Salís, acercándoos primero al helicóptero para luego girar a vuestra derecha en dirección a una calle lateral. En ella encontráis lo que parece más adecuado: una edificación ligera de ladrillo con entrada por un lado y salida por el otro, seguramente ideada para tener animales de granja atados a la pared. Desde él podéis ver el helicóptero y esperar con los pelos de punta la llegada de Alexei, de las motos o lo que sea.

-Bueno Billy. Toca esperar colega. Esta es la parte dura. Ya queda menos... no se para que, pero queda menos.

Nash se muestra nervioso. Intentando cubrir todos los ángulos posibles.

- ¿Esperar? Llevo esperando esa puta orgía desde Las Vegas. Te aseguro que esto va a ser un puto paseo.
Billy susurra para que no se le oiga, aunque su tono es un poco airado.

Al llegar a la estancia Alexei recogió el comunicador del suelo con más miedo que seguridad, como quien recoge un explosivo del suelo, lo acerca despacio a su oreja.

- ¿Justin?

Antes de esperar respuesta reemprende su marcha hacia la salida caminando a grandes zancadas.

-Sí, Alexei, ya está listo. Podéis largaros.- le escuchas decir al otro ladod el aparato.

Te dirijes directamente a la salida tan rápido como puedes. Cuando llegas a lo alto de las escaleras y te asomas por la trampilla, puedes escuchar claramente el sonido de las motos acercándose. Ya no tiene sentido mirar el reloj. Calculas dos minutos más como mucho por el volúmen del ronquido de los motores. El helicóptero sigue en su sitio. No ves a Nash ni a Billy, así que les supones escondidos en algún sitio desde donde puedan ver esta trampilla o el helicóptero. Eso esperas.

Como si aquel agujero estuviese al rojo vivo, como si estuviese a punto de explotar, casi deseando que lo hiciese, el mercenario sale de la trampilla. Lleva el comunicador colgando de su brazo izquierdo y la pistola en alto en la derecha. Ha escuchado el sonido de motos y no se detiene un momento en su carrera hacia el helicóptero.

- ¡¡VAMOOOOS!! - dice mientras hace un gesto con la mano llevándola hacia el helicóptero.

Sin mirar atrás sube a la cabina y pone en marcha los rotores mientras se acopla el interfaz, hace un rápido chequeo a los sistemas y espera a que Turbo y Billy se le unan.

- ¡Go, Man!
Billy sale de su escondite hacia el helicoptero donde está sentado Alexei.

Por una calle lateral, provenientes de lo que parece un antiguo recinto techado para animales, aparecen Billy y Nash, corriendo tan rápido como pueden al helicóptero. Apenas les ha dado tiempo a subirse cuando el aparato ya se eleva un pie sobre el suelo con un salto brusco. Poco a poco, gana altura hasta unos tres metros y se estabiliza mientras los dos músicos se abrochan los cinturones.

Entonces aparecen las motos. Son dos vehículos potentes todo terreno negros sin logo, montados por dos hombres vestidos con monos que les dan un aspecto nada tranquilizador, en especial la multitud de conexiones que asoman de la espalda de los trajes y que acaban en la nuca de sus portadores. Cada uno lleva colgado del costado un fusil de asalto pesado de diseño soviético al que hechan mano tan pronto detienen las motos. No sabéis lo que esas balas le podrían hacer al helicóptero, pero preferiríais averiguarlo más tarde buscando en la red, gracias.