Partida Rol por web

Crónicas de Gnosia

Episodio Primero: Toldoth.

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30/05/2014, 10:45
Dorno el gordo

Oh, por supuesto, sin problema. Abonad la tarifa de 10 mo y os franquearé el paso.

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30/05/2014, 10:45
Brok

Tengo 1 mo y con eso te vas a conformar. Porque, claro, no querrás que alguien se entere del negocio que tienes aquí montado. Yo no soy un ladronzuelo del barrio que quiere probar esperiencias fuertes, y que si muere nadie va a hechar de menos. Yo soy una persona influyente, lo sabes, y podría hablar con cierto jefe de cierta guardia...

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30/05/2014, 10:46
Dorno el gordo

Hey, tranquilo, Brok. No hace falta amenazar, somos amigos, ¿cierto? ¿Cuánto hace que nos conocemos? No te preocupes, siendo para recuperar un objeto tuyo puedo obviar mis honorarios y franquearos el paso por la mo que me ofreces. Así que, ¿cuándo queréis entrar? Tras sopesar la cara de Brok, se pone intensamente pálido. ¿Ahora? ¡¡Pero eso es una locura!! Brok sigue sin decir nada, pero es como si Dorno leyese su cara. De acuerdo, pero no conteis con que os acompañe, ni yo ni mis hombres. No los voy a sacrificar por nada.

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30/05/2014, 10:49

Así pues, acompañados de Dorno y un par de guardias humanos, además de la comitiva de enanos, os dirigís directamente a la puerta de las gárgolas.

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05/06/2014, 09:39

Según llegais, veis un grupo de enanos que rodean la entrada de la gárgola, por donde se supone que ha escapado Goldie. También veis a quien sólo puede ser Dorno el gordo, a juzgar por su tamaño y el aire de superioridad que se da, acompañado de tantos guardias como enanos hay. Parece que están discutiendo sobre algo que no alcanzais  escuchar.

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05/06/2014, 10:08
Sir Mordred Camlann

Tras caminar junto a Tres Libros por las callejuelas de aquel barrio llegaron a la alguacilería pero Dorno no estaba allí. Por suerte, había dejado indicaciones de donde encontrarle y, tras preguntar a la joven el camino a seguir, comenzaron su marcha hasta allí. 

Ambos caminaban callados, Sir Mordred caminaba preocupado por que iban a encontrarse y que le diría al alguacil del barrio de las pulgas. Por suerte, el camino no duró mucho y llegaron a el lugar de las reformas. Un grupo de enanos parecía proteger el lugar por el que había escapado Goldie mientras que Dorno y otro grupo de guaridas están enfrente de los enanos. A primera vista parece que están discutiendo sobre algo pero Sir Mordred no logra escuchar nada. 

Parece que tendremos que acercarnos a ver que está pasando antes de que la discusión pase a mayores. - dijo Sir Mordred mientras comenzaba a avanzar decidido hacia Dorno. 

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05/06/2014, 10:17
Tres Libros

Tres Libros se refugió instintivamente tras Sir Mordred. Dorno tenía fuego en la mirada, ese tipo de actitud imperativa que para los mendigos como ella sólo podía significar problemas.

Ten cuidado -le dijo en un susurro, siendo vagamente consciente de que le estaba aconsejando cautela a un tipo embutido en una armadura de combate.

La mendiga siguió a Mordred de cerca, como un perrillo faldero y lastimoso.

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05/06/2014, 10:44
Dorno el gordo

¡¡He dicho que no, nadie más va a entrar en estos túneles hasta que el Capitán de la guardia decida que hacer!!

Notas de juego

Mordred: 141+20 por postear +2 por humano = 163px

Tres libros: 44+20 por postear +2 por humana = 66 px

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05/06/2014, 10:50
Boroin Martillocertero

Me da igual lo que digas, Humano. Nuestra suma sacerdotisa está ahí dentro y vamos a entrar

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05/06/2014, 10:52
Dorno el gordo

¿A que muera más gente? No me haré responsable de ello

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05/06/2014, 10:53
Boroin Martillocertero

No sabemos si está muerta. Dejadme entrar.

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05/06/2014, 10:54
Dorno el gordo

No tienes autoridad para pedirme tal cosa.

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05/06/2014, 10:56
Sir Mordred Camlann

¿Alguacil Dorno? - preguntó Sir Mordred interrumpiendo aquella conversación. - Soy Sir Mordred Camlann y tengo que hablar con usted. Ahora. - dijo para captar su atención mientras miraba a su alrededor, parecía que no solo Goldie había bajado a los túneles. 

 

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05/06/2014, 11:24
Tres Libros

Tres Libros se mordió el labio. No sabía si exigir era la mejor estrategia para lidiar con alguien como Dorno. Pero viendo el punto muerto a que había llegado la conversación con los enanos, tal vez fuera la única forma. Si es que Sir Mordred tenía autoridad sobre el alguacil, claro.

Tres Libros no se presentó. Había aprendido por las malas a no hablar a personas como Dorno salvo que se dirigieran a ella primero.

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05/06/2014, 13:34
Dorno el gordo

Dije que nadie me inte... las palabras que el gordo hombre estaba pronunciando mueren al girarse y encontrarse cara a cara con el custodio. Su rostro se vuelve inmensamente pálido, antes de agacharse en una reverencia.

Por supuesto, señor, por supuesto. Venga por aquí, nos apartaremos un poco y hablaremos. Veo que tenéis una escudera... yo... no pensé que fuera vuestra...

Parece nervioso, quizá recordando algo sobre algún desarrapado, mendigo o demás, del barrio de las pulgas.

Antes de situaros en una posición donde no seais escuchados, Dorno da órdenes a sus guardias de no dejar entrar a nadie más por la puerta de las gárgolas.

Notas de juego

Mordred: 163px + 10 por postear + 1 por humano = 174 px

Tres Libros: 66 + 15 pos postear + 1 por humano = 82 px

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05/06/2014, 13:38

Notas de juego

Te parece ver un gesto del enano que parecía llevar la voz cantante como indicándote que quiere hablar contigo, aunque se queda tranquilo cuando os apartais. No parece que tenga prisa por hablar.

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05/06/2014, 14:18
Tres Libros

Tres Libros abrió mucho los ojos por la sorpresa.

«¿Escudera? ¿Eso es lo que Dorno cree que soy?»

No era ella precisamente quien iba a desmentirlo si es eso lo que pensaba. Le daba algo de margen para preguntar:

¿Mi señor me conoce? -le preguntó a Dorno de sopetón.

Ella no recordaba haber tratado nunca con él. Pero había tantas cosas de su pasado que no recordaba... no dejaría pasar la oportunidad si Dorno tenía alguna pista de quién había sido antes de verse arrojada a la miseria.

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05/06/2014, 21:35
Sir Mordred Camlann

Sir Mordred estaba tras Dorno erguido, con los pies un tanto separados, la espalda recta y el pecho sacado. Una postura imponente si además de eso le añades que era un Custodio del Alcázar. Normalmente no habría actuado de esa manera pues veía su trabajo como un servicio a la ciudad y no creía estar por encima de nadie pero cuando Dorno se giró como si fuese a despellejar a quien tenía detrás y le vio se alegró de haberlo hecho.

Aquel miserable corrupto se tragó sus palabras e hizo una reverencia a lo que Sir Mordred asintió sin decir nada. Volvió a asentir a las palabras del alguacil que comenzaba a hablar de forma nerviosa, como si todo ese valor con el que se había girado se hubiese esfumado de golpe. 

Caminó tras él sin sacarle de su error con las funciones de Tres Libros y permaneció en silencio mientras Dorno respondía a la pregunta que esta le había hecho aprovechando para pensar en como iba a afrontar el asunto. Una vez el alguacil respondió, Sir Mordred se aclaró la garganta.

Estoy aquí en misión real. - dijo para que el alguacil supiese la gravedad del asunto. - Busco a una joven, Yena Goldhair, aunque aquí la conocéis como Goldie. - añadió a modo de introducción. - Sé que la conocéis y que le abristeis la reja de la Gárgola para que entrase en los túneles que hay bajo la ciudad. - dijo en un tono neutro, sin que sonase a acusación. - ¿Hace cuanto que entró en los túneles Alguacil Dorno? - le preguntó en un tono que dejaba claro que no quería escusas. 

- Tiradas (1)
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06/06/2014, 06:45
Enda Viskunnar
Sólo para el director

Que una construcción enana con unos acabados tan sólidos estuviera ocupada por un humano ya era de por si indignante. Que una situación como aquella fuera más o menos habitual en Toldoth no lo hacia desde luego mejor. ¡Pero que fuera él, precisamente él, quien la habitara! Aquel ser abyecto, inmundo saco de manzanas podridas, demasiado ruin incluso para los estándares humanos, era una auténtica vileza y un insulto a la dignidad de su raza. 

Desde luego que la enana, en ejercicio de su cargo, había tenido que mantener con normalidad relaciones diplomáticas con humanos de distinto pelaje, pero por una vez agradeció el haber tenido un representante que hubiera hablado por ella. De lo contrario no sabe lo que le habría dicho... o hecho. - No sé como lo aguantas... - Confesó al capataz una vez salieron, con la bilis rebulléndole todavía en las tripas. -  

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06/06/2014, 12:11
Brok

Demasiado acostumbrado estoy a tratar con él, mi señora responde el enano, haciendo un gesto de disgusto hacia el tipo, que se encamina a los cuartos de guardias. Allí despierta a un par y sale con ellos a vuestro encuentro.

Una vez en la puerta de las gárgolas, Dorno la abre, y con una cínica sonrisa os hace una reverencia. La mirada de odio de Brok hubiera congelado a un caballo de los mil califatos en plena carga, y Dorno traga saliva ruidosamente, antes de cerrar la puerta tras vosotros y marcharse rápidamente.

Bueno, aquí estamos, mi señora. ¿Qué camino seguimos?

A ambos lados se abren unas cloacas, empleadas por la ciudad. Frente a vosotros, un agujero en la pared marca la entrada a las catacumbas. Sonidos de ratas royendo se escuchan a ambos lados vuestros, dándoos la tranquilidad de que si hubiera alguien en las cercanías, las ratas habrían escapado corriendo.

Notas de juego

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