Partida Rol por web

Al soltar la descarga contra el suelo puedes escuchar un quejido como si hubieses asustado a algo que tuvieras cerca

Oh... my... god... Creo que la imagen de esta copia me va ha perseguir en mis pesadillas -Sorry strange Julia... bye bye...- dije eliminando la copia. Yo misma notaba que su aspecto no era lo único que le iba mal... no podía estar vigilándola todo el rato para que no se la coman -Okey... hay que cambiar de plan- pensé. No tenía armas, mi única forma de hacer mínimamente daño es a base de proyecciones... ay Dios la idea suicida que se me ha ocurrido -Salvatore... i have a idea... me voy ha acercar al Wolf que tenemos delante*...- le indiqué señalándole al que estaba delante de nuestra roca -Voy a intentar mandarlo a levantarlo del suelo... when este en el aire... lanzale una corriente que le estrelle contra la pared, haber si hay suerte y se despeñan algunas piedras que le aplastan... y si no me sale, lanzame a mi la corriente para alejarme please- le dije, algo preocupada en la última parte.

Cogí aire... y medianamente decidida, comencé con mi plan. Salí de la cobertura que me daba la piedra, corriendo en dirección al lobo. Cuando estuviera lo suficientemente cerca, me deslizaría por el suelo para quedar justo entre sus cuatro patas, y entonces, invocar cuatro proyecciones mías que le empujen con fuerza y violencia hacia arriba, y luego hacer la croqueta para alejarme de él... es que sin katana ni pistola no se me ocurría otra forma de atacar. Solo esperaba que luego Salvatore me ayudase.

La acción parecía haber empezado en el campo de batalla. Aunque Rin estaba frustrado, Julia si que había consegido sacar valor y salir hacia delante para atacar a una de las criaturas. Con una ejecución perfecta, consiguió meterse debajo de la criatura que tenía enfrente para patearla hacia el cielo, invocando cuatro copias, pero justo en el momento en que fue a golpear al ser, este se movió ligeramente haciendo que el golpe fuera lateral y solo lo desplazara hacia un lado.

La criatura furisoa por el golpe, encontró un objetivo al fin. Acabar con una de las chicas que tenía enfrente y le habían golpeado. Por lo que se abalanzó contra ellas, con las garras por delante y la boca preparada para morderlas. Por suerte, Salvatore había hecho caso a Julia y estaba preparado para sacarla de ahi. ¿Pero a cual de las 5 que había delante de él? Tenía en mente como hacer la corriente, pero ¿quién era Julia?.

Tras un segundo de indecisión, una explosión de viento se originó entre las Julias y la criatura que hizo que todos los involucrados salieran despedidos. Con el impacto, las Julias falsas se desvanecieron en el aire mientras la criatura se golpeó contra la pared de rocas de atrás, haciendo que se desprendieran algunos pedruscos más.

Julia, corrió más o menos la misma suerte en dirección la roca que tenía en sus espaldas, pero al estar más lejos no llegó a darse contra ella. De esta escaramuza solo salieron, unos rasguños en las piernas de Julia, al ser despedida por el suelo y un chichón en la criatura.

Aprovechando la ocasión y viendo que la criatura había salido despedida contra la pared me empecé a frotar las manos mientras que corría dirección a aquel ser, esperando ciertamente que empezaran a sudarme las manos, apretándolas y frunciendo el ceño, marchando corriendo hacia aquel lobo. Aunque desgraciadamente al agarrarme a el vi que mis manos no estaban sudorosas por lo que intenté hacerle distraerse conmigo.

-¡Centráos en el otro! ¡Yo me encargo de este!-

Dicho aquello me aferré a la criatura con todas mis fuerzas, rogando empezar a sudar para poder dejarla incapacitada. Aunque me agarraba probablemente me podría tirar sin problemas, apretando los dientes.

Para ayudar a que Julia se pusiera a salvo, Makoto se lanzó contra la criatura aturdida que había sido despedida hacia atrás por Salvatore. El hecho de que Makoto se lanzara a por el ser hizo que uno de los compañeros de la criatura, se abalanzase contra ellos con una embestida. Habría sido de gran ayuda para la criatura, sino fuera porque Makoto muy inteligentemente, forzó a su contricante a ser su escudo en la embestida.

Parecía que nadie conseguía dañar a nadie, mientras dos criaturas seguían desaparecidas.

Me está a punto de dar un infarto. Cuando Julia se lanzó a lo kamikaze contra los lobos, el corazón me subió hasta la campanilla. Con todo el aire y el viento que había por ahí, casi no pude ver qué pasaba, pero parece que el lobo recibió más daño que Julia. Makoto también me hizo sufrir lo suyo, pero tampoco daba la sensación de haberse muerto. Pero lo que me daba más miedo de todo, ¿Y los otros dos? Si es lo que creo, ¿puede con 2? ¿Y Adwin ha perdido hasta su olor? Eso es malo...

Empezando por la posición inicial de los lobos desaparecidos, me pongo a fijarme en lo apretada que está la hierba contra el suelo, en piedrecitas que no parezcan seguir la misma trayectoria que las de su lado, en las sombras curiosas, en si los otros lobos miran hacia alguna dirección en concreto... en todos mis puntos débiles... Cuando me parece haber visto algo, no pierdo el rastro de vista, y lo señalo con el dedo gritando ¡Allí! para avisar a los otros. Y me preparo, probablemente, para recibir el hostiazo más heavy de mi vida. Miedito, Sara, miedito.

Ves dos juegos de pisadas que apareceny desaparecen, uno en dirección a Salvatore y otro ha empezado a rodear la roca grande tras la que estabais Rin, Adwin y tu. Como verás en la imagen que pongo luego, han pasado por tu lado y ni te has dado cuenta.

Además enfrente de las criaturas, daba la sensación fijandote en el entorno que habia una parte que no se alteraba ni con el viento

La situación poco cambió desde que Makoto se había lanzado. 

¡Pero tío, ¿a donde vas?!- gritó Adwin cuando se dió cuenta de que había ido a pecho descubierto a por una de las criaturas. ¡Te van a matar, inconsciente!

Parecía que hacía falta salvar a Makoto, por lo que Adwin recuperó su aspecto felino y se lanzó contra la pelea de Makoto contra la criatura. Al igual que la otra criatura, parecía que Adwin había perdido el control y embistió fallando al apuntar. De ese momento, solo Adwin, recibió algun daño debido al cabezazo que se dió.

Ahora al menos eran dos contra dos ahora.

Levante al instante la cabeza mirando en la dirección en la que había escuchado ese "quejido" y no tarde en entenderlo sin darle mas vueltas levanto ambas manos y lanzo una potente descarga el línea recta. De pura casualidad lo había descubierto pero iba a aprovecharlo. No habían desaparecido solo vuelto invisibles y camuflado su olor. Eso me convenció mas de que no eran reales. Parecía que Sara también se había dado cuenta de lo que había pasado la verdad lo esperaba ella y yo eramos los que analizabamos mas las cosas.

-Chicos, encargaros de esos lobos yo me las apaño con los que han desaparecido.

-Auauauauauau... duele, duele, duele...- es lo que pensaba después de acabar rodando por el suelo casi a punto de darme contra la roca. Bueno... echaría la culpa a Salvatore... pero si no fuera por el estaría mucho peor... pero que mucho.

Vale, había aprendido la lección: no ser tan kamikaze. Me había salido bien, pero es que si no llega ha ser por Salvatore acabo en el estómago de alguno de los bichos... y además, ahora que dijo Rin que había un par invisible... no me fio.

Aproveché que se habían desprendido unas pocas rocas, cogiendo una de estas de más o menos el tamaño de una bola de béisbol, y la agarré como tal para lanzarsela al lobo al que pegué. Estaba a punto de lanzarla cuando... me empezó a picar la nariz -A... ahh... ¡Achiss!- acabé estornudando por culpa del polvo que se me había metido en la nariz. Cuando me di cuenta, ya no tenía la piedra -Oh Dios... ¿donde la he lanzado?- pense preocupada.

De un momento a otro, la pelea que hasta ahora había pasado de observarse e intentar evaluar al enemigo a enfrentamientos contra las criaturas. Por un lado, Rin parecía haber oido algo cerca de él y con un movimiento instintivo, cargó su mano de electricidad y consiguió tocar a una de las criaturas que tenía justo al lado. De la nada, uno de los monstruos apareció muerto o como poco inconsciente.

En el otro extremo y sin mucho a mano con lo que contraatacar, Julia lanzó una piedra que perdió de vista al tirar. ¿A dónde había ido? ¿Tan lejos? - pensó antes de mirar a sus pies y verla a un escaso metro de ella. Menos mal que el resto no había visto eso.

Con uno de los desaparecidos fuera, ¿donde estaba el otro? Fue suerte que unos gruñidos, sonaran cerca de Salvatore justo antes de lo que sonó como un mordisco. Digo suerte, porque sino fuera por ello, Salvatore no habría conseguido esquivar ese ataque de una forma simple, invocando una corriente de aire debajo de sus pies que lo elevó.

¡Rin! ¡Aquí está el otro! - gritó Salvatore en el aire, mientras señalaba debajo suyo.

Apretaba los dientes aun sujeto a aquel maldito lobo, temiendo de lo que fuera a suceder cuando el otro lo embistió, aunque por suerte pude sostenerme encima. Una vez mis manos empezaron a sudar sonreí y pase una de mis manos por el lobo que había atacado al otro mientras aun estaba sujeto, esperando que el sudor también penetrara en la piel del lobo sobre el que aun estaba.

-¡¿Siendo venenoso intentarán morderme?! ¡No creo! ¡Centraos en atacar a los que se habían ocultado!-

Dicho aquello me centraba en los dos lobos que tenía cerca, sonriendo ladino.

Lakoto con la criatura, le había caldeado. Lo suficiente como para sudar un poco. Lo necesario para ser capaz de intoxicar a la criatura con la que estaba peleando. Con el último golpe de Makoto, el ser salió despedido hacia atrás manteniendose en cuatro patas. Parecía que el ataque no había surtido efecto, hasta que el "lobo infernal" se desplomó. Había tardado unos segundos más de lo debido, pero la criatura parecía haber quedado inconsciente.

Ya sólo quedaba una criatura en el campo, más una que seguía en paradero "desconocido". Ante esta situación, la criatura se quedó quieto. ¡Ek gee! - os gritó el ser yendo hacia atrás, quedando acorralada entre la pared y vosotros.

Heikki podía anular mi poder con la punta de la nariz, literalmente... claro que él no estaba usando su poder en él mismo, ni en dos lobos más... hmmm... supongo que vale la pena intentarlo. Pero no mucho. Aunque primero debería quitar de enmedio. Mientras veo como Salvatore se eleva y empieza a caer, avanzo un poco para no estar entre el lobo y Rin, y de paso acercarme un poco a la zona que no está afectada por el viento. 

Mientras avanzo, señalo a esa zona con el índice, y digo en voz alta ¡Ahí! ¡Algo tapa el viento en esa zona! Respiro, me pongo a parpadear tan rápido como puedo mientras observo concentrada, e intento que un círculo del diámetro de mi puño en el medio de la zona sin viento - exactamente donde estoy señalando - parpadee, y se haga intermitentemente visible, como hice conmigo misma en educación física. No será una imagen completa, pero a lo mejor es suficiente. O a lo mejor no sirve para nada. Quien sabe.

¡Chicos! ¡No le hagais daño a ese! - gritó Adwin poniendose entre el ser que había entre la pared de roca y el resto. Acaba de decir que se rinde. Lo ha dicho en mi lengua natal, pero lo ha dicho. Puede ser una trampa, pero ¿no teneis curiosidad? 

¿La criatura había hablado? Eso desde luego si que era raro y más ondeando una bandera blanca para rendirse. No era momento para despistarse, porque aún había otro oculto a la vista. Y este puede que no estuviera por rendirse.

Adwin parecía defender a uno de ellos pero no tenía tiempo para pensar en ello tanto Salvatore como Sara me habían revelado la ubicación del último. Cargo de electricidad una mis manos mientras me giro para mirar en la dirección correcta traspase parte de la electricidad a mi mano derecho y volví a lanzar una descarga como la anterior. O ese era el plan pero en vez de eso decenas de descargas salieron disparadas en todas direcciones sin parar. Por suerte en ese momento llegue a mi límite y caí sobre mi rodilla derecha exhausto. Pero se podía ver en mi cara un gran frustración.

Ehh... ¿que no le hagamos daño a ese porque se rinde? -¿Puedes hablar with animals?- le pregunté sorprendida a Adwin... pero espera... ¡Este no era momento para preguntar! ¡Que aún había unos que no se rendían! Pero entonces vi a Rin cayendo exhausto de rodillas después de parecer un Pikachu soltando rayos por todos lados -¡RIN!- exclamé preocupada. Traté de concentrarme en crear unas copias para ayudarle a incorporarse mientras yo hacía otra cosa... pero nada... ahora mismo era incapaz de concentrarme en otra cosa que no fuera en ayudarle.

Me acerqué a él corriendo, y le pasé el brazo por los hombros y traté de ayudarle a levantarse -Rin, are you ok?- le pregunté mientras trataba de ayudarle.

Los intentos de ataque de Rin y Julia habían sido en vano dada la inexperiencia que tenían en el control de sus poderes bajo una situación de estrés. Esto había hecho que quedaran a merced del ser que quedaba, quien apareció delante de ellos preparado para atacarles. 

Aquí arriba, bicharraco - gritó Salvatore mientras hacía un gesto con las manos que habíais visto anteriormente. Intentaba usar su poder. Solo que esta vez no pasó nada. Mierda, me la voy a pegaaaaaaar. Extrañado, el ser volvió a centrar su foco en Rin y Julia.

¡Suficiente! - dijo una voz justo cuando el ser iba a morderles . Consideraré esto un empate.

Una persona trajeada con una espada atada a la cintura apareció de la nada, en la zona que os había señalado Sara hace unos momentos. A algunos, os costó enfocar correctamente tras el esfuerzo, pero a los pocos segundos todos pudisteis ver quien era. Era Yamamoto, el chico que os había ayudado el primer día en el ataque en la escuela.

En cuanto Yamamoto apareció notaste que te faltaba el aliento durante un segundo. Como si te sacasen todo el aire de dentro, para despues volver a recuperarlo de repente.