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CYOA [DM11/21] [JJVV] Sentenciado estoy a muerte...

Cartagena de Indias

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14/11/2021, 11:15
Cookie a barlovento!

Agarras a Vargas por el pescuezo y evitas que se hunda. Por fortuna, el bombazo ha hecho que muchos de los arcabuceros que os fusilaban cayesen al agua. 

- Aguanta Vargas que de esta o salimos todos o nos vamos para el fondo. 

Vargas chapotea y menciona no sequé hostias de un colgante que le doy su padre, algo de que quiere mucho a su madre y algo de pedirle perdón a Nuestra Señora del Rosario, a la que prometió muchas cosas que nunca cumplió. Tu le dices que si a todo y buscas por el agua alguna cabeza flotando que no esté jurando en extranjero. A unos metros ves desaparecer una en el agua, con un grito de agonía. Tras unos instantes de burbujeo, aparece Leandro a unas brazas de ti.

- ¡Vámonos Ulloa! -susurra, casi gritando.

- A Vargas se le salen las tripas, no puedo dejarlo aqui.

- Cagontó, gaditano bocachancla... No podremos llegar con el herido hasta la costa.

- ¡Arramblemos un bote entonces! Decid dos gilipolleces en ingles para que se acerquen los de los botes y lo echamos abajo.

Leandro gruñe, pero obedece. Al momento llega nadando Isidoro, el cuarto de vuestro tronco, que nunca escuchó bien. Leandro le gruñe al oido y te parece mentira que nadie se entere de lo que decís, pero es tal la turbamulta que los ingleses parecen haberos perdido. Y hay tanto juramento en el aire que hasta puedes aprender su idioma.

- ¡Jir! ¡Jir! ¡Jel! ¡Jarri! -gritan Leandro e Isidoro, a una barca con tres marineros que se acerca a recoger supervivientes. Parece funcionar y a la que se les pone a tiro, Leandro e Isidoro hacen su labor y el bote se da la vuelta. Los tres pasmaos mueren rápido, uno aplastado con el propio bote, los otros dos, a base de aguadillas. Pero también llama la atención de otros botes y nadadores, que se están acercando. Leandro hace gala de unos huevos como el caballo del Gran Capitán y da la vuelta al bote el solo. Isidoro no tarda en subirse, pescando un remo. Leandro hace lo propio y te ayuda a subir a Vargas. 

Esta casi hecho. Te aúpas a la borda y vas a echar pie adentro.

- ¡Pa'la costa! ¡Cagando leches!

Y suena un mosquetonazo. Suenas varios, pero este suena distinto. Lo escuchas por dentro. Ves a Leandro caerse para atrás. Y a Isidoro y a Vargas y el bote y el cielo... Te cubre el agua y te das cuenta de que no ha sido el resto del mundo, sino tú el que caía.

Te hundes en la nada oscura, mirando por el único ojo que te queda como todo lo que te rodea es negrura. Un malnacido te acertó en plena cabeza. Al menos no ha dolido.

Al menos te vas al cielo

Porque ha muerto por Dios. Y por España.

FIN

- Tiradas (1)
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14/11/2021, 20:38
El bebedor de Ron

Lo del bote no ha funcionado, aunque ha sido épico. Así que intentaremos sacar al podré desgraciado a nado.

Pág 212

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14/11/2021, 21:55
Mr Parrot

Página 212

¡Por todos los tesoros del mundo! ¿Cómo podría Íñigo dejar a Vargas desangrándose en medio del mar? Los hombres miran a Ulloa, lo sienten como un líder. Si ahora hace lo que realmente desea, nadar raudo y veloz hacia la orilla, perderá el respeto que le tienen, y el mancillado honor sería finalmente irrecuperable.

Maldito bastardo. Solo espero que no vengan tiburones

Debía de proceder deprisa, pero por supuesto, nunca solo - ¡Souza, Marcial, Leandro! ¡Venid prestos! - Ordenó. No era momento de solicitar peticiones o ruegos, de lo contrario, no habría tenido el efecto deseado - Vos Souza, coged a Vargas por el pecho, Marcial de la pierna derecha y Leandro de la izquierda. Patead con fuerza para sacarlo del agua.. No me miréis así, que está bien orondo y todo el mundo sabe de que los gordos flotan más - ¿No debería ser al revés? ¡Qué más daba! Lo importante era que le creyesen - Yo me adelantaré hasta la orilla para asegurarme de que no hay enemigos a la espera, pues si los hubiese, los engatusaré para que vayan a otro lado y despejaros la costa. El éxito está en el trabajo compartido... - No se lo creía ni él, lo que deseaba era quitarse de en medio por si los escualos de la bahía olían la sangre.

Y así fue como Íñigo de Ulloa salvó el pellejo, tras detonar tan solo uno de los barriles de pólvora que transportaban sus hombres. No exponiéndose más de lo necesario a la muerte, pues bien sabía el desdichado que el diablo siempre le buscaba en las tabernas, no fuera a ser que esta vez le encontrase en el mar.

Cuando llegó a la orilla miró alrededor y pudo comprobar con satisfacción que no había nadie rondando. No tardaron en llegar el resto de los españoles, arrastrando el cuerpo de Vargas hasta la húmeda arena. Era el momento de darles una charla motivadora, donde su propia valía fuera la protagonista de esta historia. Y es que el ego era algo que ulloa siempre había tenido muy bien desarrollado.

- Mi plan ha sido formidable. Hemos hundido uno de los navíos atacantes y sin sufrir baja alguna - Miró a Vargas que se retorcía de dolor en el suelo - Al menos por ahora - Lo recomendable era cambiar de tema cuanto antes - Ya habéis visto que bajo mis directrices los perros ingleses sucumben. Dios Misericordioso me ha señalado como su elegido para evitar la tragedia que asola la plaza. Es ahora cuando nosotros, hermanos de armas, debemos continuar con lo que hemos empezado y para eso necesitamos un plan - Hizo una pausa dramática, quizás porque no tenía ni idea de cómo continuar procediendo - ¡Porque yo siempre tengo un plan! Podemos...

Vargas hacía demasiado ruido con sus alaridos, si seguía así quizás les diera problemas y lo peor... ¿Podría continuar el ritmo de los demás?

No era momento para pensar, debía dar nuevas órdenes. ¿Cuál sería el nuevo plan a seguir?

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15/11/2021, 13:28
Guillermo Brown

Aprovechar que han de estar confundidos para hacerles creer que internarse en la jungla y rodear el fuerte es buena idea. Alguno de tus hombres hablaba bien inglés, ¿o no? Si crees que sí, pasa a la página 25

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15/11/2021, 15:08
El bebedor de Ron

Tarde o temprano la selva va a estar infectada de esos jodeputas de casaca roja. Retroceder hacia el castillo mientras llenas el camino de trampas es el mejor camino.

Si eliges esta opción ve a la página 88.

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16/11/2021, 17:36
Cookie a barlovento!

Quizás sea buena idea descansar un poco y volver a por suministros a la hacienda o incluso al fuerte. Esta gente lleva una paliza encima de cojones.

Ve a la página 76.

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16/11/2021, 20:21
Mr Parrot

Si alguno de los hombres bajo los servicios de Ulloa hablase inglés, habría que lavarle la boca con jabón en el mejor de los casos, o cortarle la lengua, en caso de fluidez. Además, la posibilidad de descansar no podía contemplarla, pues el tiempo menguaba.

Regresar al castillo sería la mejor opción, y si se ponían trampas por el camino, pues aún mejor.

Nos vamos a la página 88

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17/11/2021, 15:55
El bebedor de Ron

Página 88

Los diez volvían a estar juntos en la playa, aunque era más que probable que el pobre Vargas no estuviese mucho más entre ellos. - Bien muchachos, les hemos tocado bien los cojones a esos hideputas.- Intentando atraer su atención hacia él desviándola del moribundo.- Y vamos a seguir haciéndolo. Pues esto es lo que vamos a hacer.

Hay muchos barcos y pronto habrá muchos ingleses para seguir atacando por aquí, debemos retirarnos al Castillo de San Felipe. Pero mientras lo hacemos les dejaremos unos regalos a esos malnacidos. Ni siquiera hace falta que sean muy elaborados, pues todos sabemos lo puta que es esta selva. Un corte, un simple rasguño y los insectos y las fiebres mandarán al otro barrio al hideputa.

¡Julián!- Le pidió al trampero nacido en Nueva España.- Vos conocéis la zona y sabéis que hacer, que Souza y Marcial os ayuden. Pequeños pozos con juncos afilados, piedras que caen de los árboles y cualquier cosa que se os ocurra. Los demás, improvisad una camilla con dos troncos y nos turnaremos para llevar a Vargas.- aunque la palidez de la cara le indicó a Ulloa que no transportarían la pesada carga muchas horas. Como así ocurrió, esa misma noche el gaditano murió desangrado y fue enterrado en la selva con todos los honores que el peculiar grupo podía darle.- Cada alma que se lleven las trampas que estamos colocando será en honor a Vargas. Dios lo tenga en su gloria.- Dijo Iñigo de Ulloa al terminar.- Que esos perros lo paguen cien veces.

El día lo pasaron en camino, trabajando sin descanso con los nueve hombres dedicados a una única tarea. Ya entrada la noche  la selva estaba plagada de trampas y con San Felipe a tiro de piedra. ¿Cuál iba a ser el siguiente movimiento de Ulloa y sus hombres?

- Tiradas (1)
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18/11/2021, 08:05
Mr Parrot

Había que regresar a la fortificación, dar novedades y por supuesto, pensar en la siguiente línea defensiva del castillo. Aunque los ingleses avanzaban hacia San Felipe, las trampas les mantendrían ocupados durante un buen tiempo.

Ir a la página 74

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18/11/2021, 21:35
Cookie a barlovento!

Habrá que dejar una guardia, pero el resto de los muchachos habrán de dedicarse a desfogar los malos humores. Quizás puedas echar a suertes quien se va a ver a las esclavas de la hacienda y quien se queda al cuidado de la honra.

 

Subida la moral, pero se puede ir de madre muy fácil.

Si aún así te pica la entrepierna, ve a la página 70.

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18/11/2021, 23:53
Guillermo Brown

Si en cambio prometes que el descanso y la fiesta será mañana, luego de que matéis algunos ingleses más por la espalda, aléjate hacia el interior de la selva y vuelve luego para sorprenderlos por el lado que menos se lo esperan cuando estén lidiando con las trampas, y lee qué ocurre en la página 143

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19/11/2021, 18:31
El bebedor de Ron

¡Hay que celebrarlo!. Nos vamos a la página 70

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19/11/2021, 21:53
Cookie a barlovento!

Pagina 70

- Mirad chicos. Lo vamos a hacer asi...

Recogiste unas cuantas ramitas del suelo del bosque. Se las mostraste a Leandro para que las igualase y dejase tres un poco más largas, para que se viera que no había trampa ni cartón. Despues las guardaste en tu puño y a la luz de los quinques, mostraste el puño a los muchachos.

- Tres se tendrán que quedar aqui, al menos hasta que os demos el relevo. Que será de aqui al alba. Al alba os doy rienda suelta a los tres que se queden y no os esperaremos hasta el mediodía. 

Nadie quería ser el primero, hasta que a Leandro, que cada vez más lo veías como tu segundo de a bordo se adelantó dando codazos y sacó una rama de tal tirón que te dejó varias astillas clavadas. Su ramita era larga.

- ¡A mojar! -gritó con los brazos en alto.

Despues de aquello se fueron animando y sacaron las ramitas cortas Marcial, Ulloa y otro bizco que ni sabes como se llama. Claro que a Marcial no se le escapó que para ti no había quedado ninguna ramita.

- ¿De que cojones te quejas Marcial? ¿Quien está al mando?

- Cagonlaputa, ni mando ni leches. Aqui o todos iguales o no folla ni el tato. ¡Muxo cuidao conmigo que descendo de Perez de Cabrón y tengo mu mala folla joputa!

- ¡Tal como era tu madre, raro es que no desciendas de un burro o una piara de cerdos! -gritó Leandro, poniendolos a todos firmes- ¡El capitán va a venir pa vigilar que la cosa no se desmadre y para que el hacendado vea que es una cosa oficial! ¿Ten'teras tarao?

Marcial gruñe pero se acojona. Coño te acojonas hasta tu. Menuda gasta Leandro. Menos mal que parece que lo tienes de tu parte.

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Cuando llegáis a la hacienda todo el mundo duerme, menos los cuatro o cinco que montan guardia. El hacendado sale presto en cuanto le hacen saber que andáis de vuelta. Esos días no se duerme demasiado y el tipo parece que ha estado dándole a la botella.

- ¿Y ahora que quiere usted? -te interpela el tipo.

- Un lugar para descansar, que venimos de salvar el pellejo a todos los aquí presentes. Un hermano nuestro ha caído. Así que respeto. 

- Lo del lugar para descansar no hay problema. Tenemos un pajar ahí detrás, grande, con paja limpia...

- Y mozas. Traednos mozas que nos tranquilicen y solacen.

Eso ya no parece gustarle tanto. Ni a el, ni a los guardas, todos mestizos o nativos que aguardan alrededor. 

- Eso ya... eso ya es abusar.

- Mia' el cabrón este. Gordinflón de mierda, se las guarda pa'el solo -exclama el "Zanahorio."

- ¡Sin faltar! Pero vamos a ver... -te agarra por la camisola y te acerca para hablarte en comandita. El hedor a aguardiente te hace bizquear-. ¿Me estas pidiendo que te lleve a las madres, hermanas, mujeres e hijas de estos chicos que cuidan de mi hacienda, para que las dejéis como un abrevadero de patos? Nos van a cortar el cuello y pondrás a toas las tribus de por aquí en nuestra contra.

Por un momento valoras tus opciones antes de decidirte.

A la mierda, dices rascándote la entrepierna... 

Sacas tu vizcaína y se la pones al cuello al hacendado.

- Pa los muchachos las siervas. Yo me apañaré con algo más mirado. ¿Ties hijas jovenes, gordinflón?

Tus muchachos te toman la palabra y desarman y acaban con la vida de los guardas en menos que uno se santigua, tu le metes un empujón al tipo y entras por lo que parece la cocina. Afuera empieza la jarana, pero a ti ya te da igual. Estas como un perro en celo. 

- Os lo ruego, dejad a mis hijas. Son jóvenes. Id por las siervas...

- Jóvenes y castellanas. Como debe de ser. Con vuestras hijas que voy...

- Pero, pero... ni pero ni hostias. Llévame a donde duerman tus hijas o te cortó los cojones.

El hombre te guía, sollozando por una escaleras de caracol, estrechas, y llegáis a un pasillo. Te abre una puerta y te suplica por ultima vez que no las hagas mal. Le arreas con el pomo de la daga y cae redondo como un fardo. Afuera se escucha un tiro o dos.

Iluminas el interior con un quinqué. 

Y entonces te apuñalan por la espalda. No consigues ver quien. Dos muchachas, como dos gacelas, vistiendo solo enaguas, salen de debajo de las camas, con sendos pistolones. No tendrán más de trece o catorce años.

- ¿Lo matamos ya, ma'?

- No hijas. Guardad las balas. Los animales de sus hombres están afuera, liándola. Pero caerán igual.

- Si ma... -responden a coro las chavalas. 

Y es lo ultimo que escuchas antes de abrir camino rumbo al infierno.

FIN

- Tiradas (1)
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20/11/2021, 19:01
El bebedor de Ron

La fiesta no ha dado resultado, así que lo mejor es volver al Castillo a dar noticias nos vamos a la 74

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20/11/2021, 20:58
Mr Parrot

Página 74

Había que pensarse muy bien los siguientes pasos, pues nadie deseaba salir herido aquella noche, e ir a una de las plantaciones para beber y fornicar solía ser el inicio de una muerte anunciada. No, Ulloa no era tan incauto, así que volvería al castillo para dar las pertinentes novedades y hacer constar que las hazañas realizadas habían tenido como consecuencia la explosión de un navío y la muerte de centenares de ingleses. En realidad eran menos, pero ¿acaso eso importaba?. Íñigo nunca fue excesivamente sincero.

Debían poner trampas por el camino. Las más sencillas y rápidas de efectuar eran los agujeros en el suelo de tres palmos, disimuladas por hojarasca, sistemas ideales para quebrar tobillos e inutilizar hombres mientras caminaban por los estrechos caminos arenosos que comunicaba la costa con San Felipe. En alguna que otra ocasión cogerían ramas de arbustos, las tensarían y doblarían para después fijarlas, dos de sus hombres quedarían rezagados para ir liberando el ramaje de la vegetación, con el fin de que los dientes de esos mal nacidos británicos se vinieran abajo. No eran trampas mortales, pero sí lo suficientemente molestas como para retardar el avance.

- ¡Excelentísimo Don Blas de Lezo! ¡Ruego que nos abran las puertas! ¡Traemos nuevas para vuestra merced! - Fue el grito que dio Ulloa a cierta distancia de la fortificación, con el fin de que los soldados españoles no los tomasen como enemigos y los mataran. Había sido una actuación prudente, pues tras la llamada de atención el enorme portón de madera hizo la apertura adecuada, para que los desheredados amigos de Íñigo y él mismo entraran en el lugar.

El ilustrísimo almirante recibió a Ulloa una vez más, recibiendo las novedades de las acciones realizadas, desde la última vez que se encontraron, el momento en el que el comandante en funciones le dio la libertad para servir a la Corona española y redimir sus faltas.

- Con bravura hicimos caer un centenar de hombres en las infestas selvas de la zona sur - Narraba muy pagado de sí mismo, elevando la voz y narrando como si en una taberna se encontrara, y es que si moría Lezo en el altercado, al menos alguien contaría las aventuras y hazañas bajo su nombre.

- Y nos metimos en el mar. Las olas indomables de cuatro metros nos azotaban, pero Dios misericordioso nos protege, porque en esta afrenta es su voluntad que los ingleses mueran. Todos hijos del diablo... - Seguía contando su historia, sin olvidar los troncos de árboles preparados para explicar el motivo de no haberse hundido.

- Y tras sembrar los caminos de trampas, aquí estamos, porque todo buen soldado sabe que una buena defensa puede anular un ataque, así que venimos a proponer mejoras sobre el fuerte. Debemos preparar algunas sorpresas a nuestros enemigos y para eso tengo alguna sugerencia... - Indicó con un brillo en la mirada, la de un hombre que sabía, estaba ganando galones frente a su superior.

Pero ahora no debía decepcionarle. ¿Qué podía proponerle que pudiera mejorar San Felipe? Ya no solo era tener la idea, sino llevarla a cabo. Debía demostrar que era el hombre de acción que había narrado, y no el maldito borracho pendenciero que hacía un día, se pudría en la cárcel.

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22/11/2021, 17:32
Cookie a barlovento!

Cuenta la leyenda de que bajo el castillo excavaron una grutas con objeto de tener un lugar para almacenar víveres y dieron con túneles antiguos donde encontraron los hombres algo que les atemorizó.

Siempre has creído que eran historias de viejas pero si alguien sabe la verdad es el Almirante.

 

Si deseas proponer al Almirante acudir a las grutas y dar un vistazo a aquella reliquia similar a un hombre con armadura pero de enorme tamaño, ve a la página 555.

Notas de juego

Lamento el cambio de género pero es que ya no sabía por dónde tirar

Me veo asaltando el Palacio de Buckingham con uno de estos. Y a Blas de Lezo en plan Cyborg steampunk.

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22/11/2021, 19:10
El bebedor de Ron

Los ingleses intentarán escalar lar murallas, pero lo que no esperan es que los fosos sean más altos que sus escaleras.

Si le propones a Don Blas cavar más hondo el foso pasa a la página 13

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22/11/2021, 20:37
Guillermo Brown

Si crees que la idea del foso es tan brillante que seguramente don Blas ya la ha pensado y propones una idea novedosa como clavar estacas cruzadas alrededor, las unas para dificultarles llegar, y las otras para impedirles huir, pasa a la página 20

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22/11/2021, 21:20
Mr Parrot

Aunque muchas buenas ideas pasan por la cabeza de Ulloa, quizás piensa que Don Blas no ha caído en cavar un foso, lo suficientemente profundo, como para impedir a los británicos asaltar el fortín. Sería algo sencillo de hacer y lo mejor, que podrías mientras tanto tomar un buen trago de ron..

Vamos a la página 13

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23/11/2021, 17:25
El bebedor de Ron

Página 13

Cuando llegue el momento,  los malditos ingleses trataran de escalar el muro solo con qué el foso tenga un metro más de lo esperado sus escaleras quedarán cortas.-Le explicas al comandante quien te mira fijamente a través de su único ojo sano.

Una risa suena a su espalda, es el capitán De la Vega, un estirado noble al que su familia le ha conseguido un puesto que no merece.- Acaso pensáis, vil rufián, que el gran Blas de Lezo no ha tenido en cuenta esos menesteres, acaso os creéis superiores a su inteligencia militar.

Deseáis lazaros contra ese petimetre y hacerle morder el polvo, es lo que se merece, notáis como se os encienden las orejas de ira.- Mi señor....- Empezáis una frase que no llegáis a terminar pues el propio Lezo toma la palabra.

En la selva habéis actuado con sabiduría y buen ojo. Aunque ya ha sido ampliado, ordenaré drenar el foso, vos y vuestros hombres tenéis un día, no puedo daros más pues el inglés está cerca.

Así, terminada la reunión volviste a salir del castillo liderando a los hombres, armados esta vez de palas, picos y cubos. Nuevamente los pusiste a trabajar como los cabrones que eran, pero estando tan cerca de recuperar la libertad y tenido los ojos del alto mando literalmente en vuestra coronilla ninguno se atrevió a respirar.

Cavasteis y cavasteis sin descanso incluso en mitad de la oscura noche hasta que al llegar al alba escuchasteis ruidos. El ejército inglés había salido de la selva y se lanzaba a la carga de forma inmediata.

Con un rápido vistazo lo tuviste claro, los casacas rojas, esos herejes malparidos llegarían a vuestra posición antes de que pudieras abandonar el foso. El estruendo ruido de una presa abriéndose y dejando salir con violencia el agua embalsada te indicó que Lezo también lo había visto desde lo alto de las murallas y que no pensaba dejar caer la plaza fuerte por nueve ex convictos que aún trabajaban a sus pies.

Sin tiempo a pensar en nada más una enorme ola te golpeo sumiéndote en la oscuridad.

FIN

- Tiradas (1)