Partida Rol por web

Aquel dúo de PJs salió de la habitación del Vomita-Código de Shiro Arakawa y se movió cual panda de cavernícolas más que dispuestos a cazar a un Mamut usando palos afilados y un par de piedras, sin saber exactamente dónde ni contra quien se estaban metiendo. A ver, la diferencia de poder aquí es bastante obvia. ¿Por que no darse la vuelta y rendirse?. Eso les vendría bien, esperar a un final menos doloroso posible...

Nos habíamos esforzado mucho en conseguir una manera de entrar, y por culpa de B-Rabbit incluso habíamos puesto en peligro la posición de Shiro respecto al resto de estudiantes, si bien la mía ya no podía empeorar más. Además, estabamos todo sudados por culpa de la tercera isla, y agotados de tanto ir y venir de un lado a otro. Más vale que hubiera algo importante en la habitación del titiritero...

—Este debe ser el miedo que siente todo programador cuando hace un comit a la rama de producción —comentó, aunque por su mueca no parecía que él estuviera sintiendo ese miedo. Confiaba en que funcionaría.

Lo único en lo que no estaba tan seguro de si podía confiar era que en lo que se encontraran más allá fueran a haber nada de provecho.

Shiro Arakawa fue a la sección de Fichas de los Estudiantes y la dejó puesta "Akemi Eiji". Tras esto pasó por el lector de las PDAs que tenía la habitación de Akemi Eiji esperando que, con esto, fuera suficiente para que se abriera la puerta y los dejara pasar a lo que sería la zona más misteriosa de todas... al menos que hayan podido ver.

Y la puerta se abrió....

Aquel inesperado dúo conformado por Shiro Arakawa y Tsumiko Komachi entraron dentro del cuarto del propio Akemi Eiji, esperando así que su plan de supervivencia e investigación diera frutos. Aunque claro, la situación de por sí era de todo menos segura, y la posibilidad de conseguir sobrevivir con ese plan maestro era bajo. Pero al menos tenían un plan.

Aquel grupo conformado por Akira Kimura, Uma Yugana y Yoshimatsu Arai llegó hasta la Zona de las Habitaciones, y aunque estos no pudieron seguir el rastro de las huellas del carrito de la compra que Barbara Custik llevaba al ser el suelo de tablones de madera, lo que sí pudieron ver fue a aquel carrito aparcado cerca de la puerta de la cabaña de la propia Barbara Custik.

¿Por qué has venido? ¿No te podías haber quedado allí con los demás? 

Es cierto que había dicho de estar todos juntos pero EL, me seguía dando escalofríos. Fui a la puerta de Bárbara y llame a la puerta.

Bárbara, ¿Podemos pasar? 

La no-tirada de persuasión parecía funcionar para Akira Kimura, pues una vez que llamó a aquella puerta, la respuesta no se hizo esperar demasiado, abriéndose lenta y ominosamente para que estos pudieran ver lo que había dentro y lo más importante de todo, pasar a su interior.

Al parecer Akira Kimura y Uma Yugana fueron expulsadas de la habitación de Barbara Custik por su actitud poco proactiva a la hora de cargarse a alguien para evitar que el veneno los acabara por matar a todos ellos. Quizás no era la opción más moral de forma directa pero... ¿Y utilitarista?. Como sea, parecía estar ya anocheciendo...

Mientras Joshua Josef y Suigin Shita se dirigían hacia la cabaña abandonada para prepararse algo de comer en un sitio en donde no hubiera riesgo de que habría un aire acondicionado que los estuviera envenenando de a pocos, estos se encontraron en la zona de las habitaciones con Akira Kimura y Uma Yugana, ambas saliendo de la habitación de Barbara Custik.

Una vez que Akira Kimura y (en menor medida) Uma Yugana fueran expulsadas de la habitación, estas salieron a la zona de las habitaciones en donde pudieron ver a Joshua Josef empujar la silla de ruedas de Suigin Shita, y al parecer ambos estaban sanos y salvos, o al menos parecían tener vida, de momento.

¿Eh? Hola shuigin, hola rompepuertas. ¿Que hacéis por aquí?

Tras avanzar a la zona de la isla 1, llegamos a la zona de las habitaciones donde se encontraba Akira y Uma, al parecer ambas estaban en buen estado, para no ser grosero les regrese el saludo

Buenas noches tripulantes y estamos de camino de camino a la cocina para ver que comemos, ya que cierto lugar esta  envenenado. 

Di un suspiro mientras me rascaba la cabeza. 

El peor de los casos tendré que pescar nuestra comida. 

Mmm... Aunque porque estabais saliendo de la habitacion de Barbara? Esta llendo todo bien? *termine preguntando, me refiero, al fin y al cabo era bastante sospechoso* Quereis uniros a nosotros para la comida? Asi podriamos tratar de hablar un poco.

 Al salir de la habitación de Barbara, Akira y Uma se encontraron con Suigin y Joshua. La jinete mantuvo una mirada seria ante los dos, aunque se podía notar que había un evidente nerviosismo en su ser. Desde el temblor de sus rodillas hasta el sudor de su frente. Se dispuso a responder la pregunta de los recién llegados.

- No, no creo que esté... todo bien. Barbara y Yoshimatsu están ahí adentro y... d-dan miedo. Hablan cosas raras, son dos verdaderos raritos... ¡y Uma Yugana, que jamás se dejaría llevar por deseos impuros y faltos de moral, tuvo que retirarse de aquella habitación! Junto a Akira Kimura, cuya pureza es relativamente comparable con la mía.

 Como era costumbre, la jinete levantó su voz y exclamó a los cuatro vientos la superioridad de su persona frente a los demás, aunque su voz se quebró en un par de ocasiones. Ante la última pregunta de la compañera en silla de ruedas, la rubia se permitió un momento de vulnerabilidad para aceptar la invitación. Con su mano, se aferró al brazo de Akira.

- Si, quisiera ir con ustedes. No q-q-q... queremos estar solas ahora.

Al parecer Barabara y Yoshimatu están algo "ocupados" haciendo cosas "personales" dentro de esa habitación y solo puedo decir. 

Oh. 

Dejando a un lado eso, al parecer Akira y Uma no quieren estar solas, era claro que querían procesar lo que vieron.

Como quieran, vamos preparar la cena aun que seamos nosotros 4, y que bueno que recuerden ir el dúos y saber quien va con quien. Les recuerdo la regla que habías propuesto tiempo atrás, ya que en solitario se ha aprovechado para cometer los asesinatos. 

Dejo que Suigin algo diga a Uma o Akira, , mientras digo. Si los "cocineros" están ocupados, quiere decir que nadie a tocado aun la comida, significando que no vamos a estar envenenados o comer sangre de nuestros compañeros. 

Tomo la silla de Suigin para iniciar a moverla hacía la vieja cabaña.

Vamonossssssss

Si, habra que vigilarlos. Estaban hablando de matar y cosas así. 

Un rugido sono en mi estómago. 

Yo se algo, aunque sea prepararnos algo sencillo, asi que vamos alla y 4 siempre estaremos mas seguros-

Bueno, mientras que no se cuanta verdad hay en la persona que parece haberse montado Barbara, sin duda hay que ir con mucho cuidado con Arai, sobretodo porque diria que es del tipo de persona que preferiria no mancharse las manos con tal de seguir en juego mas tiempo. Igualmente si, es mejor dejarlos estar, siempre y cuando en vayamos en grupos de dos o mas sera realmente complicado hacernos algo.

Y bueno, tengo ganas de ver que preparais *termine de decir con tranquilidad mientras me dejaba llevar*

Y con esto dicho, aquellas parejas se juntaron y formaron un pequeño grupo que se encaminó hacia la zona de la piscina, en concreto, hacia la vieja cabaña en donde se encontraba la única cocina disponible de todo aquel enorme complejo de islas, a fin de cuentas, era un sitio en donde el oso no los había amenazado que había veneno.

Yoshimatsu Arai salió al exterior de la habitación, cerrando tras de sí la puerta dejando atrás el conejo destrozado en la habitación de la joven cocinera esperando que esto fuera más que suficiente para que sus planes salieran decentemente.