Partida Rol por web

03:00

- Arlesha carga con casi todo el peso de Intius y comienza a llevárselo hacia la lanzadera.

- Titus termina de guardar los objetos recuperados del cuerpo del tecnohereje muerto y corre a ayudar a Arlesha. Entre los dos van más rápidos, pero al llegar a la sala de la lanzadera se encuentran una sorpresa desagradable...

- Se trata de una criatura de más de tres metros de alto, que quizá en otro momento fuese un Ogrette de la Guardia Imperial, y ahora es una aberración biomecánica.

- Entretanto, Cerberus ha terminado los ritos de propiciación de los espíritus-máquina de la pequeña lanzadera, los motores se activan y rugen, haciendo vibrar todo el complejo con su potencia mientras comienzan a expulsar humo y llamaradas.

- Cerberus no se ha dado cuenta de la llegada del servidor Ogrette, que ahora se interpone entre la lanzadera y los otros tres miembros del equipo.

- Valerius, tumbado y con una pierna menos en la bodega de carga de la lanzadera orbital, despierta con la vibración de los momentos previos al despegue. Al hacerlo, siente de nuevo todo el dolor de la amputación que acaba de sufrir, y de los crudos "cuidados médicos" (por llamarlos de algún modo) recibidos. La hemorragia está cortada, pero el dolor es espantoso y el muñón podría infectarse muy fácilmente en las condiciones actuales con que ha sido tratado.

INTIUS VARNIAS:

TIRADA DE ESQUIVA:

- Siempre olvido que en este juego la Esquiva es reacción, y es posible hacer un intento por asalto.

- Tira ahora, si la pasas, la herida de Varnias deja de sangrar y recupera la conciencia, de lo contrario sigue inconsciente y desangrándose.

"¡¡¡¡Maldición!!!!"-Escupió la Agente Rais al contemplar la aberración biomecánica a la que se enfrentaba-" Titus, llama su atención. Mientras yo avanzaré hacia la lanzadera y dejaré allí a Initius, luego lo masacramos en fuego cruzado."

Al acabar de hablar inspiró profundamente, preparandose para correr con la pesada carga que suponía su compañero herido.

INTIUS:

- Estas tiradas de combate no era necesario que fueran ocultas. Has fallado ambas.

ARLESHA, TITUS:

- Tiradas de Esquivar +10, y de Agilidad +0.

TITUS:

- No, no hacía falta que fuesen ocultas.

- Serías capaz de esquivar a esa criatura y llegar a la lanzadera por tus propios medios. De lo que no te ves capaz es de hacerlo mientras sigues ayudando a Arlesha a cargar con Varnias.

- Titus prepara su fusil de caza, apunta y dispara contra la enorme mole biomecánica, atrayendo su atención.

- La criatura carga bestialmente contra el Asesino.

- Arlesha, pese a no contar ya con la ayuda de Titus, que ha soltado a Varnias, se apresura a ponerse el cuerpo exangüe de su colega Arbitrador sobre el hombro y a correr haciendo un esfuerzo titánico final hacia la rampa abierta de la pequeña lanzadera.

- Titus esquiva la carga con facilidad pasmosa y el Ogrette servidor se estrella contra un mamparo de acero, haciéndolo trizas con sus dos brazos terminados en colosales sierras mecánicas. Parte del techo cae sobre la criatura, pero eso no la detendrá mucho.

- Titus se percata de que la rampa de la lanzadera sigue abierta, pero que comienza a recogerse mientras la lanzadera vibra y se estremece, lista para despegar. El techo se ha abierto en forma de iris, revelando el cielo nocturno de Donaris y el polvoriento planeta Granithor en el firmamento.

02:00

TITUS:

- Te das cuenta de que tu bala ha rebotado por completo en el pesado blindaje acerado de la bestia, sin causar el más mínimo daño.

TITUS:

- Esquivar +0.

- Agilidad +10.

- Tirada de disparo, apresurado, sin Apuntar.

- La criatura se libera de los restos del mamparo y corre a embestir a Titus, quien la esquiva y corre a su vez a la rampa de la lanzadera, que ya se está cerrando mientras el aparato comienza a elevarse. Con una voltereta, Titus dispara sin apuntar con su fusil de caza. La bala rebota de nuevo contra el pesado blindaje de la criatura biomecánica.

- Instantes después, los propulsores a reacción de la lanzadera ganan plena potencia y el aparato despega, alejandose a progresiva velocidad del complejo del Mechanicus.

01:00

- La rampa de la bodega de carga de la lanzadera se cierra por completo. En su interior están los cuerpos inertes de Valerius y de Intius, mientras Arlesha intenta cortar la mortal hemorragia de Varnias utilizando un botiquín demasiado elemental...

00:20

- Cerberus pilota muy torpemente con un solo brazo y los sistemas de su cibermanto bajo mínimos. Raudales de energía chispean en el muñón de su brazo seccionado, así como sangre y fluidos lubricantes. El tecnosacerdote novato siente como su consciencia va y viene, no consigue pilotar en línea recta...

00:00

- La explosión del complejo es una tremenda detonación...

- La lanzadera es golpeada por varios fragmentos de buen tamaño, se parte y termina estrellándose...

La gran explosión  junto a mi bajo nivel de pilotaje  supusieron el fracaso rotundo de la misión, ¡SALIR CON VIDA! empezaron a iluminarse todos los paneles de alerta, la nave empezó a descender a ritmo vertiginoso.

- No puedo controlar la nave, la explosión ha dañado todos las piezas claves de estabilización, el compresor ha sido dañado ¡DESCENDEMOS, DESCENDEMOS!

Cogí con mi único brazo a Intius, empezábamos a descender sin duda moriríamos y lo senté en la cabina de salvamento o en los asientos inyectores que propulsarían el lanzamiento segundos antes de la colisión.

Fui dándome prisa necesito tu ayuda agente ponga a los otros en sus respectivos asientos - mis movimientos iban acompañados con el bamboleo de la nave desplazándome de un lado a otro chocando contra las paredes laterales de la nave pero pudiendo moverme aunque con dificultad. Seguramente si hubiese sido todo humano el miedo provocaría la paralización de todo mi cuerpo, pero ahora podía controlarme y todo lo que veía desde mi ojo bioquímico era en probabilidades de cuerpos salvados como si de una ecuación matemática se tratase, a tal velocidad sólo me daría tiempo a salvar a uno más como mucho, esperando que la agente cogiese a Valerius cogí a Titus y lo deposité en otra cabina de salvamento después me senté aunque creí que era demasiado tarde y sentí el vacío...