Partida Rol por web

SIBELLUS: ESPIRA: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 06:15.

- Bien. Al encuentro con el mercenario yo no iré. - Replico. Sería muy sospechoso que alguien de mi estatus social acuda a ningún lugar de esos bajos fondos. - Günther y Arao... creo que es mejor que os quedéis aquí. Nataly, tú también. No quiero levantar demasiadas sospechas. - Y un grupo numeroso seguro que las levanta.

Luego miro a Kritus y a Vassily... Finalmente me decanto. - Vassily, te quedas. Como mi guardaespaldas personal sería demasiado extraño que te enviara a ese lugar y permaneciera yo aquí. Kritus, tú irás al encuentro con Orlay. -

- Esta noche acudiremos a la Corte de Alabastro nosotros, - digo señalando a los que he nombrado para quedarse, - y los que hayan acudido al encuentro con el cazarrecompensas permanecerán aquí como grupo de apoyo en caso de problemas. - Explico. Siendo tantos veo factible dividirnos y que uno de los dos grupos permanezca de apoyo para cualquier contingencia o imprevisto.

Salvo que alguien más tenga algo que añadir... creo que las órdenes están claras.

SIBELLUS: ESPIRA: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 06:20.

Kritus, Titus Pullus, Varius y Verius se preparan y, tras despedirse, se encaminan a la Colmena Media para acudir al encuentro con el mercenario.

Varius, que es quien cuenta con la mayor confianza por parte de los Strophes debido a que su identidar real es como Clérigo del Adeptus Ministorum, ha recibido el cofre de datos que contiene mil Tronos.

SIBELLUS: ESPIRA: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 06:20.

Renata-Nataly chasqueó la lengua cuando Kurt-Kritus salió con el resto. Nadie supo en qué sentido lo había hecho. Después se giró hacia Intius-Annius y le guiñó un ojo, descarada.

-Si tengo que seguir representando el papel de tu amante, y esta noche vamos a un evento con gente pomposa y de alta alcurnia -el tono con que remarcó las palabras las convirtieron en una especie de mofa- voy a tener que ponerme presentable. 

Para la fiesta ya había conseguido de algún modo un buen conjunto de ropas prestadas que suponía habían salido de las arcas de su joven anfitriona. Por deseo del padre, claro, seguro que la noble hija estaba menos dispuesta a cederlas. Pero ahora volvía a necesitar un atuendo acorde. Añadió para los demás, claramente jugando con las caras largas o impasibles del cuestor, el psíquico y el envarado militar:

-Ya sabéis, telas ricas, colores brillantes, adornos. Y un buen peinado. Y masaje, y afeites. Voy a husmear por la casa, a ver qué clase de esclavos y sirvientes tienen las damas aquí, y qué maravillas proporcionan. Quizá incluso proporcionen información. Y os diría que hiciérais algo parecido, a veces un buen chisme vale tanto como una llave. Tenemos largas horas por delante, es un buen modo de sacarles partido. Y puede que incluso de divertirnos un poquito.

SIBELLUS: ESPIRA: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 06:20.

Asiento a Renata, aunque dejo entrever una sonrisa.

- Bien. Pero no te acostumbres mucho a estos lujos. - Comento divertido. Lo cierto es que mi aspecto dista mucho del de un noble... pero con la excusa de ser de un planeta primitivo como Fenksworld, puedo dar el pego. Me pregunto si debería buscarme unos ropajes más... "acordes".

Probablemente hable con Laurent, o su hija, para que se encarguen de esos detalles. Ahora quiero centrarme en algunos aspectos de la misión, así que centro mi atención en Xerxes y Arlan.

- Lo de esta noche es importante. Ignoro cuántos miembros importantes del Coro van a estar ahí... Pero tenemos que conseguir saber más del origen de la tecnología xenos que poseen. Aunque confirmemos que trafican con psíquicos... Aunque encontremos a la sobrina de Strophes... el objetivo principal de nuestra misión sigue siendo el mismo. Y recordad... nadie debe enterarse de que somos agentes de la Inquisición. Tenemos que mantener tus poderes ocultos todo lo posible. - Añado señalando un momento a Arlan.

- Vassily... Tú estarás en todo momento conmigo. Y si en algún punto no permiten guardaespaldas, Nataly estará conmigo. - Continúo. - Günther. Tú y Arao no os separéis. No quiero que nadie se quede solo durante la fiesta en ningún momento... en ninguna habitación. Ni para ir al baño. - Comento con el semblante serio.

SIBELLUS: ESPIRA: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 06:20.

¿Mantener mis poderes ocultos?

El rostro de Itsua pareció amagar una sonrisa que fue difícil de identificar como tal. Más bien parecía un viejo y reseco trozo de cuero cuarteándose bajo el impulso de un dolor sordo procedente de lo más profundo de sus intestinos.

-No haré nada que mi particular guardián no considere necesario. Ni siquiera ir al baño. Y en todo caso, si no contamos con más recursos, siempre puedo servir de cebo -dijo sin que aquello le pareciera descabellado.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 16:32.

La cara de Kurt, ahora bajo el nombre de Kritus, era un poema dedicado al fracaso, de su espalda colgaba el fusil que no había terminado de guardar desde que lo había sacado para hacer fuego. Su ancha mandíbula estaba apretada delineando la frustración en su rostro.

—Orday... —dijo haciendo una señal con la mano que de forma inequívoca indicaba que el hombre había pasado a mejor vida.

No quiso hablar mucho más de lo que había sucedido, seguro que Varius, Verius, Vorius o alguno de los demás podría ofrecer un relato más certero y próximo de lo sucedido. Con la mirada buscó a Renata para poder encontrar un lugar agradable en el que deposar sus ojos.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

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HORA LOCAL: 16:32.

Casi al mismo tiempo en que entraban en la sala el grupo que había ido a la zona de El Ajetreo, Renata apareció también por una puerta interior, oliendo a sales y cremas, y peinada con la sofisticación propia de las concubinas de la nobleza. Sonreía, relajada y satisfecha, pero la sonrisa se quebró en su rostro al ver el gesto de Kurt.

-¡¿En serio?! Venga, soltadlo.

Siguió, mirando al resto del grupo que entraba, ya que el legionario parecía reacio a seguir hablando. 

-¿Qué ha pasado?

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 16:32.

- Orday ha sido asesinado enfrente de nuestras narices. Un asesino bien equipado, entrenado y preparado. Quien quiera que lo haya contratado, se ha dejado una enorme cantidad de Tronos para pagarle. El asesino huyó con la información que nos iba a entregar el cazarrecompensas. Le perseguimos, pero tenía apoyo... más asesinos a sueldo, todo un escuadrón... Tenían bien planeada la huida. Hicieron estallar un edificio con una bomba de fusión y en el caos reinante les perdimos la pista. - Valerius parecía ligeramente abatido... Más bien frustrado por no haber podido completar la misión con éxito.

Miró a Tercio... él tenía todo lo que llevaba encima el cazarrecompensas cuando murió. Todo lo que había podido salvarse. Quizá hubiera algo que les ayudara, o que les diera alguna pista más sobre el Coro.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 16:32.

-No parece casual. Quien haya pagado por ese servicio, debía de tener la certera sospecha de que el cazarecompensas estaba dispuesto a vender su producto y han hecho todo lo posible para quitarlo de en medio. Pero posiblemente por menos de mil tronos o si no, hubiera bastado con pagarle -dijo con una escueta apatía-. Las cosas se ponen difíciles. Entiendo que no os vieron, ¿verdad? En caso contrario, nuestra posición e identidad estaría comprometida.

Quizá su presencia hubiera supuesto la diferencia entre el éxito y el fracaso gracias a sus poderes pero, ¿quién de los allí presentes confiaba en él? Ni siquiera el Inquisidor, quien había limitado su empleo al visto bueno de Xerxes. El Emperador protege, pensó, y tortura de mil sublimes formas.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 16:32.

—Varius y yo intercambiamos disparos con el asesino. Fue muy rápido, no sé si ese cabrón se quedó con nuestras caras, aunque en mi caso soy el mozo de equipajes, creo que puedo pasar desapercibido sin problemas —argumentó mientras enseñaba su fusil para indicar el arma con la que había abierto fuego.

—Era un profesional, bastante decente a decir verdad. No debe haber muchos de ese nivel y de su gremio por aquí, deberíamos buscarle e intercambiar unas palabras con él para que nos cuente quién lo mandó —gruñía más que hablaba, pues le habían dejado en evidencia y eso era algo que llevaba francamente mal. Tenía bastantes ganas de rastrear y encontrar al asesino de las patas mecánicas para desguazarlo como a un transporte viejo.

Cubrió su arma bajo la ropa que llevaba y se apoyó en la pared, cercano a la posición que la falsa concubina, Nataly, ocupaba. Allí mantuvo su expresión de perro enfadado, con el mentón echado hacia delante y las mandíbulas apretadas.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 16:32.

Verius se pasaba los dedos por el pelo, todavía procesando lo ocurrido como si le hubiese ocurrido en un sueño.

Habían combatido contra herejes, monstruos y hasta un demonio pero aquella mezcla de humano y maquinaria les había pasado por encima como quien pasea. La vergüenza que sentía como parte de un séquito inquisitorial le hacía arder la cara y revolver las tripas.

- Un talento así, debe ser una celebridad en según qué ambientes -trató de organizar sus ideas-; seguramente en el local de ayer sepan algo, todos parecían gente del oficio por lo que no me sorprendería que supieran de quién se trata- concluyó, respaldando la idea de Kritus.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 16:32.

El viaje de vuelta a la mansión de los Strophes transcurre completamente en silencio pues la frustración está en todos los presentes. La idea de que esos infelices se hayan adelantado con tanta facilidad y hayan conseguido lo que nosotros buscamos es algo que en mi profesión no se perdona. 

Al llegar donde los Strophes, nuestros compañeros preguntan lo sucedido y algunos preguntan mientras yo mantengo silencio, hasta que considero que puedo hablar:

 - "Los tipos que acompañaban al asesino eran asesinos a sueldo sin afiliaciones. Armas de alquiler que se preocupan de cumplir su trabajo y cobrar sin preguntar. El asesino, en cambio, era algo que me deja sin palabras. Era humano, no un xenos, pero las aumentaciones que tiene en piernas supera a las que se producen en Marte y eso no debería ser posible. Dudo que sean del Mechanicus y son demasiado avanzados."

Aquello me hace dudar mucho pues significaría que el Coro del Júbilo cuenta con un tipo de tecnología xeno de aumentación corporal, lo que es sumamente preocupante. Ahora hay dos cosas que no dudo: Ellos son completamente herejes y son de tener en mucha cuenta.

Esto se ha vuelto interesante de un momento a otro.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 16:32.

Boquiabierta en un primer momento, Renata volvió a su expresión habitual, aunque mucho más callada, concentrada. Entrecerró los ojos y evaluó cuanto sus compañeros estaban diciendo. Finalmente sacudió la cabeza, negando.

-Una maniobra de recuperación. Eso ha sido. No es que les haya costado más de mil Tronos, es que les da igual lo que costara. No se han planteado pagar al pobre tipo que la tenía esa cantidad, porque estaban dispuestos a hacer lo que fuera para hacerse con la placa... de nuevo. ¿Volar un edificio entero con una bomba de fusión? Estamos hablando de algo más que un asesino profesional. Están organizados y armados, nuestro objetivo no es una secta, o una organización incipiente con medios aceptables. Nuestro enemigo es un gigante, queridos. Uno con los cañones bien puestos, que no teme a nada y no se detiene ante nada.

Su rostro se había ido ensombreciendo a medida que hablaba, dejando la socarronería que solía acompañar su tono para adquirir un tinte duro, casi solemne. Que rompió añadiendo entre dientes y sin casi ser percibido un sibilante "Joder..."

Después si recuperó su mirada incisiva y su aire socarrón.

-Hay que infiltrarse en esa Organización, sí o sí. Por la fuerza va a ser imposible, hay que usar la astucia, el engaño. Lo de usar un cebo me parece de lo más acertado... lo siento, calvito, deberías ser tú...  -Indicó con una sonrisa torcida dirigida a Arlan- y parecer todos los demás unos absolutos negados inocentes fácil presa de mentes ágiles. Con bolsillos llenos dispuestos a financiarles.

Cuando terminó ladeó la cabeza, se giró y se apoyó completamente en Kurt, como si éste fuera la pared, recostando en él su espalda.

TRANSCURREN ALGUNAS HORAS.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 19:30.

El equipo inquisitorial discutió lo que se había descubierta hasta el momento en el transcurso de la investigación.

Llegó un momento en que era necesario prepararse para salir hacia el siguiente punto relevante para la investigación: La Corte de Alabastro.

La presencia de Annius sería imprescindible, pues era el invitado principal. Aunque podía ser peligroso, Julia Strophes se había ofrecido voluntaria también para asistir.

Ahora tan sólo faltaba que Annius confirmase a los miembros de su séquito que le acompañarían.

TRANSCURREN ALGUNAS HORAS.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

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HORA LOCAL: 19:30.

Llevo un buen rato escuchando las explicaciones de unos y otros, y rumiando en silencio cómo desarrollar la misión. La situación con el mercenario, y esos asesinos a sueldo, ha hecho que cambie la perspectiva en un instante.

- En vista de estos acontecimientos, creo que debemos modificar nuestras opciones. - Comento finalmente cuando estamos todos reunidos. - Vamos a ir todos a la Corte de Alabastro. Todos menos Kritus y Varius. - Especifico finalmente.

- Kritus desentonaría mucho, y creo que es mejor dejar a alguien vigilando la mansión Strophes... Por si acaso. Y me niego a que ninguno de nosotros esté solo en ningún momento. Varius... tus convicciones pueden hacer que te sobresaltes con facilidad ante las palabras de esos necios del Coro... Además los Strophes te valoran y confían en tu juicio. Tú y Kritus os quedaréis aquí y les protegeréis. Estad atentos a cualquier novedad y noticia que pueda llegar desde la Corte de Alabastro. -

Inspiro hondo, y miro al resto.

- Los demás, vamos todos. Estad atentos, no podemos descubrir nuestra tapadera pero hay que hacer lo que sea por averiguar más de esos detectores xenos que tienen... o por averiguar a dónde llevan a los psíquicos. Tal y como dijimos, nadie se queda solo. Vamos juntos, pero al llegar nos dividiremos en grupos para tratar de ir sonsacando información por separado. - Voy señalando a cada grupo por separado. - Günther y Arao irán juntos. - Digo indicando el primer grupo.

- Titus y Verius sois el segundo grupo. - Añado. Parece que han trabajado bien juntos en el encuentro con el mercenario. - Vassily, Nataly y yo seremos el tercer grupo. - Digo finalmente. - El que primero encuentre algún hilo del que tirar, que avise al resto. -

TRANSCURREN ALGUNAS HORAS.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 19:30.

Con el paso de las horas el serio semblante de Kritus se había relajado, posiblemente la proximidad de Nataly hubiera influido, pues sus brazos descansaban sobre las caderas de ella envolviéndola en un abrazo próximo. No había hablado mucho más aunque había asentido a las preocupaciones mostradas por su ama. Aquel asesino no era un matarife cualquiera, era alguien peligroso: bien entrenado, bien equipado y muy bien respaldado. Como veterano militar sabía que conocer al enemigo era el primer paso para el éxito.

Cuando Annius comenzó a distribuir los grupos, no pudo evitar sentirse ofendido al ser desplazado de la acción central. Entendía los motivos sin duda aunque la posibilidad de que él llamara la atención dibujaba en su cabeza ciertas connotaciones clasistas que en un día de ánimo bajo como aquel, le disgustaban.

—De niñera, entendido... —murmuró entre dientes aunque lo suficientemente alto como para ser escuchado por todos los presentes, pues tal era su intención.

Apoyó entonces su cabeza cerca del hombro derecho de Nataly y la susurró al oído—No te metas demasiado en tu papel. —Sus labios estaban tan cerca que rozaron la oreja de la mujer por descuido, o quizás no, mientras con firmeza atrajo el cuerpo de ella hacia él, tirando de las caderas. Lo hizo por un instante nada más.

Tras eso miró a Varius que iba a ser su compañero de fatigas en aquella tarea.

—Hay que hablar de la forma que vamos a seguir para organizarnos. Tú caes mejor, quizás deberías ocupar una posición interna y yo vigilar más el perímetro. ¿Cómo lo ves?

TRANSCURREN ALGUNAS HORAS.

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HORA LOCAL: 19:30.

Después de ser elegido por Intius para ir con él a la Corte de Alabastro (o como sea que le hayan puesto estos nobles pomposos a sus fiestas de degeneración) me preparé para ir a ella. En esta ocasión, claramente, no puedo llevar mi rifle pues no es un arma para proteger a mi empleador, por lo que decido dejarlo en la mansión de los Strophes.

Me presento ante mis compañeros, ya listo para partir, cuando recuerdo las cosas que encontramos en el cuerpo de Orday:

 - "Verius, deberíamos revisar lo que encontramos en el cuerpo. Me refiero, a saber realmente qué tenemos pues eventualmente pueden servirnos de algo."

La pistola bólter siempre es algo útil para volar cabezas de forma elegante, aunque no me interesa ahora mismo pues no me he entrenado en su uso lo suficiente como para utilizarlas con soltura. Las llaves, en cambio, podrían darnos alguna pista a seguir pues no me gusta la idea de que mezclarnos con esos nobles sea la única forma que tengamos de rastrear al asesino y su tecnología.

TRANSCURREN ALGUNAS HORAS.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 19:30.

Valerius contempló el rostro de Kurt. El mercenario era eficiente, mucho. Lo había visto en acción. Pero era imprevisible también, y solo le debía lealtad a Renata. O eso sospechaba el sacerdote. Pero aun así, Kurt seguía siendo un miembro valioso de la célula inquisitorial.

Asintió. - Me parece bien. Aunque querría que estuviésemos comunicados en todo momento... Si el perímetro sufre un ataque serás el primero en enterarte, y estaría bien que pudieras avisarme para que tome medidas para proteger a Strophes... Y para ir en tu apoyo. - Comentó.

- Y al revés, si algún asesino se cuela hasta el fondo de la madriguera, prefiero saber que puedo avisarte y que en cuanto puedas estarás cerca para apoyarme. - Realmente no creía que pudiera darse ese segundo caso... Si había problemas, se notaría primero en el exterior, y salvo que fuese un ataque a gran escala, confiaba de sobra en la capacidad de Kurt para repeler a cualquier intruso.

TRANSCURREN ALGUNAS HORAS.

COLMENA SIBELLUS: ESPIRA SUPERIOR: CASA STROPHES:

080.816M41.

HORA LOCAL: 19:30.

Observo con calma los objetos que Titus y Tercio depositan frente al grupo. Las pertenencias del mercenario. Tras escuchar las explicaciones y estudiarlos con atención, lo tengo claro.

- Llevaremos con nosotros la llave magnética del maletín a la Corte de Alabastro. - Confirmo tras sopesarlo. Puede que a estas alturas no sirva de nada, pero quién sabe. - Los papeles de viaje, la llave de datos y la pistola bólter se quedarán aquí a cargo de Kritus y Varius. - Añado. - No quiero arriesgarme a que nos vean con algo que nos relacione con el mercenario. - La llave magnética se puede ocultar con suma facilidad, y si encontramos el maletín nos será muy útil para tratar de hacernos con su contenido.

Miro a Valerius y a Kurt... - Si surgen problemas y tenéis que acudir a la Corte en nuestro apoyo... quiero que antes os encarguéis de que Strophes haga llegar como mínimo la llave de datos al Inquisidor y a Cerberus. - Añado con calma. La pistola bólter y los papeles de viaje son lo de menos, pero esa llave de datos puede ser importante. - Si no hay problemas, guardad todo aquí y esperad nuestro regreso. -

Me cruzo de brazos y miro finalmente a todos para ver si están preparados.

- ¿Todos listos? - Pregunto esperando que nadie ponga pegas. Es hora de partir.