Partida Rol por web

¿Y tienes idea de para qué necesitan los caídos a un sacred gear? Si dijeron que les trajeras a uno o yo desaparecería... igual quieren que ese otro desaparezca... Skadhi suspira profundamente. En fin, supongo que tengo que elegir, y está claro que voy a elegir seguir viva... así que...

Cuando te entreguen tu nuevo grimorio, me darás el tuyo antiguo, ¿verdad? Aquí la cara de Skadhi se ilumina con una sonrisa. Siempre ha querido poder usar magia, como hace su nana, pero nunca ha sido capaz. Ojalá ahora lo sea...

¿Cuánto tardarán tus sombras en encontrar a alguien? ¿Será mejor que volvamos a casa, o esperamos a que regresen? Un bostezo mal escondido por parte de Skadhi muestra el por qué quiere volver a casa.

Leonor miró otra vez a Skadhi con seriedad y le explico;

-Los ángeles caídos poseen un ritual mágico por el cuál absorben la esencia de la persona, ‘’se devoran su alma’’, a tal punto que cuando lo hacen se llevan su sacred gear con ellos. –

Dijo, explicándose. Al parecer el conjuro era tan poderoso como para destruir el alma de un individuo, algo que te asusto, horrorizo, sorprendió y gusto al mismo tiempo, pues la nigromancia más poderosa de todas era la única capaz de hacer algo así. Luego, cuando le pregúntate sobre el grimorio ella sonrió y te respondió;

-¡Si, Skadhi! Te daré el fruto del conocimiento, y puedas manejar a los muertos tal como lo hago yo, podrás esclavizar sus almas y hacer que sus sufrimientos eternos y desesperación aparezca en lo más reciente de sus caras. –Dijo, ampliando su sonrisa mucho más que antes, luego, ante tu pregunta ella se rascó el cabello.

-No lo sé, pero espero que consigan atraer gente lo antes posible, ya que de otra manera puede que tú llegues a estar en peligro. Si eso es así, tendré que convocar aún más sombras y repartirlas por todos los rincones de la ciudad, lo cual podría llegar a ser un problema si llama mucho la atención. –

Dijo, arrugando el rostro.

Devorar el alma de alguien... llevarse su alma... Una sonrisa ilumina la cara de Skadhi al pensar en ello. Ojalá pudiera hacerlo.

Quizá deberíamos volver a casa, digo antes de que por cualquier cosa noten nuestra ausencia, ¿no? ¿O quieres esperar un poco?

La persona que encontremos no creo que vaya a ofrecerse voluntariamente a acompañarnos. Aunque quizá si se lo pedimos las dos... si es un hombre... un débil hombre... podríamos convencerlo, jejeje. Los hombres son tan básicos...

Skadhi mira a Nana, sin querer moverse. Quisiera que siguieran allí, haciendo cosas, aprendiendo cosas. Pero por otra parte, también el sueño la está atacando. Así pues, esperará a ver qué quiere hacer Leonor.

Ojalá la persona que encuentren sea un hombre... es más fácil manipularlos, no puede evitar comentar Skhadi.

Leonor te miró con una sonrisa y dijo;

-No, debemos irnos. Por ahora lo mejor será desaparecer de este lugar, dejando la pared de piedra entre abierta. Así si llegan a encontrar a alguien, las sombras lo traerán hasta este lugar. Incluso ellas mismas saben cómo hacer callar una persona en caso de que lo necesitemos. –Dijo con una sonrisa algo más macabra, y cuando le dijiste tu frase dijo- Mujer u hombre, o lo que sea, si posee un sacred gear nos servirá. No necesitaremos convencerlo, solo necesitamos entregarlo. –

Dijo con una sonrisa, mientras comenzaba a caminar hacia la salida. De la docena de sombras que habían, solo nueve habían desaparecido, las otras tres seguían a Leonor como si fueran guardias, mientras tu tenías a la sombra de siempre siguiendo tu espalda.

Skadhi empieza a dirigirse hacia la salida, mientras prosigue hablando con su Nana.

Y los otros, ¿llegarán en cuanto los llamemos? Espero que sea así, no me gustaría andar teniendo que retener horas, o días a alguien. Imagina que la policía nos acusara de rapto.

Skadhi parece muy animada. La idea de aumentar su poder, de conseguir lo que tanto lleva buscando, la ilusiona. Poco a poco, los pasos de ambas se alejan de la cripta.

¿Es cierto eso que aparecen en las películas de que este tipo de magia exige de sacrificios? Quiero decir, sacrificios personales. No sé, como que si no tienes cuidado lo que invoques se te lleve el alma, o algo así...

Dios, que ganas tengo de que encuentren a alguien, de poder estudiar la magia... pronto, muy pronto, podré vengarme.

Leonor te respondió mientras caminaban;

-No. Los caídos nos han dado una fecha y un momento y así lo hacen, aunque las sombras nos trajeran a alguien en menos de una hora tendríamos que esperar hasta la fecha que han dicho. Las sombras tienen un vínculo mental conmigo, por lo que siempre puedo saber dónde están,  y que están haciendo, incluso si son destruidas puedo saberlo. Dudo que la policía llegue a saber algo de nuestras sombras, de primeras porque son capaces de atravesar paredes y se ocultan fácilmente, lo que sí sería un problema sería que exorcistas, cazadores de brujas o demonios se involucraran en este asunto. –Dijo seriamente, preocupada.

Sabías que una de las primeras cosas que te había enseñado Leonor era el anonimato, pues o si no, cuando menos lo pensaras una lanza de luz te atravesaría el pecho…y probablemente nadie podría sobrevivir a algo así. Luego, cuando le preguntaste sobre el sacrificio ella negó con la cabeza;

-No, simplemente se necesita conocimiento, paciencia y voluntad. Necesitamos el conocimiento para saber lo que tenemos que hacer y como lo tenemos que hacer para hacer conjuros, y la voluntad para tener la fuerza para controlar nuestros conjuros. A veces, si no tienes la voluntad suficiente un espíritu se puede soltar y comenzar a crear sus propios muertos para atacar a las personas o a los nigromantes, pueden ocurrir problemas horribles a causa de eso. –Dijo, contándote.

Estaba pensando que igual hubiera sido mejor decir a las sombras que sólo vigilaran a la persona escogida hasta que se acerque la fecha, no? así no correríamos riesgos...

Hay algo que me tiene muy preocupada, nana dice, tras un momento de silencio, ¿y si, una vez les des lo que quieren, los Caídos dicen "mejor dos que uno" y quieren llevarme con ellos para hacerme eso mismo? ¿Qué haríamos entonces?

La puerta de la casa se adivina al fondo, pero SKadhi se para, mirando intensamente a los ojos a Leonor, esperando su respuesta... y temiendo la respuesta que le de. Con los ojos y la pregunta, casi le está diciendo me tienes aprecio o no, Nana? Harás conmigo lo mismo que te he visto hacer con otros, por mucho menos de lo que conseguirás con los Caídos?

Ante tu primera aseveración Leonor te miró con una amplia sonrisa y te dijo;

-Si fuera así se podría ir, ¿No lo crees? Además, no conocería la tortura de saber que va a morir. –Dijo con una amplia y macabra sonrisa, y luego, para complementar ella te responde- Azael no haría eso, a pesar de ser un ángel oscuro, mantiene su palabra. Los tratos entre nigromantes y ángeles oscuros suelen ocurrir, pues así no afectan a las otras facciones llamando la atención y se libran de esa, y si dado el caso quisieran hacerlo…probablemente no podría detenerlos. Azael ya posee un sacred gear, y todos los otros ángeles que lo acompañaban son igualmente poderosos. –

Dijo, con un poco de preocupación. Se notaba en la cara que Leonor no tenía ninguna intención de mentirte, pero también se veía bastante preocupada con respecto a los ángeles oscuros. Al llegar a la casa Leonor volvió a su actitud de siempre y le dijo;

-Concéntrate en conocer la esencia de su sacred gear…debes escucharlo, debes verlo, debes sentirlo…y también debes descansar. –Dijo, en su tono de siempre, mientras abría la puerta de la casa.

Es cierto, estoy cansada. Creo que hoy han ocurrido demasiadas cosas. Voy a ducharme y a acostarme, nana. Hasta mañana dice Skadhi, despidiéndose con un beso.

Mientras sube la escalera piensa en las palabras de Nana. Tiene razón, quizá si consiguiera saber cuál es su sacred gear podrían tener una oportunidad en caso de que el caído las traicionara...

El agua de la ducha golpea su juvenil cuerpo, relajándola, haciendo que se olvide de todo. Siempre es agradable una ducha antes de dormir, hace que sus músculos se relajen y sus problemas desaparezcan.

Pero esta vez los problemas no van a desaparecer tan fácilmente. Acostada en la cama, su mente vuelve una y otra vez a ver la cara de Azael, a escuchar sus palabras. Leonor ha querido tranquilizarla, pero está claro que si tienen un sacred gear, que se supone son algo poderoso, y son cinco.... y ella aún no sabe cuál es su sacred gear. Mientras ellos seguramente tendrán amplia experiencia.

Tiene que trabajar sobre ello. Mañana hablará con Nana, a ver qué pueden hacer para despertarlo... Pero el cansancio ya la está venciendo. Así que cierra los ojos, dispuesta a dormir. Es curioso las pocas veces que sueña... quizá su sacred vaya de eso? Este último pensamiento la acompaña al cerrar los ojos.

Y la tranquilidad y la calma cubrieron una noche y un día más. Fuiste a la universidad tranquilamente mientras te preguntabas varias veces sobre tu sacred gear. Te gustaba bastante ir hasta la universidad, pues podías hacer en las clases lo que más te gustaba hacer, desmembrar cosas. Podías oler fácilmente la sangre, y no dejabas de asustarle tanto a tus compañeros y compañeras, pues se notaba a leguas que te gustaban bastante esas ‘’clases’. Hoy llegaste a clases bastante tarde y tal como ayer, tus padres no estaban. Te mostraste un poco sorprendida cuando buscaste a Leonor para hablar con ella, pues cuando la encontraste, está maldiciendo;

-¡Malditos, malditos sean! ¡Maldita sea la iglesia, maldita sea! –Decía enfurecida.

Después de verla unos segundos ella te miró, y se calmó de la nada y te miró con su típica sonrisa;

-Hola Skadhi, me alegro que hayas llegado, ¿Cómo te fue en la universidad hoy? –Te dijo con tono muy tranquilo.

El día pasó más bien aburrido, como siempre... sin novedades. Hoy Skadhi ha estado más ausente que de costumbre en la universidad. Se ha enfrascado en sus estudios como siempre, y eso la servía para desconectar de sus pensamientos. Pensamientos oscuros, donde se ve a sí misma en manos de los caídos, sufriendo inconcebibles torturas (inconcebibles para las mentes normales, claro) y finalmente muriendo a sus manos...

Skadhi llega a casa. No parece haber nadie. Sube a su cuarto, deja la mochila y, con la misma ropa que tenía de la universidad se puso a buscar. Sabía que nana tenía que estar en algún lado. Finalmente la encuentra, maldiciendo.

Al llegar ella nana se da la vuelta y habla como si nada pasara.

Hola, nana. La universidad... algo aburrida, pero bien, como siempre. Hemos estado estudiando el interior de la cavidad abdominal y como abrirla sin ocasionar una hemorragia mortal al paciente, algo con lo que me he divertido bastante. Pero aparte de eso, el resto más bien aburrido.

Por qué estabas maldiciendo, nana? me ha parecido escuchar que decías algo de la iglesia... acaso le han hecho algo a las sombras?

leonor puede ver que Skadhi está nerviosa, lo nota claramente. Pero también su mente está trabajando a una velocidad alta. Y es en esos momentos cuando mejores ideas se le ocurren, Leonor lo sabe, y más de una vez lo ha aprovechado para conseguir soluciones ingeniosas.

Leonor te miró con una amplia sonrisa y te dijo;

-Siempre es aburrido hasta que tenemos algo que hacer sangrar. No te preocupes, ya podrás titularte y buscar un trabajo donde puedas desmembrar todo lo que quieras. –Dijo mirándola con una gran sonrisa, para luego poner el rostro extremadamente serio y decir- Hoy he sentido como seis de mis sombras han sido destruidas. Cada una de las sombras me decía que habían encontrado personas tan prometedoras…ya las había hecho matar a alguien para saciar la sangre de ellas…pero entonces aparecieron ellos, malditos sean. Tendré que ir otra vez al cementerio y traer muchas más sombras, muchas más…quizás también otras criaturas. ¿Me acompañaras, Skadhi? –Dijo, mirándote con una sonrisa.

Por supuesto, sabes que siempre estoy dispuesta. Pero se me ocurre... no tiene enemigos la iglesia aquí? Por qué enfrentarnos directamente a ellos? Parecen poderosos, y si simplemente le decimos a algún enemigo que tengan dónde están, y mientras se encargan de pelear con ese enemigo, nosotros aprovechamos para llevarnos a alguna de esas personas prometedoras?

Por cierto, podríamos aprovechar antes de ir al cementerio para ver si podemos averiguar algo más de mi sacred gear... no te parece? dice Skadhi, poniendo cara de niña buena. Una cara que puede parecer inocente, pero que a quien la ha visto una vez no le suele apetecer volver a verla, ya que suele implicar que tiene pensamientos sádicos.

Ante las palabras de Skadhi, Leonor sonrió y te comenzó a contar; -¿Te acuerdas cuando te expliqué de que existían los ángeles, los ángeles caídos y los demonios? Bueno, ellos estuvieron en guerra por largas décadas, pero finalmente hicieron un tratado de paz. Ellos no se atacarían libremente como me lo planteas, y probablemente todos ellos deben conocer la posición de los otros. Además, en el cementerio entrenaremos tu Sacred gear, o al menos averiguaremos de él, ya que hacerlo aquí es muy peligroso. –Dijo con una gran sonrisa, mientras comenzaba a arreglar sus cosas para ir al cementerio.

¡¿Entonces vamos ya?! A Skadhi se le nota ansiosa por conocer más sobre su sacred gear. ¿Qué hará? ¿Le será útil, por ejemplo, para desmembrar a alguien? ¿O quizá paralizar personas? Eso sería tan conveniente... qué hará, qué hará

Corriendo y antes siquiera que leonor tenga tiempo para responderla, Skadhi sube a su cuarto y prepara las pocas cosas que va a necesitar, se cambiar de ropa y se lleva algo de ropa de respuesto. Hace rápidamente los deberes, que no son mucho y no la llevan mucho tiempo, y baja a la cocina para comer algo. Allí se sienta, esperando impaciente a que Leonor le diga que parten ya. Si leonor tarda un poco, pues me sentaré a ver un poco la TV hasta que salgamos.

Oye, Nana, ¿sabes algo de mis padres? Tú les habrás visto, imagino que siguen ocupados, pero... ¿te has planteado qué sucederá si algún día, cuando vuelvan, nosotras estamos en el cementerio?

Después de arreglarte y estar lista, viste como Leonor te estaba esperando con una amplia sonrisa. Después cuando le pregúntate de tus padres ella te respondió;

-Pues al parecer andan de viaje por algunos días, hoy me enviaron un mensaje sobre eso. Por eso salimos durante estos días, pues no están, de otra manera tendríamos que decirle como ha sido otras veces, que te he llevado a una casa de tus amigas o que has salido a un tour nocturno, como bien sabes, a ellos no les importa mucho lo que haces. –

Dijo mirándote, para luego señalarte que iniciarían el camino. Mientras caminaban en medio de la noche ella comenzó a hablarte, explicándote;

-Esta noche tardaremos un poco más, pues intentaré enseñarte algunas cosas de la magia para que las sepas de memoria…creo que ya estas preparada para empezar con los primeros pasos. Quizás incluso si lo llevamos junto al entrenamiento de tu sacred gear a la larga puedas ser capaz de ser una nigromante mucho más poderosa que yo…-Dijo, mirándote con expectación.

Pues al parecer andan de viaje por algunos días, hoy me enviaron un mensaje sobre eso.

Skadhi respira aliviada. Al menos, no tendrá que sufrir sus insufribles peleas. Es lo último que desearía con todo lo que está pasando. Ya el tema de los estudios es complicado, si añadimos esto sería casi imposible.

intentaré enseñarte algunas cosas de la magia para que las sepas de memoria…creo que ya estas preparada para empezar con los primeros pasos.

Skadhi empieza a dar saltos de alegría.

¿En serio, en serio? no para de repetir, su angelical cara iluminada con una sonrisa enorme. Por fin, empezaré a aprender la magia que tanto deseaba... empezaré a ganar  conocimientos para vengarme de todo el mundo, especialmente de mi padre. Tanto tiempo esperando, y ahora lo voy a conseguir!

Quizás incluso si lo llevamos junto al entrenamiento de tu sacred gear a la larga puedas ser capaz de ser una nigromante mucho más poderosa que yo…

Lo dudo, nana. Aunque nada más sea por los años que me llevas de experiencia, no creo que nunca llegue a igualarte. Pero, ¡eh! eso no significa que no lo vaya a intentar, ¿eh? así que ándate con ojo. Skadhi explota en una sincera carcajada, como si hubiera dicho algo realmente cómico. Aprender más de mi sacred gear y aprender magia negra, todo en la misma noche. Espero no sea un sueño.

Leonor sonrió ante tu reacción, y asintiendo con la cabeza dijo;

-El hecho de que poseas un sacred gear hace que tu entendimiento y avance sobre las energías necesarias para ejercitar la magia fluyan con mayor facilidad. Por eso mismo empezaremos pronto, para que así puedas desarrollarlas al igual que tu sacred gear. –

Dijo con felicidad, Leonor. Luego al escuchar tus palabras ella hizo un gesto para quitarle importancia al asunto y respondió;

-Quizás alcances mi nivel mucho más rápido que yo de lo que yo pude hacer en años, no solamente por tu sacred gear, si no que has tenido a alguien que te enseñe como debe ser el arte, a mí nunca me enseñaron a hacer la negromancia, por lo que todo lo aprendí por mi propia cuenta. –Te dijo con una sonrisa mientras seguían caminando hasta el cementerio.

Ya veremos... La sonrisa en la cara de Skadhi no se borra. Según se acercan al cementerio, un nudo se forma en la boca del estómago de la chica. Son tantos sentimientos juntos, que no sabe por donde empezar.

Así que nana aprendió por sí misma. Debió de ser duro. Impresionante Skadhi lanza una mirada de asombro a su nana. Hasta ahora sabía que era poderosa, pero ahora está aún más asombrada.

La oscuridad se cierne a su alrededor. Pero Skadhi está acostumbrada, y le gusta. Se siente protegida en la oscuridad. Sus sentidos se agudizan, y siente que es capaz de sentir respirar una mosca.

Skadhi está sumida en sus pensamientos y sigue a Leonor, mientras sigue pensando en lo que va a cambiar su vida.

Luego de un rato caminando entraron por la entrada de siempre, y al llegar a su lugar de entrenamiento, se sentaron en el círculo de siempre. Leonor, una vez allí le dijo que se acercara;

-Iniciaremos con tu entrenamiento…para partir con él, necesito que hagas lo siguiente Skadhi…limpia tu mente, concéntrate, piensa que eres agua, no te dejes llevar por nada más, solo piensa en la oscuridad y el silencio que hay en este lugar. –

Dijo mirándote. El suelo estaba frío y relajante. Estos días, a pesar de ser invierno en New York eran bastante placenteros, por lo que estabas bastante cómoda. Era el momento propicio para un entrenamiento en el cementerio.