Partida Rol por web

Eso digo yo. Dijo el presidente mientras enarcaba una ceja.

¿Qué demonios hace aquí? Bueno, eso de trepar se le da bastante bien, por lo visto.

Me cago en la madre que la pario... ahora lo único que falta que sea parte de la familia... hum... creo que tendré que vigilarla más de cerca si no quiero que mi mandato se vaya al traste...

Beth, ¿tu estabas enterada de esto, cielo? Pregunto tranquilo Dean.

Beth niega con la cabeza - No, sabia que vendria acompañado pero no por quien, al igual que tampoco sabia que bien vestida esa mujer era tan guapa. - Ves como Beth comienza a buscar con su mirada algo y anntes de que os deis cuenta teneis ante vosotros al ministro de economia.

- Señor presidente, buenas noches - Dice de manera que a ti te parece mas falso que nunca - Señorita Elisabeth - Beth sale de su ensimismamiento y lo mira con una ceja enarcada. - Muy arriesgado el venir juntos tras todos los rumores que corren... o es una manera de confirmar que sigue el ejemplo de clinton con su seretaria.

Hola Señor Ministro. Dijo Dean con una sonrisa. Siempre tan oportuno con sus comentarios.

El presidente miró a su hermano y después miro al ministro.

¿Ve a esa señorita con la que está mi hermano, caballero? Debería conocerla y hablar con ella. Es la persona que dará el discurso en la próxima reunión de ministros la semana que viene. ¿Sabe que tema va a tratar? Seguridad Social para todos. ¿Qué le parece?

- Creo que su hermano ya la tiene mas que atendida y si se trata de seguridad social.. sera interesante ver como otro insensato intenta llevar esa idea... - Comenta reincidente al tema. Claramente no puede quitarle los ojos de encima a Beth... y ella sin cortarse un pelo lo ignora por completo.

El se retira para hablar con uno de los gobernadores y la velada va pasando de forma tranquila hasta que en un momento que hablas con tu hermana oyes un bofeton y al girarte vez a vez cruzandole la cara al ministro, el sonrie y ella se va.

Tu hermana hace una señal a seguridad para que lo saquen fuera.

Mierda... ¿qué ha sido eso? Pensó el presidente pero cuando se giró vió lo que había pasado y negó con la cabeza.

Su hermana ya había hecho los honores mientras él, comenzó a caminar hacia donde se dirigió Beth, sonriéndoles a todos mientras pasaba, estrechando manos y esas cosas que hace un presidente, como si nada hubiera pasado.

Cuando llegó al lado de su secretaria, la cogió con suavidad del brazo y la giró para mirarla.

¿Qué ha pasado? ¿Qué te ha hecho?

Tu hermana te mira dejando claro que ella e encarga y deja que te vayas hacia Beth que ya ha salido fuera. Cuando sales la vez en la parte delanntera apoyada en un coche con la mirada ausente. Al cegerla su vivion se centra en ti pero se vuelve a bajar a los pocos segundos.

- Lo siento... te he... te he avergonzado... de verdad que losiento Dean...pero... - Notas como se contiene en abrazarte o estallar a llorar, sus manos y sus braozs se abrietan "abrazandose a si misma" - Puedo soportar que sea un cretino, puedo soportar que especule de nosotros, que intente ligar conmigo como un baboso, que me mire, incluso que me metiera mano.... pero... - Vuelve a suspirar mirando a otro lado - No soporto que hable de Liam como si le importara o lo conociera....

Cuando la veo así, llorando desconsolada, no puedo más que pasarle un brazo por su espalda y atraerla a mí para que llore sobre mi traje. Los chicos del servicio secreto se quedan a una distancia prudencial, pero igualmente, me vigilan. A mi y a ella. También estarán pendientes del ministro.

Tranquila, Beth. Ya ha pasado. Ya no te molestará más...

Nunca más.

No te preocupes más por eso, toma. Dijo el presidente tendiendole un pañuelo. Sécate las lágrimas, cielo. No soporto que llores. Venga.

Se abraza a ti, hacia años que no notabas el calor de su cuerpo contra el tuyo... Muchos años, practicamente desde la universidad... Te estecha con fuerza sollozando e intentando dejar de llorar. Finalmente cuando se separa se limpia con el pañuelo mirando a otro lado - Lo... lo siento... yo tenia que hacer que tu no lo estropearas... y al final lo hice yo... - Dice avergonzafa de su comportamiento.

En ese momento ves como dos gallardos caballeros escoltan al minstro hasta su coche mientras tu herman lo observa desde la puerta, notas por su actitud corporal que ella se ha contenido en pegarle... asi que parece que hoy Micheal venia en busca de problemas.

Tu no te preocupes, cielo, no pasará nada, yo lo arreglaré todo. Dijo el Presidente mientras buscaba a Ryan con la mirada.

Sabía que lo que iba a suceder a partir de ahora no era algo que Beth tenía que saber. ¿Por qué? Simple. Lo que iba a ordenar como Presidente de los Estados Unidos esta noche no era algo que lo llenaría de orgullo.

Ryan lo miró y sabía que necesitaba hablar con él. Pero no ahora. Eso sería en otro momento de la noche.

Tranquila, Beth. Ya se ha ido. ¿Estás mejor?

Ella siente limpiandose las lagrimas y cogiendo y soltando aire de forma profunda - Si... Lo siento Dean... - Vuelve a repetir - Prometo compensar esto - Te dice intentando volver a sonreir pero ves que le cuesta horrores.

Volveis a la fiesta de forma y Eva se lleva a tomar algo a beth mirandote con na tierna sonrisa, como si hubieras echo algo bien... pero no sabes esactamente el que. Ryan aprovecha para cercarse a ti.

Hola amigo. Dijo el Presidente mientras se acercaba el asesor de Seguridad Nacional hasta él. Necesito que me hagas un favor... ¿has visto lo que ha pasado? Sí, el ministro. Lo quiero fuera de juego.

No era la primera vez que el Presidente le pedía algo así a su amigo, ni sería la última vez que se lo pida. Realmente, haría cualquier cosa por los que quería, y cualquier cosa por el pueblo americano. Y esto era algo que quería hacer desde hace ya mucho tiempo.

No quiero saber como, ni cuando, pero quiero que sea para ayer, ¿me has comprendido?

Ryan te mira y termina su copa dejandola en una bandeja de un camarero que pasa a tu lado, ves que mira a Eva de Reojo y a Beth - No hay problema... - Cuando miras a las chicas ves que Eva os mira y arquea una ceja pero no dice nada, simplemente se acerca con Beth a vosotros.

- Dean, no quiero que Eva se entere de estas cosas - Te dice sabiendo que os conoce a los dos demasiado bien. Cuando las chicas llegan Ryan sonrie Agarrando a tu hermana por la cintura y besando su mejilla - Tengo que  irme y ver que Michael no toque las narices fuera de aqui...- Tue hermana os mira a los dos - Tranquilo, me iba a ir ya Y tu tendrias que llevar a Beth - Dice sonriedote.

Gracias, Ryan. Mantenme informado. Dijo el presidente cuando su amigo asintió.

La verdad es que no le costaba decidir quién vivía y quién moría...

Ese era uno de los trabajos del Presidente que menos le gustaba, pero alguien tenía que hacerlo.

Y él era el hombre.

Después, el presidente miró hacia Beth y su hermana y sonrió.

Sí. Yo me encargaré de que llegue sana y salva a su casa.

La pareja se despide y tras un rato mas en el que os despediis cordialmente y puedes observar que tu hermano ya no esta y la señorita Daniells tampoco finalmente os vais.

El coche o espera en la entrada, al entrar Beth permanece en silencio y el chofer espera que le indiques donde ir para tomar esa direccion.

Volvemos a la casa de Elisabeth, Ding. Llévanos tranquilos y por dónde no haya mucha gente. Dijo el presidente mientras subió a la limusina después de Beth.

Cuando estaban los dos dentro, y el coche arrancó hacia su destino, Dean miró a los ojos a la chica y le pasó el brazo por encima del hombro, para acercársela a su pecho mientras que con la otra mano acariciaba su pelo.

Ya ha pasado todo, Beth, ya puedes ser la misma de siempre. Yo me encargaré de que todo siga como antes. Su mano levantó la barbilla de la chica hasta que sus ojos se cruzaron y le sonrió.

¿Estás mejor?

Ella se deja abrazar por ti, notas como esta escuchando tus latidos y acompasando su respiracion con ellos. Una de sus manos se posa en tu abdomen de forma suave mientras se deja acariciar por ti.

Cuando haces que eleve la mirada y la cruza con la tuya se sonroja un poco desviandola unos segundos - Si... mejor... tranquilo... mañana volvere a ser la chica fuerte y sarcastica que tiene tu vida en orden... - Notas como coge aire inchado el pecho y llenando sus pulmones para soltarlo despue de forma lenta, cuando termina te vuelve a mirar y acerca sus rostro al tuyo, cosa que hace que se tee corte la respiracion pues parecia que iba a besar tus labios... pero finalmente lo hace en la mejilla susurrando despues - Mañana volvere a ser yo la que cuide de ti...

Vale. Pero debo decirte que esto de cuidarte no es algo que me disguste, la verdad. Dijo Dean con una sonrisa. Toda tu vida pendiente de mí, ya era hora que yo haga algo por ti, para variar... ¿no crees?

Dean miraba los ojos de Beth, pero tampoco sacaba la vista de la ventanilla... ¿paranoía? No, supervivencia.

Además, supongo que al Ministro no le quedarán muchas ganas de jugar contigo cuando le haga una visita de cortesia a su despacho. Y ya sabes que mis visitas de cortesia son bastantes... "guays".

Beth sonrie ante lo de que no te molesta cuidar de ella y se sonroja levemente, cuadno hablas de ministro aprieta las manos con fuerza en tu traje, pero no dice nada, simplemente asiente. Al fondo de la calle ya se ve la casa de Beth.

Ella sigue apoyada en tu pecho de forma relajada hasta que el chofer para delante del domicilio y ella se incorpora - Nos vemos mañana Dean..

Nos vemos mañana, cielo. Si quieres. Por que si quieres quedarte en tu casa, no pasa nada. Podré apañármelas sólo con la becaria. Dijo Dean mientras sonreia a su amiga.

Dean espero que la chica entre a su casa y soltó el aire que tenía en los pulmones. Después, se dirigió a su chofer.

Quiero dos personas cuidando de ella durante las veinticuatro horas. ¿Entendido?

Al cabo de un rato, el coche salía de la casa de la chica en dirección a la Casa Blanca.

Llegas a la casa blanca y vas a tu despacho antes de irte a dormir, al llegar ves a mila dormida sobre el escritorio con el pelo sobre la cara, parece bastante cansada pues no se percata de que entras, y eso te hace pensar que dentro de poco necesitaras una ayudante para la ayudante.

Parece que ha estado leyendo el proyesco Daniells pues es lo que tiene debajo.