Partida Rol por web

Divitis Corduba I - Una tarde en el Potro

I. ¿Quién roba a un ladrón?

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18/04/2013, 00:11
Diego Mendoza "Sonrisas"

¡¡MALDITO SEA EL ZAGAL!! ¡Corre como el mismo diablo!

Diego era una persona bastante agil a pesar de su altura por lo que nada más subir arriba, logró correr con tanta velocidad o más que el chiquillo que se alejaba inexorablemente. Sin embargo, los tejados no son un buen sitio para que los hombres de bien como Mendoza corriesen o saltasen. Aquello era cosa de bribones por lo que, cuando intento emular al muchachillo saltando, resbaló en una de las tejas sueltas...

- Tiradas (2)
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18/04/2013, 09:26
Duran Gómez "El errante"

Sin dudarlo, viendo el movimiento del chiquillo, y quedando fuera de nuestro alcance. Me interno por las calles para poder llegar a la plaza del Potro.
Grito a mis compañeros, - Se escapa de nuestro alcance, voy detrás de él.
Me golpeo con varias personas, pero no miro a la cara de la gente sino a un horizonte lejano y poder observar al chiquillo.

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18/04/2013, 11:58
Nâzeh Ibn Radi

- ¡MALDITO SEAS MUCHACHO! -aunque debía de alabar la agilidad del chico, además parecía bastante inteligente. Eché a correr tras él, dudaba que pudiera alcanzarle pero tenía que intentarlo.

- Tiradas (1)
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18/04/2013, 12:34
Yurem Saied

-Aleikum Salam -contesto devotamente a Ahmed- yo me llamo Yurem

Sigo con la vista al chico como corre e intento perseguirle con la mirada, a ver hacia donde se dirige finalmente.

-Corre como un demonio este chico, parece que ne vez de una bolsita haya robado un alma cristiana, jajaja -me rio ante el chiste improvisado que me ha salido- ¿qué hace un camarada como tu por esta zona?

Notas de juego

Coño... se me había olvidado la descripción, y di puedo mañana pongo la historia, que también se me ha pasado.... soy un desastre con las fichas...

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18/04/2013, 15:35
Abid ibn al-Amir

Con mis posesiones bien controladas, volví a la plaza del potro detrás de Duran aprovechando el camino que había abierto a empujones entre la gente,  quería comprobar con mis propios ojos como terminaba aquel hurto pero también quería evitar que me pasara como al rúbio al que habían limpiado su bolsa.

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18/04/2013, 16:46
Bermudo "El Justo"

Siguió tras el ladrón por aquella inestable techumbre intentando correr para alcanzarlo, pero se había quedado sin aire al trepar hasta allí y ahora era incapaz de dar un paso más. Vio como se alejaba mientras el joven que lo había acompañado se dirigía en pos del rapaz que, al igual que uno de esos titiriteros que recorrían plazas y mercados, saltaba con una agilidad pasmosa que dejó bien claro al pobre Bermudo que su dinero se esfumaría bien pronto de allí.

Después de unos breves segundos para recuperar la respiración y aún a sabiendas que no lo conseguiría, quiso emular al rapaz e intentó saltar al otro tejado, el fracaso fue estrepitoso.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Hale... ya me escoñé :P

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18/04/2013, 16:59
Simón de Ambroz

Simón perdía interés por aquel ladrón conforme pasaban los segundos pero aquel par de dos que no se terminaban de deicidir sobre si era o no era buena idea lanzarle un proyectil al susodicho divertían sobremanera al ghazi. ¿Cómo uede haber gente así? Por ello echó a correr tras ellos. Además ya le picaba la curiosidad... ¿qué demonios contendría la bolsa robada? ¿Habría acaso alguna recompensa?

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19/04/2013, 19:30
Director

Uno de los tres que había entrado en el mesón de Doña Teresa, ese musulmán de turbante rojo (Has), salió corriendo como una mecha fuera, saliendo de nuevo a la bulliciosa plaza del Potro, a encontrarse con la gente. Y no hacía sino mirar parar arriba (más que hacia delante, ciertamente), pues quería seguir al susodicho ladron que iba saltando por los tejados de los mesones frente a vosotros. Lo mismo hizo Simón y Durán, y no dudaron en correr justo inmediatmente después de la enorme carrera de Has.

Por su parte, entre la bulliciosa plaza también estaban otros dos musulmanes, Yurem y Ahmed, y uno estaba ayudando a levantar al otro, pero no perdían de vista al joven pícaron "pisatejados" y "robabolsas", que aguantaba el equilibrio de una manera magistral. No es que echaran a correr, como los tres anteriores, pero al igual que muchas de las gentes que estaban esa mañana en el Potro y ya se habían percatado de la situación, asombrados fisgaban.

Y hablando de fisgar, que Abid, otro de los fieles de Alláh, avanzaba tras los espacios dejados por los que se atrevían a ir en carrera en medio de la plaza.

Entonces, todos vosotros vísteis cómo el muchacho daba un salto espectacular desde el borde del tejado del Mesón Dos Puertas* hasta el Mesón de la Madera, habiendo saltado limpiamente y de forma asombrosa (de esos saltos en los que el "atleta" patalea en el aire varias veces) para caer con una perfecta voltereta hacia delante, amortiguando el golpe. El chico (que apostaría la misma bolsa que llevaba a que ni él se creía que hubiera podido conseguir tal salto), miró hacia atrás, hacia los tejados que había ido dejando atrás, pero él y vosotros comprobásteis que nadie le seguía por las alturas ¿Nadie? ¿Pues no habían salido varios tipos corriendo tras él (incluido la víctima del robo)?

Sea como fuere, el muchacho esbozó una sonrisa, y siguió corriendo por el tejado del Mesón de la Madera, hasta perderse por el otro lado, pasando definitivamente hacia la calle del Adarve del Río. Seguramente bajó del tejado a esa calle. Ya no podíais verle.

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*: ver toda esta descripción en el mapa del inicio (lo que es seguirle..., podéis seguirle).

Notas de juego

Nuevo grupo de posteo, Ojo:

Abid, Ahmed, Durán, Has, Simón y Yurem: todos juntos.

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19/04/2013, 19:42
Director

Ambos dos, cayendo primero uno y luego otro, descendíais al patio interior del Doña Teresa, justo encima de donde habíase quedado Has y le preguntásteis a los dos tipos. Caíais... caíais... Ni tan siquiera la suerte estaba de vuestras parte... Y unos cuatro metros habí desde el tejado hasta el patio interior del mesón...

Diego se golpeó fuertemente el pecho, causándole un gran dolor (5 puntos de vida, sin secuelas ni para ti ni para armarduras), mientras que el cuerpo de Bermudo cayó aplastando su propio brazo derecho (1 punto de vida, sin secuelas ni para ti ni para armaduras).

Sin duda alguna, uno salió peor parado que el otro, pero el que mejor salió, sin duda, fue el ladronzuelo, habíase escapado. Sin embargo oíais tumulto en la plaza del Potro. ¿Habríanse percatado las gentes de fuera? Entonces, junto a la entrada del Doña Teresa, un tipo que estaba fuera, en la plaza, os hacía señales con la mano, como para que os acercárais corriendo, lo más aprisa posible. Pese a que llevaba una capa oscura, como negra y con capucha (haciendo un calor inmenso), aguantaba el tipo y mientras os llamaba señalaba también a los tejados.

¡Va por encima... Va por encima! ¡Que se va! -y os instaba a ir, os instaba, aunque lo decía como un divertimento, según entendísteis sus gestos. Os invitaba a que fuérais tras él, pues se escapaba-. ¡Se escapa! -le oísteis decir-. Finalmente, antes de que os diérais cuentas, os sonrió levemente y desapareció entre la gente, entre la multitud del Potro.

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Notas:

Habéis caído justo donde Has se quedó esperando, pero Has ya no está. No sabéis dónde ha ido (vosotros estáis, ahora mismo, en el patio interior del Mesón Doña Teresa, levantándoos de la caída).

Ya os he restado yo la vida de vuestras fichas.

- Tiradas (8)

Notas de juego

Tiro yo para agilizar la cosa.

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19/04/2013, 22:52
Bermudo "El Justo"

Notó el vacío bajo sus pies y en la boca del estómago mientras caía. Cerró los ojos intentando no pensar en lo que iba a pasar y cuando el suelo salió a su encuentro apenas pudo ahogar un grito de dolor. El golpe le dejó sin respiración y sintió como si un rayo recorriera su brazo, como si mil cuchillos se clavaran en él. Apretando los dientes se puso en pie con dificultad y vio cómo el joven que le había ayudado en la persecución también había caído.

- ¿Se encuentra bien? ¿Puede levantarse?

MIentras esperaba una respuesta dirigió su atención hacia la puerta, en el exterior parecía haber algún tipo de tumulto y comprobó como un hombre encapuchado le hacía señas. Le miró receloso sin saber muy bien a qué atenerse, aún así se acercó un tanto tambaleante hacia el exterior con el brazo colgando a su costado, pero cuando llegó al exterior el hombre ya se había perdido entre la multitud.

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20/04/2013, 00:55
Ahmed ibn Musa

 

Ahmed observaba asombrado las maniobras del muchacho. Debía conocer muy bien su camino, además de ser un magnífico atleta, para galopar de aquella manera entre los tejados, arriesgándose a partirse el cuello en una mala caída.

-En verdad que debe estar muy desesperado para jugarse la vida así por unas cuantas monedas... –dijo, aprobando el comentario de Yurem.

Luego, viendo regresar al gigante que le había atropellado antes y a los hombres que le seguían, tomó de la manga a su interlocutor y eludió su pregunta interpelándole en baja voz:

-Dudo que le alcancen, pero si así sucede, ese joven lo pasará mal. Quizá deberíamos ayudarle... un poco más –remató con una significativa mirada, pues Yurem ya había tratado de despistar a los perseguidores.

Irguiéndose procuró llamar la atención del coloso ismaelita:

-Allah os guarde, sidi –le abordó-. Ahorrad vuestro aliento, no alcanzaréis ya al bribón que buscábamos. Es tan ágil y rápido como un mono, y ya debe haber bajado del lado del río, ocultándose entre la gente...

Notas de juego

Por cierto, el muchacho en cuestión, ¿es árabe o cristiano? No es que vaya recitando el Corán, pero al menos sus vestidos indicarán algo...

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20/04/2013, 15:07
Diego Mendoza "Sonrisas"

—Herido en el orgullo por ese zagal. mucho trabajo voy a tener en esta ciudad— respondió Diego levantandose malhumorado y palpandose el cuerpo. Cuando vio al hombre que les haia señas, no dudo demasiado en acercrse junto a Bernardo...aunque su aspecto no generaba deasiada confianza

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22/04/2013, 09:30
Nâzeh Ibn Radi

- ¡Qué salto! Más que un mono yo diría que es un demonio... nadie puede saltar así, jamás he visto nada igual -dijo entrecortadamente a causa del esfuerzo y la falta de aire -es verdad, no le alcanzaremos nunca, aunque podríamos intentar saber a dónde ha ido. No sé mucho de esta ciudad pero... ¿de qué barrio puede haber salido ese muchacho? Quizás trabaje para alguien.

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22/04/2013, 09:36
Yurem Saied

Miro las espectaculares acrobácias del chico, y casi aplaudo cunado da su último salto vertiginoso.

-Alá está con el, nadie en su sano juicio haría eso, y seguiría tan contento, o eso, o está tan loco que no vale la pena perseguirlo.

Lentamente, continué un poco haci al adirección que había tomado el pillo, y comenté  a los otros:

-Voy a ver si se escapa finalmente -y de ese modo... conseguí irme de la posada sin pagar la primera copa - si lo llego a saber, invito a una ronda a todos...

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22/04/2013, 10:48
Duran Gómez "El errante"

Continuo por las calles siguiendo al chico, después de ese salto que ha visto todo el mundo, dudo que lo alcancemos, es un atleta sin duda alguna, y se conoce la ciudad como nadie.

Veo a diversas personas pararse hablar, elogiando el majestuoso salto del chico, pero con poco interés en alcanzarle.

Grito a los allí reunidos - ¿quién quiere seguirme e ir detrás del chico? no puede quedar impune un hurto en esta ciudad. Espero unos instantes si se une alguien a mi.

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22/04/2013, 11:27
Director

Diego y Bermudo salieron al exterior del Doña Teresa, y la plaza del Potro seguía concurrida. Eso sí: la gente ya miraba a ciertos tipos (el resto de vosotros), que parecían que habían salido corriendo por la plaza mientras miraban a un zagal saltando de tejado en tejado.

Éstos dos, un poco maltrechos por alguna razón, fueron yendo hasta donde estaba el resto, que miraban sorprendidos un edificio frente a ellos, el Mesón de la Madera (o tal vez más su tejado), mientras se llevaban su mano a la cabeza y se preguntaban algo, como un poco desanimados ¿qué habia sido del chico?

Entonces, Diego y Bermudo oyeron decir al tipo de la barba de antes (Durán): "¿quién quiere seguirme e ir detrás del chico? no puede quedar impune un hurto en esta ciudad.". Y esperó unos instantes antes de, probablemente, intentar seguirle la pista.

Notas de juego

Bien, postead para TODOS ya. Volvéis a estar juntos.

Diego y Bermudo no saben de momento dónde esta el chico (acaban de incorporarse), pero el resto sí (incluyendo por dónde puede estar...). Decidme si intentáis ir tras él o no.

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22/04/2013, 11:39
Nâzeh Ibn Radi

Al darse cuenta de que estaba parloteando innecesariamente, sin esperar respuesta salió corriendo siguiendo la dirección que había seguido el muchacho, esperaba que alguno de aquellos le siguiese, más que nada por si resultaba que al ladronzuelo le esperaban amigos armados, pero tampoco miró atrás para comprobarlo.

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22/04/2013, 12:25
Diego Mendoza "Sonrisas"

Yo mismo iré detras del zagal. No permitiré que esta ciudad este a merced de ladronzuelos de poca calaña. Aunque he de reconocer que la agilidad del mozo supera lo humano— dijo Diego llevandoe la mano al maltrecho cuerpo que le dolía como mil demonios. La caida le había ocasionado unas cuantas heridas al larguirucho alguacil, pero su expresión era decidida.¿Por donde marchó?

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22/04/2013, 17:16
Simón de Ambroz

- P-p-p- por -a-allí!!! - chilló Simón a la vez que iniciaba la carrera.

Aquello estaba llegando al punto de convertirse en algo cómico y, más por curiosidad que por el afán de recuperar el bien robado, Simón no estaba dispuesto a perderse el desenlace de aquel encuentro. Si el landrón contaba con compinches su espada vendría bien... y si no, cuando le atrapasen todos aquellos tipos, lo mejor sería que alguien controlase de que no se excedieran y lo desmembrasen por haberles hecho correr tanto.

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22/04/2013, 17:23
Diego Mendoza "Sonrisas"

Diego se lanzó a la carrera tras el muchachillo pero entre el dolor en el pecho y la multitud que le impedía abrirse paso, le resultaba harto complicado alcanzar si quiera a ver al mozuelo. Ay de él como le atrapase, iba a enterarse de lo que era cumplir la ley y se le iban a quitar las ganas de robar por una temporada.

- Tiradas (1)