Partida Rol por web

Nueva York, sábado 21 de marzo de 2021. Hora: 19:22

El motor del furgón sonaba limpio. Un rugir silencioso acompañaba el ruido continuo de la radio, con mensajes de información acerca de la situación. El Grupo Dauro se encontraba de camino hacia el museo Gran Avenida, donde la noche anterior el equipo Pegaso perdió la conexión con la central principal.

El museo Gran Avenida, de prestigio internacional, había evolucionado a sala de exposiciones temporales. Las obras de arte que allí se presentaban, solo eran expuestas un fin de semana o varios días, dependiendo del autor y del convenio que llegaran con el mismo museo.

Ayer viernes, un grupo criminal organizado se hizo con el museo. Se cree que facilitado el acceso por medio de algún empleado compinchado, quien había proporcionado la información necesaria a nivel de horarios, accesos... tras varios meses de estudio. No obstante, no se sabe si se trata de un secuestro, robo u otro cualquier motivo. La principal preocupación son los civiles inocentes que están dentro del edificio. 

En primer lugar, el Grupo Pegaso se infiltró para obtener información y neutralizar la operación enemiga, pero tras varias horas, el contacto fue imposible. Se desconoce si están inmovilizados o neutralizados. El Grupo Pegaso, que cuenta con grandes agentes entre sus filas, se considera también un pilar primordial de rescate.

- "Aquí Central, Grupo Dauro, ¿me recibe? Confirmo posición: se encuentran a cuatro manzanas, en la calle  67 esquina A, a cinco minutos del museo" - la radio central rompió el silencio del furgón.

Evans, el quinto hombre del grupo Dauro que viajaba en el asiento del copiloto, cogió la radio.

- Central, aquí Evans. Afirmativo, Grupo Dauro se encuentra de camino. Estamos atentos, dejaremos el furgón antes de llegar al perímetro policial para vernos con el Sargento Smith. Cambio.

Un chasquido de radio. Kelce iba al volante, los demás, detrás.

- "Recibido, Grupo Dauro. Buena suerte. Cambio y corto".

Evans volvió a dejar la radio en su lugar y se giró hacia atrás.

- Ahí dentro no se andan con mierdas, chicos, han jodido al grupo Pegaso - a pesar de sus palabras, Evans no transmitía miedo ni preocupación. Tenía el cuerpo hecho a estas situaciones.

Parecía que la mañana empezaba movidita. No solo tenían una intervención, sin muchos datos a los que atenerse, sino que ya se había perdido a un grupo entero dentro del museo.

- Espero que nos den un informe de la situación como Dios manda. - dijo con cierto desprecio. Estaba cansada de ser el comodín, a los que siempre llamaban cuando una operación se iba a la mierda.

Seguro que Pegaso se había tenido que infiltrar sin saber a lo que se enfrentaban y ahora ellos debían ir detrás a limpiar cadáveres.

- Más os vale llevar los calzoncillos limpios chicos, porque nos vamos a cargar en todo.

Al volante del furgón, conduciendo a toda velocidad en dirección al museo, escucho las palabras de Michael. Por lo visto se había perdido la comunicación con el grupo Pegaso en lo que parecía una operación de lo más corriente, y ahora nos tocaba a nosotros "sacar la basura".
No teníamos demasiada información de lo que nos íbamos a encontrar, pero seguro que no iba a ser tarea fácil.

Cita:

Escucho a Carolyn en el asiento de atrás soltar esa frase y solo se me ocurre responder bromeando. -"Yo solo espero que no seas tú la que lleva calzoncillos"

—Yo no apostaría por si acaso Mark —rompió el silencio el estonio respondiendo a la broma de su compañero—. Porque seguro que perderías...

Le guiñó un ojo a Carolyn mientras se escuchaba de fondo el sonido de la radio. Sus compañeros no dejaban de tener su parte de razón, al fin y al cabo se dirigían hacia una misión de la que no sabían una mierda. Pero ese era su trabajo, ir donde se les necesitaba, limpiar la basura que nadie quería recoger y regresar por donde habian llegado.

Sin embargo a Ivan le preocupaba el hecho de que ninguno de los integrantes del grupo Pegaso hubiera dado señales de vida. Era un buen equipo que trabajaba duro, y pensar que los hubieran pillado a todos o, mucho peor, que los hubieran matado se le hacía bastante raro al estonio.

—Miremos el lado bueno —dijo, con su marcado acento y su habitual voz calmada—. A partir de ahora podemos ser considerados el mejor equipo. Quién sabe, igual hasta nos den una medalla de esas tan monas y todo.

Ivan sabía que aquellos instantes en el furgón antes de llegar al destino marcado solo significaban la calma antes de la tempestad, así que mejor tomárselo con humor y tranquilidad.

- Sí, ya imagino el informe de situación: “No sabemos nada de ellos desde hace horas. Entrad y encontradlos, y ni se os ocurra poner en peligro la vida de un rehén.”

Dijo Yuri con poca fe. Estaba acostumbrado a los protocolos de estas misiones y al final rara vez les daban un reporte como dios manda.

- ¿Hay alguna estimación de rehenes al menos?

- Veremos a ver qué nos cuenta el Sargento Smith, pero si han perdido el contacto de repente, poco sabrán -  se lamentaba Evans.

El furgón del grupo Dauro se incorporó a la vía principal que llevaba al museo. Una calzada con varios carriles se abría ante ellos. Al final, el prestigioso edificio, a unos quinientos metros. El perímetro policial se podía intuir entre carpas de intervención, furgones de operaciones especiales, coches y vehículos de radio y prensa.

Los agentes estaban a punto de llegar cuando de repente, en el último cruce antes del destino, cuando un camión se acercaba hacia ellos a toda velocidad, arrasando con todos los vehículos que encontraba a su paso. El escándalo de cláxones y del motor rugiendo hacia ellos, los alertó, dándoles el tiempo justo para reaccionar.

- ¿¡Qué cojones?! – gritó Evans mientras se agarraba a las barras de fijación y seguridad del furgón - ¡Gira, joder!

- Pues me lo estoy planteando, sabiendo que tengo más huevos que vosotros dos. - siguió con la broma.

Tanto era así que Carolyn estaba demasiado relajada, bromeando con sus compañeros, como para darse cuenta de lo que se les venía encima...

El momento distendido que estaban viviendo previo a su entrada en acción no impidió que Ivan se percatara de que algo iba mal fuera del furgón. Quizás fuera la suerte o tal vez sus sentidos alerta, o más bien pudiera ser que justo en ese momento el estonio se encontraba mirando por la pequeña ventanilla pero, independientemente de lo que fuera, estaba viendo el camión directo hacia ellos. Un puto camión que se cargaba todo a su paso y ellos serían los siguientes.

—¡Joder! —exclamó al ver la velocidad que el otro vehículo llevaba—. ¡Cuidado!  ¡Por tu santa madre esquívalo Mark!

Aparte de gritar para avisar a sus compañeros o de sujetarse con fuerza temiendo el duro impacto, Ivan poco más podía hacer.

García sacó un cigarro y se lo puso en la boca cuando vio que llegaban a destino. Sin esperar a parar el coche buscaba el mechero cuando se giro a un lado y observó el camión que avanzaba descontrolado. 

- What the... ¡Cuidado!

Seguíamos camino del museo, iba pensando que responderle a Carolyn, aunque sin quitar ojo de la carretera, cuando algo llamó mi atención y me hizo mirar a un lado. -"Pero qué cojones....!!!" -Exclamo cuando me doy cuenta que un camión se acerca a toda velocidad directamente hacia el furgón.

Para cuando mis compañeros intentan avisarme yo ya estoy intentando una maniobra, casi imposible, para esquivar el impacto. -"AGARRAOS!!!!!" -Les grito al resto del equipo mientras doy un volantazo, estiro del freno de mano y lo vuelvo a soltar para no volcar, clavo freno, el furgón se cruza, las ruedas chirrian mientras derrapamos y, por fin, se detiene justo en el momento en que el camión pasa rozándonos, tan justo que arranca el retrovisor del furgón

-"Estais todos bien??"-Pregunto interesándome por el resto del equipo.

Los agentes se agarraron con fuerza en el interior del furgón ante la inminente colisión con el camión que venía en su dirección. Kelce, con una maniobra ayudada en gran parte por los gritos de alerta de sus compañeros, pudo esquivar el camión décimas de segundos antes de impactar, salvando al equipo y el furgón. El camión terminó por estrellarse con una estructura de hierro donde habían postes de luz. 

- Central, aquí Grupo Dauro - dijo por la radio mientras intentaba recobrar el aliento tras la tensión -. Casi nos embiste un camión a pocos metros del punto de encuentro. Ningún agente herido, repito, ningún agente herido; pero toda la calle es un caos.

En menos de dos minutos, coches de policía y ambulancias llenaban de ruido las calles.

Evans se sacó el cinturón y bajó rápidamente del furgón. Desenfundó su pistola y se dirigió hacia el camión.

- Podemos echar un vistazo o dejárselo a ellos - hizo un gesto con la cabeza, señalando a la policía -. Aún así, no sería conveniente retrasarnos mucho.

Carolyn que fue la última en darse cuenta y solo por los gritos de sus compañeros tuvo tiempo de agarrarse, resopló aliviada.

- Aquí alguien se ha cagado encima y no he sido yo. Me bajo. - bromeó como de costumbre para quitar hierro al asunto, pues ese puto chiflado había estado a punto de convertir el furgón en una lata de conservas con ellos dentro.

Una vez abajo, con los pies en la carretera, todo parecía dar vueltas después del brusco giro. Tenía suerte de haber bajado de los primeros y así ganar unos segundos mientras el suelo se estaba quietecito.

- Te sigo Michael, es demasiada casualidad que pase esto a tan poca distancia del cordón de seguridad y el museo. - apuntó volviendo a un tono más serio y profesional, mientras sacaba la escopeta y quitaba el segundo.

Una vez que me aseguro que todos están bien, quito las llaves del contacto y las guardo en uno de mis bolsillos. Veo a Michael y Carolyn dirigiéndose hacia el camión y les hago una seña para llamar su atención. -"Yo voy por el otro lado"-Les digo desenfundando la Glock

A pesar de encontrarse bien agarrado previniendo el más que seguro encontronazo con el camión, Ivan acabó golpeándose el hombro contra uno de los laterales del furgón. Pero, tras soltar un juramento en su idioma natal, pudo comprobar con cierto alivio que habían conseguido esquivar al loco que había decidido abordarlos como había hecho con otros tantos coches en la calle.

Cargando su equipo y un tanto aturdido aún, salió detrás de sus compañeros. Tenia que darle la razón a Carolyn, aquello no podía ser mera coincidencia.

—Voy contigo Mark —dijo el estonio e, imitando a su compañero, desenfundó también su Glock.

Lo principal era lo primero y según saltó del vehículo, el humo de un cigarro recién encendido  salía por la nariz de Yuri. Después, con la escopeta en las manos aunque apuntando al suelo para no asustar al ciudadano curioso se acercó con sus compañeros al camión, mientras observaba los alrededores por si se cernía sobre ellos alguna otra amenaza.

El parabrisas seguía de una pieza, pero quebrado por todos lados. Salpicaduras de sangre pintaban la parte del conductor, de un rojo oscuro. El motor del camión seguía en marcha, pero un ruido desacompasado daba señales de que su funcionamiento no era correcto.

- Cuidado – advirtió Evans -, sería buena idea que no nos jodieran antes de empezar la misión - el SWAT pulsó el botón de contacto de su casco -. Central, Grupo Dauro procede al reconocimiento del vehículo siniestrado.

El Grupo Dauro se fue acercando lentamente, flanqueando los dos costados del camión, que parecía no dar señales de vida. Evans puso un pie en la rueda delantera para apoyarse y abrir la puerta del conductor.

- Apuntad. De que abra, si algo se mueve, no dudéis en pegarle un tiro; ya ha hecho suficientes méritos como para encima darle una segunda oportunidad de quitarnos del medio. Una, dos y…

- ¡Joder! - gritó con una mezcla de asco y sorpresa mientras se echaba a un lado y el cuerpo caía como un saco de patatas. - Mark ¿puedes echarle un vistazo a esta tía?. - le pidió al médico del equipo para que comprobara si seguía viva o no y si había muerto a causa del impacto o ya estaba muerta y por eso del descontrol del vehículo.
Ninguno de ellos iba a hacer el trabajo de un detective o un forense, pero más valía asegurarse antes de seguir inspeccionando el camión.

- Yo voy a echar un vistazo en la parte trasera. - dijo apartándose dando unos pasos atrás. - No me fío un pelo, voy a comprobar que la compuerta no tenga ningún dispositivo trampa.

No era por prejuzgar, pero rasgos árabes, camión suicida, todo apenas a unas manzanas del museo... Aquí olía a mierda que echaba para atrás.

Tras revisar que todo estuviera en orden abrió la parte de atrás para comprobar la carga.

Cuando Michael abre la puerta del camión veo como el cuerpo de una mujer cae a plomo quedando sujeta por el cinturón de seguridad, de sus heridas brota la sangre. La pobre desgraciada yace sin vida, al menos aparentemente.

Cita:

-"Voy a ello Carolyn, yo diria que está muerta a causa del impacto, pero no está de más descartar otras opciones"

Me acerco al cuerpo de la mujer y la comienzo a examinar