Partida Rol por web

Cuando siente eso en la mano maldice para si y dice entonces:

• Tu…bicho raro de sombras, me vas a dejar o que quieres hacer? Porque me estas mosqueando ya, que lo sepas…

Decía a aquel tipo ya que realmente a ella le daba un poco igual lo que pasase allí, ella no había entrado en esa casa para meterse en esos problemas, le hacía falta un poco de dinero, lo cogería y se iría, no quería tener nada que ver con un hombre lagarto, una tía que parecía hecha de kevlar y un bicho raro hecho de sombras

He dejado de observar a la muchacha cuando de nuevo escucho su voz, y me giro en un acto reflejo, una acción de la que, de salir Enrique de la habitación, seguro que me arrepentiré.

Me han llamado muchas cosas, pero nunca bicho, a pesar de la situación, me resulta gracioso. A pesar de ello, respondo algo molesto, pues jamás acostumbré a dar explicaciones 

- Extraña forma de mostrar gratitud, de no haberte tomado conmigo, serías igual que él. Respondo señalando hacia la habitación donde pasó reptil.

Laura mira a la sombra y dice:

- Eso no lo sabes, ahora si no te importa dejarme ir, porque no me interesa demasiado lo que pase aquí con el wancho ese ni nada por el estilo...

Se agarra la mano ya que de pronto le ardía bastante más, mientras maldice en voz baja

El reptil había entrado en frensí, en una desesperación por sobrevivir y escapar. La lluvia de garrazos habían tomado desprevenida a la atlante. - Maldito aire - pensaba por su extraña dificultad y sus lentos movimientos fuera del agua. Apenas unos golpes había acertado aquella criatura, pero su fuerza no era de impresionar; apenas unos rasguños habían dejado sobre la dama. - Mira lo que hiciste, ahora no podré usar vestido - intento hacer un chiste poco acertado demostrando su poco conocimiento humano y de sus vestimentas.
Entonces aprovecho el momento y se abalanzo sobre la criatura, lo retendría y lo usaría para su beneficio.Ya casi lo tenia entre sus brazos; pero el enemigo era escurridizo, con una destreza envidiable. - Maldito - exclamo en voz baja, quedando acostada en el suelo mientras el reptil se escapa por otra habitación.
Desde allí miro a los otros dos, muchas palabras y poca acción - Ejem! Se quedan ahí discutiendo o al igual que yo quieren saber que pasa aquí. Si es así hay que ir por el bicho - comento mientras se incorporaba. Ya no estaba tan suelta y alegre; sino más bien un poco enojada, que se demostraba mientras sacaba su lanza para evitar cualquier emboscada al entrar en la nueva habitación

Kassandra toma con firmeza su lanza, apuntando a la puerta de la habitación por la que ha huido Salamandra. Los dos desconocidos permanecen sumidos en una especie de manto de sombras, o más bien como si sus cuerpos se hubieran sumergido en ellas. Es como si las sombras se hubieran convertido en un líquido oscuro en el que ellos buceen. Es... extraño. Pero Nicte, conversando tensamente con su "protegida", se concentra en el cercano Enrique para recordarle lo que es el miedo, lo que es la esencia de su anterior amo y señor.

Es imposible saber realmente si ha llegado a afectarle o no, porque al entrar Kassandra en la habitación se ve sorprendida por un estridente ruido de cristales y una fuente de luz que le da en la cara y la hace cubrirse los ojos, molesta. Al acostumbrarse a la luz, puede ver que la ventana de la habitación está destrozada, reventada hacia afuera llevándose por delante cristales y persianas. La atlante se asoma al hueco dejado, tan sólo para vislumbrar una cola de reptil desapareciendo tras el muro exterior del edificio.

Salamandra ha huido...

Chasqueo la lengua algo molesto, pues no esperaba que Enrique me diese esquinazo de nuevo, esto ya se esta convirtiendo en algo mas que un simple inconveniente.

Carece de sentido permanecer al abrigo de las sombras y mas aun mantener oculta a la muchacha.

Pero la otra mujer tenia un claro objetivo, conoce al desconocido y quizas pueda ayudarme a vengar la afrenta que me hizo. Es fuerte, me resultara util si puedo conseguir su ayuda, pero debo ser cuidadoso, parece algo agresiva...pero como, ella parece absorvida por el odio, puedo ofrecerle mi ayuda, pero seguramente desconfie, y si me muestro abiertamente dispuesto a colaborar, mostrandole mi desprecio por el extraño encapuchado, entonces es posible...si, es posible.

- Mujer...

Se le había escapado, una vez más se quedaba con pocas cosas para continuar. Odiaba aquella sensación de fracaso, giro sobre sus pies y en un acto de descarga emocional pateo fuertemente la puerta. - Mierda! - exclamo la guerrera mientras la madera falsa cedía frente a la fuerza.
Era impulsiva y se notaba en su roja cara mientras guardaba su lanza a su espalda; el llamado desde la oscuridad la tomaba por sorpresa echando una mirada desafiante.
- Guerrera - respondió con un tono afilado. No sabía que quería aquella criatura que había tomado a la joven de pelo oscuro, por lo que se mantenía a la distancia.

Laura realmente no sabia donde estaba y no tenia ganas de seguir ahí, dice entonces

- Señor sombra rara me va a dejar marchar o vamos a tener problemas de verdad?

Guerrera? Busco en mi memoria los soldados que contemplé en las trincheras hace años, no, no se parece a ninguno de ellos, lejos de mostrarse intimidada, trata de mostrarse intimidante, finalmente le concedo. - Sea pues, Guerrera.

Cuando termino de hacerle la concesión la muchacha vuelve a hablar de nuevo, esta vez en un tono claramente mas dócil, aunque sus palabras traslucen cierta agresividad. Entorno los ojos antes de hablar, sin comprender porque ella y yo tendremos problemas si no la suelto, mantenerla oculta carece ya de sentido, - no lo creo.

Cuando la sombra esa deja libre a Laura observa a los que están ahí y dice:

- Seguramente volveremos a vernos y ya te pagare el regalito señor sombra...

Tras lo cual empieza a caminar hacia delante, no le interesaba quedarse con esos dos, ya se había montado bastante escándalo en el lugar y ya eso no le interesaba, así que simplemente trataría de irse de allí caminando, pero atenta para usar sus poderes si tenía que hacerlo para marcharse

Al salir Laura de las sombras donde Nicte la mantenía oculta, puede ver el origen del escozor de su mano. En la palma de la misma nace una oscura mancha, que se extiende por toda la mano como pequeños vasos capilares de negrura dentro de su piel. Mientras lo observa, puede ver con horror cómo esos pequeños zarcillos se mueven en ocasiones, y cada vez que lo hacen la mano escuece un poco más.

Al acercarse a la escalera, puede asomarse por la barandilla y ver desde allí la planta baja, un enorme salón diáfano con piscina interior incluida. Junto a esta, una enormes cristaleras se han convertido en un gran agujero en la pared. Allí, en medio de una zona donde el suelo se ha convertido en escombros, yace inerte la mujer que antes la descubriera en el exterior, con el cuerpo lleno de sangre y moratones.

Tras ver el estado de su mano se gira hacia el ser ese hecho de sombra y bastante molesta le coloca la mano delante y dice:

- Que has hecho? ya puedes ir quitándome esto porque si no la vamos a tener bien gorda

estaba molesta y le escocía la mano, quería irse de esa casa que había dejado de interesarle, pero antes tenía que arreglar lo de su mano y no iba a permitir que ese tipo se fuera tan de rositas

Durante unos instantes la guerrera pasa a un segundo plano, mientras la joven alterada me muestra la mano. Entorno los ojos y avanzo decidido, tratando de tomar la muñeca de la muchacha para observar bien esos zarzillos que se enroscan y retuercen, tan similares a las sombras de las que procedo. Mi voz suena entonces algo fuerte y quizás amenazadora - ¿quién eres?¿es tu naturaleza similar a la mía?

Laura mira extrañada y dice:

- Como la tuya? que clase de naturaleza tienes tu? yo solo tengo un par de habilidades especiales y poco mas

El tono de voz de esa criatura no le había gustado nada, pero parecía que tenía una cierta idea de que era lo que le pasaba, pregunta:

- Que sabes de esto si dices que es como tu naturaleza es porque sabes algo

La masa oscura había salido de su protección, una mirada de duda se visualizaba en la atlante que seguía manteniendo la distancia de aquella criatura. Con unos pasos lentos se acerco a la barandilla dando un vistazo; el panorama era desalentador y eso no le daba buena espina a la guerrera. - Mierda! - exclamo por lo bajo, pocas pistas le quedaban sobre la mano; aunque aun podría estar aquella muchacha rubia.
Los otros dos continuaban hablando, mientras Kass perdía su mente en ideas mientras emprendía la bajada por las escaleras; pero la voz de Laura llamo su atención cuando está hablo de aquello que parecía meterse en su cuerpo. Rápidamente se acerco a la joven, quería ver, quería mirar si aquello era igual a lo que había consumido a  Liam.

Observas la negrura de la mano de la mujer. No, no está hecha de sombra, al menos no de la sombra resultante de la ausencia de luz, aquella de la que naciste. Es... Otra cosa.

Miras la mano de la mujer, la negrura que se adueña de ella. E inmediatamente sientes un escalofrío al reconocer en esa negrura lo que cubrió a Liam antes de convertirse en esa cosa, ese monstruo. Pero con él no se detuvo, le cubrió completamente en cuestión de segundos. ¿Por qué con esta mujer no lo hace? ¿Quizás porque habéis interrumpido el proceso?

Escucho la voz de la joven, parece algo extrañada, confusa y ciertamente molesta, lo cual me causa cierto desconcierto, ya que no acostumbro a causar esas sensaciones en quienes me contemplan, pero Enrique se ha ido, y el encapuchado la buscaba a ella, quizás ella sea la clave para encontrarle.

Mientras observo también como reacciona la otra mujer, ella pretendía atacar a Enrique...

Niego con la cabeza antes de pronunciar palabra alguna, - no, no eres como yo...pero, ¿de dónde procede esa sombra?, ¿podría caminar dentro de ella si fuese mas grande?