Partida Rol por web

-Es posible- Contesto a Rhia mientras me extraigo el machete del interior de la bota.

Antes de hacer nada vuelvo a probar el agua, haciendo un ligero cuenco en mis manos, incluso me mojo un poco la melena para refrescarme. -Bebe, sienta bien, te lo aseguro. Ahora veamos si tu traducción ha sido certera..-

Con una sonrisa dibujada en mi rostro me encaro al pedestal. Poco a poco el machete se va acercando a la runa para desencajarla. -Estate atenta...- Susurro ya cuando he encajado el filo del cuchillo para desencajar la runa.

Asiento con la cabeza a sus palabras y le hago una señal con la mano para beber antes de que vaya a sacar nada. Le doy un trago luego me aparto para mantenerme atenta a cualquier cosa que pueda salir, que ya no me fío ni de mi sombra.

- Ten cuidado, por favor.. - Digo a Kaim mientras tengo sujeta la pistola y por alguna extraña razón mi vista se dirige de vez en cuando a las estátuas, pensando que en cuanto saque ese disco, seguramente se comenzarán a mover.

Cuando llego y veo que Kiam esta mirando las estatuas solamente me quedo en silencio y apoyado por el marco de la puerta, luego cuando dice lo dicho solo me mimito a sacar el machete y la pistola, me sorprendo al ver cuando el pedestal se levanta y rápidamente me acerco a el  

Buen trabajo Kiam, empiezo a mirar el pedestal

definitivamente eso es algo que nos ah de servir mas adelante, pero la pregunta es: ¿para que?

Observo las escrituras… esto claramente es un idioma muy antiguo… hace cuantos milenios existirán estas criaturas aquí?

Cuando Kiam dice que bebamos del agua me acerco y me refresco un poco, bebo un buen trago, me lavo la cara y me mojo el pelo

Ok listo… quítala ya guardo el machete y la pistola esperando para atajar la runa si es que sale despedida, ninguno quiere que se rompa

 Rhia,antes de kaim,se disponga a sacar la runa,se acerca al estanque y bebe de su agua cristalina*al igual que Jhon,inmediatamente Kaim,intenta hacer palanca con su machete para sacar la runa(una piedra pulida,fina y lisa,en la que hay inscritto una runa,azulada),una vez la saca...

Observo en silencio como Kaim saca el disco de la piedra y todo continua en calma, o al menos eso parece. Aún así no me fío y me incorporo, tras lo que giro sobre mi misma con la pistola en la mano para comprobar si ha cambiado alguna cosa.

- Habéis notado alguna cosa rara? - Pregunto por si acaso, no vaya a ser que haya sido yo la única que no se ha dado cuenta de nada.

Espero a que los demás se refresquen con ese líquido puro y me atrevería a decir que mágico. Cuando me indican que están listos y han tomado posiciones, anclo el filo del cuchillo sobre el espacio que deja la runa y extraigo el objeto que cae sobre mi mano como una gota de agua.

Parece que no ocurre nada fuera de lo normal.

-Por esta vez parece que no. Respondo a Rhia con el objeto entre mis manos. Esto tiene que ser la llave que abra la puerta. Miro a los demás, supongo que opinaran lo mismo. Vayamos por el portal que encontraste John..-

Echo una mirada a Rhia y con un gesto de cabeza indico que empecemos a movernos de aquí.

La verdad es que resultaba hasta agradable ver cómo no sucedía ninguna cosa y como no aparecía ningún bicho con ganas de desayunar.

- Bien, pues vamos, a ver si salimos de aquí antes de navidad, que me apetece salir a tomar unos tragos en nochevieja.. - Digo medio bromeando mientras comienzo a caminar hacia el pasillo por el que hemos venido, aunque tras un breve silencio recuerdo a todo el ejército de bicharracos varios que habíamos dejado entre los dos portales. - Creéis que todos aquellos seres, el de la cadenita y compañía, seguirán donde los dejamos? Me siento como si me estuvieran esperando a la alida de clase..

Echo unas miradas por los corredores que vamos dejando atrás para asegurarnos de que no hay ningún bichito de esos que dice mi compañera. Ls divertidos comentarios de Rhia los escucho a mi espalda, mientras voy oteando las esquinas de los pasillos.

El fusil entre los brazos me hace ir un poco menos ligero, así que decido guardarlo en mi espalda y desenfudo la precisa pistola. -Al menos ya saben que les hemos matado una vez, si vuelven a resucitar lo volveremos a hacer- Respondo, dando mi opinión sobre el futuro que correran esos demonios si vuelven a despertar.

-¿Sabes que te digo?. Que les estoy echando de menos, me apetece un poco de acción..- Sonrío echando una mirada atrás y continúo andando hasta llegar al portal.

- Bueno, pero el de las cadenitas nos calentó de lo lindo, y el segundo se quedó vivo no? Me refiero a aquellos que estaban entre los dos portales, en los que salimos corriendo de uno a otro, al menos yo.. - Digo a Kaim, ya que al no haber visto si mis compañeros los habían matado, no sé si seguirán o no allí.

Continuo nuestro camino, atenta de que no vaya a aparecer nada que no nos queramos encontrar, como casi todo lo que nos está apareciendo en este lugar. Lo único decente que ha aparecido fue Kaim, y se ganó un tiro por aparecer de repente..

Llegáis hasta el portal,guiados por Jhon y Klins... 

- Bueno de aquí era asomarse al oro lado y salir corriendo al otro portal no? - Pregunto a ver si es que la memoria no me falla.- Antes, los que hemos llegado con mayor facilidad hemos sido Kaim y yo, así que esta vez, os cubriremos nosotros mientras corréis hacia allí y luego pasamos. ¿ Qué os parece la idea ? - Digo tratando de proponer un plan más efectivo que el sálvese quien pueda.

-Me da que están todos muertos Rhia. Yo maté al segundo antes de penetrar en el portal, justo cuando tu corriste y te metiste, creo que John y Klins hicieron lo propio antes de entrar..- Respondo recordando aquel momento, pero es posible que me confunda, este sitio destroza demasiadas neuronas.

De pronto giramos un nuevo recodo y nos topamos con el citado portal.

Escucho la propuesta de Rhia. -De acuerdo, aunque será mejor que nos demos prisa. Tenemos la última puerta ante nosotros chicos..- Digo en un tono entre satisfecho por el trabajo del grupo y de subidón de adrenalina. Al fin hemos descubierto la salida de esta lata de sardinas.

 Finalmente os situais,por orden,en la puerta dimencional.

Inmediatamente,os teleportáis a la sala,dónde habían,otras dos puertas dimensionales,una de ellas,conduciía a la sala,dónde estaba la puerta,la misma puerta que necesita una llave rúnica,para entrar.

Vuestras dudas se resuelven,cuando os teleportáis,la sala,contiene los mismos monstruos,que habian,una vez abandonásteis la sala...

DOs cuchillas giratorias,un escorpiónido,de tamaño grande,y un trio de muertos viviente,sedientos de sangre...

-Vaya. Me asombro al ver a nuestros amiguitos. Parece que tenías razón..- Respondo a Rhia, mientras meto mano a mi pistola. Disparo tres ráfagas que viajan, algunas de ellas, hasta la cabeza del escorpión humano.

Estudio el camino hacia el nuevo portal y parece que esté bastante accesible. -Corred, yo os cubriré. Agarro el hombro de la médica que es la que más tiene que estar en protección y le grito, empujándola hacia el portal. ¡Vamos!-

El cañón de mi pistola ya busca nuevos objetivos.

Muestro una sonrisa que muestra un claro, si es que ya lo sabía cuando veo a toda la tropa que habíamos dejado ahí.. - Si es que estaba claro que iban a seguir aquí.. - Digo levantando mi arma hacia el encadenado que está cercano al portal al que debemos ir. - John, Klins, corred!! Detrás iremos nosotros!! - Digo ciñiéndome al plan comentado antes de pasar por el portal.

Me cago en todo lo que se menea, si en los entrenamientos nunca te dicen que vas a acabar pegandote con bichos raros, solo que vas a defender el planeta y... Me voy...nadie que se quede atras

Replico mientras disparo a la vez que intento que no me de ninguno de los presentes

Al ver nuevamente a las criaturas se perfectamente que solo nos resta correr

Y salgo disparado tras de klins  y al sobrepasarla trato de ponerme frente a ella para que no reciba ningún golpe, cuando estoy llegando al encadenado que tengo enfrente le disparo varias veces con mi fusil y al estar junto a el lo ataco con el machete

Disparáis a bocajarro...

Ryld,no se lo piensa y dispara hacia el escorpiónido.EL monstruo,recibe,un par de balazos en el cuello,que aunque no sin suficientes,para machacarlo,si que queda aturdido,incapaz de hacer nada...

Los demás,disparáis contra el encadenado,el cuál cae al suelo desplomado...rápidamente,Jhon y Klins,se dirigen hacia la puerta dimensional,desapareciendo...

EL encadenado,restante,empieza a girar,como una peonza....pero antes que pase nada,Kaim y Rhia,debdido a un subidón de adrenalina,tienen las fuerzas suficientes para escapar,y dirigirse hacia la puerta dimensional,junto a sus compañeros..

Zum ZUM

Acto seguido aparecéis en la sala,la misma que contiene la puerta,en la cual,habñeis de introducir la llave rúnica,recien adquirida,si queréis abrirla.

Tambioén,hay alguna piedras,semitransparentes y luminosas...

No sabía exactamente cómo lo habíamos hecho. Estaba disparando, pero cuando vi que John y Klins llegaban al portal, así que aún con el arma casi terminado de disparar, eché a correr como un rayo o como si mi vida dependiera de ello, que en realidad, así era.
Volvíamos a estar en la sala que contenía la puerta y esta vez, esperaba que lo que teníamos fuera la llave, porque no creo que volviera a resultar tan fácil correr entre todo lo que habíamos dejado ahí fuera.

- Bueno Kaim, ataca! Creo que te toca hacer los honores.. - digo animándole a probar la llave, aunque sabía que lo iba a hacer incluso sin haberle dicho nada.

Entre todos, conseguimos aturdir a los enemigos que protejían la entrada como si fuera su única misión. Por suerte hemos conseguido atravesar sus fuerzas y salir victoriosos una vez más. No se cuanto tiempo seguirá cayendo el canto de la moneda de nuestro lado.

-Morid. Hijos de puta-

Abosorvidos por ese portal, mis pensamientos son reflejados como una pequeña despedida.

Somos transportados a aquella sala que ya no se si volvería a ver, dando pasos seguros hacia la puerta saco la piedra que desencajé del pedestal. -De acuerdo, ¿estáis preparados?- Advierto para que tomen posiciones mientras observo el orificio donde debería encajar la piedra. Un dos y tres segundos y mis dedos ya incrustan la piedra en el orificio.