Partida Rol por web

Dragon Age: Las Cenizas de la Ruina

30. En tu Corazón Arderán

Cargando editor
26/09/2020, 14:03
Alexei

—Y por eso yo también quiero ayudar. Soy alguien ajeno al Círculo y a todas vosotras. Seguro que tendrán en cuenta mi testimonio como es debido. Y teniendo en cuenta que toda la torre fue enviada al Velo, aunque omitamos ciertas cosas, no creo que sea tan difícil darle verosimilitud a nuestra historia. Además, ¿los magos no tenéis magia para obligar a decir la verdad?

Cargando editor
26/09/2020, 14:11
Ayla

—No es Irving quien me preocupa...

Ayla soltó una risa sin ganas cuando Alexei preguntó como si aquello le resultara retorcidamente irónico.

—Sí, la de sangre—dijo. Luego se giró hacia Alexei—. Si quieres ayudarme, quédate aquí y arregla el desastre que le hizo Rhagos en la cara a tu amiga. ¡Lo digo en serio! Me... se-entiré mejor en cuanto vuelva a ver. Y seguramente lo primero que quiera ver es que has vuelto.

Carraspeó con incomodiad ante algo que parecía resultarle emasiado sentimentaloide para su gusto.

—Confiaré en vuestra incombustible postitividad si eso hace que os calleis—refunfuñó cruzándose de brazos—. Pero al menos dejad que no me haga espectativas altas. Se me da mejor afrontar las cosas así.

Ayla: Amistad +5 (Alexei)

Cargando editor
26/09/2020, 14:28
Lynn

Lynn soltó una risita con la torpe sinceridad de su amiga, la agarró de una mano y tiró para que se acercase (a lo que la apóstata protestó dando golpecitos sobre ella con la mano libre) Luego, aprovechando que vosotros dos ya estabais cerca, intentó más o menos abarcaros con los brazos a los tres y estrecharos un poco.

Un tour y una comida pendiente—dijo—. Ya nos arreglaremos con cartas una vez nos hayamos asegurado de que todo esté bien.

Miró a Alexei teatralmente de reojo y acercó el rostro para su surrarle al oído.

Y mientras buscas al voluntario que prepare esa comida. O mejor: ¡a alguien que te enseñe!

Le guiñó un ojo.

Cargando editor
26/09/2020, 14:34
Narrador

Os despedisteis con la promesa de volver a veros en cuanto las cosas en el Círculo quedasen claras y regresaste a Refugio. Aquel pueblo que te había visto crecer y que ahora tan pequeño te parecía. Pero allí estaba lo poco que conservabas de tu vida así que fuiste en busca de Ovalia.

La alquimista se sorprendió muchísimo al verte, aunque no más que aliviarse de que lo hicieras de una pieza. Te contó que habían oído el rugido de un dragón en la lejanía y se habían temido lo peor de modo que le contaste que habías visto uno (de lejos, para no provocarle un infarto) y que al parecer se había cargado el puente al templo. La anciana murmuró algo sobre solicitar un poco de ayuda a Denerim para solucionar aquel problema, no era como si sólo los habitantes de Refugio pudieran volver a unir ambos lados del acantilado ni mucho menos echar a aquel lagarto gigante de allí.

Le preguntaste por Anne y te dijo que la última vez que la había visto había sido cerca del lago de modo que allí te dirigiste no sin caer en el tonto detalle de que precisamente allí la habías encontrado la primera vez. Cruzaste el pueblo hasta allí y no te fué dificil localizarla pues era la única persona a la vista en aquel momento. Se había sentado en uno de los bancos de madera y tenía al peludo gato que le habíais dado sobre las rodillas.

Cargando editor
26/09/2020, 15:08
Anne

Cuando estuviste a varios pasos debió escucharte porque se sobresaltó, dejó de acariciar al gato y alzó la cabeza.

—¿Q... quién va?

Cargando editor
26/09/2020, 15:08
Narrador

Os despedisteis con la promesa de volver a veros en cuanto las cosas en el Círculo quedasen claras, recogisteis a un sorprendido Fritz al que tuvisteis que explicarle más de una ausencia y volvisteis al camino.

Echasteis bastante de menos la carreta de Balaena al menos hasta que llegásteis a Risco Rojo donde parasteis a pasar la noche. No pudiste evitar sentir un vacío interior al recordar a tu hermano pero no tuviste muy claro si era provocado por su ausencia o por lo que Deseo te había revelado de él así que decidiste no pensar mucho en ello.

A la mañana siguiente os hicisteis con unos caballos. Era mucho más barato alquilarlos que comprarlos así que fué lo que hicisteis con la promesa de tenerlos listos para entregar en los muelles del Lago Calenhad que llevaban al Círculo en el plazo máximo de dos días. Alguien vendría a recogerlos.

El viaje fué tranquilo pero a la vez silencioso.

Sentiste un alivio inenarrable cuando aquella silueta alargada apareció en el horizonte, surgiendo del lago como un dedo de piedra que apuntase al cielo. La Torre estaba en su sitio, Astucia la había devuelto al Mundo Material. Inconscientemente espoleaste a tu caballo para aligerar el paso y cuando un puñado de minutos más tarde llegásteis finalmente al embarcadero y dejasteis a los caballos descansar en el travesaño de la posada. Os topasteis con un desconcertado Jhonas que, aparte de reconoceros, os explicó paridifuso que hacía unos días había tenido lugar una explosión enorme de luz y la maldita torre había desaparecido dejando sólo un agujero verdosoe en el aire. ¡La torre entera! Sólo para volver a aparecer en su sitio aquella mañana como si nada raro hubiese sucedido.

Os preguntó que qué demonios estábais haciendo los magos últimamente allá adentro y entre risas nerviosas lo tranquilizaste con algo sobre alguien que se había venido arriba con un ensayo de conjuros de ilusión pero nada dañino. No era la mejor mentira piadosa del mundo pero era lo que el pobre hombre necesitaba oir para que no le diera un infarto.

Más tranquilo, aceptó a llevaros en su barca y para entonces empezabas a pensar que si pinchabas a Ayla en aquel momento no iba a salir sangre. La apóstata estaba cada vez más tensa pese a que no dijera una palabra, se notaba en sus movimientos.

Y cuando finalmente llegasteis al mismo muelle del que habíais salido hace lo que parecía ya un millón de años... visteis que había bastante gente en las puertas. Estaban abiertas de hecho y podías ver bastantes templarios sentados por los alrededores junto a un puñado de magos, los pocos sanadores de la torre se aseguraban de que todo el mundo estuviera bien. Te alivió en cierto modo ver gente magullada pero no charcos de sangre a espuertas ni miembros amputados ni ninguna cosa truculenta... o al menos por el momento, claro. Esperabas que continuara siendo así.

Fritz pareció localizar a algún conocido que acudió a reunirse a la vera de un joven mago que lo saludó alzando ambos brazos.

Cargando editor
26/09/2020, 15:08
Primer Encantador Irving

Y en medio de toda aquella gente estaban el Primer Encantador y el Caballero Comandante en persona hablando de algo. El último permanecía en su sempiterna postura seria de brazos cruzados aunque arqueó mucho las cejas al veros pues era quien se encontraba mirando en vuestra dirección. Irving estaba de espaldas pero al notar aquello se giró y su reacción fué desde luego mucho más llamativa.

¡Gabrielle! ¡Lynn!—exclamó acercándose todo lo rápido que le permitieron las piernas sin tropezar y darse un batacazo—. ¡AYLA! ¡Hacedor, estáis de vuelta!

Cuando llegó a vosotros se agachó ligeramente para rodearos con los brazos. O al menos a ti y a Lynn, Ayla dió un paso atrás como si quisiera formar parte del decorado.

—No teneis idea de lo que nos ha pasado... —suspiró—. ¡Me alegro de que os pillase fuera!

Cargando editor
26/09/2020, 15:08
Caballero Comandante Greagoir

Greagoir le siguió a paso ligero emitiendo un rítmico tintineo metálico en el proceso. En una de aquellas contadas veces en la que lo veías descruzar los brazos y parecerse más a una persona que a una estatua.

¿Dónde está Derek? ¿Y Dreren?—pese a la seriedad de su rostro notabas un ribete de sincera preocupación en su voz—. Y... ¿Y Wynne?

Irving se separó ligeramente, observándoos con la incertidumbre en los ojos.

Cargando editor
26/09/2020, 16:37
Gabrielle

Gabrielle había cambiado su túnica nevarrana el día antes de su llegada al Círculo de Magos, sintiéndose algo culpable por no haber lucido los colores del colegio durante la última parte de su viaje. Puedes abandonar el Círculo, pero el Círculo nunca te abandonará a ti —solía decir Irving.

Era extraño volver al Lago Calenhad. Parecía haber pasado una eternidad desde que partiera del que había sido su hogar durante buena parte de su adolescencia. Se sintió muy cambiada cuando el Caballero Comandante y el Primer Encantador se acercaron a ellas. Ya no se sentía tan intimidada en su presencia, y no le parecían tan severos y solemnes como antaño. Habían dejado de ser representaciones ideales de los puestos que desempeñaban para ser, simplemente, hombres que hacían su trabajo lo mejor que podían y sabían. Solo hombres. Con sus virtudes y defectos, con sus anhelos y sus miedos. Como todos los demás.

Gabrielle cogió aire y lo soltó. Desvió la mirada un momento de la de Gregoir.

—Todos muertos. Ellos y muchos otros —dijo Gabrielle.

Le sorprendió el tono firme de su propia voz. Había pesar en sus palabras, desde luego, especialmente en lo que se refería a la muerte de Wynne y la de su hermano. Pero la Gabrielle que había salido del Círculo se habría desplomado de bruces en el suelo y se habría puesto a llorar delante de todo el mundo. Supo que no se debía a que sus sentimientos se hubieran debilitado, sino a que su carácter se había fortalecido.

—Cassidy también —dijo, volviendo a mirar a Irving—, devorado por un Demonio del Orgullo.

Volvió a suspirar. No debió haber dado aquel detalle, pues no tenía ganas de hablar de las circunstancias de la muerte de todos los que no habían regresado. Especialmente las de su hermano.

—Decir que nuestro viaje ha estado plagado de peligros es quedarse muy corto, pero hemos triunfado. Y no me refiero a devolver a Ayla al Círculo, sino a detener los nefarios planes del Encantador Superior Adrath que es lo que más importa. Impedimos que utilizara el... que usara la legendaria Glandivallis para abrir las puertas de la Ciudad Negra. Ayla sabía que tramaba algo y por eso salió en su busca.

Cargando editor
26/09/2020, 17:28
Caballero Comandante Greagoir

No habrías sacudido más a Irving de haberle dado un cabezaco en la cara. Y de hecho hasta Greagoir lo notó: Cuano el Primer Encantador dió un paso tambaleante hacia atrás por la impresión, se acercó para sujetarlo.

No es tu culpa—murmuró con un gruñido algo dolorido.

Te diste cuenta ahora que se movía que en el costado de la armadura que antes no veías tenía un rajón considerable contorneado por un círculo de sangre reseca, aunque no veías que brotase más.

Irving no le respondió, sólo se pellizcó las sienes entre el índice y el corazón de una mano y negó con la cabeza. Greagoir medio lo ayudó medio lo obligó a sentarse en una roca cercana.

—Si queríais provocarnos un infarto, vais por buen camino. ¡Hacedor! ¿De dónde ha salido Glandivalis, Glandivalis, así de repente?—dijo. Luego miró a Ayla entornando los ojos—. ¿Y qué sabías tú de esto?

Notabas que, pese a que él fuera capaz de mantener el tipo mejor que Irving, lo habías perturbado genuinamente con aquello.

Cargando editor
26/09/2020, 17:28
Ayla

Ayla apretó los dientes en cuanto se vió objetivo del escrutinio del templario. Lynn se dió cuenta y se acercó para rodearla con un brazo.

Lo descubrí por casualidad cuando me lo asignasteis de mentor—masculló—. Se dejó la puerta abierta y descubrí que tenía la mesa llena de pergaminos y una inscripción antigüa que hablaba del... la espada. En ese momento volvió, me escondí y lo vi usar Magia de Sangre para hablar con... un demonio de.... Bueno, no sé de qué era. N-Nunca vi de esos antes. Pero era un demonio. Sobre... lo de la Ciudadela Negra. Y... eso...

Nunca la habías oido tartamudear pero era evidente que estaba conteniendo los nervios hasta tal punto que parecía que fuera a estallar como lo haría un odre al que están forzando a albergar más agua pero simplemente no le cabe más.

Cargando editor
26/09/2020, 17:29
Caballero Comandante Greagoir

—¡POR LA SANGRE DE ANDRASTE!—exclamó el Caballero Comandante que parecía tan estupefacto que no le daba para enfadarse—. ¡¿POR QUÉ NO SE LO DIJISTE A NADIE?!

Cargando editor
26/09/2020, 17:29
Ayla

—¿Acaso me habríais creído?—respondió la apóstata con voz tensa—. ¡S-Si aparezco acusando a un Encantador Superior de semejante burrada sin más pruebas que mi palabra, me llena el cerebro de agujeros antes de que termineis de pensar en deliberar nada!

Hizo ademán de cruzarse de brazos pero más bien casi se abrazó a si misma. Ayla se había asustado al descubrir aquel asunto y había reaccionado quitándole el manuscrito a Adrath... con lo que ya no había tenido vuelta atrás. Entre la manada de lobos y el vacío, la apóstata se había tenido que lanzar a éste a las bravas sin saber qué le esperaba abajo.

Cargando editor
26/09/2020, 17:29
Caballero Comandante Greagoir

—¡Eso no puedes saberlo!—protestó el templario volviendo a cruzarse de brazos.

Cargando editor
26/09/2020, 18:00
Primer Encantador Irving

—Ahora sí...

La voz de Irving sonó como una losa de calma en medio de toda aquella tensión. El Primer Encantador de pronto parecía diez años más viejo.

—Ahora sí te creemos—añadió con amargura—. Adrath se presentó aquí soltando una retahila de sandeces... no vi ninguna espada pero lo que le hizo al Círculo sólo puede explicarse con eso. Probablemente la estaba ocultando. La torre...

Suspiró peinándose lentamente hacia atrás con la mano. Por supuesto él no tenía idea de que vosotros sabíais lo que había sucedido.

—La torre fué enviada al Velo. Entera. Fuimos como una almenara para las criaturas que lo habitan—miró a su homólogo templario—. Sabes tan bien como yo que, como poco, habríamos dudado tremendamente si nos hubiera aparecido con un relato tan disparatado. Pero esto que hemos vivido creo que es prueba más que sólida de que no miente. Si hemos vuelto a la normalidad, seguramente sea obra de ellas que persiguieron a Adrath. Y no es un logro pequeño.

»Desde que desapareció "misteriosamente" su primer aprendiz me olí algo extraño en él, no me convencieron para nada sus explicaciones... pero cuando también lo hizo Ayla, cuando huyó, tuve una corazonada. En parte por eso les envié a ellos en lugar de a un batallón de templarios. Conozco a cada uno de los hijos de este Círculo como si fueran mios; sé que Ayla no iba a confiar en nadie si Lynn no estaba presente. Dreren era de los pocos amigos que tiene. Y me cuesta pensar en magas más fieles a esta pequeña familia que Gabrielle. Aunque jamás me esperé que se toparían con algo como... esto.

Señaló a Ayla con la palma.

Estaba asustada, Greagoir, tomó la primera decisión que se le ocurrió para intentar...

Cargando editor
26/09/2020, 18:00
Caballero Comandante Greagoir

—¡Vas a acabar conmigo, Irving!—rezongó el templario frotándose el rostro con ambas manos—. ¡No podemos basar nuestro juicio sólo en intenciones! ¡Rompió su filacteria y huyó como una apóstata! ¡Ha muerto gente! Podríamos haber ayudado los templarios. Podríamos haber salvado...

Lanzó un hondo suspiro y volvió a cruzar los brazos como si aquella fuera su postura natural. Pero era un gesto cansado, realmente aquello tampoco podían saberlo pero simplemente parecía dolerle la idea de no haber hecho nada.

Cargando editor
26/09/2020, 18:01
Lynn

—¿Está... todo el mundo bien?—preguntó Lynn apretando a Ayla contra si incosncientemente cuando escuchó lo de la almenara.

Cargando editor
26/09/2020, 18:01
Caballero Comandante Greagoir

—Ha habido bastantes heridos. Pero no muertos—respondió el templario medio malhumorado, medio pensativo—. Aparecieron algunos demonios de los "gordos" pero la mayoría eran de jerarquía baja. Docenas de ellos. Pero de jerarquía baja.

Cargando editor
26/09/2020, 18:01
Primer Encantador Irving

Los templarios nos protegieron—dijo Irving—. Hemos salido sorprendentemente bien parados para lo que podría haber sido, hija. No te preocupes.

Señaló al Caballero Comandante anecdóticamente.

—Es más, a él le hirieron por defenderme a mí.

Cargando editor
26/09/2020, 18:01
Caballero Comandante Greagoir

—Y nosotros tuvimos vuestros escudos—respondió Greagoir de mala gana porque lo "delatasen"—. No hables como si os hubiéseis quedado acurrucados todos temblando en una esquina.

Volvió a mirar al Primer Encantador.

—Pero no me cambies de tema. Si  no hago nada al respecto ¿qué clase de mensaje le voy a dar a tus aprendices? ¿Que pueden escapar cuando quieran y decir que lo hacían de buena fé porque todo lo que haremos será darles una palmadita en la espalda y decirles «Está bien, no vuelvas a hacerlo»?—dijo con aquel tono de indecisión frustrada que sólo le habías visto una vez: Cuando se había planteado la Anulación del Círculo antes de que la Guarda llegase a salvaros—. Estoy... de acuerdo en no aplicarle el castigo establecido para un apóstata Angustiado si es lo que piensas. ¿Pero qué esperas que haga? 

Ayla te miró de reojo. Ahora entendías a qué se había referido en Refugio con que no era Irving quien le preocupaba... ¡Greagoir acababa de decir exactamente lo mismo que había dicho ella! La situación era seria pero pudiste apreciar lo gracioso que resultaba aquel detalle.