Partida Rol por web

No se me ha pasado por el alto el hecho que la pieza ha suscitado algo de interés en el viejo lobo de mar, ¿pero que preguntarle o como abordar el tema?, quizás sabe algo que nos podía ayudar, ¿pero ayudar a que y donde?. Creo que de momento lo voy a dejar pasar pero me conviene no olvidarlo.

-Desgraciadamente el dinero es lo más valioso en este mundo, y no tiene pinta de mejorar- concuerdo con el clérigo con voz cansada.

Me dejo mojar con el agua para que acabe el ritual, pero no puedo evitar levantar una ceja con un poco escandalizado cuando el agua me gotea por el pelo y se me cuela por el cuello. Está muy fría, oficialmente estoy despierto. Con un pequeño escalofrío, me siento de nuevo.

-Creo que mañana subiré a desayunar con él- no estoy de acuerdo con la separación de los oficiales de la tropa, es algo que casi siempre es maña idea.

Cuando me pregunta nuestro destino, no me gusta mentir, de hecho no lo he hecho nunca.

-Nos dirigimos a Solace, y como ya habrás podido imaginar, no estamos un una misión solamnica oficial, pero por favor- levanto la mano- no me preguntes más sobre ese tema o me veré obligado a dar rodeos sin decir nada interesante, jajaja.

Me dirijo al capitan.

- saludos capitan! Soy Tarben Uth Crownguard, escudero de las órdenes Solamnicas. Le agradezco que nos permita viajar en "La crisis" y lamento el incidente de ayer con mi compañero.

 Definitivamente, este no era el mejor tiempo para navegar. Trato de mantener el equilibrio, mientras escucho hablar a los demás, deseando que lleguemos a nuestro destino pronto...

 Ufff, no sabrías decir que es lo que le ha suscitado ese interés en el enano, pero es verdad que al ofrecerle uno de los peones de Khas a la Diosa del Mar, diciendo que ella lo entendería, ha encendido una chispa en los ojos del "Cabrón Ilustrado"... pero que se extingue con ese Baahh!!.

- Solace?? Bella ciudad. Pase por ella en mi peregrinación a la costa. Poderosa magia contienen las aguas de su Lago Crystalmir...

En fin, caballero, trataremos de contener la ira del Mar!! Procure mantenerse bien agarrado!!, tras lo que con un apretón afectuoso en el brazo, se gira, y se dirige hacia el altar, calándose la capucha de algas, y dejándote sumido en tus pensamientos...

Teniendo mucho cuidado al moverse por la cubierta, Tarben y Anubis se dirigen a la cubierta superior de popa, esquivando maromas y marineros por igual, subiendo la escala. La mirada de Bornegar es, en inicio, más peligrosa que la picadura de un alacran de Foscaterra, pero parece que las palabras, junto con el modo de decirlas, por parte de Tarben, consigue que torne a una... amigable?? Difícil decirlo.

- Demonios escamosos, Solamnico, no pensaba que tuvieseis huevos para subir aquí en mitad del baile!! Ja!!, dice, maniobrando el timón según una instrucciones no escritas, que consigue que la coca remonte una ola sin recibir el impacto implacable de la marea. Tarben se da cuenta, por la modulación de su voz quizás, de que la omisión de cualquier referencia a la pelea no es casual, parece que obviandola, la está dejando pasar.

-La Zorra cree que puede conmigo, pero se tendrá que contentar con alguna chalupa de pesca. Que se cree, que soy un mojabragas de sus dulce?? Jajaja!!

Si la sensación en la cubierta inferior era potente, aquí aumenta aún más. No sabéis lo que aguantareis de pie, pensáis ambos agarrandoos fuertemente a una maroma de borda...

- Que se te ofrece, muchacho??, Dice el Capitán, sin quitar los ojos del Mar, en un alarde de simpatía.

Con otro apretón de manos le despido y tras guardar mi escudilla de la comida para posteriores usos, hablo con nuestro compañero Asthor cuando he cerrado mi arcón.

-Asthor, como has oído hay tormenta, quédate en el camarote y vigila nuestras pertenencias. Que no entre nadie- Cojo una ropa más de abrigo para que me proteja de la lluvia y salgo.

Me dirijo a la zona de la bodega, quiero confirmar que nuestros caballos están bien inmovilizados y que tienen de todo, no me fío de los marineros.

Kostar, el capataz, te va guiando por la cubierta, presentándote al resto de marineros en faena, aunque metiendo pullas del tipo: - Bueno, el hombre-toro nos va a enseñar sus dotes de marinero: tened cuidado, no nos vaya a quitar el puesto a alguno!!, lo que levanta alguna carcajada entre los marineros, que se afanan en sus quehaceres, envueltos por nubes de espuma de mar que vuelan por toda la coca.

Llegas al cabestrante, y ves que Pitt, sin camiseta, se afana en tratar de moverlo, pero pese a la rojez de su rostro, no logra moverlo.

- Hale, valiente, tu oportunidad de lucirte!!, te dice, el marinero vapuleado por Leviathan, con una sonrisa socarrona.

Zoak se dirigió a cumplir con su palabra. Además el ejercicio físico le vendría bien.

La mar estaba comenzando a ser una molestia. El minotauro, a pesar de llevar agua salada por las venas, pocas veces había trabado en un barco y había cosas que se le escapaban, estaba seguro que sería el blanco de muchas bromas pero se esforzaría al máximo como siempre hacía en todo. 

Después el "amigo" del caballero le pidió ayuda para mover el cabestrante, pero era más pesado de lo que en un principio parecía.

Ayer no te faltó mucho para sacudir al estirado caballero, no le viene mal que de vez en cuando alguien le baje los humos.

Al capataz, pese a no decir nada, parece agradarle tu comentario sobre la pelea, sobre todo porque le hace sentir casi ganador, aunque al momento, al ver que, pese a los efuerzos, no moveis ni un apice el cabestrante, vuelve con mas fuerza con las pullas:

- Que pasa, nenazas, voy a tener que llamar a hombres de verdad!!??, a lo que Pitt, aprieta aun mas sus musculos, y su cara de niño parece estallar.

Asthor respira aliviado cuando le dices que se quede en el camarote, aunque contesta:

- A sus ordenes, Sir Leviathan, aunque, si necesitan ayuda fuera, no le tengo miedo al Mar. He acompañado a mi tío, en su bote, por la Bahia de Branchala...

Sales del Camarote Comun, mientras el Iniciado vuelve al Camarote, y le oyes echar la tranca. Llegas a las escaleras, y bajas a bodegas, donde 3 marineros, controlan, tanto la carga, que tiende a moverse, como a vuestras monturas, que piafan y patalean, con los ojos como platos, a cada vaiven o ruido repentino. El que trata de manejar a las bestias es un cano Ergothiano del Sur, crees, que viste ropas de cuero, y tiene tatuajes pintados con gena por la cara y los brazos. A la vista está que tiene buena mano, pues consigue controlar a todas las monturas, incluso Trueno, el garañon montañes de Zoak, que parece dispuesto a atizar patadas a todo el que se acerque.

No sabes si por casualidades del destino, pero uno de los 3 marineros con la mision de cuidar de bodegas es Tinker, el escualido marinero con el pañuelo blanco de lunares negros que se asustó con tu aparición ayer. Cuando apareces, te mira (como los otros dos), pero no ves en él signos de miedo o sopresa en él. Te saluda, como el resto con un Eyy...!! sin mucho afán, pues está atento asegurar nudos, enganchar cinchas, etc... para que no se suelte la carga, y de momento, con bastante exito, parece.

Una vez que los animales parecen asegurados, el maduro tatuado se acerca a tí, y te dice, en un forzado solámnico: - Buen dia, Caballero!! En que puede ayudarte este espiritu libre??

No sabrías decir la edad que tiene, pero se mantiene en plena forma, y ahora que le ves, va sin ningun tipo de calzado.

Con todo correcto, mi pequeño psicosis de tenerlo todo bajo control disminuye en un gran medida. El compañero de los tatuajes parece diestro y me gustaría aprender sus trucos, sabe bastante de animales y de nudos, una buena combinación.

- Buen día Espíritu libre, estaba preocupado por nuestras monturas- miro a los caballos- pero ahora veo que no tenía fundamento. Me tienes que contar tus trucos para tranquilizar a los caballos, cuando pase la tormenta me gustaría compartir mi tiempo contigo.

Asiento ante el trabajo bien hecho y me separo dando por terminada la conversación ya que he visto algo más interesante. Después me acerco a Tinker para hablar con él.

-Tinker, tienes un momento, no te robaré mucho tiempo- le pido con voz serena, dejando a mi espalda la salida.

Concentrado como está en que no se estropee nada por la tormenta (no sería raro que se lo descontaran de la paga, en caso de que pasase), no se da cuenta de que te acercas a él, así que, da un pequeño respingo cuando le hablas. Enseguida pone una sonrisa nerviosa, y te dice:

- Ehh, claro, por qué no?? Pero, si no te molesta, "Gigante", seguiré con la faena mientras, no vaya a ser que algo se suelte..., dice, moviendose facilmente, pese a vaivén, y asegurando una cinta en una de las argollas las paredes del barco.

Te mira con esos ojillos de cervatillo que ya le viste ayer. - Menuda paliza le diste a Kostar ayer, te dice susurrando, para que no le escuchen los otros dos compañeros en la bodega, no estaba de buen humor por la mañana!!, acaba, sonriendo en una boca en la que algun diente está mellado, y otros en falta.

Dejo que durante un rato más siga haciendo lo suyo mientras va de un lado para otro, guardando silencio, sólo lo observo. Cuando me ha mirado un par de veces empiezo a hablar.

- Tinker, te lo voy a preguntar una sola vez. ¿Tienes algo que contarme? la tormenta llegara en breve y todos tenemos que estar preparados ¿estás preparado Tinker?- lo miro con fijeza- cada nueva decisión en tu vida te lleva por un camino, ¿que camino elegirás? hacia arriba, hacia abajo, ¿a donde ir? tantas opciones, pero a veces hay alguien que te ayuda que te tiende la mano. ¿Cogerás mi mano?

Lo sigo mirando gravemente, esperando que sopese sus próximas palabras.

Midiendo las palabras, sutilmente, le das las pistas para que se abra a tí, y empiece a hablar sobre... lo que fuera que hablaba con Kostar cuando el viento caprichoso te trajo sus palabras, pero la cara que pone, y que puedes leer perfectamente, se adelanta a lo que el escualido pudiera decir. En su frente puedes ver, grabada, la frase: No lo pillo!!

No puedes evitar recordar haber visto besugos, en la lonja de Port'o'Call, con mas inteligencia de la que demuestra la cara del marinero, que, tras rascarse sonoramente la mejilla, te dice: - Te encuentras bien, Sir?? Por qué habría de coger tu mano??, dice, mirando alternativamente su mano y la suya.

Zoak sonrió ante la pulla Kostar, afianzó su posición y empujó con fuerza.

Los músculos se le hincharon, las venas se le distinguían a pesar de la peluda piel. Con un grñido por el esfuerzo intentó mover aquel cabestrante.

Los músculos de ambos fenómenos de la Naturaleza parecen a punto de estallar, mientras el resoplar del gigante humano y el Minotauro amenaza con ocultar hasta el ulular del viento de tormenta. Una gran ola rompe justo en el momento en que la coca vira a estribor, evitando la fuerza del choque, pero enviando una cortina de espuma salada que cubre toda la cubierta, pero apenas supone una molestia, pues la madera está bien tratada, y las vias de evacuacion en perfecto estado. Cuando todos vuelven a abrir los ojos, cada uno está en su sitio: - Parecen bien entrenados en el arte de la Mar, piensas, por una momento, antes de, con pura fuerza bruta, metes presión en un punto del cabestrante, y lo levantas, unos milimetros, sí, pero lo justo para que el retrasado humano pueda meter tres dedos en el hueco, y, en un alarde de potencia hacerlo virar hacia su posición. Pero, de pronto, flaquea en su infantil voluntad, como si no se creyese capaz de tal proeza, y el cabestrante amenaza con volver a caer.

- Nooo!!! Por las entrañas de Sargas que no lo dejaré caer!! Noooo, por Keeli, que me espera que no lo haráaaaaa!!!, así que, con un Aaaaarrrrrgggggggggghhhhhhhh!!!!!!!!, apenas discernible, aplicas todo tu peso en los biceps, y con un sonoro Clooooooooonnnnnnkkkkkkkk!!!!!!! el cabestrante entra en su sitio.

Una sonora ovación recorre la cubierta inferior, llegando a ambas superiores, y todas las conversaciones, ordenes y funciones se paran para girar las cabezas y ver que Zoak, el Minotauro de pocas palabras, junto a Pitt, el retrasado gigante rubio de "La Crisis" han colocado en su sitio un cabestrante que el embate del agua habia sacado de su lugar. Incluso el Capitán Bornegar, al timón, se permite un segundo para evaluar la situación, y aquellos que le están mirando, pueden ver como sus rasgos, siempre ceñudos, se relajan, quiza un segundo, otorgando a su semblante una cara de ¿orgullo?, antes de, apretando los dientes, volver al baile de la coca con la Muerte...

- SIIIIIIII!!!, POR LAS TETAS DE UNA TRITONA!!!!, blasfema Kostar, palmeando a la par al Minotauro y al "Lumbreras", para acto seguido, empezar a enroscar el cabestrante, para mover la maroma que bloqueaba el velamen de popa.

La risa de Verithiel, en el Castillo de popa, atestigüan que, por fin, los hombres a su cargo allí, empiezan a tener exito en su misión, mientras él, lanzandose agarrado a una de las cuerdas, desafía a la inercia de la coca para posarse con éxito sobre un travesaño de una de las cuadras, y deshacer, en menos de 3 segundos, un nudo que amenazaba con partir la misma.

-queria ofrecer la ayuda de toda nuestra comitiva e todo lo que precise. Y sobre todo preguntarle sobre si usted ha ordenado algo a los marineros para que se hiciera hoy sin falta. No tengo ni que saber el porqué ni el motivo, pero uno de los mios pudo sorprender a un par de marineros cuchicheando como si de una conspiracion se tratase. Ya le digo que no necesito saber nada mas alla de este asunto aparte de saber que usted está al corriente. Cualquier miembro de las ordenes solamnicas esta para servir y ayudar a mantener el orden allá por donde puedan presisarlos, y esa es nuestra unica intencion.