Partida Rol por web

Una vez que veo que Zora hace su movimiento, rapidamente le doy el apoyo necesario para acabar el enfrentamiento lo mas rapido posible. Con las patas traseras ajustadas y trabadas, como una especie de soporte de precision, apunto el subfusil cinetico para disparar una rafaga hacia los enemigos localizados.

Desde la posicion elevada que tenia ostentaba una mejor vision y panorama de la situacion, facilmente pude atinar a los blancos que me habia propuesto... solo restaba confirmar si el atque de Zora y el mio habian sido suficientes para acabar con ellos.

Coordinados online, Ahmir y Zora disparan en el mismo instante contra los carroñeros. La saboteadora apuntanto su rifle automático posicionada cuerpo a tierra y el aracnoide con su subfusil cinético desde lo alto de la cupula del edificio.
Totalmente tomados por sorpresa, las ráfagas destrozan a los miembros del Cartel. Sus morfos se sacuden en espasmos cuando los proyectiles horadan sus cuerpos, para después caer como muñecos rotos sobre los escombros, frente a las ruinas del bloque en las que iban a entrar antes de ser abatidos. Junto a ellos, el robot servidor que va cargado con los contenedores se queda quieto como si no supiera qué hacer ahora.

Zora levanta el rifle y se pone en pie. Esos dos no van a volver a ponerse en pie, y el robot es una IA de bajo nivel, que no les va a causar ningún problema. El problema será que si quedan más carroñeros y comparten una red privada ya sabrán lo que ha pasado. Deben encontrarlos rápido y acabar con ellos antes de que puedan atrincherarse en alguna parte del destrozado hábitat o pedir refuerzos.
Ahmir coincide con la valoración de la anarquista, pero activa su rifle de plasma para rematar a los caidos. El haz corta literalmente los cuerpos de los carroñeros abatidos, asegurando la destrucción de sus biomorfos.

Como si fuera un mapamundi sobre el que se encontrara volando, ante Elis se desplega la red que los carroñeros han creado en este cementerio que es Ebb 6, una red que intercomunica los equipos que han traido hasta aquí y que se concentran sobre todo en el edificio ante el cuál se encuentran los cuerpos físicos de Gavin y la técnico, el que se encuentra tras la puerta que acaba de desbloquear.

La mayoría son equipos de diagnóstico y sensores de muy variados tipos, algunos inclusos usados en cirujía cibercerebral, además de maquinaria para excavaciones y arqueología. A Elis le traen vividos recuerdos de los equipos que se usaban en sus expediciones como Rompepuertas y que se utilizaban para recoger datos de los exoplanetas a los que eran enviados.

En ese momento, otra parte de la intranet llama su atención. Hay un sistema de microcámaras y sensores de movimiento repartidos por la mayor partel hábitat.
Es un sistema de seguridad y videovigilancia.
Un sistema que debería haber detectado la entrada de ella y sus compañeros en el hábitat.

En ese preciso momento puede ver a través de la conexión compartida cómo Ahmir y Zora abaten a tiros a los dos carroñeros que seguían.
¿Qué ocurre aquí? ¿Es que el sistema de vigilancia les ha fallado y no se han enterado todavía de su intrusión en el hábitat?

Elis se conecta a la red a través del sistema de cierre de la puerta. La capa camaleón la convierte en una imagen desdibujada que se confunde con la superficie de la pared.

A ti te sucede lo mismo. Confías que el camuflaje te proteja de la detección de cualquiera de los mafiosos del Cartel que puedan aparecer. Ahora Elis está indefensa en el mundo físico y sólo te tiene a tí para que la protejas de cualquier amenaza.
Por eso sujetas con fuerza la pistola agonizadora y apuntas con ella a todas partes, a los extremos de la calle inundada por las arenas de Marte, a las ruinas de los edificios, a los rincones oscuros, pensando en que de cualquier parte puede surgir un carroñero.
Gruesas gotas de sudor corren por tu rostro, pero es debido al nerviosismo porque la temperatura es de menos quince grados centígrados. En momentos como estos echas de menos tu morfo sílfide, que apenas sudaba y cuyo olor corporal era tan agradable...

¡Detrás de tí!

No es la voz de Elis ni la de Adda ni la de ninguno de tus compañeros. Es la voz que sólo tú puedes oir.
Pero le haces caso.
Te giras de manera instintiva, hacia la puerta que tienes a tus espaldas y de la que te habías olvidado completamente.
La puerta se está abriendo. Y eso te deja cara a cara con un morfo Ruster como el tuyo, pero diferente, vestido en ropas de abrigo negras y un subfusil cinético colgado del hombro. Un carroñero del Cartel de la Noche.

El hombre abre los ojos, totalmente sorprendido de verte ante él, echa un paso atrás e inmediatamente trata de coger su subfusil con ambas manos.
Ni siquiera lo piensas mientras disparas la pistola agonizadora contra él a quemarropa.

Una señal de alarma se activa en vuestros entópicos.

A través de la conexión compartida todos podéis compartir la experiencia de Gavin cuando se vuelve en su posición para encontrarse con otro carroñero del Cartel de la Noche que abre la puerta ante la que Elis y él se encuentran.
Frente a frente, el negociador dispara su pistola agonizadora contra el morfo tipo Ruster, que se lleva las manos al pecho con un graznido de dolor mientras cae hacia atrás, dentro del edificio. La puerta de entrada se voltea y queda medio cerrada, impidiendo a un conmocionado Gavin ver que ha sucedido con el hombre.

Gavin apunta con su arma a la puerta esperando cualquier posible ataque, Ellis debia seguir donde estaba si querian saber que ocurria alli, nervioso mando un breve mensaje al canal privado.

[Ahmir, zora, os necesito aqui, YA]

El negociador mira rapidamente alrededor ¿Quien sabe si hay alguien mas ahi fuera?

[¡Aguanta compañero, en un segundo estoy allí!] Zora se incorpora como un resorte, y corre a toda velocidad hacia la puerta, quedándose quieta a un  lado de esta con el arma desenfundada. [Gavin, voy a entrar ¿puedes disparar? Voy a pedirte que me cubras en lo que abro lo puerta y entro. Voy a encontrar a ese hijo de puta para darle un recado de tu parte. Luego puedes cuidar de Elis para que pueda vigilar el perímetro desde la net, no sea que se nos escape por otro lado.]

Gavin, completamente en tensión, no deja de apuntar con su agonizador a la puerta semicerrada hasta el momento en que llega Zora y le indica que se eche atrás mientras ella se coloca a un lado de la puerta y la comienza a abrir suavemente.

La entrada parece dar a un espacio bastante amplio y oscuro. Milímetro a milímetro, la anarquista asoma el extremo de su rifle en busca de un movimiento en el interior, maldiciendo por no disponer de la vista potenciada de su anterior morfo Fantasma.
Pero lo detecta. El carroñero está en uno de los extremos, herido en apariencia y tratando de levantarse agarrándose a unos salientes de la pared. Por las imágenes recibidas vía Gavin cuando ha disparado contra él, Zora sabe que está armado por lo que no duda en apuntar y abrir fuego con una serie de ráfagas contra el miembro del Cártel.
Mejor no arriesgarse.

La saboteadorea vuelve a ponerse a cubierto ante la entrada. Está casi segura que le ha alcanzado, y además no ha habido fuego de respuesta desde dentro lo cual es una buena señal. Con un poco de suerte quizás no haya nadie más allá dentro, pero no le parece buena idea entrar al interior sin estar completamente segura y además sin disponer de visibilidad clara...

Y mientras, Gavin ha cubierto el ataque de Zora, guardándole las espaldas. A su lado continúa Elis, cuya intrusión parece estar llevando más tiempo del necesario. ¡Necesitan la información que les puede proporcionar la técnico para asegurar el lugar!

En ese momento les llega una comunicación de Ahmir, que se ha ocupado de rematar a los dos carroñeros y se ha acercado hasta las ruinas a las que se dirigían, donde ha descubierto que ocultaban un buggy marciano, su medio de transporte.

También ha puesto bajo sus órdenes al robot servidor que llevaba la carga, que ahora lo sigue. El experto en seguridad les informa que se reunirá con ellos en unos segundos.

Elis se mantiene acurrucada junto a la puerta, con la mirada perdida en la nieve tratando de abrirse paso en la pequeña red local. Sus dedos se mueven en pequeños espasmos reflejos de los movimientos que hace en el ciberespacio. Tiene que conseguirlo y ¡tiene que hacerlo ya!

Una vez confirmada la terminacion de los dos agresores, con el buggy marciano bajo mi control, vuelvo hacia donde Gavin y Zora estaban protegiendo el cuerpo de Elis. Tambien me tomo el trabajo de llevar los morfos ya desactivados de los carroñeros por si la hacker queria urgar en sus pilas corticales.

[Voy para alli, Zora avisame si necesitas ayuda urgente]

Eso fue todo lo que dije mientras emmprendia el camino hacia el grupo, mientras tanto cuidaba la retaguardia para evitar que algun otro grupo de carroñeros nos sorprendiera.

Desplazándose con rapidez con sus extremidades arácnidas sobre la arena rojiza, Ahmir se dirige hacia la entrada al edificio donde están el resto del grupo. Sujetos sobre su caparazón lleva los morfos de los dos Carroñeros que Zora y él han acribillado.
El especialista en seguridad piensa que es una lástima que no dispongan aquí, en este hábitat abandonado en mitad de la ZCT, de los medios para extraer información de los egos contenidos en ellas.

Unos metros detrás suyo le sigue el robot servidor de los criminales, ahora bajo en control directo de Ángela, su Musa, y que lleva consigo los dos contenedores que los del Cártel de la Noche pensaban cargar en el buggy. Ambos están cerrados por medio de un código de seguridad, por lo que Ahmir no ha tenido la oportunidad de averiguar de qué se trata...

Cuando Elis se hace con el dominio de la intranet, de pronto pasa a formar parte del sistema de control y vigilancia instalado por los Carroñeros. La sobrecarga de información sensorial debida a las cámaras y sensores instalados en Ebb 6 hace que tenga que protegerse durante unos segundos para poder gestionar tal cantidad de datos, pero consigue hacerlo trabajando conjuntamente con Koryo.

La Musa de la técnico gestiona las imagenes y los datos del sistema de videovigilancia, permitiendo el acceso a él por parte de todos vosotros, con lo que confirmáis que no hay nadie más en el hábitat aparte de los tres miembros del Cártel con los que os habéis encontrado.
Elis también está en condiciones ahora de operar con la red privada, con la que puede, por ejemplo, controlar la apertura y cierre de la entrada norte de Ebb 6 (la única todavía operativa) y otros sistemas, como por ejemplo...

[Luces]

Ante la orden mental de la técnico, el interior del edificio se ilumina con una luz intensa.
Justo lo que necesitaba Zora. La anarquista entra dentro del edificio, un amplio espacio abierto, apuntando con su rifle al último de los carroñeros, abatido junto a una columna, pero inmediatamente coloca el seguro del arma porque ese hombre ya no se va a levantar. El fuego automático del rifle le ha alcanzado repetidas veces en la cabeza, que ha quedado destrozada en su mayor parte.

Zora se arodilla junto al cuerpo y con sus manos de niño enguantadas busca en la base del cráneo, justo donde comienza la espina dorsal, para extraer un pequeño cilindro negro. La pila cortical. La guarda en un bolsillo de su traje de supervivencia marciano y después se pone en pie tras limpiarse los guantes cubiertos de fluidos en el cadaver.

Con la pistola agonizadora todavía desenfundada, Gavin entra en el edificio detrás de Zora. El interior le sorprende.
Es como si hubiesen vaciado por dentro el bloque, todas las habitaciones interiores, dejando sólo las paredes exteriores y el techo, donde todo ha sido reforzado por medio de un material inteligente que se ha ramificado por las paredes hasta el techo, donde un sistema de focos iluminan con la potencia de un pequeño Sol.

Gavin da unos pasos hacia dentro, donde en mitad del edificio hay lo que podría dar la impresión que es una excavación arqueológica. Sólo que los restos que se estaban buscando pertenecen al futuro más que al pasado.
Cerca de esa zona hay otro par de robots servidores, desconectados, ambos equipados con herramientas para excavar. Y más cerca mesas portátiles, contenedores, equipos de diagnóstico y sensores de todo tipo, conectados físicamente con cables a lo que quiera que repose en mitad de la excavación

Una vez todos reunidos dentro del edificio, avanzáis hacia su zona central, hacia la "excavación", donde el suelo forma una hondonada alrededor de la cual están todos los equipos de diagnóstico.

Lo que hay es lo que parece ser una estructura semienterrada, cuya forma completa sólo se podría aventurar. Por lo que sobresale fuera de la tierra podría ser una esfera cuyo diámetro sería de unos diez metros de longitud. Su superficie es extraña a la vista, podría describirse como "escamosa" como la piel de un reptil, de un tono gris oscuro, pero que refleja anormales brillos metálicos según la luz incida sobre ella. Al tacto es como metal, y aunque la temperatura dentro del edificio está por debajo de los diez grados bajo cero, en la superficie es de veinte grados.

Definitivamente no se trata de un artefacto Transhumano, sino de tecnología TITAN. Y no un mero artefacto, sino de algo con lo que prácticamente nadie ha encontrado antes. La única manera que tenéis de describirlo es como un "búnker".
Porque parece que contiene algo en su interior.
El búnker está abierto en cinco puntos. En cada uno de estos lugares, la superficie escamosa da la impresión de haberse abierto como si se tratase de una flor, cada una con un tamaño y una forma distintas. En su centro, se puede acceder a lo que se oculta bajo la piel.

Dos de estas zonas abiertas están huecas, parecen haber sido vaciadas. El interior en ambos es un entramado microcircuital, con diminutos puntos de luz que aparecen y desaparacen en distintas zonas, en un patrón dejado aparentemente al azar.
Otras dos aperturas están conectadas mediante cableado a los equipos de diagnóstico y monitorización colocados sobre las mesas de trabajo, todos conectados y en funcionamiento.
Dentro de la última zona abierta se puede distinguir lo que parece una especie de robot de superficies metálicas de color blanco y de forma vagamente antropomórfica. No se puede distinguir bien porque está como "embebido" en el mismo búnker, pero posee al menos cuatro brazos semejantes a tentáculos.
Alrededor del robot de guerra TITAN hay colocado un sistema de cargas explosivas. Esto ha sido obra de los carroñeros. Seguramente como precaución en el caso de que el robot se activase. Si eso sucediera las cargas estallarían, destruyéndolo.

Tras chequear el resto del perímetro gracias al trabajo de la técnico, Zora se planta con los brazos en jarra delante del experto en seguridad [Pues no vas tú listo ni nada si estás esperando a que saque yo las pilas corticales de éstos fiambres que traes. Yo ya me he limpiado los guantes; éstos dos corren de vuestra cuenta.] Aclarado esto, se da la vuelta y pasa entre los cableados y el equipo de diagnóstico hasta llegar al borde de la excavación, donde empieza a examinar de cuclillas. [Vaaya… Parece que esta chusma ha estado haciendo algo más que jugar con palas y cubos de arena por aquí.] Entonces baja por la pendiente arrastrando el culo, aproximándose al extraño artefacto. [Que cosa más rara… aquí hay dos agujeros donde parece que han sacado algo; puede que fueran esas cosas que iba transportando el robot… ¿y eeesto?] Ante su nuevo descubrimiento Zora da un respingo y, utilizando pies y manos, asciende como un rayo por la pared de la excavación hasta llegar lo suficientemente lejos para no verlo más. [Creo que éste es el tipo de cosa por la que nos han mandado aquí. Voy a contactar con nuestra amiga de inmediato para mandarle las imágenes. Errico, camarada, ya sabes lo que hay que hacer. Aunque la última vez no sirviera para salvar el pellejo.]

La poderosa voz de Malatesta resuena en vuestras mentes.

[Camarada, acabo de enviar a nuestra Proxy una ráfaga de imágenes de la excavación recogidas directamente de tu retina, junto con los últimos datos encriptados.]

La Musa de Zora continúa hablando para decir que una transmisión tan corta como esa no será detectada por los satélites de las hipercorporaciones y llegará hasta River, que ahora se encuentra en órbita alrededor del planteta rojo, en la estación Viriditas.

De pronto os llega una transmisión de respuesta a través de la red del Ojo, desencriptada por Errico. Es el corto mensaje de respuesta de River:

[Intentad valorar el alcance de la tecnología descubierta y transmitid informe en cuanto sea posible.]

Elis respiraba con agitación ante el descubrimiento. Esto sin lugar a dudas era aun más valioso que la tecnología recuperada en sus saltos por las puertas Pandora. En realidad no sabía que era, pero la complejidad del diseño hablaba por si sola.

Zora procura no tocar mucho, no sabemos que es todo esto y algo podría activarse.

Dice con la mente puesta en el nanoenjambre que terminó con sus anteriores morfos.

Pero lo primero es lo primero, voy a cerrar a calicanto el hábitat.

[Koryo, monitoriza el sistema de vigilancia y si detectas cualquier anomalía, avisa. También puedes traer el HEV y meterlo por la entrada Norte, tendremos que cargar todo lo que saquemos de aquí. Y nena, cuando termines tienes que ayudarme a examinar todo esto, ¡es una pasada!, ¿verdad?]

La técnico se acerca a los contenedores recuperados e introduce la secuencia de apertura, mientras se abre, se gira hacia sus compañeros sonriendo y dice:

Es como un regalo sorpresa, ¿qué habrá dentro?