Partida Rol por web

Malditos juegos de palabras en inglés, lo mal que lo paso para traducirlos...

Os dirigís a vuestro puesto a la entrada de Edgecomb dispuestos a averiguar lo que ocurre. Sea lo que sea que causa las desapariciones, pensais descubrirlo colocandoos en puestos estratégicos y manteniendo la vigilia durante toda la noche si es necesario.

Después de un rato allí, veis como los guardias que os acompañaron durante la mayor parte del tiempo en Edgecommb, y que hacían guardia cerca de vosotros, dan por terminado su turno y se marchan. Ya estáis vosotros haciendo su trabajo y además es poco probable que lleguen refugiados a estas horas de la noche, por lo que aprovechan para irse a descansar ahora que pueden.

Pasan las horas, que se hacen muy lentas, no deben quedar más de un par más para que amanezca y aún no habéis notado nada que llame vuestra atención, todo el pueblo parece dormir a vuestro alrededor sin que ningún mal quebrante su sueño...

Os dirigís a vuestro puesto en el cruce de dos de las calles principales de Edgecomb dispuestos a averiguar lo que ocurre. Sea lo que sea que causa las desapariciones, pensais descubrirlo colocandoos en puestos estratégicos y manteniendo la vigilia durante toda la noche si es necesario.

Después de un rato allí, veis pasar a un par de guardias, deben ser parte de la llamada patrulla nocturna. Os saludan al pasar y parece que dan por terminado su turno, porque se despiden entre ellos y se marchan cada uno en una dirección. Ya estáis vosotros haciendo su trabajo, por lo que aprovechan para irse a descansar ahora que pueden por fin dormir durante la noche.

Pasan las horas, que se hacen muy lentas, no deben quedar más de un par más para que amanezca y aún no habéis notado nada que llame vuestra atención, todo el pueblo parece dormir a vuestro alrededor sin que ningún mal quebrante su sueño...

Te diriges a tu puesto junto al pozo en el centro de Edgecomb dispuesto a averiguar lo que ocurre. Sea lo que sea que causa las desapariciones, pensais descubrirlo colocandoos en puestos estratégicos y manteniendo la vigilia durante toda la noche si es necesario.

Después de un rato allí, ves pasar a un par de guardias, deben ser parte de la llamada patrulla nocturna. Te saludan al pasar y parece que dan por terminado su turno, porque se despiden entre ellos y se marchan cada uno en una dirección. Ya estáis vosotros haciendo su trabajo, por lo que aprovechan para irse a descansar ahora que pueden por fin dormir durante la noche.

Pasan las horas, que se hacen muy lentas, no deben quedar más de un par más para que amanezca y aún no has notado nada que llame tu atención, todo el pueblo parece dormir a vuestro alrededor sin que ningún mal quebrante su sueño...

Cuando de pronto escuchas un ligero chapoteo a tu espalda, rápidamente te das la vuelta a tiempo para ver como tres criaturas humanoides pero con rasgos de rata salen por la boca del pozo. Van vestidas con cuero negro y llevan espadas cortas en una mano y ballestas de mano en la otra. Cuando se percatan de tu presencia se disponen a abalanzarse sobre ti...

- Pues mucho me temo que no vamos a encontrar nada ¿no te parece?

¡Ahora, atacad! digo para intentar despistar a los atacantes y además lo hago lo suficientemente fuerte como para

Desde vuestras posiciones os parece escuchar la voz de Erevan gritando: ¡Ahora, atacad!

Las criaturas parecen comprender tu grito y por un momento se quedan paradas mirando a su alrededor esperando ver llegar un ataque, pero en cuanto comprueban que no hay ningún peligro inminente vuelven su atención hacia ti...

-Por fin!

-Shergard mira a Baltena con una increible expresion de alegria y sin fijarse en si esta le sigue se dirige corriendo a toda prisa hacia Erevan con la intencion de hacer picadillo cualquier cosa que se mueva.

Antes de que puedas reaccionar los tres hombres rata te disparan sus ballestas desde detrás de la cobertura que les ofrece el pozo. El segundo de ellos consigue darte en el pecho, pero resistes el impacto. No tienes tanta suerte con el segundo virotazo que se te clava en un costado proveniente de la ballesta de la tercera criatura, que se ha asomado por el otro lado del pozo y te ha disparado casi a bocajarro.

Tus heridas son demasiado dolorosas como para que tu cuerpo las soporte, y te desmayas en el sitio presa de un agudo dolor. Normalmente unas heridas así no te habrían hecho perder la consciencia, pero los virotes debían estar impregnados en algún tipo de veneno que ha empezado a extenderse por tu sangre mientras daña tu organismo...

¡¡Qué demonios pasa!! -digo levantandome de un brinco, al escuchar la voz de Erevan- Iré a dónde Erevan está, permanece aquí vigilando, no sería bueno dejar el puesto. Grita si lo necesitas, y acudiré rápidamente en tu auxilio

- Shergad, avisa si hay problemas, puede ser una falsa voz... Espero unos instantes.

Akmenos accede a regañadientes al plan del dracónido:

- No dudes en llamarme si los habéis localizado o necesitáis ayuda.

Cuando llegáis a la plaza donde se encuentra el pozo de la aldea, veis a Erevan inconsciente en el suelo con dos virotes sobresaliendo de su cuerpo, parece que estén impregnados en otro tipo de sustancia además de su sangre...

Y detrás del pozo, semiescondidas pero aún así visibles, a tres crituras humanoides pero con rasgos de rata vestidas con cuero negro y blandiendo espadas cortas y ballestas de mano. En cuanto os ven llegar se preparan para luchar.

Los tres hombres rata se abalanzan sobre el enemigo más cercano tratando de rodearle y abrumarlo con su superiodidad numérica. Shergard lo pasa mal ante el inesperado ataque, y aunque es capaz de parar con su hacha uno de los golpes, los otros dos consiguen herirle, uno en el brazo y el otro, con mucha más malicia, en la espalda mientras trataba de parar el primero de ellos...

Pero eso no es todo, las heridas parecen arderle y el dolor es casi insoportable, sus piernas no responden como debieran y al fijarse en los filos de las espadas de sus enemigos comprueba lo que se temía, están impregnadas con el mismo líquido oscuro y espeso que tenían los virotes de Erevan.

Este por su parte se convulsiona en el suelo presa del dolor causado por el veneno mientras su cuerpo intenta luchar por sobrevivir...