Partida Rol por web

El corazón de Caín

[09] Hurgando en el pasado

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04/06/2018, 22:30
Samuel Miranda

- ¿Pretenden en serio que me acuerde de un caso concreto de niña robada hace casi 50 años? Creo que no están al tanto de la profundidad del asunto. No fue un bebé o dos... fueron docenas. Eso sin contar con los cadáveres desaparecidos o incluso los rumores de gente a la que le hicieron cosas.

El hombre negó con la cabeza.

- Pero dudo que todo aquello tenga nada que ver con...- señaló la foto que Aldara había guardado en su carpeta - Dudo que su víctima supiese siquiera quien era en realidad. O que alguien implicado en aquello tuviera ahora motivo alguno para una atrocidad. De haberse hecho algo así tendrían que habérselo hecho a Santellán o alguno de sus secuaces. Pero no creo que quede ninguno vivo. Excepto aquel muchacho... el celador... ¿cómo se llamaba? Tenía un nombre raro... Ah, sí, Isolino. Isolino García. Pero a ese lo encerraron hace años en el hospital de Conxo, ahí al lado. Es un psiquiátrico. Aquel chaval era una mala bestia. Estaba muy allegado a Santellán pero cuando el viejo murió el hombre perdió los contactos y sus problemas con la bebida y las drogas no mejoraron las cosas. Lo encerraron por matar a un hombre... pero sigue allí, encerrado.- señaló con la cabeza como si el psiquiátrico estuviese al otro lado de la valla.

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25/06/2018, 18:22
Gustavo Cortés

Gustavo dirigió una mirada reprobatoria a su compañera. La estrategia no había funcionado. O al menos no la estrategia por sí sola. El shock de ver aquella escena dantesca no había sido suficiente para contextualizar el asunto y, aunque habían pasado décadas y la memoria del señor Miranda ya no era la que fue, el agente aún mantenía esperanzas de obtener una respuesta que pudiese añadir al menos un dato sobre aquella maraña de oscuridad.

- Adelaida Menéndez Garrido murió en su Hospital... pero, claro, realmente no murió. Al parecer eso es lo que se les dijo a los padres. Y luego esta, con el mismo nombre, fue adoptada por una mujer rusa. 

Una pausa medida pretendió dejar tiempo al interpelado para que la mente pudiese ubicar el recuerdo y el hilo llevase algo enganchado al anzuelo.

- Entiendo que hacer muchos años de esto pero el hecho de que la madre adoptiva fuera rusa pienso que puede ayudarle. Yllina Martivona, se llamaba. Es probable que el tal Isolino recuerde algo pero ya que estamos aquí pienso que si usted pudiese darnos algo de luz quizá no iríamos tan "a ciegas". No sé si me entiende... no es que pensemos que el autor de esta barbaridad venga de aquella época. Más bien es el hecho de que Adelaida, la víctima, es un agujero negro de información. Necesitamos saber quién era o jamás podremos averiguar quién la mató.

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28/06/2018, 00:09
Samuel Miranda

El tipo parecía devanarse los sesos pensando en la pregunta de Gustavo.

- Una rusa. Sí que era algo inusual para esa época. Los rusos no solían visitar España, que era enemiga declarada del comunismo.- su rostro se iluminó - Sí, recuerdo a una mujer rusa. Alguien que conocía a Santellán la mandó. Yo creo que el director le tenía miedo. No sabría decirle más: ni siquiera estoy seguro de que hablase nuestro idioma.

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29/06/2018, 10:35
Aldara Seoane

- Es decir que tenía un contacto que le dijo a esta mujer donde conseguira a la niña, y además ésta tenía cierta autoridad o poderío que le resultaba intimidante, aunque fuera por su simple mirada...desde luego el paréntesis empieza a aclarase, pero hace falta todavía un poco más en todo esto.

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02/07/2018, 23:29
Gustavo Cortés

Gustavo dirigió una mirada compasiva al Sr. Miranda que luego trasladó a su compañera. Aquel hombre no estaba en posición de recordar más. Y si no era así, si de forma torticera se hacía el enfermo para evadir a la justicia, pues parecía que le iba a salir bien porque el agente no tenía intención de seguir presionando. Al menos le había dado un nombre; Isolino García. De hecho, Cortés repitió aquel dato para confirmar que lo había entendido bien.

- ¿Isolino García...? Esperemos que él nos pueda dar algo más de luz sobre el asunto. Por lo que a nosotros respecta, le deseamos que pase usted un buen día. Gracias por su colaboración.

No había más. El viaje a Galicia se agotaba. Pronto habría que tomar el camino de regreso y poner en común cuanto habían encontrado. No es que fuese mucho. Solo esperaba que el resto del equipo hubiese conseguido avanzar en la dirección correcta. Por lo que correspondía a ellos, Gustavo tenía la sensación de que tenía como para escribir una maldita biografía de la finada... pero nada que acercase al hecho de que alguien la había prácticamente descuartizado.

- Aldara... ¿a Conxo? A fin de cuentas está "ahí al lado". - comentó replicando las palabras del anciano.

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03/07/2018, 18:04
Aldara Seoane

Suspiré por un momento con la mirada cansada hacia Gustavo...- De acuerdo, tenemos que darnos toda la prisa que podamos, señor Miranda un placer haberle conocido, pero me temo que el deber está por delante en este caso y tenemos que irnos...

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03/07/2018, 23:11
Romeo Carbero

Los dos agentes se despidieron del anciano y confirmaron lo que ya sospechaban: el sanatorio psiquiátrico de Conxo estaba a escasos dos kilómetros del sitio donde se encontraban. Tras coger una carretera secundaria llegaron al parking del lugar. El sanatario era un un monasterio del siglo X que había sido reformado para albergar las oficinas. Los internos no estaban allí, sino en otro edificio cercano, un poco más moderno - teniendo en cuenta que cualquier cosa es más moderna que un edificio medieval - pero si querían saber donde estaba su hombre deberían empezar por aquel punto.

Al llegar a la entrada se dirigieron a la recepción. Tras identificarse y esperar a que la secretaria hiciera un par de llamadas un médico apareció en la recepción para atenderlos. El buen hombre quería saber los motivos que tenían para querer interrogar a aquel paciente.

- Verán: la mayor parte del tiempo lo mantenemos sedado. Y estamos hablando de décadas así. De hecho hemos solicitado repetidas veces que lo trasladen a un centro con una mayor seguridad porque nuestro diagnóstico es claro: este hombre está más allá de cualquier terapia de recuperación. En el pasado tuvo que sufrir traumas muy graves y el haber consumido psicotrópicos no le ayudó. Lo encerraron porque mató a uno de sus camellos... fue un crimen atroz... En sus pocos ratos de lucidez mezcla realidad y ficción pero estoy seguro de que ese no fue su único crimen. Ese hombre es una bestia con aspecto humano, creánme.

Aquel parecía un diagnóstico sorprendentemente apasionado para un psiquiatra.

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10/07/2018, 11:08
Aldara Seoane

Notas de juego

No sé si tú tienes algo, yo estoy en blanco.

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10/07/2018, 12:38
Gustavo Cortés

En verdad Gustavo no tenía ya muchas esperanzas de encontrar respuestas en Galicia. El viaje le había agotado y el hecho de hallar un callejón sin salida tras otro resultaba desalentador. Si a esto se le añadía el hecho de que había aparecido un segundo cadáver en Madrid y que nada tenía que ver con la tal Illyna Martivona, con el Doctor Santellán y los casos de bebés robados ni con Galicia en general, el resultado era que el agente no sabía ya por qué no había puesto rumbo a la capital y aún seguía dando tumbos por aquellas tierras. 

Y sin embargo, algo intangible le hacía seguir adelante. Quizá fuese el mero celo por el trabajo bien hecho... quizá simplemente se trataba de no regresar a Comisaría para decirle a Robledo que todo aquello había sido una absurda y cara pérdida de tiempo. 

- No tardaremos mucho... - aseguró Cortés al psiquiatra. Por un momento se posicionó él mismo como terapeuta de un tipo así y lo encontró fascinante. ¿Era eso lo que le hacía hablar de aquel modo al doctor... mera fascinación? Ciertamente resultaba muy apasionado y el hecho de que se lamentase de que el interno no hubiese sido trasladado a un lugar con mayor seguridad aportaba datos contradictorios. - Sólo queremos hacerle unas preguntas sobre un caso que pensamos pueda tener relación con los hechos que el interno presenció cuando trabajaba en el Hospital a las órdenes del Dr. Santellán. Le mostraremos unas fotos... - una mirada cómplice se cruzó con la de su compañera, - y seguiremos a lo nuestro. Honestamente, teniendo en cuenta que aquello sucedió hace décadas y que el interno lleva años sedado no albergamos muchas esperanzas. Y aún así... teniendo en cuenta que hemos venido desde Madrid era algo que no debíamos dejar sin comprobar. Eso sí... le rogaríamos que pudiéramos hablar con él a solas.

Notas de juego

No sé si tú tienes algo, yo estoy en blanco.

A ver si hay suerte... ;) 

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10/08/2018, 00:18
Romeo Carbero

El médico negó con la cabeza:

- Me temo que su petición es imposible. Lo de verlo a solas, me refiero. Les seré sincero: por mí no tendría problema, dudo que puedan sacar nada en limpio sea lo que sea que buscan, pero no nos está permitido algo así y no me jugaré el puesto por un... por el paciente García.

Se quitó las gafas para limpiarlas mientras concluía:

- Ustedes dirán: si desean esa entrevista yo mismo les acompañaré.

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10/08/2018, 10:24
Aldara Seoane

- Lo dice especificando... dije en tono seco ...¿tiene algo que ver eso con la medicina o son cuestiones personales propias?, desde luego si es lo segundo, creó que no tenemos tiempo para estar con esas con todo con el que nos cruzamos...

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14/08/2018, 15:00
Romeo Carbero

El hombre contestó sin demasiado interés:

- No tiene nada de personal1. Ustedes escogen si les acompaño hasta la puerta o hasta el dormitorio del paciente García.

Notas de juego

[1] Aldara tiene Interrogatorio. No necesita gastar punto para saber que el tipo está mintiendo. Le ha pasado algo con el paciente pero no sabe el qué. Si quiere gastar 1 punto de Interrogatorio puedo ampliar la pista.

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16/08/2018, 11:52
Aldara Seoane

Notas de juego

¿Yo sé si a Gustavo se le da bien apretar las tuercas?

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18/08/2018, 16:03
Gustavo Cortés

Notas de juego

Off rol... Gustavo también tiene Interrogatorio con lo que si también me he percatado del asunto y Aldara no gasta, gasto yo.

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20/08/2018, 11:13
Aldara Seoane

Notas de juego

Ya, pero para dejarte a tí, necesito saberlo on rol, por eso pregunto si tengo ese dato.

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24/09/2018, 18:12
Romeo Carbero

- ¿Y bien? ¿Han tomado una decisión?

El hombre parecía impacientarse.

Notas de juego

 

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26/09/2018, 10:46
Gustavo Cortés

Gustavo respiró sonoramente. Alzó las manos en señal de calma. En verdad el interrogatorio lo estaba conduciendo en primer término Aldara con su acostumbrado carácter recio e inflexible. Y lo hacía realmente bien pero quizá ahora había que dar algo de cera con la estrategia del poli bueno.

- Como desee... honestamente preferiríamos llevar esto a solas pero entiendo que tenga usted sus... reticencias. - una pausa larga se instauró en la sala a tenor de la evidencia de que el médico negaba una información a los investigadores. Si el tipo era tan peligroso, tan agresivo, tan inhumano... muy probablemente habría podido intentar herir al psiquiatra y ahora este actuaba con un exceso de celo. Lógico por otro lado. Pero poco práctico de cualquier modo dadas las circunstancias.

- ¿Incluso si le aseguramos que no será más de diez minutos...? - rogó Cortés.

Notas de juego

Intento jugar la última ficha (suplicando) para que nos deje a solas con el loco. Si puedo gastar yo el punto de interrogatorio lo hago... creo que Variam está out así que si te parece seguimos tú y yo.

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26/09/2018, 21:40
.=Corazón de Caín=.

Gustavo se quedó mirando al hombre.

- Sí es algo personal. ¿Qué fue? No fue a usted. Es un odio más arraigado. ¿Verdad? - tras muchos años tratando en interrogatorios Gustavo podía ver a través de ese hombre como si fuera de cristal - Probablemente un ser querido. Le hizo algo. Algo terrible. Y usted es ahora su cancerbero. - el joven policía negó con la cabeza antes de continuar - No le haremos nada. Se seguirá pudriendo en esa celda. No venimos aquí ni para ayudarle ni para librarle de su castigo. Venimos a buscar respuestas para parar a otra bestia como él.

El médico palideció antes las palabras del policía. Luego asintió:

- Diez minutos. Estaré esperando fuera.

Y sin decir nada más los condujo a través de unos lúgubres pasillos hasta la zona de las celdas aisladas. Se detuvo delante de una pero su mano se detuvo delante del picaporte.

- Fue mi hija. - dijo hablando más para si mismo que para los agentes. Luego se separó de la puerta y continuó por el pasillo - Les enseñaré al verdadero. Estoy ya muy cansado.

Gustavo y Aldara intercambiaron una mirada de extrañeza pero no dijeron nada. Continuaron avanzando por el pasillo hasta el doctor se detuvo delante de una puerta con un cartel de privado. Para sorpresa de ambos la abrió y comenzó a bajar por unas escaleras de metal ¿Qué estaba pasando? Aún así, casi por voluntad ajena, siguieron a aquel hombre sin mediar palabra para ver que misterio ocultaba.

Las escaleras desembocaban en un cuarto amplio cuarto de calderas. Su particular cicerone se dirigió hacia una puerta de metal del fondo y la abrió para flanquear el paso a los agentes. Dejándose llevar por lo insólito del escenario atravesaron la puerta.

El interior estaba en penumbra y apestaba. Hedía a pis, vómito, sudor. Cuando el médico cerró la puerta fue difícil no imaginarse en una celda medieval. Por un momento los agentes salieron de su extraño letargo y sintieron una punzada de alarma ¿los habían encerrado? Entonces escucharon una tos y lo vieron. El individuo que estaba atado a la cama mediante correas lucía un aspecto lamentable. Se notaba que llevaba mucho tiempo sin salir de allí, probablemente sin ser desatado. Aquello no es que infringiera todas las leyes posibles de atención a un discapacitado. Era simplemente inhumano. ¿Qué había hecho aquel hombre para que lo tuvieran así? ¿Por qué nadie había denunciado aquello? ¿Por qué había dejado el doctor entrar a dos policías para ver aquel espectáculo? Tendrían que dar parte de aquello... ¿o no?

Notas de juego

He usado tu punto de Interrogación para marcar una elipsis amplia y ponernos en marcha con todo el equipo, para arrancar la partida de su letargo ;)

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26/09/2018, 22:25
Isolino García

- Visitantes...- dijo el hombre atado - Ugh... uff... ¿Es otra de tus burdas torturas Romeo? La esperanza es lo único que nos mantiene con vida en el infierno ¿eh? Hehehehe.

Su risa, su voz, su tono serpenteante en la oscuridad resultaba odioso. Pese a que ambos detectives comprendían la gravedad de la situación y el sufrimiento al que había sometido aquel individuo, fuera cual fuera su pecado  estaba más allá de todo comprensión aquel lamentable estado en el que se encontraba. En pleno siglo XXI no se podía admitir que una institución pública torturase a un reo. Y sin embargo en lugar de sentir pena o desasosiego la sensación que invadía a ambos era un odio irracional hacia aquel tipo ahora desvalido.

- Oooooh... no... ya os veo... os veo... ¿venís con preguntas? Alguien viene... ufg... a hablar con el viejo Isolino... hehehehe.

Era complicado saber que edad podía tener aquel destrozo humano. Pese a su actual estado seguía mostrando un volumen corporal prominente, lo que indicaba que en su juventud habría sido extremadamente fuerte. Pero ahora lo único que destacaba de esa fuerza era una penetrante mirada cargada de amenazas. Como si en vez de ser él quien estuviera atado fueran los agentes quienes estuvieran a su merced en aquella penumbra.

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01/10/2018, 18:28
Gustavo Cortés

Gustavo apenas había usado el arma un par de veces y más como un acto reflejo a la hora de entrar en lugares potencialmente peligrosos en su trabajo en el Cuerpo que, de hecho, para disparar. Pero estar en aquella pestilente habitación le producía el desasosiego de estar en un tiroteo... jamás había experimentado nada similar y por muchos años que hubiese podido estudiar en la facultad de psicología, efectivamente no estaba preparado para aquella visita. Ahora entendía las reticencias del Doctor que les había franqueado la entrada finalmente. El palpitar de su propio corazón sobre sus propias sienes parecía el piafar de un caballo enloquecido que galopa sin control hacia un acantilado. Apenas podía escuchar nada más que su propio latido desbocado y una respiración que se negaba a ser normalizada.

Directamente habló. A buen seguro sabía que aunque tuviese la posibilidad de pedir un momento, una pequeña pausa para controlar al río de emociones que le sacudía, jamás habría tenido bastante. Con un hilo de voz, aparentando una firmeza que no poseía atajó:

- Preguntas... sí. Sobre el doctor Santellán y una de sus... clientas. Rusa. Yllina Martivona. Y la hija de esta... Adelaida.

Las palabras fueron manando de la garganta del detective de policía a borbotones. No era capaz de frenarse... de organizar sus ideas. De poder conformar un discurso más o menos coherente. Aquello le sobrepasaba y necesitaba ganar tiempo. Si aquel pobre diablo comenzaba a hablar quizá pudiese serenarse mientras le escuchaba. Por lo demás, sólo esperaba que la oscuridad le amparase y su desasosiego no fuese excesivamente evidente. De lo contrario aquel tipo no abriría la boca.