Partida Rol por web

Weelksy, ya que Meiar no pretende usar el escudo por poder tener la versatibilidad que la bastarda le ofrece, esgrime el escudo pesado +1, y en su diestra presenta la maza de armas.

- Adelante compañeros.

Weelksy encabezó el grupo como de costumbre y continuaron avanzando hasta llegar a una bifurcación... Se abrían ante ellos dos posibles caminos, uno que continuaba con el actual y otro que parecía descender...

- Continuando con nuestra idea de repasar el nivel antes de descender o ascender, sugiero que sigamos por este nivel. Susurra la pelirroja dama.

Con la mano en la que lleva la maza pone un dedo en los labios pidiendo silencio, y escucha con tención en un y otro pasadizo.

Sin hacer el menor ruido, Weelksy les indica que retrocedan un poco.

- Habeís oido esos ecos en el pasaje descendiente, que opinaís al respecto?

Asiento sin abrir la boca, intentando averiguar qué puede emitir esos extraños sonidos. Ya tendremos tiempo de bajar más adelante, pero de momento el piso inferior parece poco alentador.

Desde su posición habitual cubriendo la retaguardia del grupo y, en gran parte debido a su pésimo oído, Meiar no escucha esos etraños ecos aunque supone que están ahí dado que sus compañeros sí parecen haberlos detectado.

Pareciéndole también más sensata la idea de acabar primero con un nivel antes de bajar al siguiente les indica mediante signos (véase señalando al grupo y al pasillo que permanece al mismo nivel) que está de acuerdo con su elección de camino

- Continuemos por este mismo piso antes de descender...

Avanza en silencio, y se coloca cerca del túnel descendente y señala con los brazos que continuen los demás.

- Meiar, pasa a delante con Konqueval, yo iré cubriendo la retirada atenta por si nos sigue alguien.

Asiento a las palabras de Weelsky y sigo por el camino, cerrando el grupo. Cuando todos han pasado me giro para cubrir el regreso de Weelsky:

- Vamos muchacha, no te quedes rezagada.

El avance del grupo prosigue. Con Konqueval y Meiar al frente, con el pícaro un poco avanzado en busca de trampas. Weelksy proteje la retaguardia, atenta de no ser sorprendidos por detrás. Hamson y Craimer van en medio.

Contenta con su nueva posición que le permitirá enzarzarse con presteza a los más que probables enemigos, Meiar sigue a Konqueval intentando no hacer demasiado ruido ya que éste los delataría.

Me mantengo en silencio, haciendo caso a las indicaciones de mis compañeros.

El grupo continúa avanzando por el mismo nivel hasta que llegan a una sala en la que ven grandes rocas... por todos lados. Ningún componente del grupo oye ni ve nada extraño... y de repente una sombra salta sobre Meiar... Veis que es una especie de pantera decrépita con dos tentáculos en la espalda... a Meiar le alcanza uno de los tentáculos en el hombro izquierdo.

Tras ver a caer a la bestia, el grupo mira a su alrededor en busca de otro enemigo; pero todo parece tranquilo.

Clavo una rodilla en el suelo mientras hago desaparecer la maza que golpeó por mi a la criatura:

- ¡Maldita criatura! - exclamo mientras miro mi herida.

Agarro fuertemente el símbolo de mi dios Moradin:

- Vela por mi, gran Moradin. Te entrego mi cuerpo, sánalo.

Weelksy, herida de nuevo, mira a sus compañeros reconociendo su estado con la mirada.

- Estías muy mal heridos!?- Dice mientras se acerca de nuevo asta la entrada, y pone su atención en escuchar por si viene alguien fruto de los ruidos del combate.

No parece venir nadie... no se escucha ningún eco...

Más tranquila aparentemente, Weelsy da un vistazo por la estancia, en busca de información y otros posibles detalles, junto a las rocas posiblemente la bestia esta tubiera su guarida en algún rincón. Mientras se atiende a los heridos.

Weelksy sólo encuentra algunos huesos de las anteriores víctimas, pero ve un colgante... está roto y toda magia que pudiera haber en él parece haber desaparecido, pero recuerda haber visto uno parecido hace tiempo... no recuerda donde...

- Gente, os suena eso.- Levanta su mano, mostrando los restos de un colgante, deteriorado.- Me resulta familiar, pero no alcanzo a recordar...

Se aproxima a vosotros para que podaís observarlo con mayor atención.