Partida Rol por web

Un examen del lugar te confirma que los bancos rotos no son por el estado de abandono  de la Iglesia, más bien parece que alguien haya estado revolviendo el lugar en busca de algo, sí lo encontró o no lo desconoces aunque se nota que no fue muy disimulo.

En cuanto al libro que menciona Kelgar, es una biblia normal y corriente, le faltan páginas pero no se las han arrancado sino que parece que se han caido con le paso del tiempo y al estar expuesta a los elementos.

Por lo demás no encuentras ni ves nada más.

Un examen  rápido te indica que la campana no ha sido utilizada en mucho tiempo lo cual deduces que no fue esa la que oisteis, auqnue no te extraña puesto que vistes una en la plaza dle pueblo, normalmente dichas campanas son usadas para congregar a la gente en un mismo punto ya sea para festividades  como congregaciones religiosas

Tu examen no revela mucho, aunque si unas cosas, el libro es una biblia normal y corriente que parece que las exposición a los elementos la han deteriorado hasta el punto que las páginas han caido

Parpadeo varias veces, confundida, pues no era así como esperaba encontrarme el lugar. ¿Y por qué soy la única sorprendida? ¿Los demás ya sabían de esto? En fin, da igual.
Me aparto un poco del grupo, viendo que se ponen a investigar y a charlar entre ellos, yo tengo poco que hacer, así que enderezo uno de los bancos que encuentro sanos y me siento en él para esperar, echándome hacia atrás y apoyando los brazos en el respaldo.

Tras quince minutos me termino durmiendo.

Al oir un ruido, había levantado brevemente la mirada para comprobar su origen. La norne, desoyendo la advertencia de perturbar el lugar lo menos posible, había recuperado uno de los bancos y se había sentado. "Angelica" bufó por lo bajo, pero optó por centrarse en lo que estaba haciendo. No fue hasta que consideró haber registrado en profundidad la nave que se irguió. Lanzó un último vistazo a aquella sala.

- No parece que nada sospechoso haya sido dejado detrás. Pero, a riesgo de equivocarme, me atrevería a afirmar que alguien registró este sitio antes y no fue cuidadoso, a juzgar por el estado en que dejó los bancos. Sospecho que el padre Scott debió de sorprender al intruso, o intrusos, y que le mataron aquí mismo.

Qué podían buscar en la iglesia era un misterio, un enigma que explicaría lo que fuera de especial que tenía aquella isla. ¿Lo tendría el sacerdote guardado en el templo?¿Por qué?¿Qué diantres sería?¿Quién estaba detrás? Cada paso que daban aparentaba plantear más preguntas que respuestas les proporcionaba.

- Voy a comprobar si la sacristía también ha sido registrada.

A la vista de que Jacklin había tomado el libro que estaba sobre el altar y que éste no parecía tener nada de interés (al menos, no por la evidencias que había visto ella de pasada), dejó a su nuevo compañero la inspección del objeto y se acercó a la puerta de la sacristía para comprobar si estaba abierta y, en caso afirmativo, si la habitación estaba en un estado similar a la nave.

Tras deslizar una mano intangible por la supervise de la campana me voltee hacia el exterior y me “senté” hacia el exterior mirando los alrededores de la iglesia. La espera hasta que llegara el barco seria larga. Aunque por otra parte, parecía que en aquella isla el clima era diferente, por el momento no había visto asomar ningún rayo de luz entre las nubes. A decir verdad era agradable.

Tras un rato de meditación y algún pensamiento travieso sobre hacer sonar la campana para asustar a mis compañeros que había abajo, empecé a bajar lentamente para introducirme dentro de la iglesia y ver que estaban haciendo.

Kelgar registró por encima el lugar y se fijó en que las páginas del libro que faltaban probablemente habrían caído por el deterioro y el paso del tiempo, y no porque alguien las hubiera arrancado.
Creo que las páginas se cayeron por viejas, no creo que las arrancaran… dijo en voz alta. Así que no era ese libro lo que buscaban.

En cuanto al anuncio de Angie de ir a registrar otro lugar de la iglesia, Kelgar simplemente asintió y se centró en buscar algún tipo de mancha de sangre o prueba de que hubiera ocurrido violencia allí.

Lissandra al descender puede apreciar como Kelgar se halla en el altar con un libro bastante deshojado en la mano mientras que Raghild se encuentra en un banco durmiendo  mientras Angelica se dirige a lo que seria la sacristia.

En la sala, Emelie puede ver que no hay gran cosa de interés aunque el lugar  tambien ha sido registrado aunque muy por encima dado que apenas hay algo, solo se trata de una habitación  sencilla con un crucifijo en una pared y un reposapies donde rezar, todo el lugar tiene un intenso olor a cerrado .

Mientras tanto, Kelgar busca el lugar manchas de sangren que indiquen donde fue asesinado el profesor, siguiendo la teoria de Angelica de que el sacerdote pillase in franganti a los intrusos (o intruso) y estos lo matasen allí pero el muchacho no encuentra nada que pruebe ser veridica esa teoria, sí fue asesinado allí los intrusos hicieron un buen trabajo limpiando el lugar.

Aún con el libro y pasando las pocas páginas que quedaban de este escuche las palabras de Kelgar atento plenamente a ellas, ya que por suerte... o desgracia no había nada en el propio libro que captara mi atención- Probablemente un libro sagrado, típico con algunos rezos y demás para leer durante las ceremonias. Pero quería asegurarme por si acaso, al menos vale la pena comprobarlo antes de dar por sentado nada -desde luego no era algo que fuera especialmente de interés para nosotros ahora mismo ya que incluso tras que Kelgar encontrara tiradas por ahí el resto de páginas estas parecían caídas por el deterioro mas que cualquier otra razón, aunque eso me hizo levantar una ceja y agacharme para recoger algunas e inspeccionarlas mejor.

Dejando finalmente el libro de nuevo en el altar tras resignarme a que no tenía nada me acerque a Angélica por la espalda pasando un mano por encima de ella y apoyar sobre la pared o la puerta, no llegando a tocarla realmente si no mas bien teniendo mi brazo bastantes centímetros por encima de sus hombros ya que parecía mas un gesto de cercanía como amistad que cualquier otra cosa- No hay absolutamente nada aquí tampoco ¿verdad? Es raro, algo no encaja en la historia pero no hay indicios de nada raro... Tan solo parece como si hubiera pasado mucho mas tiempo para este lugar que para el resto de la isla. Por su estado da la sensación de que lleva ya muchos años abandonado pero al menos no me dio la sensación que por las palabras de Miriam la muerte del padre hubiera ocurrido hace tanto tiempo -comenté mis pensamientos en alto para todos aunque claramente iban mas dirigidos a la mujer, suspire incapaz de entender nada y me puse un dedo el dedo gordo en la sien, rompería la cercanía con mi compañera si esta quería moverse a otro sitio o si la notaba incómoda pero por el momento estaba justo a su lado.

La sacristía también presentaba un estado similar a la capilla; levemente revuelta, pues no había mucho que registrar y tan abandonada y polvorienta. Desde luego no parecía el tipo de abandono que cabría esperar de unas pocas semanas. No obstante, no exteriorizó aquellos pensamientos, ni siquiera en respuesta a la cuestión que planteaba el paladín. Se limitó a girarse y, con un movimiento gracia y fluido, evitó el brazo de Jacklin al tiempo que éste se moviera.

- Este lugar cuenta una historia, - Observó con ojo crítico la nave, los bancos revueltos y volcados y el estado del altar. - pero falta el contexto y una pieza clave.

Después, echó a andar decididamente hacia la salida. No había mucho más que pudiera hacer allí, no sin aquel dato que le faltaba.

- Es hora de visitar al galeno. Y a la hija del padre Scott... Pero antes, quiero ver algo en el cementerio. - Había dudado un momento antes de mencionar el camposanto, como si una idea hubiera comenzado a formarse en su mente y, sólo una vez totalmente clara, la quisiera compartir. Pero, de resultar aquella intuición, podía aclarar en parte el "misterio" del estado general de la iglesia.

Sin encontrar indicios de violencia en toda la iglesia, Kelgar se dio por vencido y escuchó lo que hablaban Jacklin y Angie.
Vayamos al cementerio pues, quizás haya algo interesante… dijo el norteño, casi como para sacarse el aburrimiento de encima.

Me aparte a un lado dejando espacio para que Emelie saliera cuando le vi las intenciones aunque esta hizo gala de agilidad para moverse rápido esquivándome. La mujer hablaba sobre el lugar como si se tratara de un libro, volví a mirar todo el lugar, yo no había sacado nada en claro de todo lo que habíamos visto aquí pero ella en cambio parecía muy convencida, tanto como para irse directamente a la salida. Por lo visto quería comprobar algo en el cementerio antes de volver a la ciudad, cruce miradas con Kelgar esperando ver si él entendía algo aunque no parecía ser el caso.

Parte del camino lo hice detrás de Angélica pero al llegar hasta la altura de los bancos en los que dormía Ragnhild la mire un momento, dudaba sobre si despertarla o no pero finalmente me rasque la nuca antes de acercarme y cargarla con cuidado de no despertarla en el proceso, podía aprovechar para descansar... Si dormía al nivel que comía le vendría bien echar una cabezada mientras el resto tratábamos de sacar algo en claro.

Tras cargar a Ragnhild*  poneis rumbo al Camposanto, este no se encuentra, sorprendentemente, en la parte trasera de la iglesia ( como suele ser habitual), sino  unos cuantos minutos hacia el norte colina abajo.

El lugar es como cualquier otro cementerio, un gran terreno rodeado de una verja alta , no os cuesta encontrar la puerta de entrada puesto que se encuentra abierta dejando paso a un camino pavimentado  que serpentea entre las numerosas tumbas y mausoleos  que hay, el lugar tiene un cierto aire de tristeza palpable por lo demás no veis ningun habitante que esté de visita a sus difuntos.

Aparte del aire de tristeza puedes sentir algo más, una presencia luminica, te ha pasado a veces es como sí no fueras capaz de verla pero es como sentir la calidez del sol  aunque no puedas ver la luz, no sabes de donde viene pero la sientes cerca.

—¡Ah!
Despierto de golpe, mirando alrededor. Todavía estaba con sueño y se nota, pero esto no fue a propósito, sólo pretendía sentarme.
—Ha sido raro... —murmuro mientras me levanto del asiento, antes de que Jacklin me agarre—. Nunca tengo problemas para dormir.

No entiendo nada, ¿cuánto rato dormí? No parece que mucho, menos mal, pero aún tengo susto, es una sensación rara. Sigo a los demás a donde sea quevayan, tratando de pensar en algo más alegre para distraerme.

- Ya estamos aquí.

No tardó en plantarse frente a la puerta abierta de la verja que rodeaba el camposanto. Examinó rápidamente el lugar para constatar que, extrañamente, parecía mejor atendido que la iglesia. No parecía haber lugareños presentando sus respetos a seres queridos en aquel momento, por lo que Emelie se apresuró con paso ligero por el camino pavimentado. Miraba de aquí para allá, por lápidas y nichos, en busca de la tumba del padre Scott. En un rincón de su mente se preguntaba con cierta excitación si no encontrarían nada desconcertante en el lugar de reposo del clérigo, algo que aumentase el enigma que rodeaba a su muerte; por fuera, procuraba aparentar calma.

Justo cuando ya iba a hacer fuerza para levantarla Ragnhild esta despierta de golpe por lo que en un principio me alejo por si la asustaba al estar tan cerca- /¿No estarás cansada? Caíste dormida al poco de sentarte.../ -le pregunte mientras caminábamos fuera de la iglesia.

El cementerio pese a la distancia que lo separaba de la iglesia parecía bastante normal, imaginaba que incluso tras la muerte del padre la gente de esta isla seguía valorando el mantener en un buen estado el lugar donde descansaban para siempre sus antecesores y poder venir con cierta frecuencia a brindar sus respetos. Pero la cosa cambio en cuanto estuve dentro... había ese ambiente de melancolía típico de este tipo de lugares pero por alguna razón se sentía mas pesado que de lo habitual y lo mas importante, estaba caminando cuando me detuve de golpe, mire un poco hacia todos lados antes de cerrar los ojos, levantar la cabeza hacia el cielo e inspirar lentamente- Hay algo aquí... -respondí aún en esa extraña postura, abrí los ojos aún mirando al cielo... Si tan solo pudiera localizarla, entonces si volví a bajar la mirada, eché otro vistazo a mi alrededor y reanude la marcha por el camposanto esperando comprobar si podía sentir esa calidez con mayor o menor claridad según me acercara o alejara.

—Cansada no —respondo, todavía pensando en cómo describir la manera en que me siento—. Incómoda.

No sé si es la mejor palabra, pero no sé de otra.

Viendo que se ponen a recorrer el cementerio, miro distraída alrededor, sin entender mucho lo que pasa.
—¿Qué buscamos acá?

Kelgar no entendía muy bien qué habían ido a hacer al cementerio y así se lo preguntó a Angie, de algún modo respondiendo a Ragn.
Eso digo yo. ¿Qué se supone que buscamos aquí? preguntó, mirando de reojo a Jacklin cuando dijo que había algo.

¿Algo? ¿Qué debemos entender por “algo”? preguntó mirando en la dirección que miraba.
A lo mejor un muerto viviente de esos que había oído en las historietas de borrachos de posada podría ser interesante y todo para sacarle del aburrimiento.

Deambulaba sin rumbo claro y vigilando cualquier lugar del cementerio mientras hablaba con Ragnhild- /Ya veo, sinceramente yo también me encuentro algo incómodo en este sitio... Angélica quería visitar una de las tumbas así que la acompañamos pero no tardaremos en ir al pueblo/ -hablaba en arkés con ella todo el rato para facilitarle un poco las cosas y que tuviera constantemente que estar medio perdida o captando las cosas a medias por no tener completamente claro el latín

Kelgar en cambio me pregunto por esa presencia de la que les había informado y sinceramente no sabía que responderle exactamente- No sabría decirte... ¿Sabes esa sensación cuando sales de un lugar completamente oscuro o frío y sientes el calor del sol? Esa sensación reconfortante es una muy parecida a lo que he sentido yo ahora al llegar al cementerio, una especie de presencia lumínica. No sabría describirlo mejor, a veces me pasa en cierto lugares específicos aunque nunca he sido capaz de identificar que lo provoca realmente... -les hablaba sobre sensaciones que distaban mucho del plano terrenal, en mi tierras por menos alguien podía ser encerrado o como mínimo puesto bajo vigilancia pero en cambio yo lo hacía abiertamente como si no existiera problema en torno a ello