Las palabras de Meñique llaman mi atención, ya había oido hablar del fanatismo de la Casa de la Luz pero no entendía su interés por ellos. Es una casa reciente con no mucho poder ahora que la reina ha muerto, ¿qué le preocupará de ellos?- me pregunto mientras continúa la conversación entre los hombres-Quien nos debería preocupar es Tyrion y más mientras tenga a nuestro hijo...
Lord Petyr parece más preocupado de lo normal y eso acaba por ponerme nerviosa a mi. Qué le rondará por esa cabeza ahora mismo...
Pasáis un momento muy agradable, y disfrutas mucho con su presencia. Ella te masturba con la boca, y luego disfrutáis de varias posturas, unidas. Aumenta mucho tu confianza en ella y a la inversa. Os profesáis afecto mutuo.
culpa mia, lo siento^^ Pero ahora no me deja editarlo asi que master si haces el favor de cambiar los destinatarios... Gracias!
- Por su puesto mi Lord, ¿con algun tipo de "cortesia" o solo visita formal?
No mi señor, no siento ningún reparo en ante vuestro señor. Es más, del grupo de mercenarios, soldados y caballeros errantes con los que salí de la apestosa Desembarco del Rey algunos cruzamos las tierras hacia el Nido de Águilas para unirnos a vuestro señor -te responde el hombre afablemente, acercándose a ti más confiado ante tus palabras -pero hemos tenido algunos problemas por aquí, ya sabes, soldados que se creen superiores durante el camino, peleas en posadas por putas y cerveza y finalmente ataques de bárbaros cuando llegamos a esta zona.
-Una visita formal, en toda regla. No se preocupe por los detalles del encuentro, yo me encargo de eso. Se dirige a Lurleen. Lurleen tú me acompañarás a las reuniones, debemos dar una impresión fuerte.
Lurleen asiente hacia las palabras de Meñique. Por lo menos me quiere para algo...-pienso mientras le sonrio
-Como mandéis, mi señor-le contesto cortesmente-sabeis que podeis contar conmigo para lo que os haga falta, especialmente si así conseguimos nuestros objetivos.
Así es Lurleen, así es. Se levanta del asiento y carraspea la voz. Entonces queda todo dicho Lord Hunter. Sé que usted llevará el asunto con maestría y podremos conseguir muchas cosas juntos.
-Gracias mi Señor,- y haciendo una reverencia- señora.-Lord Hunter termina su segunda copa y sale de la tienda
Entonces serás bien acogido, auque la ultima decisión por supuesto no la tomare yo, por mi parte puedes acompañarme al campamento, espero que lord huster este de buen humor y te acepte en el grupo, aunque te prevengo que nos dirigimos a la capital, bueno creo que todas las casas se dirigen allí, ha llegado la hora de repartir el pastel y el juego de tronos vuelve empezar de nuevo.
Bueno hago un ademán de emprender la vuelta al campamento. espero no haber perdido la senda y poder encontrarlo sin mucha dificultad.
Motivo: Supervivencia
Dificultad: 10
Tirada (4): 2, 5, 4, 4
Guardados (3): 5, 4, 4
Total: 13, Éxito insignificante
Será un placer ir con usted y acatar las órdenes de vuestro señor. Además, mi estómago llora por un buen trozo de venado -te dice señalándose el ombligo.
Volveis directamente al campamento, siguiendo la misma ruta que tomaste para llegar hasta la antorcha del hombre. Este cogió sus pocos efectos personales antes de salir detrás de ti y apagó su pequeña hoguera con puñados de tierra.
Estás en tu tienda, apunto de echarte a dormir para descansar del largo viaje, cuando llega a visitarte Ser James Melcolm, algo preocupado.
¿Podemos hablar James?
-Por su puesto Ser Melcolm- dice James ofreciendole una silla de campaña.
Gracias.
Hace un gesto de dolor.
Esta maldita espalda...Debería descansar. ¿Puedo tomar algo?
-Si, hombre, si.-Dice James sonriendo- Pasa, y tomate un vino del Rejo conmigo.
Coge su copa, y con tranquilidad empieza a beber.
Es realmente bueno...Muy bueno, sí señor. Hace una pausa para degustarlo. Bien, no he venido sólo para esto, ya me gustaría...Vengo para hablarte de algo que presiento James.
Escuchas unos ruidos que te despiertan. Te habías quedado dormida, junto a Kira, desnudas. Alguien está pasando cerca de tu tienda.
Una vez se ha ido, quedas a solas con Meñique.
¿Te fías de él?
Sin incorporarme, me aparto de ella lo bastante para poder levantarme sin que me estorbe, de tener que hacerlo, pero por el momento, simplemente escucho, con la mano ya en la espada corta, de la cual nunca estoy lejos, me esté bañando,, durmiendo, o comiendo.