Partida Rol por web

Trix aunque se vio sorprendida por la que se había formado en apenas unos momentos tras lo que había hecho para conseguir librarse de los sith no pudo hacer otra cosa que frustrarse y mosquearse , pero igualmente no iba a quedarse quieta y esperar que todos fueran acribillados , debía moverse y prepararse para el combate . Instintivamente buscó una cobertura donde atrincherarse y mientras lo hacía su subconsciente actuaba por ella acudiendo a la fuerza para mejorar su puntería , aunque no sabía exactamente cual de sus armas a distancia podría usar más adecuadamente en esta circunstancia. 

Ante las llamas, los rayos de bláster y el rugido de guerra del wookie la calle se llenó de inmediato de gritos de alarma y dolor mezclados con el pánico de la gente. Todos huían hacia los puestos, tiendas y bares para cubrirse y alejarse mas y más del conflicto. Algunos se cruzaban en medio del tiroteo en su intento de huir cayendo ante los blásters de los soldados sith.

Inmediatamente después los soldados sith devuelven el fuego. Dos ha caído ante las llamas, pero se ve que han sufrido daños bastante considerables.

-Teneis que salir de aquí.- Ayudando a Kazer el maestro Teron ve como los aprendices Sith vuelven para unirse a la fiesta.

-Llevadlos al refugio y cuando podais seguid con el plan.-

Solo los mercenarios que se han unido al grupo recientemente saben de que habla y al resto solo os queda confiar en la fuerza.

- ¡Yaggh! - Gritó cuando le impactó el blaster en pleno hombro y lo sintió arder. Tharr era ágil, pero el soldado debía ser el primero de su promoción, pues le había dado de lleno. Mientras se recomponía, escuchó al monje hablar. Al final pasaba lo que tenía que pasar: El maestro se quedaba atrás... Lo estaba temiendo todo este tiempo y al final sus sospechas se cumplían. Quería enfrentarse a los Siths él sólo. Podrían ayudarle, pero Teron estaba determinado a sacrificarse, de una manera o de otra. ¿Porqué razón perseguía aquello con tanto esmero?

- ¡Seguidnos, vamos!

Gritó al monje, el wookie y la zeltron. Echó una mirada a Hamlen, expresando su tristeza por el viejo. Empuñó el blaster y abrió fuego contra uno de los soldados, tratando de rematarlo. Tenía que hacer un único disparo, de lo contrario no podría moverse.

Los disparos de los Trooper son lo suficientemente precisos como para impactarme. Logro evitarlos para que no me causen todo el daño pero ha estado muy cerca. Veo que el Maestro tiene intenciones de quedarse y no puedo permitirlo:

"He pasado años creyendo ser el último Jedi en la galaxia. No le dejaré partir ahora que nos hemos encontrado."

Disparo contra uno de los soldados mientras le grito al Maestro Teron:

 - "Venga con nosotros. No le dejaré solo."

Luego de apretar el gatillo avanzo detrás de los que parecen mercenarios mientras invito al Maestro a irse con nosotros y no quedarse en un sacrificio que no es necesario.

Trix saca su pistola blaster y dispara desde la cobertura a cualquiera de los trooper esperando que al menos uno de ellos caiga ya y así poder comenzar con la fuga . 

" Diablos , habíamos venido aquí para estar tranquilos y se lia todo esto ¿ es que no puedo irme de marcha y relajarme ? ! Estamos en la puta luna del contrabandista ¡ debería poder desaparecer como un grano de arena en una tormenta en Tatooine " . 

El rayo blaster de Tharr impacta directamente en el pecho del soldado de asalto derribándolo un metro hacia atrás mientras el fuego todavía consumía su armadura.
Kazer también hace lo propio con el otro que le disparó y un agujero ennegrecido en la armadura deja ver la carne chamuscada de debajo, a la altura de las tripas y aunque el disparo de la Zeltron es igualmente bueno la armadura absorve la suficiente potencia como para dejar malherido al soldado sith pero no muerto.

Todos emprendéis una rápida huida mientras el maestro Teron habla con Kazer.
-Solo me buscan a mi. Me reconocieron por que mi cabeza tiene un precio y si voy solo, puedo despistarles mejor que si huimos todos juntos. Vete Kazer, nos veremos más adelante.-  

Una perturbación en la fuerza interrumpe la conversación cuando Teron empuja a Kazer a un lado, escabulléndolo entre la multitud y el sable láser de Kazer aparece en las manos del maestro en el momento justo para detener el rojo sable de luz de uno de los aprendices Sith que a traición pretendía acabar con su vida.

De un mandoble se lo quita de encima y empuja con la fuerza a otro de los apredices cuando intentaba llegar hasta vosotros. 

-¡¡Corred!!- Os apremia mientras se escabulle entre la multitud hacia una calle lateral. Otra escuadra de asalto sith acaba de aparecer y los disparos se suceden en una ráfaga mortal hacia la calle por la que el maestro acaba de huir. Los aprendices sith ofuscados por la ira le persiguen y puede verse el reflejo de los sables de luz cruzándose en los cristales de los escaparates.   

Viendo la escena y la premura con la que el viejo ordena que nos marchemos no dudo en enfundar mi pistola blaster y salir de mi cobertura para correr junto a kazer . 

Vámonos , estará bien . 

" El estará bien , nosotros ya veremos " .  

Le digo rápidamente a la par que le cojo por la mano para arrastrarlo si hace falta ya que por lo visto lo conocía de antes y no solo eso , sino que parece ser un jedi . 

Rápidamente , tras un silvido a su compañero wookie para que se percatara de que nos marchábamos , comenzamos a correr en otra dirección por la cual no vienen patrullas ni es la dirección por la que el viejo se marchó . 

" Las calles de la luna del contrabandista deberán servirnos bien para despistarlos , y seguramente ese viejo tambien las use a su favor " . 

Buen tiro, había tumbado a ese bastardo que casi le hacía un agujero en el hombro. Dolía mucho la herida y eso no podía sino irritarle. El maestro les pedía marcharse de allí y con razón, porque las cosas se estaban torciendo. 

- Tenéis que seguirnos...

Les comentó, pues no iba a explicar los motivos en plena calle, ya que cualquiera podría escucharles.

- Vamos, vamos...

Trató de indicarles el camino, sin tener que gritarles.

"Vaya pena de rifles láser. Me vendría bien uno". Pensó para sí, deseando llevar un rifle colgando de cada hombro. Sería el amo con tan buen armamento, pero no podía retroceder.

Tharr echó a correr en dirección al callejón, pendiente de que los conocidos de Teron le siguieran.

Asiento a las palabras del Maestro y sigo a los mercenarios junto con el grupo:

"Si la voluntad de La Fuerza es que nos volvamos a encontrar, así será".

Me muevo junto con todos para desaparecer del radar tal como deseábamos hacerlo. El Maestro sabrá lo que hace y aún tenemos muchas respuestas que oír. Estoy seguro que los hombres que nos acompañan podrán darnos algunas de ellas.

"Vamonos, estará bien" fueron la palabras de la mujer que ahora corría con ellos. Después de haber hablado con el hombre, Hamlen no estaba tan seguro. Con Tharr habían coincidido en que el hombre no tenía en sus planes escapar de aquí.

Ahora lo importante eran los niños, había que sacarlos de este basural y llevarlos a donde sea que el maestro lo haya preparado. -Vamos, Tharr aceleremos el paso o el plan no saldrá.- después se volteó para hablar con los desconocidos -Mi nombre es Hamlen y tenemos una forma de salir de aquí...- se detuvo un momento y pensó en lo que había hecho el Jedi -La primera parte del plan ya está en movimiento, había que generar una distracción. Ahora solo falta sacar a los niños de aquí, ir a la nave y esperar a que el maestro desactive las defensas... si puede seguirnos, será el plan perfecto, sino... nos vamos de aquí.- No estaba contento con esto, pero el Jedi lo había dejado claro y el coincidía, los niños eran lo mas importante.

Seguís a los mercenarios por los estrechos callejones de Nar Shaadda, peligrosamente poco iluminados, atravesando una calle principal hasta llegar a un turboascensor del servicio de mantenimiento escondido detrás de un muro bajo.

El ascensor era pequeño pero lo suficiente para caber todos achuchados en él mientras bajábais. Una vez se abrieron las puertas, una oleada de pestilencia os inundó la nariz e hizo que luchar contra los soldados Sith fuera mucho mas apetecible. Un túnel pobremente iluminado a donde iba a parar todos los desechos de los sectores superiores serpenteaba hasta perderse de vista.  

El enorme wookie había reaccionado por inercia cuando acompaño a sus compañeros en la huida. Ni un gruñido malhumorado salió de su garganta, mientras se escabullían entre los callejones y  estrechas callejuelas.Pero, cuando parecía que habían conseguido  huir de sus enemigos, Roorh no aguanto mas y explotó:

-¡¿GURROOOW RUOOOR RUOORRRR?!- rugió sin importarle  demasiado alertar su posición. señalo con su mano diestra a sus espaldas refiriéndose al encuentro del que habían huido:- Gurroowww ruuuur roarr roooor rurrrr gurrr rooooarr graaaw....- Conteniendo las ganas de  soltar un puñetazo a alguno de lo presentes, el enorme wookie lanzó su puño diestro contra la pobre pared, dejando un desagradable desconchón en ella. -... gurooor ruurr guraaww ruuur rooor...-

Miró directamente a Kazer sin prestar atención a las posibles réplicas a sus palabras y, algo mas calmado,  preguntó: - ¿Graarr ruoorr rooor gruuuu....? graarr raaaw ruooor graaw reeeg.-

Joder , este sitio huele peor que una manada de Banthas . 

Comentó la chica Zeltron al notar el penetrante olor que abarrotaba la zona , luego el wooki se puso a gruñir quejándose por la situación . 

Roorh , estamos aquí para ocultarnos , llamar la atención de una patrulla sith no es la mejor manera de hacerlo . 

Le dijo tratando de tranquilizarlo un poco , pero ahora que ya estaban relativamente a salvo era el momento de las preguntas . 

Bueno chicos , creo que es hora de que nos conteis lo que sabéis . 

Le dijo mientras se cruzaba de brazos y miraba tanto a Kazer como a los 2 tipos que les habían ayudado de forma intermitente . 

Bajaron por el turboascensor y les impregnó de nuevo aquél asqueroso olor. Durante el trayecto el wookie no había parado de quejarse, pero eso era habitual en ellos, así que el joven simplemente sonrió sin decir nada, mientras acariciaba el lanzallamas, que había hecho un estupendo trabajo.

- No somos tan fáciles de vencer, amigo. - Le dijo al peludo después de la amenaza. - Tenemos bastantes años de combate a nuestras espaldas, así que alégrate de que estemos de tu lado.

Aquello quizá parecía un farol, pero Tharr era un soldado desde niño y llevaba más años luchando que viviendo en paz.

- Yo me llamo Tharr, era de la milicia de la ciudad y trabajaba en la parte baja. Es un sitio muy duro y he decidido desertar. Era una mierda de trabajo, básicamente. Le dije al monje que le ayudaría a salvar a los niños monje que intentaba sacar de aquí. Esos niños son los que os decía Hamlen. La mayor tiene unos quince años y hay algunos demasiado pequeños como para estar en un entrenamiento así, en mi opinión.

Con "un entrenamiento así" se refería a un entrenamiento que él consideraba militar.

- El maestro Teron había encontrado la forma de salir de aquí y nos la dijo. Iba seguro de que hoy era un día importante...

Se quedó callado un momento, porque a él le había parecido que el monje se quería suicidar y era una de las cosas que no entendía. En teoría les acompañaba otro monje, de modo que era mejor no opinar al respecto.

- Nos dijo lo siguiente. Lo memoricé todo pensando que acabaríamos separándonos: "El acceso al sistema de almacenamiento de naves incautadas está en la planta 22 sección norte. En el mapa hay una anotación de la caja de registro que contiene los circuitos del campo de fuerza y he averiguado que el droide de la torre de control de despegue tiene implantado un sistema "auxiliar" de personalidad que utilizan los hutt cuando necesitan sacar una nave sin que las autoridades Sith lo sepan. La frase clave es "venimos a hacer la colada". El resto es vuestro trabajo. Eliminar a los guardias presentes, poner a salvo a los niños y esquivar la patrulla de Ties Sith."

Revisó mentalmente las palabras. Las había conseguido decir al pie de la letra. Ojala conservara esa memoria para siempre.

- Teron quería entrar en la torre de control y permitir nuestro despegue. Le dijimos que lo intentaríamos recoger en la torre de control, pero no tenía muy claro que eso fuera a ser posible.

Tras darles toda la información se quedó a la espera de sus reacciones.

Cuando salía del ascensor, un dolor punzante le hizo cerrar los ojos y quedarse quieto un segundo. 

- Este hombro me va a matar, y nunca mejor dicho. 

Tenía una herida fea y no tenía forma de tratársela.

- Si alguien tiene medpacks, vendría bien un poco de ayuda. Somos dos heridos, creo.

Mis pasos resuenan en el suelo metálico de los pasillos recorridos mientras sigo al grupo. Mantengo un silencio sepulcral a medida que avanzamos, solo prestando la atención necesaria para escuchar las explicaciones que los mercenarios nos dan pero entonces, las palabras de mi amigo Roorh me saca de mi silencio para responderle:

 - "Tranquilo amigo, parece que están con nosotros. Conozco al Maestro Teron hace años y salvar pequeños padawan es algo que él haría, aun a costa de su vida."

Fijo mi vista en los hombres y les respondo:

 - "Es un placer conocerles entonces. Yo soy Kazer Almoth y haré lo que el Maestro Teron haya dispuesto para nosotros. La causa es importante y daré todo lo que esté en mí para conseguirlo."

Me acerco a ellos y les ofrezco mi mano en señal de amistad y cooperación. Parecen buenos tipos, quizás un poco excéntricos o violentos pero con buenas intenciones. Eso es lo que cuenta.

El enorme wookie refunfuñó como respuesta a las palabras de calma de sus compañeros, pero su enorme cuerpo se relajó. Mientras escuchaba a los presentes la nueva información al respecto,Roorh no pudo evitar percatarse de la petición de ayuda por parte del humano que portaba el lanzallamas. Con el ceño fruncido, se acercó hacia el y  con  unos gestos  poco delicados le agarró para inspeccionar la herida.

- Ruuurr gruurooow...- consiguió pronunciar entre dientes mientras  sus ojos inspeccionaban aquella herida de blaster.

- ¿Graaaw roooor ruooor? , ruooooor rooor gruuurrr...- Roorh sonrió entre dientes  con una burlona mueca.