Partida Rol por web

Tras un par de días de viaje en los que habéis tenido tiempo para pensar en lo que ese hombre os había dicho y todo lo que habéis visto en ese pueblo fantasma llegáis al pueblo de Zabil sin saber muy bien como encontrareis esa piedra o siquiera como empezar a buscarla.

Zabil es un prospero pueblo de considerable tamaño conocido en el principado por las curiosas costumbres de sus habitantes. La villa tiene decenas de inusuales tradiciones que impulsan a sus gentes a realizar cualquier prueba estrafalaria, ya sea en festividades o para su propia diversión. Está ubicada junto a unas grandes fuentes de agua mineral que se dice que tienen una extraña facultad, quienquiera que la beba aumenta su fortuna durante unos días. Naturalmente, solo es un mito al que nadie da mucho crédito. Pese a lo pequeña que es, Zabil tiene uno de los mejores equipos de Edén de todo el mundo, y tres de sus jugadores forman parte de la selección de Phaion.

Solo por curiosidad, Valeria se había acercado a la fuente milagrosa y bebido un trago de agua. Si es verdad que daba suerte, iban a necesitarla para encontrar un trozo de roca voladora en aquel sitio.

En el fondo pensaba que, si aquellos brujos no estaban con la compañía Arkayu,  no les debía nada, pero la idea de dejar a su suerte a los habitantes del pueblo, convertidos en aquellas extrañas criaturas, no le agradaba lo más mínimo. Si podía ayudar, tenía que hacerlo.

- Otra vez a indagar... Creo que la última vez no se nos dio muy bien. ¿Por donde deberíamos empezar?

Conforme entramos en la ciudad contemplo las estructuras de los odificios, es curioso como la gente llega a ser tan superticiosa, al igual que Valeria tomo agua de la " fuente milagrosa", sin embargo es mas por sed que por la creencia de que aumente mi fortuna.

---Lo primero de todo seria buscar un lugar para alojarnos, despues de eso, deberiamos empezar nuestra busqueda- afirmo buscando alguna posada que sea apetecible

Os dirigisteis a la posada, con Kayne tan callado como siempre. No os cuesta mucho encontrar una acogedora posada de unas pocas habitaciones pero en muy buen estado y por un precio más que razonable. El posadero os atiende con amabilidad y os da vuestras habitaciones y una cena caliente, compuesto por una sopa con algún tipo de carne con un buen sabor aunque no conseguís saber exactamente de qué animal se trata debido a las especias que acompañan el plato, que reconforta vuestro espíritu después de los días de andar y de lo que habéis visto en aquel terrible lugar.

Aunque ya empieza a ser tarde, sentados en la mesa reposando la comida empezáis a pensar vuestro plan de actuación, aunque no estáis del todo solos en la taberna hay el suficiente ruido como para que no os oigan pero no tanto como para que os cueste hablar entre vosotros.

Valeria se mantenía pensativa, recostada sobre el respaldo de la silla, el sobrero calado hacia delante y con los pies encima de la mesa

- ¿Como afrontamos esta situación? Ir por ahí preguntado por una roca voladora no me parece la mejor idea, la verdad

Meneo mi bebida con aire distraido mientras sopeso la situación.

---Logicamente si es una tonteria preguntar esa clase de cosas,nos tomarian por locos o peor, como brujos que buscamos algo en concreto.- levanto el vaso y doy un sorbo- Hay que buscar una manera mas sutil de sacar la información, quizas debamos preguntar si a sucedido algo raro ultimamente ya sea meros rumores que habladiduras

Valeria soltó un bufido

- En un pueblo así nos contarán mil tonterías... pero imagino que es la única manera de sacar algo

Yo basicamente trato de acercarme a algun pueblerino que tenga pinta de irse mucho de la lengua ( es decir, que no calle ni debajo del agua), y trato de estamblar conversación, diciendo que es un pueblo muy tranquilo y que dudase que  pasara algo emocionante o raro, etc. Todo de la manera " sutil" que conozco XDDD

A Valeria no se le daban bien los interrogatorios; ya lo había demostrado en Hong Kua. Pero bueno, por probar... Buscó con la mirada a algún habitante de la aldea que estuviese algo perjudicado por el alcohol; los borrachos solían soltar la lengua con mayor facilidad.

Aunque Shalash intento entablar conversación con los parroquianos la verdad es que no consiguió sacar nada demasiado útil, aunque alguno no se quedaba callado ni aunque le faltase el aire, lo más que consiguió fueron chismorreos sin ningún valor, sobre la hija o el primo o el cuñado de dios sabe quién.

Valeria en cambio tubo algo más de suerte y se entero de que unos días atrás, justo después según vuestros cálculos de cuando se produjo el incidente en el otro pueblo se produjeron aquí pequeños terremotos, pequeñas sacudidas mas bien, que si bien no provocaron pérdidas ni daños personales sí que asustaron a todo el pueblo y lo tuvieron en vela durante unos días, por si lo que fuese que estuviese pasando iba a mas. Afortunadamente, tan repentinamente como llegaron se fueron. Los terremotos estuvieron precedidos por la caída de un meteorito a las afueras del pueblo y que alguien se llevo lo que fuera que cállese.

Más tarde, un hombre se acerca a Shalash, lo ha visto preguntar sobre emociones fuertes y cosas raras y le cometa que hay un hombre, Goro Walter, que dirige un negocio poco limpio, que podría ofrecerle trabajo y aventuras para un hombre de su talla. Antes de que Shalash pueda decir nada el hombre se mezcla y desaparece entre la gente, está claro que sabe lo que hace.

Tras mis malas pesquinas me siento tan frustado e irritado que estoy a punto de dejarlo pasar todo hasta que un hombre se me acerca y me habla de un hombre, Goro Walter, sin embargo antes de que puede hacerle algo desaparece de mi vista, mascullando ciertas maldiciones vuelvo a la posada a la espera de que vuelvan mis compañeros.

---Espero que hallais tenido mas exito que yo en la información- les suelto nada mas se sientan y les escucho con atención.

Valeria estaba bastante satisfecha con lo que había averiguado; no se había dado mal después de todo

- He conseguido hacer que un borracho suelte la lengua. Por lo visto hace unos días cayó un meteorito en las afueras del pueblo y alguien se lo llevó, así que por lo menos ya sabemos que está aquí.

Asiento penstivo y procedo a contarle lo que he conseguido yo, incluido el encuentro del misterioso hombre.

--- Deberiamos ir a ambos sitios, quizas encontremos algun indicio de donde seguir- digo cuando acabo de  explicarselo todo.

- Primero deberiamos empezar por el exterior, ¿no? Ver donde cayó la piedra

Asiento con la cabeza.

---Esta bien, si vamos a  ver esa cosa partamos ya a verlo- digo levantandome y saliendo del local esperando a que me guien hacia la roca.