Partida Rol por web

TRASFONDO
 
Fusagus robó los pergaminos de los monjes y consiguió llegar hasta la isla Orlum (en Freeport). Cuando los aventureros llegaron a la Isla Orlum, Fusagus había partido en el barco “El Venganza Sangrienta” en dirección a la Isla Bor, la isla de los piratas, donde según dicen los aldeanos de Freeport, ningún humano en su sano juicio, iría a tal lugar. Según cuentan los piratas, parece ser que sólo convirtiéndose o haciéndose pasar por uno de ellos es posible llegar a la isla Bor. Aunque siempre los PJs tendrán la alternativa de formar su propia tripulación para poner rumbo a la isla. En la aventura El Legado Robado II los piratas no llegaron a Freeport. La trama se centró en los villanos aliados de Shardar que operaban bajo el subsuelo de Freeport. Durante un periodo de tres lunas llenas, mientras los personajes esperaban la llegada de los piratas a Freeport, descubrieron que un poderoso hombre-serpiente llamado Milos había sembrado la semilla de la discordia entre los habitantes de la ciudad costera.
 
Paralelamente los PJs tuvieron la oportunidad también de aliarse con la organización Los Sabios de Kárgudin, que les ayudaron en su lucha contra las fuerzas de Milos y sus perversas sacerdotisas de Seth. Tras desentramar todo el complot que tenía montado Milos en Freeport, la guardia real puso entre rejas al hombre-serpiente (si los PJs no lo mataron previamente). Los aventureros averiguaron que las cajas de los órganos iban a ser enviadas a una misteriosa isla, llamada La Isla Negra donde Shardar llevaba a cabo sus experimentos con los gólems. Asimismo, Orlic (el sabio de Kárgudin enviado a Freeport) pidió a los PJs que trajeran de vuelta al gobernador Dionus, pues éste se había dirigido con una pequeña flota de soldados al rescate de su hija Elainy en la isla de los piratas.
 
Sea como sea, los PJs fueron los héroes de la ciudad. Pero tal vez la fama no les convenga en estos momentos y tal vez sea mejor guardar el anonimato, pues los aventureros tienen que dirigirse a la isla Bor y, a lo mejor, necesitan hacerse pasar por un pirata. Esta aventura asume que los PJs deciden hacerse pasar por piratas.
 

Todo sucedió de una manera un tanto distinta a como Mirgan lo recordaba, pero sucedió. Al parecer las noches de borrachera y las hierbas fumadas habían hecho su efecto y habían distorcionado un poco los recuerdos del pequeño brujo.

Filo había conseguido vencer al pirata en la competencia de tragos y las pruebas para entrar a la tripulación estaban al caer. Mirgan dio la vuelta y en el lugar donde antes estuviera Fonkín había aparecido otro gnomo. El mediano miró a su alrededor pero no lo encontró, entonces se dio la vuelta hacia sus compañeros.

_¿Y Fonkín? ¿O ese es Fonkín luego de pasar por un cirujano estético?

Vargos escucho los comentarios del otro mediano del grupo con resignacion. No parecia haber encajado en el grupo como habia planeado.

-El consejo de sabios juzgo conveniente sustituir a Flonkin. Sus razones tendrian, yo las desconozco. En cualquier caso, deberiamos ocuparnos de la labor actual y actuar como verdaderos piratas. No os preocupeis, me he documentado extensamente  sobre el tema en mi biblioteca personal.

- Arrrr!- gruño dando mas pena que otra cosa...

Filo miró sorprendida a nuevo miembro del grupo cuando se enteró de que no era el que les había acompañado hasta Freeport. Hasta que hizo su presentación pensaba que era Fonkin que se había cambiado de ropa.

Efectivamente las últimas noches habían sido bastante confusas, disfrutando del éxito por acabar con esas culebras y los placeres que ofrecía esta ciudad, pero llegaba el momento de volver a la tarea que les había traído hasta aquí.

Pese a que había puesto todo su empeño, Vargos se dio cuenta de que su imitación pirata había fallado. Sus compañeros lo miraban reflejando su clara desconfianza. Era natural, por supuesto, había aparecido casi de la nada sustituyendo a otro mago muy parecido. Él también estaría con la mosca detrás de la oreja. Se tomó el tema de su integración el grupo como todo lo que hacía, muy en serio. Aquella noche estudiaría duro para ver cómo podía caer más simpático. Seguro que alguno de sus libros lo explicaba en alguna parte.

-Supongo que mi presencia os resulta artificial pero quiero que sepais que haré todo lo que esté en mi mano para resultar de utilidad! No tengo mucha experiencia en trabajos de campo pero me sobra voluntad y capacidad de trabajo!

_Sí, todo muy lindo, pero ¿dónde está Fonkín? -Mirgan miró con preocupación al enano-. Me dijo que había tomado monedas tuyas, que ya te las devolvería.

Paso algun tiempo y solo quedaron 2 miembros del grupo original, pero eso no menguo sus ganas de acabar la mision que les habian encomendado, contaban con buenos refuerzos y el contacto de Filo que se habia ganado en el concurso de resistencia al grog, que les avisaria cuando el barco pirata llegara para presentarles como futura tripulacion el dia llego y se estuvieron preparando

Me acerqué al resto del grupo, que parecían encontrarse en la taberna bastante cómodamente. A diferencia de ellos, por lo que parecía, yo estaba deseoso de continuar nuestro viaje. Las mieles del éxito eran dulces, pero si la boca las tenía demasiado tiempo, se acostumbraba a ellas y después era reticente de dejarlas atrás. - Deberíamos ponernos en marcha, cuanto antes tomemos el barco, mejor. - Dije a mis compañeros. La taberna entera parecía haberse girado a mirarme. Sin duda mi alta estatura solía llamar la atención, pero tampoco creo que estuvieran acostumbrados a ver allí a un guerrero ataviado con una armadura completa y un gran espadón asomando por encima de su cintura.

Mirgan estaba en un estado melancólico, con las patas apoyadas en una banqueta delante de él y las manos acariciándose la barriga llena de cerveza. No había podido superar el abandono de su gran amigo Krugh. Los elfos y gnomos parecían ser muy inestables, iban y venían, pero el enano había estado con ellos desde el principio.

_Debí devolverle sus monedas cuando tuve oportunidad, debí haberlo hecho -sollozaba-.

Entonces un muchacho que se había sumado hacía muy poco tiempo no tuvo mejor idea que apurarlos para ponerse en marcha. Lo miró inexpresivamente.

_No sé qué te habrán dicho para que quieras sumarte a este grupo, pero aquí hacemos las cosas a otro ritmo. Primero bebemos, luego dormimos (a veces las hacemos en simultáneo), y decién después está el deber. ¡Filo, dile que me deje extrañar al enano tranquilo!

Vargos se subio los anteojos antes de hablar.

-Tendras que disculpar a Mirgan,Cesar. Parece tener problemas aceptando que sus antiguos compañeros ya no estan. Yo he tratado de exponerle los hechos pero, diria que sufre de una cierta tendencia a la nostalgia y la melancolia. 

- Yo más bien diría que sufre una gran tendencia a la vagancia. - Contesté a Vargos, que parecía estar sobrio, a diferencia de los demás. - Pero gracias por tus palabras, de todas formas. - Después se volvió a su borracho acompañante y añadió. - Ya lo has extrañado bastante, no hay más tiempo para la melancolía. Cuanto más tardemos en ponernos en marcha más lejos estará el gobernador y más se enfriarán las pistas que necesitamos para nuestra búsqueda. Así que será mejor que dejes de beber y olvides esa siesta de después, porque nos tenemos que poner en marcha. Así que mejor estar preparados y con la mente despejada. - Añadí, para luego mirar entre las demás personas que se encontraban en la taberna. - Me parece que Filo estaría de acuerdo conmigo en que es la hora de volver a la acción. Y ahora que lo dices... ¿Dónde está Filo? - Pregunté, a ninguno de los dos en concreto.

Mirgan sonrió mirando su cara y luego se volvió a girar hacia Filo.

_¿Lo has escuchado, Filo? Este acaba de llegar y ya habla de "nuestra búsqueda" y pretende darnos órdenes justo a nosotros. Al final creo que es más gracioso que el gnomo.

LLEGADA DE LOS PIRATAS
Tras eses periodo de tres lunas llenas, el Capitán Scarbelly, su contramaestre Aggro y su tripulación de 50 hombres llegan al puerto de Freeport. Las campanas del pueblo costero suenan como tantas otras veces ha ocurrido para alertar a sus habitantes de la llegada de los personajes menos deseados. La guerra contra Shardar está matando lentamente a este pueblo pues la ciudad está bajo mínimos de soldados reales. La gran mayoría dejaron la ciudad para dirigirse al Oeste a Tálynton y, los pocos que se quedaron se dirigieron hacia la Isla Bor para salvar a la hija del gobernador Dionus.

“El Venganza Sangrienta”, con sus velas pardas y su bandera de dos tibias y una calavera, atraca en el puerto frente a la taberna “La Gaviota Negra”. Viene cargado de barriles de grog y durante varios días. Como cada cierto tiempo el Capitán Scarbelly rellena las bodegas con barriles del mejor grog del posadero Jhonz. Los piratas van a estar en Freeport el tiempo que sea necesario borrachos, cantando y persiguiendo mozas por la ciudad - ¡hasta gastar el último barril!

LAS PRUEBAS PIRATA
Durante el periodo en que los piratas estén en Freeport, el Capitán Scarbelly, Aggro y algunos de los piratas “más fiables” de su tripulación se instalarán durante todo el día y la tarde en la planta superior de la “Taberna la Gaviota Negra” Aggro pondrá un par de piratas en las escaleras para impedir que nadie pase a menos que el Capitán Scarbelly quiera. Este es el momento en el que los PJs pueden acceder a enrolarse como futuros piratas. Para convertirse en pirata y poder formar parte de la tripulación del Capitán Scarbelly es necesario pasar una serie de pruebas

- Deberíamos tratar de enrolarnos en la tripulación. Pero ¿Cómo lo hacemos? Quizá debamos ir por separado si tenemos que tratar de no llamar la atención. Quizá tengamos suerte de que no han estado aquí y no nos reconocerán ¿Qué pensáis? - Dije preguntando al resto del grupo antes de encaminarnos hacia la taberna.

-Creo que deberiamos mantenernos juntos. De esa forma optimizariamos nuestras posibilidades de ser enrolados. No debe de ser extraño que varios miembros de otra tripulacion busquen enrolarse en un nuevo barco cuando el suyo ha sido hundido capturado. Solo necesitamos inventarnos una historia en comun. 

Podriamos haber trabajado en un barco que fue hundido y nosotros nos salvamos saltando por la borda. Hay que pensar en un nombre creible para nuestro anterior capitan pero no os preocupeis, he leido mucha literatura de piratas. Que os parece "Jake el pirata de Nunca Jamas?"

Vargos estaba muy orgulloso de aquel nombre. Habia estado pensando en todos los detalles de su historia desde que le encargaron la mision.

_Sí, deberíamos estar juntos, aunque no creo que eso haber saltado por la borda de un barco sea una buena referencia. Mejor simplemente decir que nos hemos gastado nuestro dinero en alcohol y mujeres y necesitamos más. ¿Filo, cuál era el acuerdo que tenías con ese pirata? Tenemos que pasar las pruebas como cualquiera?

- Lo siento, pero esta vez estoy con Mirgan, esa historia suscita menos preguntas. Además, el nombre de ese barco parece de un cuento para niños más que de una historia de piratas. - Comente a mis compañeros. - Entonces vayamos juntos, imagino que una vez allí ya sabremos si tenemos que pasar o no alguna prueba. ¿No? Posiblemente tengamos que hacerlas para pasar mejor desapercibidos. - Añadí después, esperando luego a que los demás se pronunciasen.

Meciendose en la hamaca de la que se había apoderada, la resacosa Filo  se mecía tranquilamente mientras inhalaba de cuando en cuando de la larga pipa con tabaco avainillado. Oyó que mencionaban su nombre una vez pero continuó tranquilamente adormilada a la sombra de la posada. Volvió a escuchar  su nombre y esta vez levantó ligeramente el sombrero para ver quién era el que la importunaba. Como no, el mediagnomo estaba allí incordiando de nuevo. ¿Como se llamaba? Grami... no, Migraña.. tampoco, eso era lo que sentía en la cabeza.

Habían sido varios días de jolgorio ininterrumpido, de mucho grog, de bailar como hacía años que no lo hacía, de concursos de eruptos con el barbudo enano, ¿Donde estaba? Recordaba algo que le había dicho sobre ciertos deberes y que sentía mucha pena por irse, pero Filo no lo recordaba bien. El caso es que ya no estaba.

Y en su lugar los, supuestos, Sabios de la ciudad, les habían encasquetado a unos nuevos compañeros. Un clérigo, un mago y un paladín había dicho. Y parecía que ya habían llegado dos de ellos.

- Falta uno. - Fue su escueta respuesta, antes de volverse a acomodar en la hamaca, a las prisas de paladín por ponerse en marcha.

No lo reconocería pero efectivamente había que ponerse en marcha. Ya sentía el gusanillo de las ganas de aventura, esa sensación en la tripa que te da el vértigo ante el peligro, ese... no, era un sonoro eructo y pestilente eructo que resonó en toda la posada. Se acordó de Krugh y miró al mediagnomo aborregado en la mesa. Ella también echaría de menos a ese patán barbudo pero se cuidaría mucho de demostrarlo.

- ¿Acuerdo con un pirata? ¿Yo? Ah sí, le aposte 5 monedas de oro a que era capaz de beberme una jarra entera de grog... Ah, el otro acuerdo... no lo recuerdo bien, pero me aseguró que nos ayudaría a enrolarnos en una tripulación. Así que cuando llegue vuestro amigo, - dijo mirando despectivamente a los nuevos – iremos a visitarle.

Les miró una vez más de arriba a abajo, corto viaje en el caso del gnomediano, y no le gustó lo que veía. Les habían encasquetado a 3 conjuradores, poco importa si se apoyaban en los poderes de los dioses o en los misterios arcanos. Para Filo eso eran trampas, cosas que peligrosas que están en contra de la naturaleza visceral del combate. El enano también era clérigo pero le había llegado a conocer, y sabía que podía fiarse, pero de estos...

Bueno ya estoy aqui, es que no dejais competir un poco en nombre de Dol Dorn- empieza a decir mientra sacude tierra de su armadura.-Me han dicho que ya han llegado esos famosos piratas, bien, ¿como lo teneis pensado en hacer? Yo creo que hablando bien, que nos queremos unir a su tripulacion, creo que no tendremos problemas.