Partida Rol por web

Dejale en paz ,ladronzu.. -mira mal a Jack por sus acciones aunque no se atreve a terminar la frase.

¿Y huisteis? Los piratas no huyen! Ademas os faltaban los otros dos ases..

Mira al viejo esperando que continue con su historia, a él le estaba gustando aunque fuese el único oyente que le tomaba minimamente en serio.

No creo que a la tripulación le gustase.. se sentirían desplazados... Quizá si un nuevo capitán comprara el barco o la tripulación... dijo contestando al español. Eso era lo que llevaban meses esperando.

No huí.. yo.. el viejo Bill me echó de su barco... le susurró a Sam mirando de reojo al Jack. Ya no se atrevía a continuar la historia, le habían dado ya suficientes palizas y aunque borracho no había perdido el juicio. Asique se levantó y se fue dando tumbos a otro lado.

Mmm, si lo llego a saber no saco el mapa... Taberneroooo! Otra ronda!
Parecía que la madre destino estaba jugando nuevamente con la vida de unos pobres mortales, ¿quién si no sería capaz de juntar tan variopintos personajes en una mesa cualquiera de una taberna cualquiera...? Y al parecer todos con ansias de aventura. Siendo sinceros, esto me agradaba.

Estoy completamente de acuerdo con Rafael, podríamos buscar un buen barco donde enrolarnos... o por el contrario, podríamos "hacernos" con uno, ejem, ejem.Bebo despacio el ultimo trago de mi jarra.Es mas, quizás el barco donde Jerry trabaja pueda servirnos... Pero en fin, ya tendremos tiempo para hablarlo tranquilamente. En realidad estaba disfrutando de la noche, y escuchar las historias de un viejo borracho no me desagradaba en absoluto, de hecho, el viejo Earl no se diferenciaba tanto de cualquier otro viejo borracho "cuentahistorias" que había conocido en otras ciudades, en otras tabernas... casi se podría decir que hacía la velada mas... familiar.

El joven de la mesa de las canciones seguía allí con algunas personas tocando y cantando. Echó una ojeada a la taberna y vió al borracho, Earl, del que algún día atrás había estado escuchando alguna historia, levantándose y yéndose con el morro echado de la mesa en la que estaba. Y pensó: Vaya, parece que ese viejo no ha triunfado esta noche. Una pena, nunca viene mal escuchar alguna historia de taberna, y las de éste... no sé, tienen su punto. Se quedó un poco resignado pues a él le encantaba escuchar historias cuando frecuentaba la taberna de su pariente, sobre todo de piratas, y tenía especial cariño por los típicos borrachos cuentahistorias de taberna. Se volvió hacia su mesa dió un trago a su jarra y le salió algo de música lenta con su armónica.

Le sorprendió sumamente la peregrina idea de Rafael, poco conocía a los bucaneros como para proponer ese tipo de concilios, una risa fuerte surgió de su garganta. - Eso traed una nueva ronda tabernero, Español jamás funcionaron dichas alianzas, no sólo la tripulación estaría incomoda, mejor que un capitán se haga cargo.- Dio una nueva calada a su pipa y observó las gentes de la taberna. -Jerry no dudo que habrá pretendientes seguramente entre el contramaestre y oficiales quieran dispustarserlo, ¿cómo se llama el barco?.

El barco se llama Saint George, era el patrón de mi capitán. Jerry escuchaba el sonido relajante y melodico de una armónica y se volvió a ver al muchacho que la tocaba.

Tocas bien, eh amigo. le dijo tratando de parecer amable.

Al oír esas palabras, giró la cabeza para mirar al hombre y le hizo un gesto de aprobación con la cabeza para no cortar la melodía. Recordó que ya le había visto alguna noche por la taberna, y no sabe porqué pero sentía cierta simpatía hacia él, tal vez fuera por la expresión de su rostro, el Caratriste le llamaban. Terminó la frase melódica, cogió su jarra y señalándosela al tabernero le dijo -Una ronda para el Caratriste. Volvió a hacerle un saludo con la cabeza y siguió con su melodía.

El Caratriste se vió sorprendido ante la invitación e invitó al hombre a que bebiera con él.

Ya que me has invitado sientate y acompañanos a beber.

Dejó de tocar otra vez pese a la insistencia de sus compañeros de mesa y dirigiéndose al Caratriste dijo -Gracias Caratriste, pero discúlpame una canción más a mis compañeros para dejarles alegres y ya me acerco. Le hizo un gesto de agradecimiento y con su armónica cambió a una canción más jovial a la par que sus compañeros de mesa alzaban sus jarras y cantaban ...YO HO, YO HO, LA VIDA PIRATA ES PARA MÍ...

Cuando el joven de la armónica al fin se acercó Jerry intentó ser amable.

Tocais muy bien ese instrumento, si Dios me hubiera dado talento ahora me ganaría la vida de otra forma... ¿Como os llamaís, joven?

-Tom, Tom Bonney. Dijo mientras tomaba asiento al lado de Jerry. Y es curioso, pues a mi me gustaría ganarme la vida como te la ganas tú Caratriste, pirata, ¿no? Sí, esa es la vida que me gustaría vivir, viajar por los mares en un barco, de isla en isla, de taberna en taberna. Echó una mirada picaresca a sus nuevos compañeros de mesa, acentuándola más al chico joven y dió un trago a su jarra. Pero bueno no quería interrumpir, sigan con su conversación, a mí me gusta escuchar. Dijo después.

Pues hablabamos de que el puesto de capitán del Saint George esta vacante, por si alguno se anima a pagar una tripulación. dijo mirando al resto por si alguno se animaba a comprar el barco y sacarlos del arroyo.

Jack se había dado cuenta de que esa gente no aprobaba su comportamiento, ni tampoco querían que estuviera allí. Pero había oido historias sobre la isla tortuga que le habían contado sus progenitores, y deseaba conocerla. Acercandose de nuevo a la mesa.
Siento mucho si le he ofendido señor dijo refiriendose a Earl, no era mi intencion causar problemas entre nosotros. Me encantaria viajar a isla tortuga, pero, como a ustedes, a mi me falta un buen barco con el que viajar. Desearía formar parte de la tripulacion del Saint George, cuando esta tenga capitan.

- Bueno parece que aquí estamos un grupo de marinos necesitados de un navio donde embarcar y nuestro amigo Jerry necesitado de un capitán que se haga cargo del Saint George, a mi no se me ocurre quien pueda estar interesado llevo demasiado poco tiempo en Nassau para conocer algón patrón interesado e interesante.- Continuo dando cortas caladas a su pipa mientras el tabernero les volvía a servir una ronda de ron que todos agradecieron incluido Sam. - Muchacho más os vale beber con algo de moderación, sino estais acostumbrado mañana puede ser un día tormentoso en vuestra cabeza y no es nada agradable.

Asiente a William y da un pequeño sorbo a la jarra.

Ey viejo Earl, vuelve aqui ! Hay sitio para uno más!

Mientras se decide a venir o no, mira al resto de marineros

Quizás él conozca algún patrón..

Jerry miró a William sin mucha esperanza en sus ojos.

Pues me temo que si nadie puja por el Saint George, vamos a ser una tripulación con barco y sin capitán...

Una bota golpeó el banco en el que estaban sentados con fuerza. Al girarse para ver quien era pudieron contemplar una pierna delgada claramente femenina.

Yo pujo. dijo una voz dulce pero serena y firme. Y un saco cayó en la mesa produciendo el inconfundible sonido del dinero ante los atonitos presentes.

Llevaba un tricornio de fieltro en la cabeza y vestía botas con vuelta y una casana de terciopelo grueso negra que llevaba abrochada y aunque le cubría hasta las rodillas era ceñida y dejaba imaginar una preciosa figura de mujer.

Aunque su cara era bonita la expresión que tenía era dura y su mirada bastante cruel y amenazadora, estaba con ceño fruncido y su mirada parecía fría e impasible.

Espero que este dinero satisfaga a vuestro capitán y sea suficiente para toda la tripulación.

Jack mira el saco de oro con los ojos abiertos se levanta y se acerca a la mujer. Vaya, vaya, vaya dice mirando escrupulosamente a la mujer. Como es posible que una mujer tan hermosa como tú halla ganado todo ese dinero? dice rodeandola, mirando cada centimetro de su hermoso cuerpo. Es posible...mirandola directamente a lo ojos que sea soltera?? dice con una pequeña sonrisa Porque yo tambien lo soy. Me encantaria enrolarme en un barco, mirandola directamente "a los ojos" en el que usted, señorita, este presente

Ah sí.. dijo de manera suculenta acercando su cara a la de Jack y todos pudieron ver entonces como su semblante duro desaparecía y se convertía en uno más suave, más delicado, más apetecible.
Pasó una mano por el cuello de Jack y acerco sus carnosos y suaves labios entreabiertos a su oreja.

Me encantaría que estuvieras en mi barco... tengo un trabajo para tí ¿sabes? Aseguró con una coqueta voz. Te encargaras de limpiar las letrinas. dijo empujandolo hacía atrás con la mano por la que le había sujetado el cuello y volviendo a la dureza anterior que tenía su rostro.