Partida Rol por web

El ninja lo medito en un instante. Vivir sin su clan, o intentar salvar a al menos uno mas de los suyos. Podria llamarse honor, pero Momochi, detestaba esa palabra llena de falsedad.

El honor solo sirve para enriquezer el ego... pero esto que siento... proviene de mi corazon

Una ultima lagrima cayo al suelo, el ninja grito, tal vez para alentarse mentalmente o quizas era la desesperacion. La respuesta era cunfusa incluso para él. Con un rapido movimiento dejo todo su equipamiento exepto su ninjato, por alguna razon sentia que debia llevarlo, lo demas seria peso muerto. Rapidamente se avalanzo a la entrada de la casa, deseando entrar y rescatar a quien fuese que estaba alli.

Morir dignamente... o vivir desalmado

esas palabras fueron lo ultimo que Momochi penso antes de adentrarse en la casa en llamas

Bueno aqui bamos

Robert sube al caballo y le dirije la palabra a la joven saserdotisa.

Reza por todos y por el templo

Robert hace andar a su montura en direccion a la Ciudad.

Los golpes resuenan y la puerta se abre un poco, frente a Ganondorf aparecen 4 hombres vestidos con ornamentadas armaduras marrones, en sus pechos portan la insignea del templo de la guardiana elemental de la tierra, llevan en sus cintos espadas largas colgadas y envainadas y una alabarda en sus manos, ademas de grandes penachos de color marron en sus yelmos los cuales les cubren la totalidad del rostro evitando que se les pueda ver este, uno de ellos habla:

- Decidnos quienes sois y que deseais del templo

El joven mago trata de realizar un hechizo, sin embargo siente como la magia le rodea aunque en un instante de descuido o tal vez inexperiencia las energias magicas le abandonan justo en el momento en el que iba a lanzar su carta haciendo que caiga al suelo muy aturdido

El soldado esta a punto de golpear a Agnus sin embargo falla por muy poco su ataque, sin dudarlo este ultimo lanza su ataque golpeando al soldado el cual parecia no ser demasiado habilidoso realmente por lo que recibe una herida mortal de encesidad.

La mujer se acerca a su salvador mientras dice:

- Señor muchas gracias por su ayuda, escuche, deberiamos marcharnos rapido de aqui antes de que lleguen mas guardias

El ninja corria por la casa en llamas evitando los escombros ardientes y corriendo en busca de la voz, una voz que cada vez escuchaba mas fuerte y mas claro, sin lugar a dudas era su mentor, y no muy lejos de la entrada le encontro, el hombre estaba tirado en el suelo tosiendo, tenia las piernas atrapadas, al ver a Momochi se sorprende y dice:

- No, hijo, marchate de aqui, no puedes hacer nada, debes de sobrevivir para castigar a quien ha hecho esto. Debes marcharte

El techo de la habitacion comenzaba a crugir y el calor aumentaba en intensidad al igual que las llamas.

Robert no tardo demasiado en llegar a la ciudad, realmente era una ciudad algo tenebrosa y mas por la noche que era cuando habia llegado, en un monte cercano se encontraba la mansion Darcia hogar de su gobernante, el cual parecia que vigilaba constantemente desde lo alto de la montaña a sus asustados habitantes, sin embargo cuando Robert llego a la ciudad se encontro con algo que sin duda le llamo la atencion, habia muchos guardias, mas de lo normal, y los aldeanos parecina muy asustados, pero ademas de los guardias habia un grupo de hombres que debian de ser algun tipo de caballeros por sus ropas.

Rapidamente uno de los guardias jutno a su compañero se acerco a Robert:

- Dime, quien eres y que haces en la ciudad a estas horas? Eres extranjero?

robert se toma unos segundo y empiesa a a hablar de forma extraña para disimular que es extranjero

puez zi zeñor e tenido muchoz problemaz de caminou y no e podiduo llegar de dia dizculpeme, hay algun proublemaz, zeñor.

El soldado rapidamente desembaina su arma, al igual que su compañero y dice:

- Los extranjeros que se encuentren esta noche en la ciudad seran interogados, baje de su montura y arroje sus armas al suelo

bajo de mi montura, y empieso a hablar en tu tono de disgusto

que pazza zeñor no entiendou cual ez el proublema, devvou dezir que yo no zuelo llevar armaz con migou, coumou ve no llevou nada de valour, ¿ze me accuza de algo?u ezto nou e justou con un eztranjerou.

El soldado dice:

- Han matado recientemtente a 4 guardias de la ciudad y siempre se ha informado de un extranjero, por ello usted es sospechoso, debera aocmpñarnos sin rechistar a que le interroguemos - se dibuja una sonrisa maliciosa en los labios del soldados- a palacio

Al mago le dio la impresion de que realmente al guardia no le importaba demasiado si el era el culpable o no

Maldicion esto no tiene  buena pinta,para rematar tendre que inventarme media vida y con este guardia que tiene pinta de maton y mala clase.

O muy bien espero que no nos lleve mucho tiempo el interogatorio mañana, tengo que preparar mi siguiente.

¿ y Por que suponen que fue un extranjero? Le pregunto al guardia.

 Tomo a la mujer de la muñeca y comienzo a correr hacia el bosque para refugiarme en el, mientras la guio/arrastro tras de mí, al adentrarnos en el bosque y refugiarnos en su oscuridad detendré el paso daré media vuelta y la mirare directamente a los ojos, sujetare su cuello con mi mano derecha y la arrinconare contra un árbol mientras hago un poco de presión sobre su cuello.

-muy bien, ahora me dirás porque te seguían, necesito saber por qué arriesgue mi vida, solo te advierto una cosa, será mejor que tengas un buen motivo para que ellos quisieran raptarte ya que “no soy amigo de ayudar a los desvalidos”.

Soy Ganondorf, rey de las Gerudo del desierto, gobernante de la Fortaleza Gerudo. Vengo para venimos amistosamente para hablar con el sumo-sacerdote de este templo.-decia esperando una respuesta.

-Estos tios no van a ser cosa fácil...-pensaba mientras les explicaba la situación.

Me dirijo a la torre y cuando llego a la puerta no ahy nadie.

Momochi estaba en una mala situacion para pensar que hacer. Sin embargo intento hacerlo. Comprendio que su maestro tenia razon, debia vengar todo esto o morir en el intento. Su mente parecia comprenderlo, pero su cuerpo estaba indeciso, en el fondo de su conciencia aun deseaba rescatar a su maestro. Junto fuerzas y finalmente exclamo resuelto

"Si maestro! no lo defraudare"

a pesar de que lo dijo en voz alta las llamas no dejaban oir... ya era tiempo de marcharse.

Nos volveremos a ver... eso no lo dudo

penso mientras luego de una breve oracion despidio a su maestro, que a pesar de que obviamente estaba sometido a un gran dolor, se veia inmutable.

Momochi aun con pasos indecisos se dispuso a salir de la casa en llamas.

El soldado rie y dice:

- Es evidente que nadie del reino se atreveria a hacer algo asi, ademas segun los testigos fueron dos extranjeros, asi que todos los extranjeros son sospechosos.

Apuntanod con su arma dice:

- Muy bien ahora iremos al castillo a realizar un interrogatorio mucho mas exahustivo