Partida Rol por web

El Oddissey: Terror en la nieve

Bernie y Maurice: Un Pueblo Abandonado

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20/11/2011, 16:56
Bernie Gardner

Me dedico a perseguir a Maurice en silencio mientras avanzamos por la iglesia abandonada tratando de esquivar los cascotes. Realmente parece un escenario terrorífico, un lugar idóneo para que sucedan cosas escalofriantes y sobrenaturales. Intento apartar esos pensamientos de la cabeza, pero la verdad es que la iglesia destrozada no ayuda mucho. Me alejo de mi compañero por un minuto y saco la cámara. ¿No querías fotografías para tu colección?, pienso de repente acordándome de la agradable cena que pasé con mi jefa. Pues aquí tienes.

El frío hace que me resulte difícil sacar las fotos, además de la escasa luz. Aún así lo intento. Alguien tiene que dejar constancia de esta maldita aventura. Trabajar en The Globe era mucho más sencillo, incluso teniendo que aguantar al asqueroso de mi jefe. Suspiro mientras guardo la cámara y me acerco de nuevo al detective, que dice algo mientras señala a una puertecilla que me había pasado desapercibida.

Me pego a su espalda.

- ¿Crees que habrá alguien aquí? - le susurro - Este pueblo... da mal rollo. Con todas las casas abandonadas. ¿A dónde habrá ido la gente? ¿Y esos perros muertos? ¿No se supone que viajan en trineos tirados por perros? - no puedo evitar dejar de hacer preguntas.

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21/11/2011, 13:22
Director

De camino hacia aquella solitaria puerta y mientras Bernie aprovechaba para tirar algunas fotos de más, el detective pudo presenciar un pequeño dato de interés. Pudo observar un rosario ensangrentado tras el altar principal, aunque como no le pareció un dato relevante en el momento prefirió callarselo para no asustar más de lo previsto a la actractiva de su compañera.

Aquella puerta daba acceso a la casa de algún misionero o sacerdote. Su aspecto también era de dimesiones reducidas. Una habitación-comedor y una cocina con despensa componían el lugar. Lo curioso residía en que la casa no parecía abandonada como el resto, ya que la alacena estaba llena de comida y no parecía faltar ropa ni otros enseres en los armarios.

Sí, habíais visto bien. Había comida y ropa cálida...

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21/11/2011, 20:03
Maurice Stolker

- No sé qué coño pasa. - Pero si te callas, podría pensar mejor. Maurice estaba harto de la retaila de preguntas de su compañera. Se estaba conviritendo en un verdadero incordio y bastante mala era la situación ya como para aguantar ese coñazo. Antes de entrar a la habitación vio algo que lo hizo estremecerse: un rosario ensangrentado. Apretó su pistola aun con más fuerza y siguió avanzando apuntando por delante suya.

Entró en la habitación del fondo y se le abrieron los ojos como platos. Dentro de aquella ruina de lugar parecía lo único habitado. Aquello no lo hizo sentirse mejor, sino ponerse más nervioso. Quién podía vivir allí con todo lo que pasaba fuera. Con esos perros, esa capilla destrozada y ese pueblo semiabandonado. Necesitaba una explicación y la necesitaba ya. - POLICÍA. SERÁ MEJOR QUE SALGAN SI NO QUIEREN PROBLEMAS. LOS REFUERZOS VIENEN DE CAMINO. - Mintió como un bellaco. Normalmente habría sido sigiloso pero si hubiese alguien allí habría oido a su compañera así que decidió tirarse un farol. Después se dirigió a Bernie. - Pégate a mi y estaté atenta. Y por Dios, cierra el pico. Si alguien se acerca quiero escucharlo. Malhumorado esperó una posible respuesta, apontocado contra una pared y observando las posibles entradas.

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24/11/2011, 15:36
Bernie Gardner

Cuando asomo la nariz por la puerta, se me escapa una exclamación de sorpresa. El habitáculo parece estar habitado... ¿Pero quién demonios va a vivir en una iglesia medio derruida, en mitad de un pueblo abandonado? La pregunta me resulta inquietante, pero me abstengo de decirla en voz alta porque Maurice parece malhumorado, para variar.

Su grito de que somos la policía me sobresalta, y me llevo un dedo a los labios para indicar silencio. Maldito loco, vas a alertar a quien sea que esté aquí, me digo para mis adentros.

- ¡Eso no ha sido nada prudente! - susurro con tono recriminatorio. Pego mi espalda a la pared e intento escuchar atentamente, por si unos pasos se acercan a nosotros. Desde luego, si queríamos hacer una toma de contacto silenciosa, ya no hay ninguna posibilidad.

- Tiradas (1)
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25/11/2011, 01:18
Maurice Stolker

- ¿Qué sabrás tu lo que es prudente? Si no parabas de hablar. Parecías una cotorra. Lo que les faltaba en aquel momento era tener una discusión como un viejo matrimonio. - Si hay alguien aquí estará acojonado. Tenemos armas y un ejército a punto de llegar. Le guiñó el ojo con complicidad. La verdad es que entre tanto silencio hasta a él le había sonado fatalmente tétrico su grito. Pero ya no podía volver a atrás y no le otorgaría a Bernie el placer de asumir su equivocación. Pegado a la pared junto a ella echó un buen vistazo al lugar.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tiro dados por si acaso.

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25/11/2011, 12:01
Director

El propio eco de Maurice fue la única respuesta que tuvo a su comentario de policia americano. Uno al lado del otro y pegados a la pared avanzásteis un poco más para percibir mejor el habitáculo. La ropa que podía observarse estaba compuesta por ropas de abrigo hechas con pieles, propias de los esquimales, y de pesadas sotanas que Bernie pudo identificar a su propietario como un misionero jesuíta.

Una investigación pormenorizada por parte de Maurice le permitió descubrir debajo del jergón un mohoso libro que resultó ser el diario del Padre Jan Svenson.

Notas de juego

- DIARIO:

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29/11/2011, 00:08
Maurice Stolker

- Joder, ya podía escribir las letras más grandes este tipo. Pese a eso había logrado entenderlo casi todo y no había podido evitar que un escalofrío le recorriese el cuerpo.Aquel lugar pondría de los nervios a cualquiera, no imaginaba haberse quedado solo allí. En ese momento se alegró de que su compañera estuviera con él. - Menudo gilipollas, Bernie. No me habría quedado aquí solo ni por todo el oro del mundo. En el centro de la nada... - Y movió la cabeza negando. - En fin, al menos sabemos que hay alguien. Esperemos que el oso que ha matado a los perros no lo haya matado a él. Y lo que es más importante, espero que ese oso no nos coja a nosotros. - Dio por hecho que había sido un oso. Qué más podría ser. Recordó la voz de la niña de su habitación, pero lo deshechó de su mente rápidamente. - Según lo veo yo, creo que deberíamos quedarnos aquí a dormir. Al menos se está caliente y seguramente haya algo para comer. Mañana veremos las cosas con otra cara y quizás encontremos una radio para que vengan a buscarnos. - Miró fíjamente a su compañera y le dijo: ¿Tu qué dices?

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04/12/2011, 12:31
Bernie Gardner

Le arrebato el diario de las manos a Maurice y lo leo a toda velocidad, deteniéndome en algunas partes que me resultan más llamativas. Ahora al menos sabemos por qué el pueblo está desierto; pero aún así según este cura los perros seguían vivos, y ahora están más que muertos.

- No creo que el oso, si es que existe tal oso, matara también al cura. Esto parece estar habitado - digo mirando alrededor - Además, ¿para qué iba un oso a matar a todos los perros y no comérselos? - mi mente comienza a imaginar un montón de cosas extrañas que podrían haber pasado en el pueblo. Algo como un simple oso polar parece demasiado sencillo en este mundo de pesadilla al que parecemos haber caído sin remedio.

Al escuchar la proposición del detective de que nos quedemos allí, le dirijo una mirada fulminante como si estuviera loco.

- ¿Aquí? Pero... ¿y si el cura aparece aprovechando que estamos dormidos para matarnos? A lo mejor ha perdido el juicio de tanta soledad... ¿Y ese chamán chiflado, el que se fue a luchar contra los espíritus del mal? Seguro que sigue por aquí, si no ha muerto por congelación o algo.

Estoy empezando a ponerme nerviosa. Este sitio pone los pelos de punta al más valiente. Aún así en el fondo sé que es el mejor sitio en el que podemos pasar la noche. ¿A dónde vamos a ir si no, a uno de los iglús abandonados con dibujitos rituales en la puerta?

Notas de juego

Perdón, he estado estos días en Málaga viendo el Cirque du Soleil!

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06/12/2011, 23:22
Maurice Stolker

Maurice miró con ojos entrecerrados a Bernie y le contestó: - Bueno, si tu quieres ir a algún lado a buscar al psicópata o a los osos no te lo impediré. Yo me quedo aquí. - Dicho lo cual se sentó en un viejo sillón. Si aquella chiflada quería suicidarse él no era nadie para negárselo pero la verdad es que no quería quedarse solo en aquello pocilga. Además no tenía ganas de cocinar y aquella mujer tenía pinta de saber. - También podemos hacer turnos para dormir. Calentar un poco este lugar y comer algo para coger fuerzas. - Se levantó otra vez e intentó buscar algo para comer en la despensa. - A ver que podemos echarnos a la boca.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Olé los buenos dados. :(

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08/12/2011, 17:51
Bernie Gardner

Suspiro con pesadumbre. Supongo que no nos queda otra opción, así que me acerco al armario para coger unas mantas con las que abrigarnos. Al menos no pasaremos frío, lo cual ya es de agradecer.

- Está bien, está bien. Pero haremos turnos para dormir. No quiero despertarme en mitad de la noche y encontrarme con un psicópata mirándome fijamente en la oscuridad - solo de pensarlo me entra un escalofrío - Además, me muero de hambre. Y quién sabe, a lo mejor encontramos alguna radio para contactar con alguien.

Abro el armario de golpe y miro con curiosidad en el interior. No sé qué es lo que espero encontrar, aunque rezo porque solo haya ropa vieja.

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12/12/2011, 12:06
Director

Mecidos por una gélida brisa, el camino os llevó, hasta un robusto edifico, centenario al menos, en cuya base se advertía algo así como un refugio.

Unas pequeñas velas, cuyas llamas parecía que habían sido capturadas por formas irreales que quedaban plasmadas en las paredes, iluminaban la estancia, suficientemente ancha como para sentirse cómodo/a. Al entrar, fue tal la sensación de protección y bienestar que el deseo de quedarse allí parecía más que una obligación.

Entre los dos buscasteis algo con lo que pasar la noche y llenar el estómago. Había algo de manzanas, peras, galletas y leche, además de latas en almíbar y de conserva. Lo justo para no morirse de hambre. Bernie por su parte dió con un buen par de mantas calientes y varias esterillas de buen grosor en el interior del armario. De entre las mantas se despegó un viejo mapa que cayó frente a sus pies.

Notas de juego

Mapa

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12/12/2011, 23:51
Maurice Stolker

Cuando acabaron con las pocas provisiones que había Maurcie aun tenía hambre. La fruta, con el frío, aun se conservaba bien pero las galletas estaban húmedas y la lecha medio pasada. Así que se dedico a mojar las galletas en agua y se sintió como un imbécil. Odiaba quedarse con hambre. Al menos, tenían latas de conserva pero decidió dejar la suya para el desayuno pues prefería tener fuerzas por la mañana. Vio a Bernie venir con unas mantas y lo agradeció. Cuando se dispusieron a desplegarlas algo cayó de una de ellas. Parecía un dibujo, hecho por un crío. Maurice se agachó, lo cogió y le echó un vistazo: - Joder, es un mapa...un puto mapa. Aunque parece hecho por un retrasado. - Frunció el ceño y se lo pasó a su compañera. - Deberíamos descansar. Si eso está bien estamos a 20 kilómetros de Salensburg. Mañana será un día largo. Otro maldito día largo y frío en este puñetero país.

Notas de juego

No te enfades por lo del mapa, máster. Es mi Maurice que es un poco capullo :)

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16/12/2011, 12:02
Director

Notas de juego

Jajajajaja. Tranqui tio, Maurice tiene toda la razón del mundo xD Aquí el servidor no tiene mucho manejo con el paint la verdad xDDDDD

Se me olvidó añadir "que disculpas por lo cutre del mapa" pero bueno. En fines, esperamos un poco a Bernie que todavía no ha leído los mensajes.

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18/12/2011, 13:03
Bernie Gardner

No puedo evitar sonreír ante el comentario de Maurice sobre el mapa, pero aún así lo examino brevemente de buen gusto. Si no es incorrecto, a 20 km está un pueblo. Automáticamente me siento feliz solo de pensar en civilización, gente normal, casas habitadas, buenas comidas... Pero caminar 20 km en la nieve no será nada, nada fácil.

Cojo mis mantas y me envuelvo con ellas hasta notar que empiezo a entrar en calor.

- Me pregunto qué narices hace este mapa entre las mantas - digo algo distraída, agradablemente soñolienta por el calorcito - Pero de todas formas, mañana será otro día... Podremos ir al pueblo con las provisiones de aquí y llevarnos las mantas para no tener tanto frío por el camino.

Me está entrando sueño, así que bostezo disimuladamente.

- Haz tú la primera guardia, ¿vale? Despiértame luego - digo tan campante, y me envuelvo más aún en las mantas hasta que solo se me ve la punta de la cabeza.

Notas de juego

No pasa nada, el mapa se entiende que es lo importante xDDD

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23/12/2011, 11:44
Director

La noche transcurrió sin sobresaltos. El cansancio casi que os obligaba a dormir hasta tarde, pero un insólito brillo os despertó a ambos bastante temprano, a eso de las ocho de la mañana.

Abrísteis los ojos y vísteis entrar a chorros por la ventana una límpida luz amarilla. No era para creerselo, pero efectivamente era el sol. Ocupaba un lugar equivocado en el cielo, demasiado bajo, pero era el sol sin duda. Os armásteis con abrigos y fueron indespensables colocaros unas raquetas para los pies para lograr alcanzar aquella distancia hasta el siguiente pueblo.

Las nubes se congregaban en el horizonte, pero en el medio del cielo se veía una gran área azul. Era un temor el pensar que el azul del cielo volviera a desaparecer durante vuestro largo trayecto. El recorrido transcurrió a través de una casi infinita llanura helada, sin peligros y con algún que otro descanso para llenar el estómago.

Al cabo de unas diez horas, arribásteis a la costa. El clima seguía mostrándose apacible e incuso el sol se hacía algo molesto al reflejarse en el hielo y la nieve.

Al fondo de un amplio glaciar, embarracado en los eternos, se podía observar un impresionante barco mercante.

Notas de juego

*ESCENA PARTE 2*

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03/01/2012, 22:07
Maurice Stolker

Maurice estaba muy cansado tras la comida y lo único que le apetecía era echarse a dormir, por eso cuando la caradura de su compañera le dijo que hiciera la primera guardia no pudo más que cagarse en todo. De hecho no pudo resistir el sueño y se quedó también dormido con lo cual si alguien hubiese querido hacerles algo no lo hubiera tenido muy difícil. Cuando ambos despertaron zanjó el asunto de la guardia mascullando de mala gana una disculpa a su compañera. Aquello podía acarrear una discusión pero pronto el foco de atención de ambos se dirigió inevitablemente a algo muy extraño. Había estado en aquel país varios días y no dejaba de ser un sitio extraño pero era la primera vez en su vida que le extrañaba la posición del sol. Él no sabía mucho de astronomía pero le parecía muy extraño todo aquello. No quiso compartir su preocupación son su compañera pues no quería quedar como un zoquete cuando ella le diera una explicación razonable. Poco después se lavó como pudo con un poco de agua, comió la comida que la había sobrado de la cena y dispusieron la partida. - Espero que esa birria de mapa nos lleve a algún sitio. Sino moriremos congelados esta noche. - Fue de las pocas palabras que compartió con su compañera. No tenía ganas de hablar ni ganas de estar en aquel maldito lugar andando veinte kilómetros.

Cuando llegaron a la costa, vieron un impresionante barco mercante. Claramente había encallado en el hielo. Los ojos de Stolker se dirigieron a él y le dijo a su compañera: - Quizás deberíamos echar un vistazo ahí. A lo mejor hay alguien y a lo peor podemos encontrar provisiones y quizás refugio para esta noche. No sabemos si nos hará falta.

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08/01/2012, 13:20
Bernie Gardner

Extrañamente, consigo pasar una buena noche de descanso, a pesar de lo horrible del lugar y nuestra situación. Supongo que cuando el cuerpo está agotado, lo está y punto, sin atender a razones psicológicas. De todas formas, la iglesia comienza a parecerme menos siniestra tras haber sobrevivido a la noche sin ninguna incidencia y tras haber comido algo.

Una vez escrutamos el mapa y después de oír rezongar a Maurice, como parece ser tan habitual en él, iniciamos un camino silencioso y gélido hacia el pueblo en cuestión. Mientras caminamos por la nieve, bien ataviados con mantas, me paro en algunos puntos para tomar algunas fotografías del blanco paisaje. Quiero dejar constancia de todo lo que nos ha sucedido en estos días, quién sabe, quizás le sugiera un aumento de sueldo a la jefa... En el contrato no entraba nada de tiroteos y aviones estrellados en mitad de páramos solitarios.

De este modo, hablando para mis adentros, llegamos a la costa y vemos ese inmenso navío atracado en el hielo. De inmediato mi olfato detectivesco se activa, y agarro del brazo a mi compañero, cuyo rollizo cuerpo parece estar al borde del colapso tras tantos kilómetros de rodaje.

- ¡Mira, Maurice! - digo con la voz ronca de tanto silencio, señalando al barco - ¿Crees que será el Oddisey? Se supone que tenía que estar por aquí, ¿no? Erik dijo que el pobre conductor de la avioneta nos llevaría hasta el barco... Quizás este fuese su destino - afirmo con tono de satisfacción.

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11/01/2012, 07:35
Director

La decisión parecía estar más que clara; ir hacia aquel carguero.

Con forme fuísteis avanzando hacia allí, podía observarse que la parte delantera había sufrido los efectos de un incendio que dejó calcinados algunas zonas de proa, pero el fuego parecía haberse extinguido antes de llegar a las zonas exteriores. En uno de los laterales del barco, pintadas en un radiante color blanco, podían observarse también las letras que formaban el nombre de la embarcación: ODDISSEY.

Para llegar hasta el barco había que descender por un abrupto acantilado, cosa nada fácil.

Notas de juego

Tenéis una única cuerda. Para bajar por el acantalido (que parece ser la forma más rápida para llegar hasta el barco) se necesita una tirada de atletismo dificultad. 17.

Tened cuidado. Hacedlo bien. Suerte.

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11/01/2012, 18:31
Maurice Stolker

Según se acercaban al carguero más se arrepentía Maurice de la decisión de ir. Aquel barco era lo más siniestro que había visto en los últimos días y, sin duda, eso era mucho decir. Sus dientes comenzaron a castañear y no estaba seguro si era solo por el frío. Cuando estuvieron a suficiente distancia y pudieron ver el nombre del barco sus ojos se abrieron como platos por segunda vez aquel día. - No me jodas, no me jodas...es el puto Oddisey. Pero, ¿cómo coño? - Su madre le habría dado varias bofetadas si hubiese blasfemado de esa forma en su presencia, pero allí no estaba su madre, sino el objetivo de aquella misión de locura. - Bernie, lo hemos encontrado. - Su primera reacción fue de euforia desatada, pero duró bien poco. Si, nosotros lo hemos encontrado a él, pero quién nos va a encontrar a nosotros. Estaban perdidos.

No obstante quiso ser positivo, quizás dentro hubiese una radio, en todos los barcos había varias. Desde allí podrían contactar con la agencia y matar dos pájaros de un tiro: ser rescatados y acabar la misión. - De acuerdo, hay que subir y buscar una radio o bengalas para intentar contactar con la civilización. - Dicho lo cual vio una cuerda que iba desde tierra hasta la nave y dijo: - Por ahí. Nena, vas a ser testigo de mi agilidad felina. - Le dijo a Bernie sonriendo con seguridad. Entonces Maurice se encamaró a la cuerda y con un esfuerzo colosal consiguió avanzar un par de metros...después resbaló.

- Tiradas (1)

Notas de juego

No sé bien que tengo que tirar. Soy un borrico, lo sé. Supongo que vista la dificultad será 1d20. Así que voy con él.

Cargando editor
13/01/2012, 12:36
Maurice Stolker

Maurice se encaramó como pudo a la cuerda. Había avanzado un par de metros y estaba ya que no se podía mover. Entonces recordó cierta película que había visto de joven de como un soldado subía por un muro trepando de una forma peculiar. Maurice lo llamó el estilo caracol. Se trataba de enrollarse de pies y manos en la cuerda, como abrazándola, e ir subiendo poco a poco. Gestionando el cansancio. Así, poco a poco, logró subir a la superficie del barco. Una vez allí estaba eufórico y sin importarle quien pudiera oirle asomó la cabeza por la borda y gritó a Bernie... ¿Has visto, nena?¿Quién es tu papi? - Y se partió de risa. Voy a ver si encuentró alguna escalara de red para que puedas bajar. Y echó un vistazo alrededor.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Hecho está. Que Dios reparta suerte. Jojojojojjojojojoj, Maurice de la jungla.