Partida Rol por web

El Orient Express

Vagón Salón

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13/05/2013, 23:08
Director

Eran pocos los que ya se encontraban en el tren. Y los que lo hacían eran acompañados por Henry hasta sus respectivas habitaciones. Allí cada uno se instalaba y se quedaba dentro de ella si lo deseaba.

Pero el caballero Rochett fue uno de los primeros caballeros en llegar, acomodarse e ir al vagón salón para relajarse un poco mientras leía el periódico.

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13/05/2013, 23:28
Rotchett (Samuel)

Llegué al vagón salón, vi que estaba vacío y que iba a ser el primero en estar allí. Aproveche entonces para escoger mi sitio en el que sentarme y poder leer mi periódico.

Me senté en la fila del medio del vagón del lado derecho junto a la venta. Me gustaba viajar siempre al lado de la ventanilla, y ya que era el primero en estar aquí elegí ese sitio.

Abrí el periódico y empecé a leer mientras esperaba a que estuvieran todos y se pusiera en marcha.

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14/05/2013, 13:05
Macqueen (Hector)

Entré en el Vagón Salón, justo después de Rotchett, como no podía ser de otra manera. Desde que desempeñaba mi trabajo como secretario del señor Rotchett mi vida se limitaba básicamente a eso, a ser su sombra: alguien que pasaba desapercibido cuando tenía que hacerlo pero que siempre estaba allí, dispuesto a atender a cualquier petición que brotara de labios del señor Rotchett.

Me ajusté la corbata. Con el ajetreo de subir las maletas noté que se me había aflojado un poco y eso no daba buena imagen. Tras comprobar que Samuel ya se había acomodado, me acerqué a él, con esa pose amable y servicial que solía caracterizarme cuando estaba con él, aunque tras mi sonrisa amable se ocultaban algunos pensamientos bien distintos.

Una vez me puse a su altura, para poder dirigirme a él sin asustarlo o pillarlo desprevenido, me incliné ligeramente para no alzar excesivamente la voz. -Señor Rotchett, ¿Es todo de su agrado? Si quiere puedo pedir que le traigan algo. - a pesar de no ser su criado, sino su secretario, siempre solía preguntarle por sus preferencias. Mientras esperaba la respuesta por parte de Samuel, dejé mi maletín de piel marrón sobre el asiento que había frente a él. Seguro que, antes o después había algún asunto que tratar. - Su equipaje ya está en su compartimento. Edward ya se está encargando de ello. Luego vendrá con la llave. - le anuncié mientras me quitaba la chaqueta, de un marrón bastante más claro que el de mi maletín.

Notas de juego

Posteo aquí directamente por lógica. Si tengo que postear también en el andén que subo, ¡no problem!

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14/05/2013, 16:56
Henry

Henry entró al vagón salón para indicarle al señor Macqueen que su equipaje lo tenía ya instalado en su habitación. Se dirigió a él y le dijo.

Caballero Macqueen su equipaje se lo he dejado en la habitación número 5 que es donde usted se instala. Tome la llave, y si necesita o requiere algo no dude en pulsar el botón de la llamada y le atenderé.

 

Notas de juego

Constatine te he puesto porque me has indicado que venías aquí

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14/05/2013, 16:59
Rotchett (Samuel)

Dejo de leer el periódico cuando veo entrar a mi secretario Macqueen, a lo que me levanto de mi asiento y le doy la mano mientras le digo.

Hombre, ya esta usted también aquí en el tren. Me alegra verle de nuevo, tome asiento y a mi lado por favor y tomemos alguna copa si es lo que quieres, mientras hablamos.

En cuanto a mi habitación, no se preocupe, relajese y disfrute del viaje.

Llamé con el botón de la llamada a Henry para que nos trajera unas copas.

Henry por favor si es tan amable traiga dos copas llenas de whisky.

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14/05/2013, 21:54
Macqueen (Hector)

Dejé la chaqueta en el asiento en el que había depositado el maletín. Me disponía a sentarme cuando Henry se acercó a mi. Le respondí con una sonrisa, asintiendo.

-Gracias Henry, es usted de lo más amable. - le dije con ese marcado acento y, al hacer el intercambio de la llave, deposité en su mano una moneda, a modo de propina. En América, de donde yo venía, aquello era de lo más habitual. Me despedí de Henry y pasé a atender a Samuel, con la mejor de sus sonrisas, mientras deslicé la llave en el bolsillo de mi pantalón.

- Sí, señor Rotchett, ya estoy por aquí. - le dije, mientras tomaba asiento frente a él, junto a mi chaqueta y mi maletín. Y, remangándome ligeramente los puños de la camisa, me dispuse a sacar del bolsillo interior de mi chaqueta una pitillera, para ofrecer un cigarrillo al señor Rotchett. No hizo falta preguntar nada. Simplemente tendí la pitillera hacia él, esperando a que aceptara mi ofrecimiento.

-Los pasajeros ya están embarcando. Espero que nuestra partida no se retrase.- dije y, al ver que pedía el whisky, sonreí, cabeceando ligeramente- Gracias, lo cierto es que un buen vaso de whisky me sentaría de maravilla ahora mismo. Siempre me han agobiado las estaciones de tren.  - le dije, algo más distendido, aprovechando para echarle un vistazo desde lejos al periódico- Y dígame, señor Rotchett... ¿algo digno de mencionar? - le dije, acomodándome en mi asiento, con mi acento y mi sonrisa del nuevo continente.

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14/05/2013, 22:35
Rotchett (Samuel)

Acepté un cigarrillo que Samuel me estaba ofreciendo, que mejor acompañamiento a un buen whisky que un cigarrillo para el viaje. Mientras hacíamos espera en el tren a que el resto de pasajeros terminaran de embarcar.

Entonces escuché la sirena del primer aviso del maquinista, eso significaba que al menos ya estábamos todos o casi todos y que en breves esto se pondría en movimiento.

Pegando una calada al cigarrillo, miro a Samuel y le digo.

¿Has oído eso?, es el primer aviso, parece que en breves nos pondremos en marcha. Un whisky siempre sienta bien a todo el mundo Samuel.

La verdad que tenemos algo serio de lo que ocuparnos Samuel, cuando lleguemos a nuestro destino nos espera un duro trabajo. Tenemos que asegurarnos que no nos estén tomando el pelo en la empresa americana de importación de neumáticos. 

Una visita allí lo que va consistir es averiguar que los neumáticos son los correctos y no una falsa copia como me han dicho los italianos que han comprado en esa empresa.

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14/05/2013, 22:43
Henry

Henry entra nuevamente al salón con las dos copas que los señores Rotchett y Macqueen habían pedido. Se acerca a ellos dejando las copas a un lado y diciendo.

Aquí tienen caballeros, cualquier otra cosa que pueda hacer por ustedes ya saben me llaman. Si me permiten y es todo me retiro.

Muchas gracias caballeros y que tengan un buen viaje.

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14/05/2013, 23:40
Constantine

busque un asiento junto a la ventana para sentarme, saque un periodico y me puse a leerlo mientras le pedia a henry una copa de vino, mi estimado henry, serias tan amable de ofrecerme una copa de vino, que sea frances porfavor

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14/05/2013, 23:45
Henry

Cuando caminé para retirarme, fui donde me reclamaba el señor Constantine y le dije.

Ahora mismo se la traigo caballero. Me marché del vagón salón al vagón restaurante para decirle a Alfredo que me pusiera una copa de vino francés.

Cuando Alfredo me la sirvió volví al vagón. Abrí la puerta y me dirigí al asiento del caballero, le dejé la copa de vino junto con la botella de vino a un lado y le dije.

Aquí tiene señor, su copa de vino francés, también le dejo aquí la botella de vino. Que disfrute del vino señor, si no requiere nada más me marcho. Gracias.

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15/05/2013, 20:09
Constantine

muchas gracias henry le ofreci una propina generosa a henry. Segui leyendo el periodico mientras me deleitaba con el vino.

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16/05/2013, 01:09
Macqueen (Hector)

Tras ofrecer fuego a Samuel, yo mismo tomé un cigarrillo de la pitillera y, tras colocarlo en la comisura de mis labios, encendí otra cerilla para mi. Cuando el cigarrillo prendió aspiré el humo, en una profunda calada, una de esas caladas que tan bien sienta después de un ajetreo considerable. Asentí a Samuel, cuando yo también oí el silbato.

-El tren está a punto de partir, si.... - dije, expulsando el humo lentamente, deleitandome en aquel pitillo. Y, cuando el Whisky llega, sonreí a Henry, despidiéndolo con un amable cabeceo.

- Eso no puedo rebatírselo...- comenté a Rotchett cuando hizo alusión al whisky , señalándolo ligeramente con el cigarrillo, siempre cordial. Y, una vez más, mi acento americano salió a relucir. Y, al escucharlo susurra, me incliné discretamente hacia delante, para no perder detalle. Escuché en silencio, asintiendo ligeramente de cuando en cuando, como para hacerle ver que estaba prestando atención a todas y cada una de sus palabras- Me temo, señor Rotchett, que su preocupación es más que lógica. Me avergüenza decirlo, pero no todos mis compatriotas son, como dicen los británicos, hombres de honor. En cualquier caso, no será muy difícil adivinar si nos están intentando dar gato por liebre. Si lo que buscaban era un comprador ingenuo, me temo que han dado con el cliente equivocado. -afirma, bajando tambien el tono. Y no queda muy claro si la última frase se refiere a Samuel o a él mismo- En cualquier caso, estaré encantado de tratar con usted los temas que crea convenientes. Después de todo, aún nos queda un largo viaje... - termino dando un sorbo a mi copa de whisky, no sin antes alzarla ligeramente, en un brindis imaginario. Y, acto seguido, tras notar la quemazón del licor en mi garganta, vuelvo a dar una calada al cigarro. Qué mezcla tan perfecta. Tabaco y alcohol. Todo un deleite para los auténticos caballeros.

 

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17/05/2013, 11:24
Debenham (Mary)

Mary entra en el vagón salón. Después de haber organizado todo su equipaje en su compartimento y haberse aseado, se siente mucho más fresca y relajada, ha tenido que correr mucho para poder llegar al tren que pensaba perder. 

Mira a su alrededor con cara de aprobación y a continuación observa a los caballeros que mantienen una densa conversación en la estancia. Cuando éstos vuelven su cabeza en respuesta a los pasos que anuncian una nueva invitada en la sala, Mary mueve su cabeza en señal de saludo y comenta

Buenos días caballeros.

Después abre su bolso de mano y saca un largo pitillo de su pitillera que posa en su boca

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17/05/2013, 11:50
Rotchett (Samuel)

Escuchaba atentamente y de cerca a Hector, todo aquello que me comentaba sobre los compradores y sus compatriotas...Siempre me había parecido un hombre muy astuto y listo. Por eso también en muchas ocasiones tenía miedo de lo que podía llegar hacer a mis espaldas o en la misma cara.

Pero aun así no hice ninguna muestra de mis preocupaciones visibles, prefería seguir escuchándole y beber este whisky que nos había traído acompañado de un cigarrillo.

Vi entrar a una bella dama, a lo que tras ver su saludo saludé muy educado.

Buenos días señorita.

Entonces me arrimé un poco más a Hector y le dije.

Veo que sabes demasiado, sin duda alguna a tu lado tendré mis negocios a salvo...

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17/05/2013, 20:57
Macqueen (Hector)

Hice una pausa, para dar una calada a mi cigarro y volver a beber de aquel vaso de whisky. Fue entonces cuando reparé en la presencia de aquella señorita así que, tras volver a exhalar el humo, y con la mejor y más americana de mis sonrisas, fingí quitarme un sombrero que no llevaba puesto a modo de reverencia.

-Buenos dias, madmoiselle. -dije, haciendo gala de mis conocimientos de idiomas, una de las razones que me habían llevado al puesto que ahora ocupaba.Si hubiera estado solo, seguramente habría entablado conversación con ella, pero con Samuel allí no causaría una buena impresión. Así que, tras aquel salude inicial y al percatarme de que Rotchett me había hablado, volví a dirigirme a él, con una delgada sonrisa, que acabó por torcerse en mi rostro.

-Mi padre siempre solía decir que hay que intentar estar siempre un paso por delante, señor Rotchett. Y, desconfiar es, en la mayoría de los casos, la mejor forma de hacerlo. Además, en mi país, por desgracia, estamos mucho más acostumbrados que en el viejo continente a todo tipo de estafas. Eso hace que se agudicen los sentidos...

Terminé el discurso ensanchando mi sonrisa, y alzando mi vaso, antes de volver a beber de él. En general, estaba de buen humor. Si todo resultaba ser, como parecía, un timo, me marcaría un buen tanto con el señor Rotchett. Y eso era algo que podría beneficiarme en el futuro.

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18/05/2013, 03:32
Constantine

levante mi copa para dar un sorbo, el esquisito sabor del vino me hizo recordar mis años en la escuela de medicina, me sumi en los recuerdos del internado, aquellas noches largas que parecian no tener fin, en ese momento, una bella señorita interrumpio mis pensamientos, la salude lo mas cordialmente posible bonjour mademoiselle, me levante apresurado y saque un encendedor ¿puedo ofrecerle lumbre?

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18/05/2013, 15:50
Rotchett (Samuel)

Me vuelvo a poner como en mi asiento y pegando un trago más al vaso y fumando tranquilo le digo a Hector cambiando un poco el tema.

Necesito que me enseñes los informes y cuentas de la empresa de algodón. Quiero ver como va el negocio con esa empresa que tengo, y que no sé nada desde hace un mes. Lo siento no es tu culpa, es mía. Pero he estado muy ocupado viajando y no me he podido centrar en la empresa de algodón.

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18/05/2013, 16:14
Debenham (Mary)

Mary sonríe agradecida cuando aquel hombre le ofrece su encendedor.

Muchas gracias, dice mientras se acerca para encender su cigarrillo. 

Veo que se encuentran hablando de negocios. Disculpen la interrupción, sólo quería conocer un poco el tren en el que nos mantendremos encerrados unos días

Dicho esto, da unos pasos hacia atrás y se asoma a la ventanilla más cercana mientras fuma su cigarrillo y contempla pensativa la estación que están a punto de dejar atrás. 

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18/05/2013, 16:55
Macqueen (Hector)

Asentí, ante la petición de Samuel y, tras buscar con la mirada un cenicero cercano, dejé mi cigarrillo sobre él para, acto seguido, coger mi desgastado maletín de piel marrón. Un simple vistazo bastaba para saber que aquel maletín había tenido ya su tralla. Lo abrí y, durante unos segundos, revisé los documentos que había en su interior. Finalmente, encontré un cuaderno verde oscuro y granate, con ese estampado en la portada típico de los libros de cuentas antiguos. Mi expresión satisfecha denotó que había encontrado lo que estaba buscando.

-Aquí tiene, señor Rotchett. Estas son las cuentas de la empresa desde primeros de año. Juzgue usted mismo lo resultados... - le dije, cogiendo mi cigarro para darle una nueva calada y volver a dejarlo en el cenicero. Aún tenía que buscar los informes, así que continué explorando mi maletín hasta extraer, en esta ocasión, una carpeta de cartón, con algunos folios escritos en su interior- Y esta es toda la documentación de la que disponemos, también en lo que llevamos de año. He recopilado aquí desde los informes laborales, hasta las incidencias, pasando por cualquier otro tipo de observación o de actividad relacionada con la empresa. - le expliqué, eficiente. No, desde luego, si algo iba mal, era extraño que fuera culpa mía. Si por algo me caracterizaba, era por ser una persona eficiente, metódica y responsable.

Me interrumpí, al ver que la señorita en cuestión se dirigía a nosotros, después de que aquel otro tipo que ni siquiera había saludado se tirara de boca a ofrecerle fuego. Le sonreí, mientras volvía a dejar mi maletín en el asiento y negué, ladeando mi sonrisa.

-No se preocupe, señorita. Si necesita cualquier tipo de ayuda, estoy seguro de que tanto el señor Rotchett como yo podremos ofrecérsela. - una fórmula de cortesía como cualquier otra. Un caballero nunca se permitiría ser descortés con una dama, y estaba en mi deber de mostrar que, tanto Samuel como yo, lo éramos. Acto seguido, en cuanto la mujer fue hacia la ventana, volví a hacerme con mi cigarrillo, que ya había reducido considerablemente su tamaño y, con una larga calada, me apoyé en el respaldo, observando a Samuel:

-Si necesita alguna aclaración, estoy a su disposición, Samuel. - le dije, aguardando su veredicto.

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19/05/2013, 04:15
Constantine

me aserque a aquella señorita del cigarro. Soy el Doctor Constantine, ¿puedo invitarla a sentarse y compartir una copa de vino frances conmigo mientras esperamos que parta el tren?, por cierto, no se su nombre aun estire mi mano como invitacion para ayudarla a tomar asiento