Partida Rol por web

Los individuos de la trampilla están como en una bóveda de unos 6-8 metros de la trampilla. No les llega la luz ni por asomo.......

Los borrachos se acercan a ti, poco a poco. Lucía y Juan pueden verlos, pero aun no. Antes de que actúe cualqueir de tus compañeros, los borrachos te verán a ti, si o si. En cuanto a hablar a tus compañeros, puedes hacerlo, excepto a Maraña que está dentro, pero si hablas desde donde estás será a gritos y puedes alertar a alguien.

Juan no tenía nada de luz cerca que poder darla , pero si podía avistar algun pequeño candil cerca del borde de la cubierta (no hace falta tirada). Viste un candil encendido con poquito aceite casi en el extremo de cubierta, pero cercano a vuestra posición. Se podía usar sin problemas. Lucía también podía contemplarlo.

 Me pongo a silbar cantando una canción que me sonaba de pequeño. SHISHISHIHSHI... LALALA SHISHISHI. Digo dentro de la tramppilla lo sufieientemente fuerte como para que me oiga el de dentro pero que los borrachos ni se inmuten Cuando de 2 toques, vía libre

Entonces bajo despacio la trampilla para que los marineros no la vean abierta.

Seguidamente me cojo una correa de la sandalia y me siento en la borda para disimular que estoy practicando nudos.

Juan va a por el candil y cogiendolo con cuidad le lleva el candil a Ricardo

 Me parece que nos hemos confundido... Yo me quedé justo al lado de la trampilla para avisar al que estaba dentro de si alguien venía. Como dijo lucia:

Yo me quedaré en cubierta, entonces. Acuña, tampoco te vamos a meter en algo con lo que no estás de acuerdo. Maraña, ¿Qué tal si bajas tú, y nuestro doctor vigila la trampilla?

....Almenos eso crei entender. xDDD

Dame la situación cuando leas esto ok? ;P

okei, pues en breve actualizo todo.

saludos.

Si, me he liado yo. Lo había entendido mal, (he permutado las posiciones de Lucía y Thorge). No problemo continuamos.(Thorge, ya se que es un poco chapuzas, pero no he dicho nada con respecto a tu post, oki? :D)

Ja, ja ja.... puf... jJaj jjjaj .. .(glup),... y decia: "en su misma taberna, ¡señor!" Puaa jaj aja jaja jaja....

Dos marinos, borrachos, iban hacia tu, tan sólo tu los habías visto y oído. Iban a pisar cubierta de un momento a otro. El resto no podía oirlos, sólo tu.

La situación es:

Lucía vigila en cubierta.

El doctor Thorge está practicando unos nudos con cuerda.

Juan acuña ha cogido un candil y se lo entrega a Ricardo.

Ricardo está en el interior de la trampilla (justo en la entrada).

Lucía hizo la señal convenida, silbando unos cuantos acordes de una canción que le había oído cantar a los marineros un par de veces.

-Eh, muchachos- les dijo a los que llegaban, hablando no muy alto-Si no quereis meteros en líos es mejor que sigais la juerga en otro sitio. Chandock andaba por aquí hace un rato, y como vuelva y vea a dos marineros borrachos en la cubierta, no le va a hacer mucha gracia.

Ricardo guiña un ojo a Juan cuando le acerca el candil, a modo de agradecimiento. Y rápidamente se interna en el túnel para alumbrar a esos pobres diablos, tratando de no hacer ruido pues le ha parecido oír algo en cubierta.

Lucía sabir extraordinariamente bien (crítico). Nadie sabía cual era su secreto, pero bien podría capitanear un barco de esas características. Acto seguido, los dos borrachos se marcharon hacia algún camarote. Ricardo tomó el candil que Juan le dio. Ahora se veía su interior. Ricardo se internó en el largo pasillo.

Con una luz decente entre tus manos, caminabas pasillo alante, adentrándote y rompiendo la oscuridad que te impedía ver qué había allí. Cuando llegaste al final, el brillo de sus ojos iba al compás de la vela del candil: eran personas. Personas normales. Tenían la misma posición que antes, el mismo semblante en la cara, allí... de pie. Parecía tener la mirada perdida (ni siquiera te miraban), y no hablaban entre sí, estaban callados.

Sus ropas eran del mismo tipo que cualquier pirata corriente podría tener: pañuelos, camisas blancas y algo sucias y pantalones rasgados. Estaba allí "apretados" al final del pasillo, uno tras otro. La escena no era aterradora ni horrenda, simplemente... curiosa.