Partida Rol por web

EL RESULTADO DEL TRABAJO DE POLAT/O'LEARY:

Es una dura jornada de quemarse las cejas rebuscando volúmenes añejos encuadernados en cuero. Qué curioso e inquietante es encontrar referencias al fez rojo a lo largo de varios siglos. Se lo relaciona con el reinado del terror del usurpador Baibars al-Jashnakir en Egipto, en el siglo XIV. Un tipo tan canalla que el pueblo del Cairo lo derrocó en una revuelta popular. Cuando Egipto fue conquistado en 1512, se rumorea que lo llevaron a Anatolia. Aparece en crónicas de la corte otomana del siglo XVII, leyendas de Samarcanda del siglo XV, y delirantes reportes de viajeros europeos en Grecia a principios del siglo XIX...

El resultado es un conjunto de textos en varios idiomas que copíais y reunís en un mismo legajo.

Habéis creado prácticamente un libro a partir de fragmentos EL APÓCRIFO DEL FEZ ROJO.*

SOBRE LA HISTORIA DEL FEZ ROJO.

"El Sangriento Fez Rojo siempre fue un objeto maligno, hecho en nombre de poderes inmobrables, poderes tan repulsivos que ningún hombre cuerdo debería murmurar sus nombres. El fez apareció por primera vez en la Corte Otomana alrededor de 1550, aunque algunos dicen que es más antiguo que el Islam, que data de la antigua Grecia. Dicen que tiene el poder de controlar las mentes y los destinos de los hombres, haciéndolos esclavos de una corrupción antigua, más antigua que el tiempo".

LA PROMESA MALIGNA.

"Beber, derramar, o bañarse en la sangre de un Príncipe mientras se lleva el fez, algunos dicen, trae favores principescos de los Dioses Oscuros. Según otros, es la llave de la inmortalidad. Pero quizá esos dioses oscuros tienen un concepto de "favor" diferente que la nuestra".

UNA ADVERTENCIA.

"Escuchad mis advertencias: llevar la abominación llamada el Sangriento Fez Rojo traerá la ruina y la desolución, pues ponérselo tu propia mente y alma a los pies de la sacrílega voluntad del fez y sus terribles amos. Solo los maestros de las artes oscuras pueden sobrevivir a algo así, y para ellos el precio es aun más terrible. Es posible controlar el Fez e incluso detener su propósito terrible. Los que buscan el conocimiento oscuro deben indagar en el libro El Fez Susurrante".
 

KAZIMIERZ/MEADOWCROFT.

Saliendo del consulado otomano decidis que hay tiempo de coger un tranvia a Rotherhite. Smith ya ha hablado con la policía. Así que el agente uniformado de guardia os deja entrar. 

La casa del malogrado señor Devore es un cottage de un solo dormitorio. El interior ha sido saqueado y hay fezes por el suelo en todas partes y un pequeño armario-vitrina destrozado en el salón. La alfombra de la entrada aun tiene la mancha que dejó el cuerpo del pobre residente. 

Había estado a punto de acabar en la nada, todo este tiempo dedicado a buscar entre viejos incunables y polvorientos cartapacios, pero la férrea voluntad de los dos intelectuales había permitido coronar con éxito la tarea, por fin.

Polat se restregó los ojos somnolientos.

—Estimado compañero, —dijo, —creo que la tarea ha sido muy productiva.

-Bien cierto, amigo.

El profesor estaba muy cansado. Sus ojos enrojecidos y los restos de varias pipas evidenciaban la enorme cantidad de tiempo que habían consumido en su investigación.

-Aunque hubiera preferido que todos estos conocimientos quedaran en el olvido para siempre.

Los preparativos para nuestro viaje continúan sin incidencias. Aún quedan unas horas para la salida de nuestro tren, por lo que intento repasar con mis compañeros si hay alguna otra cosa que podamos hacer que nos ayude a prepararnos...

Tras un día de fructíferas investigaciones, por la noche todos coincidís en el Oriental Club para comparar notas y tomar una reconstituyente copa de oporto.

Finalmente, todas las excusas y justificaciones que KAZIMIERZ había estado elucubrando durante el trayecto a Roterhite, resultaron innecesarias. Pues tal parecía que el profesor SMITH ya había puesto sobre aviso a los encargados de la investigación, y estos estaban deseosos de aceptar cualquier ayuda que pudieran brindarles

Evidentemente, estaba claro que la policía de Londres no tenía ni la menor idea de por dónde comentar siquiera sus pesquisas…

Cuando entraron al lugar, el joven noble no pudo evitar que su mirada se centrara un buen rato en la mancha carmesí que ensuciaba la alfombra. Aquello era un recordatorio del tipo de sujetos con los que trataban. Y del precio que habrían de pagar aquellos que intentaran oponerse a sus designios…

Consciente de que no era un experto investigador (y que, en realidad, ni siquiera sabía lo que estaba buscando), KAZIMIERZ procuró identificar detalles que pudieran lucir fuera de lugar, que le dieran algún indicio sobre las últimas actividades del difunto Sr. Devore. Quizás algún manuscrito, o el ticket de algún viaje. Publicaciones que pudiera estar leyendo, o simplemente detalles de algún pasatiempo.

Por supuesto, también se dejó llevar por la simple curiosidad, rebuscando la malograda vitrina para ver que otras cosas podían haber sido de tanta importancia para aquel particular personaje.

Aún tienen tiempo de poder ir a ver la casa del pobre caballero que ha muerto, y la joven se pasa el trayecto intentando hacerle entender al caballero por qué no es adecuado que se usen nombres de pila. Puede que fuera de la City esté bien visto, pero en Londres...está casi segura que estando en público ni siquiera los miembros de una misma familia se tutean. Si ella trata de “Usted” a su propio padre, ¿qué pensaría el anciano si por casualidad escuchara que tutea a un hombre?.

Deja que sea su acompañante el que hable, limitándose a observar la destrucción del pequeño cottage. Sin embargo la verdad es que no puede centrarse en mucho más que en clavar los ojos en la mancha todavía húmeda que indica el punto en que calló el desgraciado anciano...

Un rápido repaso a las propiedades del difunto señor Devore permite encontrar en su escritorio una carta que recibió de Estambul: se la mandaba un tal señor Leeds  ofreciéndole 100 libras (una suma principesca) para comprarle un libro llamado "El Fez Susurrante". El matasellos es de hace dos semanas, no hay dirección de remitente en el sobre.

Aparte encontráis un libro con un registro de todos los fez que tenía Devore (por motivos de poliza de seguro). Sólo aparece un libro en la colección, el "Fez Susurrante". Que falta. Por tanto, es lo que robaron.

Aparte, hablando os dáis cuenta de una cosa. Pook comenta en su diario que los sospechosos individuos a los que investigaba pensaban volver a Estambul de la forma más rápida posible... Eso implica que tan truculentos turcos irán en el mismo tren que vosotros. Es el método más rápido de ir a la capital otomana. Y vuestro expreso es el que sale antes.