Partida Rol por web

El templo del Viento es testigo de como la oscuridad comienza a llegar a el, rumores sobre un posible ataque del ejercito de Vermas el cual ademas puede estar involucrada la orden, el enemigo de todo el mundo. Sin embargo para el grupo de aventureros estos asuntos pasan a un segundo plano justo cuando habian logrado comenzar a contactar con los moradores del templo y es que se descubre la autentica mision de Khan y sus contratistas.

Elenaide observa bastante callada las reacciones que se van sucediendo, entonces finalmente habla en tono frio y tranquilo:

- Era evidente que no eras un paladin sino un ninja, tu forma de luchar sin duda es como la de aquellos, usando el sigilo y el engaño para poder acabar facilmente con tus enemigos de forma muy diferente a la que los luchadores honrosos usamos, sin embargo

Se acerca a Kayla y le mira con una mirada acusadora:

- No es motivo suficiente para tratar a alguien que ha sido compañero de esa forma, alla de donde vienes no se como se actuara en situaciones como esta, pero de donde yo vengo no actuamos de esa forma

Seguidamente se acerca a Khan y dice:

- No conozco el codigo de honor de los ninjas ni si teneis un codigo de honor, sin embargo, si se como actuaria uno de los mios y nunca habriamos hecho una mision asi, pero creo que antes de nada podrias darnos informacion sobre la orden ya que eres miembro de ellos

Yui se queda callada y entonces tras la intervencion de Elenaide dice:

- Esto, no lo habeis pensado? el ha estado con nosotros desde hace tiempo y no ha actuado en contra nuestra, ademas nos ha ayudado y por lo que contais aquel mago de la orden tambien le ataco a el como si no le conociese, no tendria sentido verdad? ademas que haya sido el mismo quien se lo ha contado a Kayla... no se

Mientras que Tenebrae habia llegado alli luego de dar un gran paso hacia adelante, apenas podia entender la situacion pero por la exprecion de Kayla, penso que alguien mas le pidio que usara su magia para sanarlo. Pero pronto se daba cueta que no era asi y mientras seguia sin entender bien que habia pasado, su mano se afirmaba bien en la empuñadura de Eliza al comprender una cosa, Khan formaba parte o trabajaba para la Orden.

Lo que mas le molestaba a Tenebrae no era el simple hecho de la traicion, le molestaba que siendo un Guerrero del Clan de la Temple, un paria entre los de su raza y un extraño en esas tierra... por fin habia recobrado su camino y en cumplimiento de su deber, llevo siempre al "espia" y casi lograba que entrara en el Templo, debio sospechar mas por como se comportaba... Pero por suerte la trampa fue "revelada", ya que el estaba seguro de una cosa mientras escuchaba a Elenaide y a Yui.

No comprendo bien la situación, pero solo se que esa Orden es nuestro enemigo, es esa Orden la que desea aquello que no podemos mencionar en este lugar publico y posiblemente, sea la Orden detras del Sitio.

Empezaba diciendo mientras que con calma movia su espada para luego, apoyar con cuidado sobre la mesa parte del filo de la misma. Ahora el estaba mas que dispuesto a matarlo ante el menor intento de algo raro, el no se ira vivo de alli si intenta escapar.

Señorita Yui, hay veces que la teatralidad es necesaria para infiltrarse en las lineas enemigas, eso solo pudo haber formado parte de su plan. Sigo sin saber exactamente que esta pasando aca, pero nuestros enemigos no deben ser subestimados.

Seguia hablando sin apartar su mirada del hombre gato, incluso usando su mano libre para asegurarse que BEatrix se acomode despacio atras de su cuerpo, como miembro de su Clan, Tenebrae ya se preparaba para lo peor.

Sera mejor que hables "gatito", si tus intenciones son buenas nos diras todo porque hay dos paladines afuera que seguramente estarian gustosos en encerrarte. Por otro lado si no nos mientes, puede que las mazmorras no sean tu destino, ni siquiera pasar por el filo de Eliza... 

Le hablaba con decicion mientras su rostro seguia tan inexpresivo como siempre, pero su mirada se clavaba en ese hombre gato de forma amenazante, estaba claro que el no era como el resto de sus compañeros y seguramente, era por ser en cierta forma el "nuevo"...

La señorita BEatrix, si es que nos presta sus servicios, podra decirme si mientes o no... asi que cuida tus palabras y dilo todo, pero ante la mas pequeña de las mentiras o un intento de ocultarnos algo... no te alcanzaran las siete vida.

Terminaba diciendo sonando realmente agresivo a pesar de la calma de sus palabras, pero tampoco estaba dispuesto a matarlo o entregarlo a los Paladines, debia conocer lo que estaba pasando y debia saber de que bando estaba el realmente, aunque tambien dejo claro que el desconocia la situacion y no hacia falta decir, que su pocicion fue por lo poco que pudo comprender de esa situacion.

Las reacciones se suceden, aunque es la primera aquella que más me sorprende y duele, en muchos aspectos. Kayla lanza como un dardo envenenado su afirmación más cruel. Cruel por el daño que me provoca, y también por el que se que le he provocado. Esa ponzoña no saldrá fácilmente de nuestros cuerpos y nuestras almas.

No confía en mi. En el fondo debería estar satisfecho ¿No era eso lo que buscaba con mi confesión? ¿No deseaba que perdiera esa inocencia que la hacía débil, que la exponía a sus enemigos? Yo buscaba en ella la fuerza que sabía que podía tener, y era consciente del sacrificio que me exigía despertarla de su mundo infantil e ingenuo. Pero eso no hace que duela menos, porque se lo que se sufre. Vaya si lo se, pocos habrá que hayan sufrido como yo el despertar al mundo real, cruel y malvado. Pero también porque he sesgado de raíz los vínculos que nos unían. Había aprendido a disfrutar de esos vínculos con otro ser, por primera vez en mi vida.

Por eso, cuando me dice que recoja mis armas, no se qué pensar. No tiene sentido. ¿Se trata de inteligencia táctica, obligándome a luchar para no menguar las escasas fuerzas de este grupo, a pesar de su seguridad de que puedo traicionarles? ¿O tiene redaños a ajusticiarme ella misma, y desea verme morir a manos de mis antiguos amos?

¿O es que aún hay esperanzas...?

Elenaide me saca de mis dolorosas ensoñaciones. Su particular visión de mi forma de luchar y del honor casi me ofendería en otras circunstancias, pero no me molestaré en contestarle. Nada tengo que ganar. Sin embargo, no esperaba una "defensa", si es que puede llamarse así, como la que esgrime. Aún sabiendo mi vinculación con la Orden, me llama compañero, y a pesar de sus acusaciones ofensivas, me pide información.

Si hubiera sido descubierto en medio de una misión, aún a servicio de mi contratante, jamás me sacarían nada. Ahora, sin embargo, es muy diferente.

Esa Yui también guarda sus dudas. Me parece algo ingenuo pensar que es bueno que no haya obrado en contra del grupo, pues no lo habría hecho de todas formas si hubiera continuado mi misión inicial, pero lleva razón en una cosa. En tal caso jamás se lo habría confesado a Kayla. Miro a la maga un instante, pero pronto aparto la mirada para evitar el dolor de contemplar su rencor.

Suspiro cuando Sir Mercenario habla. ¿A esto he llegado? ¿A ser interrogado por aquel de quien más desconfío? Sus amenazas me resultan baldías a pesar de no tener defensa ante ellas. Mis armas reposan aún sobre la mesa, y no estoy dispuesto a cogerlas de momento. Pero algo llama mi atención: ¿Esa Sacerdotisa sabe leer la verdad?

Me pongo en pie, lentamente, con las manos separadas del cuerpo, bien a la vista, con la mirada cansada. Miro a todos lo presentes y, lentamente, acerco mis manos a mi capucha y a mi máscara, apartándolas de mi rostro con suavidad. Dejo al descubierto un rostro grotescamente felino, de ojos desmesurados y brillantes, pómulos marcados, nariz ancha y boca torcida en una permanente mueca de disgusto que deja aflorar unos colmillos afilados. Mis orejas puntiagudas apenas se asoman a la maraña de pelo castaño oscuro, casi negro que corona mi cabeza. Toda mi piel, al igual que en el resto de mi cuerpo, es marrón parduzco con rayas más oscuras. Es el rostro que los humanos detestaban, cuando yo era pequeño, el que me obligó a apartarme de la sociedad y ser un solitario. Cierro los ojos un instante, antes de observar sus reacciones. Entonces miro a Elenaide.

• No soy miembro de esa Orden, soy alguien a quien contrataron. Es muy diferente. -Aún hay orgullo en mi para puntualizar ese tipo de cosas- Y sí hay honor en nosotros, los Ninjas, solo que es un código diferente a vuestro. Para mí, el honor no consiste en exponerse como un blanco a los ataques enemigos, para ofrecerles una oportunidad. En la lucha, para nosotros vale absolutamente todo lo que te acerque a tu objetivo. Es nuestra palabra lo que debe respetarse siempre, un pacto que siempre debe ser satisfecho.

Me giro entonces hacia Tenebrae, a pesar de ignorarle completamente. No es a él a quien quiero dirigirme, sino a esa mujer que protege a su espalda, a quien oculta con un gesto de su brazo mientras enarbola su espada en contra de un hombre desarmado.

Hace bien, nunca puedes saber cuando un Ninja tiene un as en la manga. O una daga oculta.

• ¿Es cierto? ¿Puedes leer la verdad y la mentira en las palabras de los hombres? -Ni tan siquiera espero una respuesta- Entonces escúchame, atiende mi confesión. Soy un Ninja, un espía y asesino. No hago preguntas cuando recibo un encargo, más allá de lo necesario para llevarlo a cabo. No somos hermanitas de la caridad, y no fingiré ser una buena persona. Recibí un encargo, y no hice preguntas. El contratante era un mago, y parecía tener a mucha gente a su servicio, incluido ese tal Albericht, así que debe ser alguien importante dentro de la Orden. Puede que sea su líder, o al menos uno de los jefazos. No se su nombre, pero le reconocería sin dudarlo si le viera. Puedo daros una descripción, si queréis, y la situación del lugar donde se realizó el encuentro. La misión era simple: encontrar a un grupo de aventureros y seguirles, para arrebatarles unos objetos que estaban buscando y entregárselos a él. Ni siquiera debía matarlos ni hacerles daño -aunque lo habría hecho si fuera necesario, ese era mi trabajo- No supe de la naturaleza de esos objetos hasta que me hablaron de ellos al llegar a este valle, y para entonces el contrato ya estaba roto. El encuentro con Albericht lo deshizo.

A ti te contrato este:

Pero tambien viste a este

Ante lo sucedido Hack da un fuerte golpe en la mesa que retumba en toda la sala, cuando levanta la mano todos pueden ver como hay una grieta en la mesa, la princesa mira fijamente a Khan y dice en tono imperativo:

- Asi que te habian contratado para espiarnos y quitarnos las llaves

Da un paso acercandose a Khan y le mira fijamente a los ojos:

- Y porque tenemos que creerte ahora? quien nos asegura que estas diciendo la verdad? y a mi me da igual que esa sacerdotisa que sabe leer las mentiras diga lo que quiera

Hack seguidamente se da la vuelta y se dirige hacia la puerta de la taberna, cuando va a salir se para y da un puñetazo a la pared esta vez mas fuerte y dejando un agujero mienras dice:

- ¡Mierda!

Para seguidamente salir de alli

Beatrix dice:

- De acuerdo puedo intentar el hechizo

Se acerca a Khan y todo pueden ver como comienza a recitar palabras muy bajo, para seguidamente poner la mano derecha en la frente de Khan, la mano emite un suave brillo dorado durante unos segudos, tras esto aparta la mano y dice:

- Todo lo que ha dicho es verdad, estoy segura de ello

Seguidamente se acerca a donde esaba y pregunta a tenebrae en el oido:

- Si lo deseas puedo llamar a los paladines que hay fuera esperando

Tenebrae no apartaba la mirada de Khan que por primera vez descubria su rostro, esta claro que es un acto desesperado en busqueda de credebilidad, pero no era algo que le afectara ya que el se limitaba a escuchar sus palabras. Al parecer Khan solamente fue contratado para cumplir algo que no hizo, al menos que lo que paso en el templo del viento este relacionado con el, pero ignoraba lo que sucedio alli como para decir algo.

No es necesario Beatrix, pero no lo quiero solo dentro del templo, no lo quiero cerca de la llave y sobretodo, lo quiero lejos de la sacerdotiza, Arturus y el lider de los paladines.

Le terminaba susurrando a Beatrix luego de confirmar que el decia la verdad, estaba claro que se arrepentia por lo que no era necesario ejecutarlo ni encerrarlo. Pero al no ser capaz de confiar en el, no deseaba arriesgarse en dejar huecos desprotegidos y aunque preferia que no fuera al templo, el tambien estuvo en ese Templo...

De todas formas, cuando estaba por hablar nuevamente, notaba como la princesa reaccionaba castigando la mesa, ella estaba muy enojada por aquella traicion y no era de extrañarse, ellos pasaron mucho tiempo viajando juntos y la confianza que se forjo entre ellos no fue mas que una ilusion, la sensacion de la traicion y de descubrir algo asi justificaba esa reaccion. Pero no podia dejar que el grupo se fragmentara, en ese lugar habia un ejercito pero cada espada era necesaria y la fuerza de HAck, podria ser la diferencia en la defensa.

El Clan de la Temple se reserva la resolucion del juicio para mas adelante, pero cuando menos lo esperes Khan, tendras mi resolucion... Por otro lado, ya tienes suficiente castigo que soportar asi que no es necesario que sufras el filo de Eliza.

Terminaba diciendole luego de guardar unos minutos de silencio despues de que la Princesa se retiró, el no tenia nada mas que decir pero tambien sabia que luego de esa confesion, es posible que se sienta sitiado ante tanto rechazo, un castigo mas que suficiente.

Ahora no es momento para seguir perdiendo el tiempo, deben seguir a Beatrix, ella los guiara hasta la presencia del segundo al mando de la Orden de Paladines de este Templo, respondan sus preguntas ya que es necesario para la defensa del este valle... yo me encargare de Hack.

Terminaba diciendo tratando de tomar las riendas d ela situacion y guiarlos de la forma deseada, no perder mas tiempo aunque cada vez que creia avanzar varios pasos, terminaba descubriendo situaciones que desviaban su camino ya que al pretender buscar a la Princesa, solo perdera tiempo.

Señorita Beatrix, llevese a uno de los Paladines para que siga a Khan como si fuera su sombra.

Terminaba indicandole a Beatrix ya que pensaba convencer a HAck para que lo acompañe, era lo mejor para aclarar la mente y calmar los animos... tampoco podia dejarla estar en el Templo con aquel humor, podria arruinar el intento de acercamiento y eso, era algo que no podia permitir si queria acercarse a la llave. 

Elenaide mira a Tenebrae y seguidamene dice:

- Un momento, desde cuando el grupo tiene un lider y ese eres tu?

Seguidamente observa a todos los alli presentes:

- Debemos de zanjar este asunto antes de seguir adelante puesto que nos veremos obligados a luchar y en batallas muy complicadas y no deseo estar en un grupo donde hay rencores y desconfianza, asi pues

Mira a todos uno por uno deteniendose unos segundos para finalmente decir:

- Que pensais hacer? continuar con khan pese a que haya dicho que su trabajo era raicionarnos pero que ha decidido no hacerlo porque le han traicionado a el, o preferis no continuar con el o simplemente marcharos

El samurai habia estado muy callado y habia estado al lado de Yui, pero sin decir nada, cosa rara en el. Era raro que no dijera nada y que no tomara la iniciativa...aquellas palabras y revelaciones. Un mito se habia caido...Khan no era buena persona.Estaba muy decepcionado con el. ¿Que hacer?Darle otra oportunidad... por el se la daria, era mas, compartia mucha de la opinion y ante las aseveraciones e insistencia de Elenaide, contesto aunque fue algo escueto:

-Estoy con Yui, Khan-san no ha llegado a hacer nada malo aun... y reniega de ello, ahora se necesitan manos y brazos para sumas, no se puede prescindir de ellos... sus actos recientes hablan por el mismo, yo solo he visto que ha ayudado de muchas maneras...creo que habria que darle una segunda oportunidad para que siga ayudando... ademas sino mostramos compasion ¿somos mejores que la Orden?

Su voz era un poco neutra, algo desanimada. Khan, le habia decepcionado y mucho...y pensar que la misma noche le habia dado un valioso consejo y le habia apoyado... no lo entendia porque lo habia hecho y no entendia porque le habia dicho aquello ¿Otra mentira? Se conocian de hacia muy poco, los lazos eran mas fuertes de Khan para con Kayla y Hack...pero eso no era asunto suyo y no le involucraba...

No tenia nada mas que añadir, tenian que cerrar ese tema aqui y ahora... y no podia ser en falso.Dejaria que los otros hablaran, ahora que Tenebrae habia conseguido que les dejaran hablar con la Sacerdotisa. Vaya con Tenebrae, habia conseguido lo que habia prometido, era para tener en cuenta... Pero un error no se tapa con un acierto y ya estaba juzgando a Khan,... Elenaide se le adelanto... se le tendria que juzgar con mas garantias...

August no había dicho nada. No le había dado tiempo. Los acontecimientos se desarrollaron de tal forma que al espadachín le costo su trabajo seguir el hilo, pero los retales que había ido cosechando hasta la fecha, sumados a la información que recién se desprendía de todo aquello ayudaba a poderse hacer una idea más definida de la historia de aquel grupillo de aventureros. Ademas, no había desayunado aún cosa que no amenizo la digestión de todo aquello.

A parte estaba el tema de Khan. Al parecer había traicionado la confianza del grupo al no desvelar su identidad a sus compañeros hasta la fecha, pero no había cometido ningún crimen excepto el de obrar según su propio juicio y correctamente. En cambio más de uno estaba cavando un hoyo para enterrarle la piernas y lapidarlo, confundiendo sus emociones con la realidad. Como si ellos nunca hubiesen cometido un error.

Hipocritas... Por suerte son en general más bien sensatos...

A pesar de que no tenía ninguna conexión con aquella gente, esto le afectaba al mago más de lo que hubiese querido, y más de lo que estaba dispuesto admitir. Respiro hondo. No iba a dejarse llevar ahora él por los recuerdos que la situación pudiese reflejar en su pasado ni a despertar simpatias. No hoy.

August se levanto, sin prisa, y sin mirar a nadie en particular dijo en un voz firme y clara. Era inevitable que parte de su resentimiento se filtrara en su voz.

- Si me disculpáis - dijo - Tengo mejores asuntos que atender que hacer de juez y jurado -

Si... y yo tampoco soy muy diferente a ellos, hay que reconocelo.

Y se fue a la habitación de vuelta a recoger su equipaje, no sin antes tomar prestada una hogaza de pan de la mesa.

Si nadie le dice nada, August va a la habitación y se toma un tiempo para serenarse. Cuando ya a recuperado pleno control de sus emociones comienza a pensaren una escusa par disculparse, y tras varios intentos sin mucho exito acaba pensando en copiar el hechizo de Beatrix, pero lo deja de lado por ahora pues no esta de humor.

Rabia, enfado y oscuridad. Tales palabras obtenían un nuevo sentido cuando estaban juntas. Y eso era lo que Kayla sentía en aquel instante.

Las palabras de Elenaide habían estado fuera de lugar y la maga no estaba en situación de morderse la lengua. Los elfos eran como había pensado en un principio, fríos, sin sentimientos y que solo miraban por sí mismos.

Tu que no confías en nadie y vigilas a todos. No debería importante que ese, dijo apuntando a Khan, vigile tus espaldas. No te importa lo que ha hecho porque para vosotros todos los que no tienen orejas puntiagudas son iguales y así los tratais, como si no fueran nada. ¿Para qué vas a preocuparte? Si sus palabras tuviesen filo, Elenaide estaría herida de muerte. Tal amargura destilaban sus palabras.

Yui fue más moderada, de acuerdo a su forma de ser. Si abría la boca solo era para intentar equilibrar la balanza. Su total falta de sentimientos fue algo que también molestó a la joven de cabellos oscuros.

La reacción de Hack fue la que no añadió más leña al fuego interior de la maga. Una reacción como la que ella había tenido la noche anterior y la razón por la que no quería que se hubiese enterado de aquella forma.

El resto, al igual que Yui y Elenaide, apenas conocían al hombre-gato. Sus aseveraciones o desavenencias no significaban nada. No habían vivido lo que Hack y ella habían vivido con Khan, sus juicios de valor o las palabras de la sacerdotisa simplemente caían en oídos sordos. Y aunque no importasen, seguían importunando a la maga. Katsu con su continuo apoyo a las palabras de Yui y Tenebrae con su peculiar forma de afrontar la situación. Fue August el único que hizo lo que la mayoría debería haber hecho, no dar su opinión, y además fue inteligente, marchándose.

Con un deje de acusación en la voz, Kayla volvió a hablar ¿Qué sentido tiene discutir? Todos estáis de acuerdo en permitir que siga. Se cruzó de brazos. Aunque sentía el impulso de marcharse de la taberna, aguantó el tipo y se mantuvo sentada. Y esta vez se dirigió directamente al asesino. Una vez confié en ti y nunca más lo haré. Cuídate de aquellos con los que viajas, tú confiaras y veras lo que ocurrirá.

Algo sellado se había abierto en su interior. Algo que nunca debería haber emergido, y ya era tarde para impedirlo...

Elenaide observa a Kayla y dice:

- Deberias de aprender a controlar un poco tus emociones, posees un poder magico que debido a tus emociones puede volverse muy inestable, asi pues es mejor que aprendas a controlar un pco tus emociones

La elfa seguidamente se dirige hacia la puerta mientras dice:

- Yo acompañare a la señorita Beatrix junto con Hack a ver a los miembros del templo, vostros deberiais ir con los dos paladines a indicarles el camino, asi teneis proteccion extra ademas de bueno, tomar un poco el aire

Seguidamente se dirige hacia el exterior caminando por el lugar en el que parecia que Hack se habia ido

August escucha desde la habitacion algunas conversaciones, al parecer el "ambiente" se esta enfriando y calentando por momentos, la habitacion esta recogida y August puede ver sus pertenencias alli.

Por lo que puede ver en el resto de la taberna no hay mucha gente casi todo el mundo esta fuera en el mercado que se ha montado y efectivamente como ha dicho Tenebrae hay dos paladines en la puerta, ademas desde la ventana de la habitaicon puede ver como las puertas dobles del templo estan abiertas y hay personas que entran y saen de el

La elfa tenía razón en algo. Las emociones no controladas en una maga eran fuente de problemas. Cuanto más intenso fuese el sentimiento, más peligroso podía ser el efecto.

Y por esa razón, en ese mismo instante estaba ocurriendo algo que ella misma no estaba controlando. Su propia magia estaba surgiendo...