Partida Rol por web

La mañana se alza lentamente en horizonte y los escombros de la reina victoria inundan las playas de las puertas del pescador, en la noche 3 embarcaciones toca tierra y solo una naufraga, los cuerpos de los marineros están tendidos en la arena algunos muestran terribles señales de lucha.

los sacerdotes suponen que un extraño y maligno mal es el culpable de esta tragedia, las mujeres preparan los cuerpos para darles el descanso a sus almas, de repente el grito de una mujer se mezcla entre llanto y dicha.

ESTÁN VIVOS, ESTÁN VIVOS, RÁPIDO ENCONTRÉ 2 SUPERVIVIENTES Los gritos de la mujer profesan alertan a los 2 jóvenes semielfos tendidos en la arena, sus cuerpos están adoloridos, pero sus corazones aun laten, las imágenes borrosas de la noche anterior parecen una pesadilla desagradable.

de un momento a otro un grupo de personas los rodean al tiempo que les hacen un montón de preguntas inteligibles por la cantidad de personas que están hablando, pueden sentir un sabor a agua salada en sus bocas y sus gargantas están resecas.

plácidamente están descansando en sus camas, si la noche anterior hubo una tormenta no lo parece, la ciudad fuera de la posada parece transcurrir con un poco de sobrelato, la llegada de los marineros y las mujeres que hacen cánticos por las almas de los hombres que naufragaron.

Antes de siquiera tratar de responder cualquier pregunta me reviso buscando mis cosas, mi arma esta xonmigo y eso elimina muchas preocupaciones, luego de levantarme digo. denme espacio y agua dulce..., por favor.... necesito quitarme el asqueroso sabor del agua salada de mi boca, mis palabras se entrecortan mientras hablo pues mis escazas fuerzas apenas y me sostiene de pie.
Me abro espacio entre la multitud para buscar a mi compañero, me acerco ael y trato de ayudarlo a levantarse, y digo estas bien, levantate, donde estamoa, que paso?, mientras lo ayudo lo bombardeo con millon de preguntas con un poco de esperanza que tenga mas idea sobre lo que nos paso.

Un lametazo y ya veremos como se despierta- pensó Eshuu mientras montado en la cama se disponía a despertar a Niara.

3, 2, 1.... lambetazooooo Fiufufufffffffffffffffffffffffffffghh¡¡ La lengua babosa y apestosa de la hiena se posó sobre el rostro de la pobre Niara que estaba hasta ese momento profundamente dormida. Ella ni siquiera puede decir nada del asco, porque teme que si abre la boca para protestar seguramente tragara babas de su compañero que no entiende que los humanos duermen un poco mas que las hienas y no madrugan tanto... menos cuando han tenido una noche como la anterior.

Hazme desayuno mujer. Fue el saludo de buenos días que Eshuu brindó a Niara. Tengo hambre, luchar y no comerme a esos bichos me abrió el apetito.

Niara entre dormida aún se levanta, se dirige hacia el lugar donde habían dispuesto un espejo y una cubeta con agua para el aseo, se lava la cara, ve su rostro sin el maquillaje ceremonial, el cual recuerda y lo coloca nuevamente ocultando sus facciones juveniles a cambio de las marcas que hablan de su lugar de origen y su familia.

Eshuu da vueltas por el lugar, se rasca el lomo con las patas, se lame las pelotas y ríe, ríe haciendo que cualquiera que estuviera dormido se despertara en un santiamén.

Niara sabe que su compañero tiene hambre... ella también, así que agarró una de las porciones de carne (de extrañisima procedencia) que había comprado en el mercado y que tanto gustaban a Eshuu y se la ofreció. Con esto bastara por ahora sentenció la bruja, a lo que siguió una carcajada de Eshuu... Si como no, replicó el cánido, dame mas. Niara sabía que era perdida la lucha contra su hijo así que saco otra y se la dio, también sabia que no comería mas, pero que era hora de ir al mercado y aprovisionarse, de paso ella desayunar y sin perder tiempo averiguar que había pasado con las personas afectadas por la tormenta.

Tras unos momentos de concentrarse con su compañero, repasando las oraciones* que sus madres les habían enseñado salieron del hospedaje por el malecón hacia el mercado.

El mercado rebullía gente iba de aquí para allá Niara y Eshuu daban paso a todos los que iban con prisa, ella comía una fruta y queso de desayuno, ya había tomado algo de leche y había comprado mas alimento para Eshuu que, ya con carne en su panza, saltaba alrededor de su compañera instándola a que se aproximara a la playa. Los gritos de la mujer hicieron que el par de aventureros se apresuraran a ver lo que estaba pasando, de pronto podrían ayudar en algo...

después de una noche tranquila en la habitación, Dahalia decide bajar para ver que sucedió durante la noche en la taberna, al parecer todo estaba tranquilo, en ese momento decide dirigirse hacia la puerta para poder recibir los primero rayos del sol después de la tormenta pero en ese preciso instante en el que se asoma logra escucha el grito desgarrador de una mujer.

- corro a al dirección del grito

....piiiiii.....(solo un sonido continuo parecia interumpir su sueño)...

...levantate...

procuro levantarse rapido y cayo sobre sus rodillas. la arena estaba humeda por la tormenta, la claridad del sol inundaba su vista.

El barco, donde esta el barco?

Su mente le iba trayendo los recuerdo de apoco. Ahora iba recordando la batalla. Penso en sus compañeros dentro de la bodega y salio en su busqueda.

SALGAN DE MI CAMINO!

Avanzo a los empujones con el grupo de personas del pueblo. Y cayo desbanecido antes de lo que pensaba. Sus amigos tendrian que esperar.

Eshuu se acerca rápidamente sin importarle la multitud que también lo mira con extrañeza y entre los cuales habrá alguno que le huya pues su aspecto no agrada a todos, cuando el hombre cae sin mas Eshuu suelta una risita y lo olisquea, alza su mirada a su compañera y le dice en un dialecto que solo los dos pueden entender 

harufu wafu¨*-dicho esto soltó otra carcajada.

Niara se apresuro, si a Eshuu algo le llamaba la atención ella sabía perfectamente que siempre era por algo.

Con Eshuu como guardia provisional del naufrago Niara se acercó a el hombre, tomó su pulso, revisó sus pupilas, controlo la respiración y reviso su cuerpo en busca de las heridas que ella suponía tendría en esta situación, al terminar su inspección contesto a su compañero animal:

ni kwa sababu ilikuwa karibu na wengi, siguió revisando, na harufu bora kuliko yako*

Concluida la revisión, la joven mira a la muchedumbre

¿aquí no hay un curandero?, este hombre necesita un par de pociones para sobrevivir. ¿quien puede ayudarme a llevarlo con la matrona para que lo sane?.

El joven se incorpora dando traspiés, en su mente las palabras se articulan y fluyen pero su garganta, carraspea y arde, saliendo algunos susurros y unos sonidos graves parecidos a alaridos, se acerca a su compañero, este se ve tan agotado como el mismo se siente, y este aun desorientado lo desconoce haciendo a un lado para caer tendido en la playa de nuevo.
Las miradas de la gente se confunden entre atónitas, lastimeras y codiciosas, pero con las pocas energías que le quedan trata de mantener la compostura.

Para dahalia
La pícara avanza por la playa con el resto de los curiosos, su aspecto juvenil e inocente despista las miradas de los incautos que se mueven presurosos y que parecen evitarla para no pisarla, al llegar un grupo de más o menos unas 70 personas rodean a dos jóvenes semi-elfos, estos parecen ser náufragos, y las habladurías de los pescadores indican que ha sobrevivido a un terrible tifón que destruyo su embarcación.

Solo siluetas y muchas voces eso se arremolinaba en la cabeza del joven semi elfo, al tratar de incorporarse un cansancio infinito le invadió y las fuerzas le fallaron, desconocidos por doquier y solo los dios sabría si aliados o enemigos, de repente sintió el pesado y apestoso aliento de un perro, su boca no era como una que hubiese visto comúnmente, pero antes de sentir el dolor de sus fauces ve como este se aleja y deja que una mujer le socorra, sus vestimentas definitivamente no son para nada civilizadas, quizá de la tierra salvaje o más allá, esta lo examina con cuidado, y revisa sus heridas aunque lo que más le mortifica es el cansancio, no sabe cómo lo hizo pero nado contra la tormenta y sobrevivió.

Al acércate al chico logras ver de inmediato que está vivo, sus corazón aun salta en su pecho y sus pulmones exigen el beso de la brisa, muestra evidentes signos de lucha quizá un tridente o algún tipo de lanza, su mirada se pierde por momentos, más que heridas se nota su tremendo cansancio, no es mortal pero eso sumado al agua del mar que pudiese tomar podrían ponerlo en problemas.

la multitud de lugareños y curiosos ve a los jóvenes supervivientes en la playa, estos se mueven tambaleantes y denotan heridas recientes, el primero de ellos, un joven aferrado a una pesada arma de fuego es el primero en levantarse, este trata de pronunciar palabra, pero no parecen poder entenderlo por el hilo de voz que tiene, se acerca junto a otro joven superviviente, los dos semi-elfos parecen desorientados y aunque algunas personas tratan de ayudarlos la multitud resulta extremadamente estorbosa.

sin embargo la multitud abre paso a una de las heroínas de la noche, una extraña muchacha acompañada de un can bastante particular, los murmullos de la gente y la risa nerviosa de algunos niños en la playa hace pensar que sera de ayuda, esta se acerca a examinar uno de los jóvenes el mas sobresaltado de los 2, ya que después de dar un par de pasos este se desplomo impotente, entre la multitud algunos marineros gritaban que se trataba de la mordedura de una medusa y que el joven estaba condenado, pero esta le examina con mas detalle y levanta su mano para pedir silencio, las personas acatan y escuchan lo que tiene que decir.

de entre la multitud la gruesa voz de un hombre afirma: ¿pero que puede saber esta salvaje? puede que halla escalado un faro, pero no pintas nada acá mujercita, las matronas y curanderos son de salvajes y monstruos, ¿acaso quieres robarle sus pertenencias? mira el hombre con ojos inyectados en sangre, mientras avanza la gente le abre paso y corren la mirada en otra dirección, este se detiene a unos 5 pies al ver como el animal muestra los dientes amenazantes, el hombre manda la mano al costado y saca un pesado molinillo de madera.
este viste un delantal y no hay que ser muy imaginativo para darse cuenta que se trata de un panadero, es un hombre alto y robusto, con sus brazos gruesos y fibrosos, algo en el inspira un cierto aire de arrogancia. el hombre mira el animal y exclama: llamen un clérigo, un hombre santo sabrá que hacer con estos desdichados apunta con el molinillo al animal y le espeta musaraña guarda esos dientes o tes bajare a golpes algunos de los curiosos abren paso campo retrocediendo de manera nerviosa.

Ni robo, ni hago daño, no somos esa clase de escoria. Solo digo que estos hombres necesitan cuidados, quienes sean las personas para sanarlos que lo hagan.

Miro a los sobrevivientes con pesar y dijo:

Tan solo necesitan agua, comida y sombra por lo menos durante un día para mejorar.

La mirada de Niara se fijo directamente en el hombre, tipos como el en su pueblo serían expuestos al sol y al hambre tras varios latigazos por tratarla a ella y a Eshuu como este lo hace ahora. Donde se atreviera a si quiera tocar a Eshuu lamentaría el resto de sus días la insolencia con la que se atrevía a vivir.

Eshuu, si aquí no nos quieren, entonces no ayudaremos, la ignorancia es atrevida y el orgullo enceguece, ojala nunca necesites la ayuda de nadie viejo idiota.

Dicho esto, tomó a Eshuu y se dispuso a volver a donde se hospedaba, no armaría un problema innecesario, pero tampoco se quedaría sin responder si la poca cordura de los habitantes del lugar interfiere con su camino.

Eshuu temblaba de rabia y de ansiedad, en el pasado tipos así como él se habían cruzado por el camino de los dos intentando mancillar a Niara y hacerlo trofeo de cacería a él, todos aquellos habían recibido su merecido y este estaba buscando el suyo

Sin dejar nunca de mostrar los dientes Eshuu se puso frente a Niara y murmuro para ella:

unataka kufanya na?, Mimi nataka kuchoma au kula mbichi?*

Niara habló y lo tomó, en señal de que no buscarían problemas, pero en la mente de Eshuu no se borraría el rostro del hombre y si la vida le daba la oportunidad le dejaría su dentadura marcada en su trasero como lección para que deje de llamar ladrón a los que no lo son.

mimi naweza kumpa haki yake** le dijo a Niara con pesar mientras se iban alejando.

mientras lo que parecía ser un panadero gritaba a la extraña y la hiena, Dahalia, se dedicaba a observar (perception)atentamente (en busca de empleo ocasional XD), mientras pasa por la muchedumbre, los cuales se encuentran entretenidos con el escándalo provocado por el panadero y la extraña, pero ve una dama la cual se encuentra con un saco de monedas, por la ojeada esta bastante lleno y ella se encuentra muy distraída por la gritería....

-al ver correr a la extraña emprendo muy casualmente (sigilo) la huida detrás de ella, dado que me causa mucha curiosidad...

La escena era tipica de las tragedias del mar. camino con paso firme pero expresion afectada hacia la playa, es una pena, tantas almas pero tan pocas manos para yudar, escucho el grito de la mujer, me apresuro en su busqueda....