Partida Rol por web

El grupo formado por Lili, Yuno, Eliza, Corajan, Alyssa, Enzo, Titania, Xhantho y Patricia se ha introducido en las ruinas de los Shanjim, pero parece que no saben realmente que pueden esperar de estas ruinas, es un lugar frio y poco acogedor, lleno de restos de golems y posiblemente con algunas trampas, sin embargo, el interior puede guardar muchos secretos y si las leyendas son ciertas pueden encontrar incluso aquel poderoso artefacto que en mayor o menor medida todos han ido a buscar.

Eliza al ver el lugar donde se adentraban, se mantenia cerca de Lili tratando de mantenerse atras de ella mientras que con una mano, no soltaba el manuscrito de Nekron en el caso que lo necesitara. Pero con su mano libre se aseguraba de sujetar un poco de tela de las vestimentas de su Reina, buscando asi seguir aparentando fragilidad al no querer separarse de ella.

Aun asi, a pesar de que Eliza trataba de fingir una exprecion de preocupacion, algo que le costaba demasiado, no dejaba de estar atenta a su Deteccion Nigromantica, no sabia si de verdad ese lugar estaba abandonado y ademas, todos iban con cuidado... algo que debia ser tomado en cuenta.

Por otro lado, Eliza sentia que se le estaba escapando mucha informacion, muchas cosas importantes que aquel grupo compartia en esa extraña lengua y eso la estaba cansando. La barrera del lenguaje la estaba dejando desventaja, eran cosas que no la dejaban estar conciente de todo lo que la rodeaba, algo que no le gustaba nada y demandaba una solucion, una solucion que parecia mas facil con la magia en vez del aprendizaje que ella buscaba al escuchar.

Durante el corto camino en el que Alyssa lideraba el grupo, la soldado estuvo atenta a cualquier movimiento. Las tensiones de las primeras misiones habían desaparecido hacía mucho; si tenía que disparar primero y preguntar después, no tendría problemas en llevar la carga de matar a alguien inocente.

Se unieron a la bailarina peleona y a la nieta, que parecían estar decidiendo qué hacer. Vaya un grupo. ¿Querías aventuras? ¿Querías descubrir los misterios del viejo continente? Pues acabas de entrar en toda esa mierda de cabeza... Se auto-flagelaba Alyssa; aún así, no lamentaba su decisión de haberse subido al Exile...

¿Shanjim? Ser nuestros abuelos. Más o menos, intentaba expresarse en aquella extraña lengua. Ya que parecía que Patricia iba a preocuparse poco en mantener a Alyssa al corriente de todo lo que se hablaba, lo mejor que podía hacer la soldado era tomar ella la iniciativa para al menos saber qué ocurría. Así pues, dio unos pasos hacia la puerta.

Permitió que la boca del rifle de asalto entrase primero bajo el vano. Y tras ello, continuó. Vamos

Yuno se adelantó sin decir nada a nadie, despues de todo no debía explicaciones para llevar a cabo su especialidad. No convenía meterse de cabeza a un sitio sin mas.

Hizo señas para que el grupo fuera algo mas lento y se adelantó una buena cantidad de metros. De escurría de forma sigilosa por aquel pasillo de hecho, pegandose de súbito a alguna pared, tanteandola con las manos y a veces dandoles ligeros golpecitos con el sable, que sacaba del cinto exclusivamente para desempeñar dicha tarea. Ni que decir que mantenía los ojos bien abiertos. Realmente, todo aquello le daba aire de tener experiencia en el campo del escudriñamiento en particular.

-Nadie se comerá una trampa mientras ande cerca, ya tuve bastante yo con esa daga de antes.

Mas bien yo no me comeré una trampa por su imprudencia, cabrones.

Con cada golpecito a la pared, Yuno reflexionaba si no sería una buena idea dejar caer a alguno que otro dentro de alguna trampa que encontrara. Le agradaba la de Nuln, pero tampoco es que fuera a desvivirse de forma particular por ella. Aún así, de momento se había mostrado amable y facilmente maleable. Y si esas patadas absurdamente increíbles estaban a su favor, sumaba mas a favor de esta.

Ahora el resto le importaba poco y nada. Las hadas en particular le caían pésimo, sentía como si dos moscas gigantes estuvieran constantemente a su alrededor y mas de una vez sintió la necesidad de darles un manotazo para aplastarlas.

Se preguntó si no podría encerrarlas en su brazal también. Seguro que a alguien le gustaría comprarse una, conocía varios Arisianos que estarían encantados. En una ocasión había atrapado un hada con una trampa sumamente sencilla y con el dinero de la venta pudo estar haciendo el vago dos meses en una posada de lujo.

El elfo no le agradaba tampoco, las pocas palabras que había escuchado de él le hacían pensar que era un idiota consumado.

El anciano...bueno, le había caído bien, por algo eligió ayudarle antes. No tenía abuelos desde que recordaba, estaban muertos tanto los maternos como los paternos. El porte respetuoso y benévolo de Enzo le había remordido un poco, en parte, ya que le hizo visualizar al abuelo que nunca tuvo.

La soldado que estaba ahí parecía un tanto poco ortodoxa, aunque hablaba como si no se enterara demasiado de como pronunciar el continental, y por último aquella tipa aparentemente amiga de la doctora que se quedó afuera realmente no sabía que pintaba, pero por lo general cualquier representación de "autoridad" le era irritante. Siempre queriendo controlar todo, los investigadores realmente le resultaban odiosos.

Por otra parte meditaba sobre su objetivo. Demasiadas personas. Demasiadas para repartir un objeto para uno. Levemente sonrió para si misma, ese objeto tenía nombre y era el suyo. Aún no entendía como eran todos tan confiados, pero no los culpaba.

¿Despues de todo quien desconfía de alguien tan elegante y refinada como yo? Lo merezco mas que todos ellos juntos.

Como siempre su ego estaba muy alto. Y su determinación férrea. El premio mayor sería suyo y solo suyo.

Lili en esta ocasión decidió quedarse en retaguardia. Yuno parecía más que dispuesta a encabezar la compañía, y esa tal Alyssa parecía capaz de enfrentarse a cualquier contratiempo, así que la luchadora se encomendó de nuevo a la tarea de cuidar de la pequeña Eliza. Situándola a su vera, trata de caminar evitando las paredes, cerca del centro del grupo.

• ¿Alguien sabe si estos corredores llevan a alguna parte, o vamos a ciegas?

La pregunta es lanzada al aire, para que todos la escuchen. En el grupo parece haber mucha gente que pretende saber mucho, pero da la sensación de que nadie sabe gran cosa...

Cuando la voluntaria se encamina hacia la sala puede comprobar como es mas grande que las dos anteriores juntas, como 3 veces la mas grande de las dos salas anteriores. La sala tiene en el centro lo que en otro tiempo fue una fuente pero que ahora no tiene agua, ademas de algunos restos de bancos de roca que habrian sido de color blanco. A parte de esto no hay nada mas en la sala, las paredes tienen restos de lo que podrian haber sido unos bellos tapices pero que el tiempo se ha encargado de destruir.

Yuno camina con tranquilidad y precaucion golpeando las paredes pero todas parecen realmente macizas, finalmente la mujer llega al otro extremo en donde un pasillo se extiende, este pasillo esta levemente iluminado por unos orificios en la pared, sin duda debe de entrar por ahi la luz del exterior, desde donde se encuentra puede ver que al final hay una puerta aunque no llega a distinguirla bien, pero parece de madera

Patricia escucha lo que pregunta Lili y seguidamente dice:

- no lo se muy bien, pero aqui llevamos poco tiempo, ya sabe el poner el campamento, y demas, las ruinas se empezaron a investigar con cuidado, al parecer primero hubo que destruir a los golems que hay en la otra sala, pero eso supongo que Alissa lo puede contar mejor, porque seguramente vino, y llegamos solo hasta esa sala en la que hay una fuente o algo asi, no llegamos a mas, la seguridad es algo muy importante para los militares y ellos tienen que mirarlo antes todo

Regresó sobre sus pasos con rapidez, el sonido de sus botas delató su acercamiento. Hizo una seña positiva al resto de la avanzadilla.

-Desde aqui hasta una puerta rara es todo seguro, aunque tampoco parece que haya nada de interés en general. Se puede respirar en paz de momento.

Bajó la capucha, queriendo librarse del calor que acumulaba en la zona de la cabeza. Al hacer esto cayó una trenza larga hasta media espalda. Este gesto fue seguido por un suspiro por nada en particular, a parte de querer llenarse bien de aire los pulmones.

Toda la expedición era impresionante: Tanta gente y con tantas virtudes... Pero al anciano le preucupaba por qué una potencia extrangera invertía tantos recursos en saquear unas ruinas.
De todas maneras, parecía que estaban unidos por un fin común, por lo que le quitó importancia al asunto.

En parte tenía algo de decepcionante ¿piedra desnuda? le costaba creer que no hubiese nada interesante en las paredes.
Aprovechó las charlas del grupo para examinarlas con más atención

La soldado permitió que la chica de la capucha se adelantara. Estaba haciendo un poco el ridículo, dando toquecitos en el suelo y las paredes con su arma, como si fuera una cegatona que nunca hubiera salido de su casa. Alyssa se encogió de hombros. No iba a quitarle la ilusión a Yuno, si ésta estaba deseosa de encontrar trampas...

La única vez que la marlockiense había estado en las ruinas, lo más importante que sucedió fue que unos cuantos de esos mamotretos de piedra habían despertado. Los cerebritos querían estudiarlos, pero tras un par de tiros, cayeron derrumbados.

Cuando vio que la nietecita volvía, se dirigió a ella. ¿Ya? Y finalmente al resto, ¡Vamos!, equivocándose de entonación. Lo que pretendía que sonara como una pregunta, acabó sonando como una exclamación. Aunque, ¿qué más daba? Ella estaba al mando allí, era marlockiense y si eso no era suficiente razón, era la única con entrenamiento militar.

Finalmente todos los alli presentes parecen aventurarse al interior de la sala, alli todos pueden ver como esta sala es mas grande que las dos anteriores juntas, como 3 veces la mas grande de las dos salas anteriores. La sala tiene en el centro lo que en otro tiempo fue una fuente pero que ahora no tiene agua, ademas de algunos restos de bancos de roca que habrian sido de color blanco. A parte de esto no hay nada mas en la sala, las paredes tienen restos de lo que podrian haber sido unos bellos tapices pero que el tiempo se ha encargado de destruir.

Tal y como Yuno comento al fondo hay un pasillo que continua, el pasillo esta iluminado por luz natural gracias a unos huecos que hay en el techo por el cual entra el sol exterior, al fondo puede verse una puerta cerrada que parece ser de madera

Poco a poco nos adentramos en las cuevas de los Shajims. Era la primera vez que escuchaba su nombre a pesar de que poseyeran magia; pero según las explicaciones de Patricia eso fue hace tanto tiempo y una es tan joven... Sigo al grupo con el estómago satisfecho después de haber dado unos sorbos al agua que encontré anteriormente. ¡Que lástima de que no tuviera una cantimplora! Hubiera podido con ella hace uso del agua en caso de necesidad.

El cada vez más numeroso grupo vamos avanzando hasta llegar a una sala. La chica de la capucha se ofreció a inspeccionar avisando que había un pasillo con una puerta al fondo. Seguro que la marimacho de Alyssa sen encargará de abrir la puerta. Va mu dirigente.

 Todos avanzaban con demasiado cuidado, Eliza veia como Yuno era la que encabezo la entrada seguida por la mujer de la extraña arma magica, seguramente esperaban encontrar trampas ya que su magia no detectaba a nadie, ni siquiera un no-muerto y seguramente, los cadaveres de un lugar tan olvidado deberian ser endebles...

Aun asi, los ojos carmesi de la "niña" no dejaban de mirar con cuidado lo que la rodeaba y escuchando esas extraas palabras, sobretodo fijandose mas en el tono de voz que usaban. El enojo o el miedo eran faciles de identificar, a pesar de que ella no sentia miedo alguno.

De todas formas, al notar que alli no parecia haber nada importante, al findo de aquella enorme sala habia un pasillo iluminado de una forma ingeniosa, tal vez era un sitio importante en el pasado y al no haber nada importante alli, solo les quedaba seguir avanzando. Por esa razon, Eliza tiraba un poco de las vestimentas de Lili y fingiendo una exprecion de preocupacion, señalaba ese pasillo esperando seguir avanzando.

¿Que podia ser aquella cueva,sin duda no aprecian simplemente unas ruinas.Quizas fuese algun tipo de laberinto o recinto lleno de trampas,pero tal seguridad solo queria decir que alli aguardaba algo valioso ,algo tambien muy antiguo que prometia compartir sus secretos con lso valientes que se atrevieran a aventurarse alli dentro.

Aquellos extranjeros se guaradaban algo de informacion seguro ,parecia que sabian que estab pasando aqui y de que iva todo esto,solo habian dicho algunas cosas seguramente no todo,la cosa parecia peligrosa,debian seguir adelante con pies de plomo..

El grupo parece que no se decidia a avanzar en un primer momento, sin embargo tras las indicaciones de Yuno parece que todos por inercia comienzan a andar hacia la extraña puerta. Al llegar pueden ver como se trata de una puerta de madera finamente tallada con relieves que representan una serie de construcciones, todas ellas similares a castillos, destaca especialmente una que representa a lo que parece ser un castillo volador. La puerta aun mantiene el pomo y es facil de mover.

Yuno que ejercia como exploradora imporvisada abre con suma facilidad la puerta y entra en la sala, tras ella una peueña nube de lo que parece ser polvo aparece justo en el lugar en el que estaba segundos antes y en el que se encuentra ahora Lili. Todos pasan por ahi ya que es el unico camino que tienen para seguir.

Al pasar por el polvo en general sienten un picor en los ojos salvo Xantho y Enzo que sienten un fuerte mareo.al entrar en la sala pueden ver como esta totalmente vacia, apenas hay nada salvo como en la primera de las salas algunos restos de lo que en otro tiempo fueron bellos tapices, el suelo esta salpicado por algunas rocas. Al final de la sala puede verse un pequeño arco que separa esta sala de la siguiente la cual parece bastante llamativa.

El suelo de la esta formado por grandes losas de marmol o similar unas de color blanco y otras de color negro, siendo es pecialmente llamativas, ademas en algunas zonas de la sala pueden ver algunos objetos realmente curioso.

Al final de la sala puede verse un pasillo bastante mas ancho que los anteriores

Echó un vistazo a la sala, que aparentemente fue descuidado pero en realidad no tanto. Observó con atención si los objetos de ese lugar valían la pena, aunque sabiendo que delante de tantos ojos probablemente habría quejas a la hora de tomarlos si eso. Pero su vista se fijó en la habitación aledaña. Algo le hacía querer ir ahí inmediatamente. Ese sentimiento, tan familiar y agradable que solía embriagarle cuando estiraba la mano para tomar un brillante, hermoso e impoluto tesoro de su pedestal para si podría ser equiparable a la emoción que un niño pequeño experimentaría al tender la mano a una tableta de chocolate carisima y deliciosa.

Casi sentía que algo le llamaba desde esa sala, tenía que entrar primero. Así que, aproximandose al tablero, le echó un vistazo de cerca. Otra cosa que le llamaba la atención era...ese anillo. La túnica y la demas basura podía ser para alguien mas, pero se dividía entre el anillo y la espada corta. Y no tenía ganas de que esos bichejos voladores se hicieron con todo.

Alyssa odiaba el silencio. Incluso prefería que Patricia estuviese parloteando, usando ese idioma tan absurdo. Bufó al ver como Yuno usaba el pomo para abrir la puerta. Ya de paso, llama a ver si hay alguien, murmuró jocosa. Una buena patada hubiera hecho las veces de picaporte, además de impedir que ninguna puerta se cerrase si había necesidad de huir. ¿Huir? Claro, para que los demás huyeran. Ella se quedaría, vencería lo que hubiera y saldría victoriosa...

Se negó a cerrar los ojos mientras pasaba a través de ese humo. Sintió debilidad al notar como el lagrimeo empezaba, intentando limpiar la esclerótica del ojo. Notó una punzada de temor ante la posibilidad de quedarse ciega. ¿Una tiradora ciega? ¿Existía algo con menos futuro? Si, quizás una Marlock abierta a todas las culturas... Ja, se rió ante su propia ocurrencia.

La sala no ofrecía ningún divertimento. Si al menos hubiera golems con los que practicar un poco de tiro al blanco... Lo único interesante se situaba más allá del arco decorativo. Un solado parecido a un tablero de damas. Y en algunas de las casillas había objetos.

¿Qué buscabais en estas ruinas? exigió a Patricia. Mientras esperaba su respuesta, se dirigió sin preocuparse mucho por posibles trampas hacia el inicio del tablero, situándose delante de la baldosa negra que estaba a su izquierda (21). Aún sin pisarla, esperó a ver si alguno de sus protegidos decidía hacer algo.

Escuchó una risa y giró la cabeza con curiosidad a la soldado.

A mi no me divierte mucho este sitio pero, que mas da.

Con curiosidad, se acerco al tablero, echando un vistazo a la sala en general bastante despreocupado. Revisó las paredes a su alcance con aparente desgana (todo parecía relativamente seguro) y se aproximó a la baldosa blanca de las frontales.

Sacó el sable de la vaina, y se dispuso a apoyarlo sobre la baldosa de adelante, sin embargo se detuvo, echando un vistazo hacia atras.

-Si es que me encantan los psicópatas. Una vez me topé con algo así e iba acompañada de alguien. A ese alguien se le ocurrió hacer caso omiso a lo obvio y acabó como un colador...¿Alguna objeción a que revise esto? Si pasa algo no me haré responsable, que a parte de los bichos el resto no sabe volar y de un modo u otro hay que cruzar.

Lili entra en la sala frotándose los ojos, mientras las lágrimas comienzan a deslizarse por su rostro en un intento de aliviar el enrojecimiento que le provoca el polvo de la entrada. Al darse cuenta, no tarda en poner una mano en el rostro de la niña Eliza, para protegerla del polvo al entrar.

Una vez en el interior, la luchadora se sorprende al ver la extraña distribución de la sala, con enormes baldosas del tamaño justo para albergar a un hombre. Por alguna razón, y máximo viendo las precauciones que adopta Yuno, siente que no sería sensato avanzar sino por donde la mujer haya comprobado que es seguro.

• Ninguna objeción, Yuno. Parece que sabes lo que estás haciendo, así que adelante.

Lili sonríe mientras da su apoyo a Yuno, simplemente para reforzar la postura que considera más sensata. Puede que otros prefieran arriesgarse, pero Lili tiene demasiado que perder como para andar haciendo tonterías.