Partida Rol por web

Pongo mi mejor sonrisa de diplomático al robot de protocolo al pedirme otra. – Si, no estaría mal pero de las normales para humanos.

Intento que mi tono y expresión corporal sea como si estuviera en mi planeta tomando una cerveza con mis amigos. Mostrarte tranquilo cuando tienes motivos para sospechar puede hacer dudar a quién intente sorprender.

El robot miró a Sand cuando habló de los hombres escondidos. Las luces de sus ojos parpadearon, simulando el parpadeo de una persona de carne y hueso... casi se podría decía que había desconcierto en su mirada, de no ser por que solo era la mirada de un robot.

Pero parte de su trabajo es permanecer escondidos, y parece que no lo hacen suficientemente bien, En sus palabras, perfectamente moduladas y con acento de Coruscant logró que se transmitiera un tono de reproche.

Bien, siguió hablando como si el anterior trozo de conversación nunca hubiera existido ¿Qué puedo hacer por vosotros? os preguntó mientras os pasaba las bebidas que habíais pedido, ¡Vaya! parece que no hay sillas suficientes... ¡Tú! dijo gritando a una de las cajas ¡Sí! ¡Tú! no te hagas el escondido ahora, te han visto, se útil y traeme una silla más.

Tras estas palabras, un humano salió de detrás de la caja, os dedicó una mirada nada amable y se fué al fondo del almacén. Mientras tanto Switch tomó asiento en su escritorio, e indicó que hicierais lo mismo Contadme

Para ganar tiempo ya que realmente no tengo ni idea cojo la mas cercana a mi. Una vez la tengo en la mano observo lentamente su color, la cantidad de espuma, como suben las burbujas. Finalmente bebo un pequeño sorbo que paladeo intensamente como si fuera uno de esos reputados catadores.

Lo que quiero realmente es hablar a solas con los otros tres sentados a mi lado. Aunque hay que disimular siempre tus motivaciones y puede que mi contacto me hubiera enviado ha hacer lo que ahora están haciendo ellos aunque sin saber lo que es de muy poca ayuda podre ser.

Dejé que fueran os otros quien hablasen, mientras yo permanecía en pié, comprobando el perímetro. No es que tuviera razones para desconfiar del droide... Es sencillamente que siempre me comportaba así cuando estaba en un terreno desconocido, con gente que no conocía...

-Nos envía Maya a recoger su paquete- mientras doy unos sorbos a la bebida que me han servido.

Nunca había sido un gran negociador, pero parece que mis nuevos camaradas dejaban recaer el peso de la negociación sobre mí. Teníamos que conseguir rápidamente el paquete y lograr salir de aquí. Era cuestión de tiempo que nuestro último encontronazo con las fuerzas imperiales llegara a oídos inadecuados y mandaran un inquisidor, y aun no estaba preparado para enfrentarme a un reto así.

Tras aliviarme un poco respecto a mi intento fallido de ponerme en contacto con al Fuerza. Tras ésto me puse alerta como el resto dejando mi mano sobre mi pistolera y mirando a mi alrededor. No me daba buena espina éste cacharro. Puede que los droides astromecanicos me parecían chulos, pero los de protocolo me parecían muy aburridos.

-Sí, y si te puedes dar prisa, nos parecería bien.

El ver la tensión entre mis acompañantes no me ayuda a sentirme mas tranquilo.

El encuentro no ha comenzado bien y ahora estoy aquí sin saber exactamente que ocurre.

Si ha sido emboscada necesitara ayuda y nosotros aquí de tertulia con un robot de protocolo que antes se quedan sin energía que llegan a la conclusión que hay que finalizar la conversación.

Los ojos del androide parpadean, y os da la impresión de que inclina la cabeza ligeramente...

Oh, vaya.... Lo lamento pero no os será tan fácil llevároslo de aquí. Comenta con una voz cantarina.

Es difícil descifrar la expresión del droide, así que lo intentáis con el Twi'leek que hay detrás de el... tras mirarle unos instantes creéis que será más fácil con el droide

-¿A qué te refieres, chatarra? -digo con mala cara y poniendo mis manos sobre el escritorio-. Sólo danos lo de la tipa para que podamos marcharnos.

Me quedo mirando al androide con calma mientras le digo. – Todos sabemos que los robots vivís mucho mas tiempo que nosotros y sobre todo a los de protocolo os gusta alargar y alargar las negociaciones. Nosotros tenemos cosas que hacer, si quieres seguir trabajando con nosotros en el futuro entregánoslo, ya. Sino hay muchos mas almacenes donde guardar las mercancías.

Me mantuve en silencio, mientras dejaba que los demás hablasen. Esperaba que el droide fuera razonable y nos diera lo que veníamos a buscar, porque de lo contrario, la cosa podría complicarse bastante.

Odiaba las situaciones como esta, lo mío era disparar y pelear, no dialogar ni enzarzarme en interminables negociaciones. Como echaba de menos mi hogar...

Jean rápidamente desmosto su ímpetu y su juventud, no controlaba sus reacciones, tenía mucho que aprender. Con amenazas era difícil sacar algo de un droide.

Rápidamente note que el mas dotado para llevar una negociación era nuestro nuevo compañero, dejaría que llevara el peso de la negociación ya que parecía tener las cosas claras.

Switch se os queda mirando, de algún modo ha conseguido que los led superiores de uno de sus ojos se apaguen, lo que le da el aspecto de estar enarcando una ceja. Su mirada se detiene momentáneamente en Jean, y hace un ligero movimiento con la cabeza, como negando, a continuación apoya los codos en la mesa, y junta las yemas de los dedos.

Bueno, reconozco que tengo su cargamento, pero aquí nadie trabaja gratis, si queréis llevároslo os costará 1000 créditos, hace una pausa para llevarse una de las jarras con bebida a la boca, y la inclina, juraríais que está bebiendo. Es una suma eminentemente razonable por todas las dificultades, sin duda.

Miré al droide con mala cara, dí un gruñido y lo vi directo a los ojos.

-Que sean 500 -veo al muchacho bonito que parecer ser más carismatico que yo.

-Realmente estoy tentada a darle un disparo entre ceja y ceja o lo que sea que tenga -pensé.

Toco ligeramente al mas cercano, de mis compañeros, mientras señalo mi blaster. – Disculpa Switch, hay un pequeño detalle que no entiendo. Puede que porque no somos tan rápidos en los procesos mentales. – Señalando mi comunicador. – Justo antes de entrar me han encargado recogerlo y no me han dicho que tuvieras pendiente nada que cobrar. Una cosa es una gratificación, pero el pedir una cantidad excesiva puede ocasionar no obtener nada.

Miré al droide con gesto gélido, aunque seguramente no se notaría por culpa de mi casco. ¿Es posible que un montón de chatarra parlante esté tratando extorsionarnos?. ¿Que sera lo siguiente?. ¿Un oficial imperial ofreciéndonos una nave para llevarnos a la prisión imperial que queramos?. ¡Como hecho de menos Mandalore!.

-Tranquila- mientras le ponía la mano en el hombro a Jean -una negociación no se puede llevar así, observa y aprende- indicándole hacia Raleg.

Ignorando totalmente a Jean, Switch continúa la conversación con Raleg como si no hubiera oido a la chica, aunque los más atentos habrían podido apreciar un ligero parpadeo en los led que componian sus ojos

La cantidad, amigo mío no es excesiva, es la tarifa estándar por usar servicios discretos y no oficiales, y le aseguro que si hubiera tenido que dispararse un solo tiro el precio sería como mínimo 4 veces mayor.... pero veo que no tenéis dinero para pagar mis servicios... no son gratis, y a mis hombres no les hace gracia trabajar sin cobrar, hace una ligera pausa mientras comprueba unos datapad veamos, quizá podríamos llegar a una solución intermedia. Os puedo rebajar el importe si aceptáis trabajar para mi... Soy un droide de negocios, y en mis negocios la información es poder, dentro de esta estación tengo todos los agentes que necesito, pero fuera nunca son suficientes, si os comprometéis a proveerme de información a lo largo de vuestros viajes puedo rebajaros 200 créditos por cada uno de los que acepte el trabajo