Partida Rol por web

Galatea mira a Verónica, parpadeando.
-Vaya, Castellano ha vuelto a dejar mi expediente por ahí tirado -murmura con ironía.

Al ceñirse las correas del paracaídas tiene una extraña sensación, como si estuviera poniéndose muletas.
De nuevo saltar al vacío. Como en los Roques de Arguamul...

-A tu señal, Escarlata. Sólo vigila que no me estrelle contra el muro equivocado. Como Daniel, trata de quitar hierro a lo que se avecina.

¿Mi cambio sería registrado por esos detectores o solo el uso de la habilidades propiamente dichas?
Pregunta, completamente inexperto en todo lo referente a la tecnología caza-mutantes.
Nunca he saltado en paracaídas y la agilidad sobrehumana que poseo en forma alternativa me vendría muy bien para el aterrizaje...
Por su expresión podría decirse que le preocupa estrellarse contra el suelo y volver a morir... como ya le sucedió en la lucha contra los androides.

No te lo puedo asegurar Sombra, lo mejor es que saltes conmigo, en forma humana y que no uses tus habilidades hasta entonces.
Coge un arnés extra para colocarselo y así ajustarlo para el salto de ambos.

Saltaremos desde unos ciento cincuenta metros, un techo de vuelo suficientemente bajo, para que el radar no nos detecte... aun así la velocidad de este pajaro y la velocidad de caída haran que hagamos algo más que fracturarnos unos cuantos huesos si no caemos adecuadamente.

Se enciende la luz de aviso. Diez segundos para el objetivo - Mira el cronometro - Saltando, que es Gerundio... - dice al tiempo que empuja a uno de vosotros (el que esté mejor preparado para ello)

Una vez observa como abre el paracaidas, empuja a otro y a otro... y finalmente saltan espada y ella.

-Si tienen medios tecnologicos para captar mis habilidades les aseguro que no detectaran nada anormal en mi. Se todas formas, espero caer de pie. El dolor no me suele sentar bien.

Waldemar espera al salto con impaciencia.

Sin pensárselo mucho, Galatea salta de la aeronave con la misma soltura que si estuviera en un trampolín.
Déjate caer... déjate caer...

Reprimir el instinto de remontar el vuelo le exige un gran esfuerzo de concentración; tanto que casi se olvida de tirar de la anilla en el momento oportuno, y su aterrizaje resulta algo menos que grácil.

Galatea abre el paracaidas un poco tarde, sin embargo, se abre... ya es algo. El caso es que los arboles le sirven para amortiguar buena parte del golpe y su constitución hace el resto.

Aun así se ve una nube de polvo donde ha caído. Desde luego ha sido un aterrizaje para recordar...

La profesora, diminuta en comparación con sus fornidos compañeros, suelta las correas y se sacude el polvo del uniforme y el abrigo.

-Pfff sin poderes... ¿le dijeron a Miguel Ángel "sin pincel"? Pero no había perdido su actitud risueña. Recogió el paracaidas mientras los demás iban tomando tierra.

Waldemar caia a plomo.

No sabia bien cuando tenia que abrir el paracaidas y para colmo no se abrio completamente.

Viendo caer a Waldemar a mucha más velocidad de lo que debería, Galatea se abalanza sobre él en un intento de cogerle al vuelo.

Espada se siente algo mas tranquilo cuando sabe que va a saltar con Escarlata. Le gustaba trabajar solo y era su costumbre... Pero siempre que sabía que iba a ser incapaz de realizar una tarea en solitario, aceptaba toda la ayuda posible.
Estamparse contra el suelo no era una de sus prioridades, pero si un momento perfecto para saber decir que si a la mano tendida.
Se prepara junto a la extraña ninja y se deja dirigir durante la caída, cooperando en todo para no resultar una molestia.

Primero Galatea y luego Waldemar caen a plomo. La primera tarda un poco de mas en abrir el paracaídas y aterriza como lo haría un meteoro, con cráter y todo.
Espada espera en su interior que Waldermar sean tan duro como la Jefa de Estudios... o estará en serios problemas. Problemas mortales.
¡Escarlata!
Exclama señalándo al hombre, a la espera de que la mujer pueda hacer algo.

Escarlata ya tiene suficientes problemas llevando a "un pasajero", asi que ignora el aviso de Espada.

Por otro lado, Waldemar cae atravesando ramas y árboles, el paracaídas se abre pero es demasiado tarde para ello, y aunque algo frena no es suficiente para un aterrizaje en condiciones.

Recoged los paracaidas, y comprobado que estamos todos. - habla por el comunicador, parte del equipo que os han facilitado.

Estad alerta por si hay patrullas de vigilancia.

-Recibido. -A cierta distancia, Galatea hace ua señal de asentimiento.- Farkas, ¿cómo te encuentras? -murmura a su compañero.