Partida Rol por web

Bien, las pistas son estas. La primera nos habla de un libro, así que supongo que la biblioteca. La segunda nos habla del mar, así que supongo que el embarcadero. La tercera tengo más dudas, pero a mi me dice piano, así que iría al aula artística. ¿Qué pensáis vosotros?

Sonreí a Matias.

---Por supuesto, no tengo ningun problema con formar parte de vuestro equipo, así no estaré solo- digo mientras me reuno con los demas, saludo a los otros integrantes del equipo y espero pacientemente a que los organizadores llegasen y al ver como Connor venia con cara de mal humor no pude evitar levantar una ceja aunque finalmente me centré en lo que tenia en manos, ya luego tendria tiempo de hablar, así que me adelanté a los demas y tomé el sobre para abrirlo y dirigirme hacia el grupo abriendolo y mostrandoselo a todos para que pudieran verlo...

Estuve observando el sobre durante unos instantes y luego comenté en voz baja.

---La primera tiene pinta que es la biblioteca, "tengo hojas sin ser árbol", los libros tienen hojas, " te hablo sin ser voz" las palabras trasmiten algo en cierta manera y lo de " cuando me abres no me quejo" creo que hace una referencia literal de abrir un libro para leerlo ¿ que os parece?- digo mirando al grupo- propongo que vayamos a este sitio mientras pensamos a que deben referirse las otras ubicaciones y así adelantar .

Ya parecía ponerse en marcha la gincana, por parte de Connor quien parecía algo alterado. Al pronunciar la primera pista resultó bastante sencilla mas no así el resto. Se quedó pensativo unos instantes.

- Vale, pues la primera pista es un libro, estoy de acuerdo. La segunda es posible que sea el mar aunque es muy vaga, seguramente sí que lo sea porque otra cosa no me cuadra. La tercera se refiere al judo o algún arte marcial, así que la prueba estará en el tatami.

Pensaba que habrían encontrado la solución a las tres.

- Vayamos a la biblioteca.

-Wooh!!

Dicho y hecho! En pocos segundos Selina se vio flotando cogida de la mano de Steve. Cuando le soltó alcanzó una altura que le permitió elevarse por encima de las cabezas de sus compañeros.

-Muchas gracias! -exclamó con una gran sonrisa.

No le resultaba tan difícil mantener el equilibrio, seguramente porque su amigo lo había hecho de un modo gradual y no de repente. Aquello le divertía. Podía ver la isla desde otro ángulo y tenía ganas de experimentar girando sobre sí misma, poniéndose boca abajo...

Pronto llegó Connor y Selina se alegró, pero vio su ceño fruncido y su expresión de enfado que mutó a una mirada de tristeza. Había visto cómo antes se fue con Keyla y pensó que algo habría ocurrido entre ellos. Parecía que el día no le resultaría al chico tan positivo como ella le había augurado. Lamentaba que así fuera e imaginó que querría hablar, aunque no fuese en ese momento.

Connor sacó unos sobres. Todo el mundo estaba ansioso por comenzar el evento, ella incluida, así que prestó mucha atención a cuanto dijo.

-Imagino que sí -respondió a Steve encogiéndose de hombros, aunque esperaba que lo confirmase alguno de los organizadores.

Le vio llegar con los sobres. Estaba emocionada!

Cuando leyó el primero de ellos, los ojos de Selina brillaron. En seguida vino una imagen a su cabeza y sonrió a Cisco con complicidad. Seguro que él había sido el primero en averiguarlo.

Escuchó las tres pistas y la opinión de Steve para aportar luego la suya.

-Pues... estoy totalmente de acuerdo con la primera y la segunda -sonrió- pero la tercera me sugiere otra cosa. Estoy de acuerdo que hay que ir al gimnasio. En las artes marciales se usan llaves, y la pista del color creo que se refiere a los cinturones de un kimono, así que también apuesto por ir allí.

Si bien había llegado hace un buen rato, al ver que los adolescentes se ponían a conversar entre ellos decidió acercarse a Bran y Nora, dejándoles algo de espacio para que planearan la maldad que fuera. Le alegraba ver que bastante gente había llego a la gincana, incluso más de los que él se había esperado inicialmente. Todo indicaba que resultaría una buena Navidad después de todo. 

Le pareció escuchar su nombre de labios de Gwen y al ver que Selina lo miraba, su mirada fue hasta la pelirroja ladeando la cabeza en una pregunta silenciosa. Entonces vio a Connor volver sin Keyla con una cara que delataba su mal humor y decidió que, por cualquier cosa, sería mejor acercarse. De todas maneras le tocaba estar con él en la prueba, así que así adelantaba un par de pasos para seguirlo cuando saliera de los jardines.

Mmm. Artes marciales. Sí. Suena bastante más probable. No estaba muy convencido con el piano y me jugó una mala pasada el traductor automático. Ya sabéis: "key-board", literalmente tablero de llaves.

Extiendo el brazo al aire ofreciéndoselo a Selina para bajar si quiere o para ayudarla a flotar en la dirección adecuada si lo prefiere.

En marcha pues.

Me alegró que Ethan se uniese y más aun que descubriese el primer lugar, pero tras leerlo en silencio pensé en los otros posibles espacios.

-Bien dicho Ethan, a la biblioteca, rápido- murmuré.

Cuando habíamos avanzado un poco, distanciados del otro equipo, comenté mis suposiciones en la función de notas del regalo de Renzo:

"la segunda ha de ser el muelle, porque habla del mar y la tercera... Es la cocina ¿No?"

Sabiendo (o mejor dicho, desconociendo) a lo que nos enfrentábamos me aseguré de cubrir la pantalla y que solo ellos viesen la nota.

Creí que sería un momento tan bueno como cualquier otro para sugerirlo pero era claro que lo necesitaríamos -Renzo, lo siento, sé que quizás te incomode por lo que comentaste otras veces pero, puede que debamos usar nuestras... Habilidades para ganar- hice una pausa y miré al muchacho, no quería que sonara a una imposición porque justamente: no lo era -el punto es que no conozco sus habilidades y creo que ustedes tampoco las mías ¿Cierto? y así no podremos coordinar como corresponde-.

Tomé aire -yo... Creo que me volví algo así como... ¿Un buen acróbata?- medité unos segundos acerca de las aptitudes que había descubierto en el incidente de la radio junto a Steven -bueno, también parece que soy muy resistente, como antibalas aunque no tanto, esencialmente no me puedo cortar al picar verduras y los golpes los siento amortiguados-.

Miré hacia abajo, como apenado, y aclaré mi garganta. Pero no dije nada más.

Renzo asintió a las palabras de Ethan sobre la localización de la primera pista y, luego, al leer las "posibilidades" que ofrecía Matías, asintió nuevamente, saliendo en compañía del resto del "grupo de gimkana" hacia la biblioteca. Ya de camino respondió a Matías.

- No puedo morir, y me regenero muy rápido. Además puedo producir ilusiones. Pero no usaré esas... cosas... salvo que no tenga más remedio.

No dijo nada más y siguió andando. Al terminar la frase anterior que se le había antojado demasiado dura, había tratado de sonreír, pero la sonrisa había sido, como de costumbre, sólo una mueca.

Escuchó los acertijos y luego las palabras que decían sus compañeros, intentando buscar una lógica que no encontraba en ningún lado. Se rascó la cabeza algo confuso pues no entendía como llegaban a esas conclusiones, sí, podía tener lógica, pero su cabeza no era capaz de entender como esas adivinanzas llevaban a ese punto.

-Yo soy muy malo con los acertijos, así que si creéis que eso está ahí me parece bien. Vámonos primero a la biblioteca y esperemos que nos toque una prueba interesante.

Se le estaba haciendo tarde. Aquello se había demorado demasiado en comenzar y el reloj corría en su contra a medida que la tarde transcurría.

-Se me hace tarde-murmuró preocupada-te veo en el baile, ¿no?-dijo a Noah inclinándose hacia él para dejarle un beso en la mejilla. Lanzó una última mirada hacia donde transcurrían los juegos y se marchó del lugar.

Se habían puesto de acuerdo en el significado de las adivinanzas y en el primer lugar a visitar, de modo que sin más dilación apresuraron el paso hacia la biblioteca en busca de la primera de esas pruebas. Tenía mucha curiosidad en ver qué habían pensado los tres organizadores.
 

Cuando Steve le ofreció su brazo Selina creyó que era para bajar, pero en su mirada leyó la posibilidad de alargar aquella fantástica sensación de volar, así que decidió aprovecharlo un poco más. Gracias a ese impulso flotó en dirección al lugar donde se dirigían y tras un rato de diversión descendió para caminar junto a sus compañeros.

-Muchas gracias!! -sonrió a Steve. Su rostro era pura alegría y emoción. Levitar era magnífico y añadiendo un poco de velocidad se convertía en algo increíble.

Llegó hasta la entrada de la hermandad donde dormía Selina ya vestido con el nuevo traje. Esperando verla de un momento a otro para poder ir juntos hasta la piscina. Estaba un poco nervioso pero hacía esfuerzos por relajarse, y no terminaba de lograrlo.

Había notado durante la mañana que Steven estaba muy pendiente de Selina. Vale. Podía entenderlo porque Selina era un encanto y preciosa. Más de uno estaría colado por ella, no sólo él, y quizá era el caso del chico de las muletas. Pensaba que Steven la trataba de impresionar a su manera, y eso le ponía un poco a la defensiva, sensación que también trataba de apartar de él. La suerte era que ahora podría pasar un rato con ella, hablando y bailando, demostrándole que sentía algo especial por ella. Aunque estuvieran los demás esperaba poder cumplir ese propósito, invitarla a bailar y dejarse llevar por una sensación que anticipaba sería extraordinaria. Estaba deseando poder perderse en su mirada.

Fue hacia la puerta queriendo poder pasar y ya dentro estaría el tiempo que hiciera falta para encontrarse con su pareja. Cisco llevaba otro ramo de rosas azules, para rememorar el día de la invitación y por si las otras habían perdido su viveza.