Partida Rol por web

Mire extrañado a Eve por su respuesta ante mi comentario de los sueños, al parecer era la única que no tenía sueños extraños.

justo en ese momento Quick0 hico caer a uno de los patanes, que incluso se ganó el vómito de uno de los novatos, ante lo cual solté una carcajada.

- y así señores, sale de escena, el payaso Asshouse...- miré al novato vomitón y le cierro un ojo- hey, tranquilo tu, solo procupate de estar atento en la batalla.- le dije con una sonrisa- ahora todo lo que importa es la misión y que volvamos todos... o la mayoría- dije lo último en voz baja, casi para que solo me escuchara Eve.

Cuando Eve me dice que esta lista, le asiento con la cabeza:

- Yo También!- le contesté y revisé por ultima vez mi Fusil de asalto, estábamos listos para la misión.

Nader no había logrado conciliar el sueño la última noche pero para colmo de males todo lo que comía le caía muy mal hasta acabar vomitando en la media hora posterior. Ese había sido su destino. Manchar las botas de un jodido veterano que le había prometido en susurros que no llegaría al final del día con vida. – L…La gravedad artificial me produce nauseas. L…lo s…siento de veras. M… Mi nombre es F…Fenx N…Nader. – El novato ni siquiera pudo lograr una respuesta sin tartamudear pero las palabras del experimentado compañero de alguna manera lograron calmar su ansiedad. – Si s…señor. ¡Lo har…hare! – Luego respondió a Ghost mientras sujetaba con fuerza su fusil de asalto.

El momento había llegado. Fatboy segundos atrás había entrado en la zona de despliegue sin contratiempos ni oposición. Sería un aterrizaje limpio en donde dejaría su carga para volver rápidamente a la zona segura… o al menos eso era lo planeado.

Primero llego una detonación en el casco de la nave que sacudió a todos arrojando a sus tripulantes contra la pared y el techo al inclinarse en un angulo de cuarenta y cinco grados en una decima de segundo. Luego llego el caos y la confusión: La alarma, las luces de emergencia, el fuego y el humo llenan la estancia.

¡Mierda! ¡Atención, atención! ¡Ha llegado el momen…! – Un segundo impacto sacudió nuevamente la nave e interrumpe la parafernalia de Blackstone al lanzarlo contra la pared opuesta por una explosión detrás de él. Su cuerpo destrozado por el fuego y las esquirlas rueda por el piso sin control hacia la proa.

La explosión creó un agujero en el casco de un metro y medio y por el mismo la atmosfera escapa a gran velocidad ya que la diferencia de presión con el exterior es evidente. A esas alturas apenas hay atmosfera respirable. Casi todos llevan instintivamente sus manos al rostro y garganta en búsqueda del oxigeno faltante y quienes no estaban ubicados en sus asientos y sujetados por los cinturones de seguridad pronto son expulsados fuera de la nave.

Pero los sobrevivientes no tendrían que preocuparse por la falta de atmosfera dentro de la nave ya que un tercer impacto (esta vez en el núcleo) parte la nave a la mitad para luego explotar en millones de pedazos.

Desde el suelo marciano el espectáculo de fuegos artificiales seria decorado por algunos cuerpos y fragmentos estrellándose contra las rocas y las dunas.

Luz. Luz cegadora…

La iluminación de la nave por un instante los deja parcialmente encandilados junto a un extraño zumbido que tarda en irse. Algunos han experimentado aquella sordera temporal en su vida militar. Sucede a menudo cuando un obús cae cerca de ustedes, cuando estalla una granada o cuando algo cercano a ustedes explota.

La ceguera temporal también ocurre cuando en el campo de batalla detona un artefacto nuclear, en la distancia por supuesto.

Mas allá de todo esto tienen la extraña certeza que algo va a suceder pero vuestra mente podría estar jugando una mala pasada a causa del mal dormir o del estrés…

“Fatboy” comenzaba a recibir los cimbronazos de la atmosfera alta del planeta rojo. Cien años atrás era imposible recibir semejante turbulencia pero gracias a las maquinas terraformadoras ahora Marte gozaba de una atmosfera semejante a la del planeta azul.

La ruta de ingreso al satélite Fobos requería cruzar por algunos minutos el área de turbulencia que se encontraba en la zona oscura de los radares militares marcianos.

Aquella zona oscura había sido “fabricada” por varias detonaciones nucleares en la estratosfera marciana. Cortesía de Industrias Greytek, quien proveía de armamento a las desgastadas naciones Occidentales de la Tierra.

No era una misión fácil ni mucho menos pero los antiguos miembros del grupo mascullaban maldiciones al sargento Blackstone por las últimas incorporaciones. Una docena de novatos recién incorporados a la unidad de Especialistas Militares de Misiones de alto riesgo.

La palabra novato dentro del grupo hace referencia a simples soldados y nada más pero la exclusividad de la unidad lo amerita.

Por lo tanto Blackstone durante el ingreso atormentaba a los nuevos con su clásico discurso motivacional antes de enviarlos al frente. Según él, A foguearse.

¡Soldados!

¿Qué día es para ustedes? ¿Lo saben ya? Pues es el día del Juicio Final.

La buena noticia es que tienen esperanzas, soldados.

Esperanza en forma de un glorioso combate. La batalla es la gran redentora.

El ardiente crisol en el que... solo los verdaderos héroes... se forjan.

El único lugar donde todos comparten...el mismo rango, sin importar qué basura parasitaria eran al llegar a mi unidad.

Si son lo suficientemente duros para llegar con vida al anochecer entonces podrán considerarse parte de mi unidad.

Parte de los Cuervos negros. 

Demian era junto a su amigo uno de los miembros más antiguos y experimentados de la unidad. Al terminar la guerra él y su compañero Charles tenían planes que los harían millonarios. Tan solo debían sobrevivir algún tiempo más…

Je je je . Mira Charles. Aquel se ha meado en sus pantalones. – Señala a un novato sentado en la punta de la hilera de asientos.

Charles es frio y calculador a contraposición de su amigo que solía hablar de mas y bromear en exceso, pero entre los dos formaban una dupla implacable en el campo de batalla y justamente eso les había permitido sobrevivir hasta ahora.

• Déjalo en paz Demian. Cuando muera yo me quedare con sus botas y tu con su munición. – respondió para su amigo sin dejar de leer una revista de economía publicada unos días antes de la guerra. Según él, la clave de los negocios se encontraba en la venta de armas.

"Piiiiiitttt"
"Piiiitttt"

"Piiiittt"
"Piiiittt"...

"Piiiiiitttt"
"Piiiitttt"

"Piiiittt"
"Piiiittt"...

La alarma en el panel le despertó de su ¿recuerdo?¿sueño? 

Eve se sobresalta, frota sus ojos y mira a todos lados, se levanta de su lugar frente al panel que sigue sonando, va hasta donde esta "Sam"
¿Que fue eso? - le preguntó y su voz apenas era audible desde el interior de su cráneo, la sensación comenzó a desvanecerse y poco a poco el parloteo de Blackstone se escuchaba claro.

Sam, ¿Sam estas despierto? - lo sacudió un poco tomándolo por el hombro...

Quico abrió un ojo primero y miró a su alrededor. La voz de Blackstone le llegaba difuminada, como distante. Se había quedado dormido. Se desperezó y poco a poco, fue cogiendo consciencia de lo que sucedía a su alrededor.

"Esto...esto ya lo he vivido ¿Será uno de esos dèja vu?"...no...tío...mira, Demian va a decir algo. Va a decir..."

Cita:

"Y Logan le responde..."

Cita:

Los sucesos se iban produciendo tal como los...recordaba. Y sabía cómo acabarían.

"Los dèja vu son una sensación, una jugarreta que te juega el cerebro. Y desde luego, no te permiten predecir algo antes de que suceda. Esto es...otra mierda. Era como en aquella película clásica del 2D, ¿El día de la marmota?¿Era eso lo que querían esta vez?¿Esta vez?¿Quienes?¿Estado Alfa?...¿Y qué coño es Estado Alfa?...Quico, se te va".

Pues iban jodidos porque según lo que recordaba, el evitar que la nave estallase en mil pedazos, estaba fuera de su alcance. A no ser que...

Quico se levantó ignorando a Damian y a Logan e incluso a Blackstone, y se dirigió a la cabina de la nave mientras comprobaba su fusil y comprobó si en su material de campaña llevaba un soldador para sellar puertas.
 

Vi Volar la nave, mierda, voy a morir!...

despierto de golpe, con Eve moviéndome y preguntándome si estaba despierto.

- Eve!... mierda...- miro a Eve fijamente como tratando de enfocar.

espero algunos segundos tratando de ordenar mis ideas.

- Eve... estamos...- miro a mi alrededor y veo que estoy en la nave, escuchando el discurso del jefe antes de la misión.

estaba soñando?...

Las sacudidas y el tirón atmosférico, estaba claro. Nos habían dado de lleno. Tan de lleno que habían agujereado la nave en el mejor de los casos, ahora todo dependía del rumbo que tomara la nave, si nos precipitábamos al vacío adiós, si entrábamos en Marte... quizá hubiera una oportunidad de sobrevivir... cierro los ojos y de repente... todo en calma.
Otra vez lo mismo. Otra vez "al principio" y parecía que no era el únoco que lo había "vivido"... otro Deja vu... miro a todos los presentes, en mi cara hay un gesto de confusión. Me levanto y camino a paso firme hacia delante.
-!Avisad al piloto! ¡Que cambie el rumbo! ¡Nos tienen fijados!
Miro al resto otra vez, esperando que no me esté comportando como un loco... Me señalo la cabeza.
-Vosotros también... ¿No?

Cuando las explosiones comenzaron, Werner se dio por muerto, por lo que intentó hacerlo con dignidad. Sabía que en la cabina de carga no tenían salida.

Pero entonces volvió a despertar, con la tablet en la mano, alarmado. Vio como otros también lo estaban, e inmediatamente se levantó. Sin duda, el oficial estaría sorprendido, y cabreándose a marchas forzadas. Werner se dirigió a él. Tunder era un tipo sensato, y lo había demostrado durante décadas.

Preguntó a los compañeros algo que si habían vivido lo mismo que él, no habrían olvidado.

¿Quién ha 'visto' caerse a Demian? Cuando algunos asintieron, habló con el oficial.

Blackstone, escuche, la nave ha sido detectada, estamos a punto de ser destruidos. Levantó una mano No, no pregunte cómo, sólo confie en mi, varíe el rumbo y ordene lanzar las contramedidas antimisiles...!

Cuando acabó de hablar, buscó su equipo de supervivencia espacial. 

Demian y Logan observan las extrañas reacciones de sus compañeros que hasta hace poco dormitaban o simplemente miraban la nada. De repente saltan de sus asientos como cabras enloquecidas. El sargento detiene su discurso y con su clásico gesto de apuntar con el dedo a los novatos y regañarlos contempla pasmado al resto de la unidad mientras Quick0 busca en su mochila y al no hallar lo que busca encuentra lo que busca en un panel auxiliar junto al pasillo que lleva a la cabina de los pilotos.

¡Hey! ¡Que no he dado la orden de levantarse todavía! ¡A tu asiento soldado! – ladró Blackstone desde su posición ante la osadía de Quick0.

Luego Jason hace lo mismo pero declara que la nave es un blanco de las defensas planetarias. Aquella idea la afirma el experimentado Werner además de solicitar que los pilotos inicien las contramedidas. - ¿Qué clase de locura les ha afectado a todos ustedes? ¡Maldición, a sus asientos ahora! – responde Blackstone mientras va a por Quick0.

Quico sigue avanzando hacia la cabina. Al pasar derca de Thunder lo mira sin detenerse.

-Tu también ¿eh? Haz lo que sea para entretender a Blackstone. Yo voy a la cabina. No creo que se atenga a razones.

Quico siguió hasta llegar a la cabina de la nave, confiando en que Thunder se las arreglase para entretener al teniente. Una vez allí cerró la cabina por dentro y se dirigio al piloto a la vez que con ayuda del soldador, bloqueaba la puerta a fin de que nadie pudiese impedir lo que iba a hacer.

-No importa lo que crean ni las órdenes que tengan. Nos dirigimos a una trampa donde con toda seguridad hallaremos la muerte. Deben abortar el aterrizaje y variar el rumbo, ¡ya!. Fijen nuevas cordenadas fuera del sector cuatro.

Al notar que los demás compañeros han reaccionado a lo que parece ser una ensoñación compartida, o lo que fuera, Eve va a donde esta Blackstone.

Tiene que ver esto señor - le dice señalando uno panel de monitoreo de comunicaciones - Detecte una señal, es muy débil pero creo que nos están rastreando - la intención de Eve es crear una distracción para que Quick0 pueda llegar a la cabina y tomar el control, en cuanto Ghost cruza su mirada con Eve, esta le hace una señal con los ojos para que acompañe a Quic0 y lo cubra para que nadie interfiera. 

-No importa lo que crean ni las órdenes que tengan. Nos dirigimos a una trampa donde con toda seguridad hallaremos la muerte. Deben abortar el aterrizaje y variar el rumbo, ¡ya!. Fijen nuevas cordenadas fuera del sector cuatro.

Ghost se cuela dentro de la cabina junto a Quick0 antes que él inutilice el panel digital que da el acceso a la sala de mandos.
Allí los dos pilotos se encontraban muy atareados y tan solo se percatan de los dos acompañantes hasta que es muy tarde. Luego de escuchar la alerta de Quick0 en piloto le responde - ¡Oye! ¿qué hacen ustedes aquí? ¿Dónde está Blackstone? – el copiloto activa la navegación automática para levantarse de su asiento y acompañar a los dos soldados a la salida. – Vamos. Basta de tonterías. Vuelvan a sus asientos. – al mismo tiempo el piloto deja los mandos para usar el intercomunicador y hablar con el sargento…  

Tiene que ver esto señor - le dice señalando uno panel de monitoreo de comunicaciones - Detecte una señal, es muy débil pero creo que nos están rastreando - 

¿Pero qué demonios? ¡Ahora no! ¡Regrese a su asiento, maldición! – Los ojos de Blackstone saltan de sus cuencas por la ira y su rostro cambia de color hacia el rojo cual una braza en el medio del fuego. - ¡Ustedes dos salgan de allí o abriré fuego por desacato y derrotismo! ¡Contare hasta cinco! – El sargento saco su arma reglamentaria para apuntar a la puerta de la cabina mientras aparta con una mano a Reiss.  

Quico asiente mirando para Ghost con una sonrisa de complicidad y aprovechando que el piloto ha dejado libre los mandos, lo aparta de un empujón y se hace con ellos.

-Será mejor que os agarréis.

Un segundo es todo el tiempo que les dió para hacer caso de su consejo. El soldado giró hacia estribor alejando el crucero de la ruta donde según sabía, serían derribados. Un giro intencionadamente brusco. Lo suficiente quizá como para hacer perder el equilibrio a Blackstone si decidía liarse a tiros.

-¡Ghost, si intentan evitarlo, los fríes a tiros!-dice Quico intentando intimidar a la tripulación-Joder, mierda. Hubiera preferido que me hicierais caso, pero no me dejais elección. Suspendí el ingreso en la escuela de pilotos ¿sabes? Por eso acabé como soldado.

Esto no podía acabar bien, pero cualquier cambio sobre el escenario que acababan de vivir sería una mejora.

¡Ramirez! Grita a su compañero. ¡Mantén la calma, hombre, estamos entre amigos! 

Thunder se interpone entre Blackstone y la cabina, poniéndose delante del arma del oficial. Su anterior forma de comportarse no habia tenido el resultado esperado, tendría que intentar otra cosa. Cuando acudir al profesional no servía, sabía que tenía que acudir a la persona.

Bien... Aunque ni yo sé si estoy loco, no hay que parecerlo. Calma y sensatez. tengo que tocarle la fibra de compañero, de... persona. Si le trato como oficial, seguirá queriendo mandar.

Manteniendo la calma miró a Blackstone a los ojos, mostrando las palmas de sus manos.

Blackstone, acabamos de tener una premonición conjunta. Fatboy era destruida por fuego planetario. Escucha, sé que suena a locura, pero vamos, llevamos décadas juntos, ¿Cuándo me has visto actuar así? Sabes que soy sensato y no creo en estas cosas, pero TODA esta gente A LA VEZ no es una casualidad. Soy científico, no sé qué es, pero sé que no es casualidad que todos soñemos la misma mierda. Miró el arma. Baja el arma, hombre. Tú estás al mando, dales la orden que de dar maniobras evasivas y salir del peligro... A mi tampoco me apetece que me frían, y no estaría poniendo en peligro a los chicos y la misión si no estuviera seguro. Confía en mi!