Partida Rol por web

No preocupe capitán. Dice la jefa de la patrulla. Sabemos que está en zona oscura de comunicaciones y le haremos de puente. Hay una extraña portadora en la señal. - Además, capitán, quiero que sepa que esaremos por aquí para ayudarle, o para lo que esté en nuestra mano, como hacer de puente de comunicaciones.

Sólo necesito comunicar al oficial de enlace mi nueva ruta. Ya llamaré cuando la conversación pueda ser más personal y preguntaré por Aven. Voy a regresar al planeta, exactamente al punto donde rescaté no hace mucho a un hombre que se había estrellado con su nave. Gracias por todo. Cierro la comunicación.

Gato, llévanos cerca de la nave de guerra del T.I. Quiero hablar sólo con ellos, no con media galaxia más.

Sólo has de elevarte un poco, y ya el planeta y el "piedro" dejan de interferir las comunicaciones.

Pasamos la información capitán. Te contesta la piloto de la patrulla.

Esa roca... es algo más de lo que parece... Pero no tengo tiempo para eso ahora. Gato, avísame cuando podamos comunicar con la nave de guerra del T.I., no con los PACOTA.

Luego me giré hacia mi gatito de dos metros. Zug, ve a acostarte un rato. Tienes que descansar, aunque sean veinte minutos, por favor. No quisiera llevarme otro susto igual.. Mi mirada era de súplica. Te avisaré cuando esté lista para salir.
 

- Crucero Ankman, a la escuha. La voz amable del oficial se te hace familiar.

Vaya oficial! dije alegre al reconocer su voz. ¿No descansa nunca? Así no se puede ir por la vida. Tendrá que descansar un poco y demás. Mi tono era agradable hacia él. No era una reprimenda, más bien una broma. Me gustaría hablar con el civil Aven Frost, si continúa en la nave, claro.

- No se preocupe capitán, acabo de empezar el turno. Te contesta de manera confidentemente Además estaba con un café. ... y retoma el tema. Espere que pregunto. Al medio minuto te contesta. - Lo siento señora, ahora mismo está reunido con la Almirante y no se lo que tardarán.

¿Podría darle un mensaje? Voy a ir hacia las ruinas donde le recogí y necesito información de ese lugar. Me gustaría hablar con él sobre aquel sitio. El tono de mi voz era relajado y amable. Reunido con la almirante. Me pregunto quien se habrá lanzado sobre quién el primero...Muchas gracias por todo y disfrute del café oficial. ¿Sabe? Me ha dado envidia. Voy a disfrutar de uno yo tambien. Ah! Por favor, insistale a Aven con esto. Es importante y urgente. Cierro.
Este Aven no pierde el tiempo. Sonreí para mi y me giré. Zug seguía allí sentado. Si no vas tu a echarte un rato, lo haré yo. Al menos hasta que reciba la llamada. Es tontería movernos de aquí sin saber donde nos vamos a meter.¿Vamos? le tendí la mano a Zug. Quizás así lograse que durmiese un poco.

Quedas en órbita. Marchas a descansar

Accedí a mi cabina y me quite el traje de vacío. Sin más, manteniendome con la camiseta y ropa interior, me tumbe en la cama. Era Zug quien debía descansar realmente, pero no le vi por la labor y ahora que las cosas se iban normalizando y mi adrenalina era eliminada poco a poco por mi cuerpo, este pedía una pausa a gritos. Me quedé mirando por la ventana hacia el infinito. Me pesaban los párpados y mi cuerpo se hacía cada vez más pesado y más difícil de moverlo. No tardé mucho en dormirme abrazada a la almohada. Imaginando que no estaba tan sola en esa cama.

Tu interfono empieza a comunicar y escuchas tras tres pitidos que te sacan de tu letargo:

¿Zhiva? ¿Va todo bien? Pregunté intentando no transmitir mi preocupación.

Pausa que parece forzada.

La comandante aquí presente, me dice que has preguntado por mi ...

Aven! Respondí entre alegre y somnolienta al escuchar su voz. Perdón. Esta descansando un poco mientras te localizaban. Espero que estés... disfutando de tu estancia en la nave y de la compañía de la almirante. ¿celos?
Si.. Todo va bien. Me disponía a viajar a un lugar que creo que conoces. Unas ruinas cerca de donde te rescaté. Me preguntaba si podrías darme algo de información sobre ese lugar... A parte del reguero de agua que vi allí por untima vez.

Si, yo me encuentro muy bien, no te preocupes...ya sabes, por aquí parecen apreciar mis conocimientos científicos. He llegado a un acuerdo con la Comandante...

Si, yo me encuentro muy bien, no te preocupes...ya sabes, por aquí parecen apreciar mis conocimientos científicos. He llegado a un acuerdo con la Comandante...dije mientras la miraba y asentía conforme. ...No tardaré mucho en regresar a mis investigaciones en los Yacimientos de Kurat...  Sobre las Ruinas...bueno, no puedo decirte gran cosa...apenas llevaba unos días trabajando en ellas...tenía algunas anotaciones en mi agenda, pero me temo que la he perdido, y no sé donde podría estar ahora mismo... 

Te da la sensación que está hablando de la nota que metió en el bolsillo del culo.

 Cuídate de las alimañas...y sobre todo de las tormentas, ya viste como termino la ultima.Volví a sonreír, ella no podía veme pero a buen seguro lo sabia por el timbre de mi voz. Si revisas mi nave o mi zona de trabajo...ehh...si el agua se ha ido, encontrarás un pórtico rodeado de unas raíces de ficus....con suerte encontrarás parte de mi viejo equipo...y con muchas más, podrás aprovechar algo...no se me ocurre nada mas...

...ah si, ni se te ocurra dejar que esas bestias se acerquen a las ruinas...y por Dios, no rompáis nada, el valor de lo que allí se encuentra, trasciende a los Aslan, los humanos, los K´krees y cualquier estúpida guerra que nos haya tocado vivir...milenios de conocimiento y sabiduría, se esconden entre eses restos enfangados...

...por cierto, ¿Qué tal se encuentra tu amigo Leonino? Se notaban sus risitas en tono jocoso.

Intenté asistir a su operación, pero no me dejaron verlo, y al día siguiente, me dijeron que Zug ya había sido devuelto a tu nave...espero que no me hayan ocultado la verdad. Una pequeña y extraña pausa.

 Cuídate...y recuerda que todavía tenemos una deuda pendiente...pronto nos volveremos a ver... Sonaba inseguro.

Mientras Aven hablaba, me puse el mono y accedí al puente de mando. Allí estaba Zug con algunos de los suyos.

De acuerdo, un portico bajo las raices de un ficus. Repetí tras él, memorizando esas palabras. Si encuentro tu nave y algo salvable lo recogeré para ti. Le respondí sonriente.

Tranquilo, no permitiré que los dos agentes entren allí. Las ruinas estarán a salvo. Los aslan aquí presentes no serán problema. Le indiqué tratando de evitar un buen lío y que alguno se ofendiese, aunque sólo Zug y el viejo entendían sus palabras. Pero creo que no me entendió cuando preguntó entre risitas por él.A pesar de hablar con él por el intercomunicador, era consciente de que los aslan tenían el oído lo suficientemente fino, como para escuchar lo que hablaba la persona del otro lado del mismo. Si, está aquí, va bien, es un cabezota. No quiere descansar un poco y eso que le toca dormir en mi cama. Esta vez reí yo.

Por cierto, dale las gracias a la almirante de mi parte por sus regalos. Me han encantado.

Eso espero, que nos volvamos a ver pronto. Hasta entonces cuídate. Quiero cobrarme mi deuda! Nos vemos. Cerré la comunicación.

Que raro... no me ha pedido que le recoja ni venir a pesar de que vamos a su lugar de trabajo e investigación. No puedo distraerme con él ahora, debo hacer algo más importante ahora mismo. Aven está en buenas manos.

Gato, ahora sí, vamos a las siguientes coordenadas. Veamos que nos aguarda allí.

Los agentes tocan a ala puerta de tu camarote. Dicen que tienen algo para ti.

La nave está ya llegando a la misma zona, donde despegaste con el air-raft. La cima de la colina está totalmente carbonizada por el fuego. Las aguas de la inundación han perdido algo, pero poco. No llega aún a poder verse donde se estrelló la navecilla del "buscapiedras viejas".

En lo alto de la loma puedes aterrizar con un poco de habilidad.

Salgo a recibirles mientras Gato me informa de la proximidad de nuestro destino. Se abre la puerta y salgo al pasillo para hablar con ellos. ¿Qué ocurre? Espero que sean buenas noticias. Suspiré, hacía tiempo que no pasaba nada raro ni malo y temía porque esos dos hubiesen hecho alguna ya.

Te dan una libretita, que tiene una hoja arrancada de su gusanillo.

Tiene notas personales, tiene recuerdos, tiene memos para no olvidarse de cosas, frases filosóficas. - Señora, estaba cerca de la escotilla de acceso. Son más secos y serios que normalmente.

Cogí la libreta. Gracias... la estaba buscando... Dije al verla, la libreta de Aven, espero... ¿Todo bien? Les pregunte al verles tan... serios. ¿Necesitais algo?

Te preguntan entre preocupados y asustados - ¿Cuál es nuestra misión capitán? Querían ayudar y se les notaba en la cara.

En cuanto descendamos lo sabré. Aunque quizás lo más prudente sería dejaros en la nave, trabajando con vuestro tanque para que podais cubrirnos la retirada con él. Pero la verdad es que no se bien lo que tenemos allí abajo y si ese es nuestro destino final o si saltarán nuevas coordenadas. Les dije con toda la sinceridad posible. Si no hay nada más, os sugiero que os agarréis a algo. Vamos a descender en nada.