Partida Rol por web

Me sigo fijando en los rastros de sangre para saber de donde vino el mutante. No obstante, me tomo un momento para acuclillarme y comprobar alguno de los casquillos más nuevos. Se diferenciaba un casquillo de preguerra de uno nuevo porque los nuevos casi nunca tenían nada más que el calibre inscrito detrás. Y eso si había algo.

Sin bajar el arma ni un segundo, me acerco con cuidado a una de las puertas de la pared frente a la abertura. La primera por la izquierda.

Intento leer el desgastado letrero y acercando la cabeza escucho a ver si oigo algún sonido provenir del interior para acto seguido abrirla con quidado.

- Y detrás de la puerta número uno tenemos... -

El recuerdo de una holocinta que ví hace tiempo, en la que salía una mujer en un concurso abriendo puertas que escondían premios, me hace sonreir ante la similitud de la situación. A ver si aquí tenemos también algún premio oculto.

Nathaniel se aproximo, haciendo que Bandido lo hiciera con el, y empezo a buscar a ver si encontraba algo, fuera un documento o algo que le diera un indicio de que habia ocurrido alli.

¡Y aquel era...! Un pasillo vacio... bueno, casi vacio. Semi vacio. Quasi vacio. Demi vacio. Y alli estaban ellos, parados ante la aparente nada. Vale si, habian casquillos y algun trozo de cadaver repugnante, pero poco mas. Bueno, no todos, parecia que Connor habia tomado la iniciativa con una de las puertas.

De dos zancadas Susan se situó al otro lado de la puerta y asomo la nariz y los ojos por ella.

Voy siguiendo al grupo más atento a la retaguardia que a lo que está ocurriendo delante. Tota, tampoco sé exactamente la pinta de eso que estamos buscando. He vuelto a enfundar el rifle y estoy con las dos pistolas en ambas manos, las he recargado para no quedarme seco en algún momento crítico. - Si no hay nada seguid avanzando, será mejor quedarnos aquí el menor tiempo possible.

Con el arma preparada y atento a lo que salga me voy acercando al recodo con cuidado para cubrir el avance del grupo.

Al llegar al recodo me agacho para ofrecer menos blanco ante un posible disparo Ahh! que poco me gusta este sitio susurro con resignacion por como se esta tornando toda la situacion y me dispongo a vigilar lo que salga de esas habitaciones

Me pego a Susan para asegurarme de que no le pasa nada.

Conforme avanzaban hacia la izquierda, pudieron ver las enormes puertas metálicas del ascensor, y antes de éste, unas puertas gruesas con un símbolo de fuego tachado junto a las palabras "Puerta contra-incendios, por favor mantener cerradas". Connor abrió la puerta lentamente, con una Susan ansiosa por ojear el interior. La puerta daba a un tramo de escaleras que descendían por el lado derecho. La estancia estaba vacía, y el polvo flotaba lentamente en el aire. A lo lejos, ambos jurarían que escuchaban algún ruido lejano, pero no estaban seguros.

Deng se detuvo a observar los casquillos, una mezcla entre munición post-guerra y munición pre-guerra, lo que le indicaba que quienquiera que hubiese disparado tenía que ser cercano en el tiempo. De vuelta al rastro de sangre, siguió el rastro por el recodo del pasillo, seguido por Mike, que también se dirigía a cubrir esa localización. Al girar, vieron a unos metros frente a ellos una pared destruida por donde cruzaba ese rastro de sangre. Por la apertura, veían un pasillo que se extendía hasta otra pared, esta vez entera, que medía varios metros de largo. Mientras observaban la apertura, se percataron de las dos puertas situadas a su izquierda desde esa posición.

Nathan estaba trasteando el papeleo del mostrador de recepción con paciencia. Algo tendría que haber de utilidad, se dijo a si mismo, mientras rebuscaba carpeta a carpeta el polvoriento escritorio lleno de cajones. Fichas de ingreso apergaminadas, viejas radiografías, y entre tanto papeleo, un manifiesto de entrega de equipo y medicamentos de color amarillento cayó en sus manos. El manifiesto indicaba que en algún lugar del sótano sub-nivel 2 estaba el almacén de equipos que contaba con máquinas de diálisis, mientras que las medicinas que les pudiesen interesar estaban repartidas por varios almacenes en cada planta.

John cubría a ambos subgrupos con las pistolas y su atenta mirada. No era el primer hospital en el que había estado, y por supuesto tampoco el primer lugar donde el silencio se podía romper tan pronto como empezaban a volar las balas o surgir los monstruos. La tensión se podía cortar con cuchillo.

Susan miró el fondo del pasillo ¿Por que carajos estaba todo TAN vacio? Sin embargo... ¡Allí! Allí a lo lejos se oía algo o al menos eso parecía. Nuevamente sin encomendarse a nadie ni decir nada (Insertese chiste aqui) se deslizó en silencio en dirección a donde creía haber oido algo.

Me acerco al rastro de sangre con la intencion de ver si era reciente para despues acercarme a una de esas puertas que se situan a la izquierda y con precaucion prestar atencion para ver si puedo oir a alguien o algo al otro lado

Tenía que haber alguien, se dijo Deng: ¡Los supermutantes no huyen de los fantasmas!. Permaneció pegado a Susan, pensando que el lugar parecía haber sido escenario de mucho sufrimiento.

- Los casquillos parecen recientes -comenta de pasada Deng, preguntándose qué puede significar exactamente

Cerrando la marcha, con un ojo detrás y otro delante, advierto que Nathan está revisando papeleo. Me acerco a él sin dejar de apuntar hacia atrás, me aseguro que Susan está cubierta por "Dennis" y le susurro al compañero de Bandido lo más bajito posible, poniéndole una mano en el hombro para no sobresaltarlo:

- ¿Has encontrado algo interesante? ¿Algo que nos ayude a saber hacia dónde ir?

Avanzando hacia las escaleras, Susan se me adelanta y asoma el "hocico".

Sin pensármelo dos veces, con el rifle de palanca alzado, pego mi espalda a la pared derecha para aumentar mi ángulo de visión y disparo de las escaleras que descienden.

Un murmullo lejano nos indica que algo o alguien nos esperan aquí abajo, así que comienzo a descender cuidadosamente intentando no hacer más ruido del necesario.

Lanzo una mirada rápida a Susan y le indico con la cabeza que me siga de cerca.

- Estate atenta - le susurro.

Nathan tenía a Bandido cerca suyo, olisqueando por si aparecían enemigos, hecho eso, saco una pequeña linterna, y empezó a revisar los papeles, con los que quizás lograba sacar algún dato de provecho. Luego de un rato, les comento a sus compañeros la localización posible de lo que necesitaban, estaba por supuesto en un lugar de difícil acceso, pero ellos eran un grupo competente al parecer.
- Sotano Sub-nivel 2 Vamos. – dijo simplemente.

Una vez mas encontraba un area vacia. Estaba 100% segura que había oido los sonidos venir de aqui, pero a simple vista no parecía que hubiera nada. ¿Podia ser algun dispositivo de ocultación? Dudabalo...

Dando unos pasos mas bajó las escaleras y se acercó a la pared mas cercana buscando algo, botones, heniduras, corrientes de aire... cualquier cosa que le indicara que allí había algo.

Tras la respuesta de Nathaniel, compruebo que es la dirección que está tomando Susan y asiento.

- Cubramos a Susan, Nathan puedes ir con ella, yo me quedo por detrás. Mike, no te entretengas, vayamos juntos.

Sin dejar de apuntar hacia el nuevo pasillo retrocedo pegado a la pared hasta el anterior pasillo al llegar bajo el arma y me acerco a Nathan y John.

Hay un pasillo y unas escaleras Apunto con el brazo hacia el nuevo pasillo. Si queremos que la gente que esta aqui no nos pille por la espalda tenemos que bloquear esa puerta.