Partida Rol por web

Fatídicos rumores

Escena de Juego

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23/03/2022, 19:29
Director

Año del señor de 1432.

Durante más de cien años el castillo de Almorchón  estaba bajo el domino de la Órden de Alcántara. Antaño había pertenecido al temple, y su ahora nueva remodelación había mejorado la obra defensiva inicial. El catillo de Almorchón era uno de los tres castillos de la encomienda de Capilla (situada al sur de la corona de Catilla (y éstos eran las fortalezas de Capilla, Almorchón y Garlitos). Se encontraba en lo alto de un promontorio rocoso de la Sierra de Tiros, desde donde se podía divisar perfectamente la gran vaguada por donde pasaba la Cañada Real. La orografía del terreno hacía esta fortaleza inexpugnable por tres de sus lados y de muy difícil acceso por el sudeste donde se sitúa la puerta de entrada defendida por sucesivas construcciones.

Y hacía unos cincuenta años que no muy lejos del castillo de Almorchón se levantaba la villa de Cabeza de Buey, a quien se le concedió en tiempos término propio, un mercado los martes y el Fuero de Flores que era el que regía en la ciudad de León.

Por vuestra parte, no érais sino caballeros militares de la Orden de Alcántara asentados en el castillo de Almorchón. Y los tiempos actuales, en las últimas semanas dejaban algo que desear en el corazón de los fráteres: una conspiración interna, propia de vuestros hermanos, parecía estar urdiéndose dentro de la encomienda de capilla (y más concretamente, del propio castillo inexpugnable que defendíais). Ésto era la comidilla durante tales semanas, y no se hablaba de otra cosa mediante miradas entre los caballero, y silencio por contra para evitar pronunciarse (al mismo tiempo).

* * *

Por vuestra parte, no érais sino caballeros militares de la Orden de Alcántara asentados en el castillo de Almorchón. Y los tiempos actuales, en las últimas semanas dejaban mucho que desear en el corazón de los fráteres: una conspiración interna, propia de vuestros hermanos, parecía estar urdiéndose dentro de la encomienda de Capilla (y más concretamente, del propio castillo inexpugnable que defendíais). Ésto, sin saber si era cierto, se trataba al menos de la comidilla durante tales semanas, y no se hablaba de otra cosa mediante miradas entre los caballero, y silencio por contra para evitar pronunciarse en abierto (al mismo tiempo).

Una noche del mes de Agosto, calurosa como pocos, andábais ambos dos de guardia en el castillo, sobre la barbacana de la entrada al castillo (bajo vuestros pies había un acceso para entrar en el recinto), en su falda sur. En aquellas noches, la sierra de Tiros era un lugar donde podían verse las estrellas en el limpio cielo sobre aquella roca inexpugnable. De momento no había novedad de ningún tipo. Todo era silencio, y todos dormían. Allá, la población de Cabeza de Buey, no muy lejos, podía verse desde aquella impresionante altura.

Notas de juego

El castillo cuenta con una torre de homenaje cuadrada, y tres torres defensivas cilíndricas, una capilla, unos aposentos, (o edificio principal) un aljibe y dos recintos amurallados (concéntricos, destinados a garantizar la seguridad de sus moradores. En total, en el castillo, habrá unos quince o veinte frateres, y un alcaide (o custodio/capitán del castillo, también fráter).

Comenzamos. Como dijimos, podéis ir confeccionando vuestras historias a medida que jugamos. Estais de guardia sobre la barbacana

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24/03/2022, 11:51
Tomén de Arabalestra

Tomén comenzó a pasear hacia un lado pues ya se había cansado de permanecer de pie en el mismo sitio. Las guardias nocturnas no le agradaban, él consideraba que la noche se había hecho para el descanso y el reposo del hombre, así tendría más fuerzas durante el día. Por un momento se quedó observando el paisaje que aquella posición les regalaba, y el cielo estrellado le recordó por un instante pequeños momentos felices de su niñez. Bebió un poco de agua y volvió sobre sus pasos. Todo estaba tranquilo.

Junto a él se encontraba su compañero Guzmán. Se acercó para intentar iniciar una conversación que hiciese la guardia un poco más ligera.

—Se ha quedado buena noche ¿no?— le dijo a su compañero.

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24/03/2022, 20:44
Guzmán Oliva

Guzmán se detuvo para observar la noche con detenimiento, el cielo nocturno le fascinaba, una fascinación de la que desconocía la causa. "Es el hogar de Dios" pensó para si mismo ensimismado. La noche estaba siendo tranquila, los fuegos del patio interior contrastaban con la oscuridad estrellada, dibujando ecos de humo que se difuminaban a medida que se alzaban hacia el cielo. El olor a piedra y humo, tan característico, estaba alterado por culpa del calor, volviéndolo nauseabundo en algunas zonas de la barbacana. 

Había sido destinado al castillo de Almorchón gracias a las hazañas y servicios como escriba que su padre había proporcionado a la Santa Fe. Su llegada no había superado el mes y medio, y esta noche era su primera guardia nocturna. Sus superiores no habían sido especialmente amables con él, la indiferencia y la condescendencia habían formado parte de su entrenamiento en el castillo. 

Giró la cabeza y observó la puerta enorme que daba al edificio principal de la fortaleza, "Aquí es donde tienes que avisar si ves algo extraño o peligroso" le había dicho su instructor, con cierta sorna, antes de comenzar la guardia. 

Se ha quedado buena noche ¿no?

Por suerte no hacía la guardia solo, Sir Tomén de Arabalestra, uno de los pocos caballeros que le habían tratado con respeto, le acompañaba.

- Sir Tomén, sin duda una hermosa noche, una lástima que nosotros estemos aquí sufriendo el calor en lugar de poder disfrutarla en algún lujoso banquete degustando buena comida y buena bebida.- Dijo con una sonrisa amigable. - Por cierto.- Este era un asunto que le había sorprendido a su llegada a Almorchón.- Se que a la gente le encantan las habladurías y las historias nada recatadas, pero ¿Vos dais veracidad a los rumores que se escampan por todo el castillo sobre una conspiración?

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25/03/2022, 11:19
Tomén de Arabalestra

—Mi padre solía decirme "Los chismes los crean los envidiosos y corren tan rápidos como una liebre" Desconozco si son ciertos o no, mi querido Guzmán, pero lo que sí está consiguiendo es que desconfiemos los unos de los otros, y eso no es bueno..— en ese momento Tomén se acercó un poco más a su compañero y continuó hablándole, esta vez, bajando el tono de su voz —..y si de verdad hay certeza en ellos, la mejor forma de acabar con una conspiración es eliminando a los conspiradores.—

Tomén supo que se arriesgó demasiado en hablarle así a Guzmán, pero el comentario dibujaba la opinión que el caballero tenía sobre la situación que se estaba dando en el interior del castillo.—Lo mejor, para estar más seguros, será preguntarle al Comendador— apostilló, para suavizar el tono.

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25/03/2022, 12:02
Director

En estas chanzas de lógica preocupación estábais inmersos, bajo el cielo estrellado y sobre el suelo de la barbacana, cuando escuchásteis un ruido detrás de vosotros. Mirásteis desde las alturas al interior del castillo y vísteis la silueta de tres fráteres caminando despacio por el patio de armas, llevando un pequeño cirio uno de ellos como leve iluminación. Sabíais que muchos fráteres eran piadosos, y que por el día tomaban la espada y el escudo, y por la noche el Santo libro y el rezo, fuera donde fuera, eran su pasión.

Las tres figuras, entonces, se internaron en la capilla de la Magdalena (que estaba realmente próxima a vosotros, prácticamente descendiendo la barbacana y nada más, entre la entrada y la torre del homenaje. Tras unos cinco minutos volvísteis a escuchar pasos, por lo que mirásteis y entonces vísteis que solo salieron dos figuras, las cuáles ahora caminaban a un paso muy deprisa (sin cirio alguno), y se internaron rápidamente en el el dificio principal (los aposentos), que era desde donde habían aparecido delante de vuestra vista en un primer momento.

Después se hizo el silencio.

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26/03/2022, 19:38
Guzmán Oliva

Guzmán confiaba en las palabras de Tomén y así se lo hizo saber asintiendo y sonriendo de forma cálida mientras hablaba. Pero su conversación se vio truncada por un suceso extraño, marcado por caminatas nocturnas, miradas bajas y prisas impropias de la tranquilidad de dicha noche.

Sir Tomén.- Hizo un gesto señalando la capilla de la Magdalena.- Todo hombre de dios sabe que hasta los mejores conspiradores cometen errores, siguen siendo criaturas imperfectas del señor.- Sonrió levemente, se apoyó en la almena un segundo y tomó aire de forma decidida antes de pronunciar sus palabras.- Este suceso extraño podría formar parte de la supuesta conspiración, creo que es nuestro deber santo inspeccionar la capilla, para evitar que haya ocurrido nada que ponga en peligro a los habitantes del castillo. - Movió las manos de forma circular alrededor de su cabeza.- Al fin y al cabo nos han ordenado que hagamos guardia. - Dijo con una sonrisa cómplice antes de coger su ballesta, que estaba firmemente apoyada en el muro.

Notas de juego

Director, ¿Qué hora de la noche es exactamente?

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28/03/2022, 16:40
Tomén de Arabalestra

 A Tomén también le había parecido sospechoso el comportamiento de los fráteres. Dudó un instante en qué hacer, pues abandonar el puesto de guardia suponía una irresponsabilidad en la que no quería incurrir.

Pero, --¿Qué les ha llevado, a dos de ellos, salir tan rápido de la capilla?-- se preguntó Tomén. Las palabras de Guzmán tenían algo de razón, algo estaba ocurriendo y estaba pasando en nuestra guardia.

—¡Vayamos!..— le dijo Tomén a Guzmán —..mantente alerta, no quiero sorpresas esta noche— A continuación se dirigió hacia las escaleras más cercanas para bajar y acudir a la capilla.

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28/03/2022, 22:45
Director

Las estrellas flotaban en las alturas, y debía ser algo más de la medianoche*. Enseguida tomásteis las escaleras de la barbacana, la cuales descendían directamente al interior del patio del castillo (debían ser unos quince o veinte escalones). No tardásteis ni un minuto en acudir a la puerta de la capilla, de madera y emplazada en un acceso en arco de sillares bien labrados, junto a la muralla interior y la torre del homenaje. Las pocas teas y antorchas que cubrían la zona era vuestra única iluminación.

La puerta de la capilla de la Magdalena estaba abierta, y lo primero que se percibía al entrar en ella eran luminarias diminutas, pequeñas velas colocadas en un atril y sobre las paredes, en pequeños portavelas de hierro. Allí adentro no había bancos, como bien sabíais, sino un par de reclinatorios y otro más allá, en el fondo a modo de espacio de presidencia, y la imagen de María Magdalena en su interior. Sin embargo, bajo los ojos llorosos de la imagen había una escena terrible, una escena que acababa de ocurrir y que ahora estábais presenciando.

Allí, postrado entre los dos reclinatorios, aguardaba Martín de Ojeda, uno de los caballeros del castillo, hombre piadoso por donde los hubiera, según sabíais, y con quien habíais compartido mesa, charla, rezo y cabalgada. Estaba tumbado boca arriba, con una mano en su estómago y las prendas ensangrentadas... Al acercaros un poco, vísteis que podía tener varias cuchilladas bajo las mismas, pues sangraba sobremanera. Sus ojos cerrados, estaba inconsciente o tal vez muerto.

Notas de juego

*: más o menos.

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28/03/2022, 22:45
Martín de Ojeda

... -el tipo yacía bocarriba-.

Notas de juego

Podéis hacer una tirada con el d100 de Medicina con un bonus de +25% (si no la teneis, la Característica Cultura), para tratar de advertir su estado y comprobar el estado (pese a que pueden ser evidentes) del ataque. En la escena Off explico cómo hacer tiradas básicas.

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29/03/2022, 10:49
Tomén de Arabalestra

Tomén se cruzó con cautela pero con ligereza el patio de armas hasta la capilla. En cuanto entró por el portal vio un cuerpo en el suelo tumbado boca arriba.

—¡Allí!, ¡rápido!—  dijo señalando

Rápidamente se acercó a él y comprobó si estaba vivo o si veía alguna herida.

- Tiradas (1)

Notas de juego

He aplicado el bonus.

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29/03/2022, 10:51
Guzmán Oliva

Guzmán observó horrorizado la escena, el hedor alteraba la santa capilla y emborronaba el lugar, incluso la luz de la luna parecía mas oscura mientras alumbraba la escena. 

Se fijó en que Tomén tomaba la iniciativa investigando el cuerpo. Se colocó nervioso detrás de él, erigiendo su ballesta hacia la entrada de la edificación, mientras, a su vez vigilaba el cuerpo desde la distancia, escudriñándolo con los ojos.

Que... ¿Qué ha pasado aquí? - Su voz sonaba entrecortada mientras rompía el silencio de aquel lugar sagrado.

- Tiradas (1)
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29/03/2022, 21:51
Martín de Ojeda

Tomén se acercó rápidamente al cuerpo allí yaciente, en el interior de la pequeña capilla. Se agachó y notó que aún tenía pulso, y por lo tanto andaba aún vivo; y entonces lo sostuvo entre sus manos el cuerpo, tratando de hacer que volviera así, pero sólo advertir las feas cuchilladas que había bajo sus ropas: tres, concretamente, y en el estómago, muy certeras y profundas. Detrás, Guzmán, ballesta en mano vigilando desde la distancia, más expectante y asombrado que su compañero. Entonces, no sin grandísimo esfuerzo, el de Ojeda abrió sus ojos almendrados y trató de mantenerlos despiertos unos instantes.

San... San... Santiñ...án -alcanzó a decir, pero luego su cabeza se echó para un lado, mientras expulsaba sangre por su boca, además-. Aquellas fueron sus últimas palabras, bajo la mirada de la imagen de María Magdalena, y la vuestra.

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29/03/2022, 21:51
Director

Santiñán.

Aquel nombre era perfectamente reconocible enseguida. Gimén Santiñán era uno de vuestros fráteres, el más joven de todos, con apenas veinte años recién cumplidos, hijo de nobles padres y, según decían la malas lenguas, bastardo no reconocido de un clérigo de las altas esferas. Por recomendación y alcurnia estaba allí, en Almorchón, como tantos otros, aunque el joven fráter no se le daba mal el manejo de la espada y la equitación (puesto que en realidad no se había dedicado a otra cosa en su corta vida).

Afuera se escuchaban sólo los grillos.

Notas de juego

Tomén logra advertir que las puñaladas han sido la causa evidente de la muerte.

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30/03/2022, 18:35
Tomén de Arabalestra

Sosteniendo el cuerpo, casi sin vida, de Martín de Ojeda entre sus brazos, Tomén lo examinó rápidamente.

—¡Está sangrando!, ¡lo han apuñalado!— gritó mientras presionaba infructuosamente algunas de las herida, y observó,  impotente, cómo se le escapaba el último aliento al herido, no sin antes pronunciar unas últimas palabras.

—¡¿Santiñán?!— exclamó Tomén al oirlas. Miró entonces a su compañero Guzmán. Apesadumbrado Tomén dejó el cuerpo en el suelo de la capilla, le cerró los ojos con los dedos de su mano y pronunciando una breve oración se santiguó.

—Hay que buscar a Santiñán..— apostilló en un tono enfurecido a Guzmán —..daremos la voz de alarma, ese bastardo no debe salir del castillo, ¡vamos!— Desenvainando su toledana se propuso ir a los aposentos en busca de Gimén Santiñán.

 

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31/03/2022, 12:29
Guzmán Oliva

Guzmán estaba aterrado, sus labios se agitaban nerviosamente mientras vigilaba la entrada, observando de reojo, a su vez, la macabra escena. ¿Quien había podido ser capaz de matar a sangre fría a un hombre en este lugar sacrosanto? No podía hacer desaparecer esa pregunta de su joven mente, simplemente no podía. "¡Es una atrocidad!, sin duda obra de un servidor de satanás, un ser despreciable que camina entre nosotros" Su nerviosismo era palpable en su rostro y en el tambaleo con el que manejaba la ballesta, rezando porque nadie entrase en ese mismo instante. 

Nadie entró a la capilla, hecho que agradeció al Santo Padre. El hombre moribundo dijo un nombre distinguible entre balbuceos, antes de perecer: Santiñan.

Sir Tomén actuó con presura y contundencia. 

—Hay que buscar a Santiñán..— apostilló en un tono enfurecido a Guzmán —..daremos la voz de alarma, ese bastardo no debe salir del castillo, ¡vamos!

Guzmán lo agarró del hombro antes de que saliese por la puerta de la capilla.
Sir Tomén, debemos ser cautos. Si hacemos mucho ruido, las ratas saldrán huyendo. Tenemos que mantener la cabeza fría.- La voz nerviosa de Guzmán no acompañaba el pragmatismo de sus palabras.- Debemos actuar con presteza, jamas te lo negaré, pero creo que debemos avisar al alcaide y actuar en silencio. Debemos ser cautos para dar caza al cabecilla de esta conspiración.- Relajó el semblante y respiró hondo antes de continuar.- Y confiar que el Santo Padre vele por nuestras almas. 

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31/03/2022, 17:50
Tomén de Arabalestra

Por un momento Tormén pensó en lo que le acababa de decir su compañero Guzmán --Tiene razón, Santiñán no sabe que lo hemos descubierto, y si damos la voz de alarma, huirá-- agradeció al señor que, en esta situación, su compañero tuviese la mente más fría que la suya.

—Está bien, vayamos a ver al alcaide, rápido— 

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31/03/2022, 22:06
Director

Fuísteis pues a la torre del homenaje, dejando allí el cuerpo yaciente, dentro de la capilla. El alcaide del castillo de Almorchón era don Beltrán de Aguado, fráter que se hospedaba en la torre del homenaje de planta pentagonal y dos plantas, situada en el centro del flanco sur. Avanzásteis hasta la pequeña puerta adintelada de la torre, junto a dos saeteras, y accedísteis al interior. Subístes pues el primero piso, construido en madera y a baja altura (se utilizaba para funciones militares). El segundo piso, tambiénen madera, estaba algo más adaptado a funciones domésticas, y tenía una chimenea, ventana y una escalera de acceso a la terrada. El alcaide Beldrán dormía allí, en un camastro, junto a sus armas y armadura, en un mullido jergón.

Fue entonces cuando despertásteis al alcaide, y entre prisas y voces bajas le avisásteis con las terribles nuevas: el fráter Martín de Ojeda yacía muerto, como si de blasfemia se tratase, bajo los ojos de la imagen de María Magdalena, en el interior de la capilla. Y que sus últimas palabras habían sido Santiñán.

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31/03/2022, 22:06
Beltrán de Aguado

Éste se alteró, pero no dijo nada, sino que se levantó y tomó su espada (sin hacer acopio de la armadura), y entonces os comentó que...

...bajad conmigo, y la armas en alto... -señaló-. El alcaide era alguien recio y disciplinado, que no le gustaba hablar tres palabras si podía comandar con dos, y entonces salísteis de la sala, escaleras abajo-. Una vez en la primera planta, volvió a hablaros. 

Id a registrar las torres, uno a la oeste y otro a la este -efectivamente, ambas de mampostería gruesa y tosca-. Subid a ellas por si dais con ese fulano -dijo, y nunca se le habían escuchado palabras malas para nadie que no lo mereciera-. Si hay alguien en ellas, hacedlos bajar al patio. Yo iré a dar cuenta a los aposentos al resto de los fráteres... ¡Que no salga nadie del castillo! ¡Rápido!

Sin tiempo para reaccionar, cada uno de vosotros corrió hacia una de las torres...

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31/03/2022, 22:11
Director

Antes de salir de la torre de homenaje, en tu mano llevabas una antorcha tomada dentro de ésta. Tras salir al patio de armas, fuistes a la torre oeste, cilíndrica y de mero calado, que subía en escalera de caracol hasta su altura máxima. Entraste por el acceso, y aquello estaba oscuro, pero la antorcha iluminaba escalón a escalón.

Notas de juego

Haz una tirada de Descubrir (o valor de PER) y otra de Escuchar (o valor de PER), ambas con el d100.

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31/03/2022, 22:11
Director

Antes de salir de la torre de homenaje, en tu mano llevabas una antorcha tomada dentro de ésta. Tras salir al patio de armas, fuistes a la torre éste, cilíndrica y de mero calado, que subía en escalera de caracol hasta su altura máxima. Entraste por el acceso, y aquello estaba oscuro, pero la antorcha iluminaba escalón a escalón.

Notas de juego

Haz una tirada de Descubrir (o valor de PER) y otra de Escuchar (o valor de PER), ambas con el d100.