Partida Rol por web

Tomais vuestras chaquetas y salis a la calle con la decisión impuesta en vuestras cabezas, buscareis a vuestro padre y pensais encontrarlo.

La calle os acoge con un ambiente frio y humedo. Hace algunas horas que el sol se ha puesto y la temperatura ha caido bastante, además tener el mar tan cerca hace que el ambiente sea mojado, pero ya no es ningún impedimento para vosotros. Estais acostumbrados a las temperaturas y climas de la ciudad.

La luna ha sido levemente tapada por las nubes que no os ofrecen ningún tipo de seguridad, algunas luces chisporrotean luchando por mantenerse encendidas aun cuando todo parecía intentar evitarlo.

La noche no parecía dispuesta a poneros las cosas faciles.

Sabeis el camino, está un poco retirado, como unos 10 minutos a pie. Ya solo queda comenzar a andarlo...

Salimos al exterior, el frío de la noche azota nuestros rostros, admito que no pensaba que haría tanto pero tampoco es que me sorprenda. Me subo la cremallera de la chaqueta y el cuello todo lo que puedo, disimulando un escalofrío y mirando a mi hermano pequeño de reojo.
-No te apartes de mí, papá me mataría- le espeto con mi característico tono de burla, aunque en realidad no tiene anda que ver con papá. No quiero que le pase nada, no me lo podría perdonar, yo cuidaré de él siempre. Pase lo que pase, es mi hermano.

Empiezo a andar con decisión hacia la dirección que me dijo antes de marcharse. Estoy asustado, claro que sí, pero no dejo que se me note. Meto las manos en los bolsillos de la chaqueta y camino decidido y sin duda aparente.
-Si te digo que te escondas te escondes, ¿vale?- le aclaro a Sammy antes de llegar al lugar. la zona no es muy recomendable y no sé muy bien qué esperar...

Hace frio, me arrepiento de no haberme puesto un jersey mas gordo. Imito a Dean abrochandome la chaqueta y me pongo los guantes ademas del gorro calandomelo hasta las orejas. Cuando me habla solo puedo asentir. Le sigo con mis cortos pasos intentando no perderle mucho de vista.
Cuando llegamos me vuelve a hablar y mi mirada sigue sin saber por que me lo dice pero articulo Lo hare, no te preocupes y asiento mientras espero a que continue, es el unico que sabe llegar ¿por que papa no habra vuelto? ¿por que Dean me pedira que me esconda? pienso para mi mientras caminamos por la zona, no conozco mucho de la ciudad, solo voy a clase y vuelvo todo lo deprisa que puedo. Una farola tintinea, su luz se apaga y se enciende, la miro de reojo, todas estan igual, dan un aire mas terrorifico a todo el lugar. Me acerco mas a Dean, no es que tenga miedo, bueno si un poco pero no quiero demostrarlo.

Durante vuestro trayecto hasta el muelle es tranquilo, quizás demasiado tranquilo. Parece como si todo el mundo se hubiera recogido antes en sus casas y los coches hubieran dejado de circular.

En el camino apenas veis pasar una pareja que camina en dirección contraria a la vuestra y algún mendigo que se revuelve entre sus cartones para intentar evitar el frio que intenta calar en sus entrañas.

Al final de la calle podeis ver el muelle, solo un par de calles os separan de él.

Al intentar cruzar la calle un coche os pasa rozando mientras aprieta la bocina con fuerza haciendoos retroceder del susto, después continuais con vuestro camino llegando hasta la parte externa del muelle.

Al llegar allí veis unos cuantos coches aparcados, en seguida reconoceis el coche vuestro entre ellos, aparcado y silencioso. Nadie está dentro ahora mismo.

Por lo demás todo sigue igual, ningún alma, ningún ruido y la oscuridad que rodea las naves que dan paso al oscuro y espeso mar...

Seguimos nuestra marcha, silenciosa y tensa cómo pocas veces, miro a menudo a mi hermano pequeño, el saco de mocos listillo de Sammy...
Doy un respingo bastante importante exclamando un "¡Joder...!" cuando ese coche pasa como una exhalación por delante nuestro. Mi brazo se extiende de forma casi automática para frenar a Sam y me quedó un par de segundo observando cómo se aleja aún con la respiración agitada antes de negar con la cabeza y volver a andar.

-Mira ya llegamos, ahí está... y también el coche de papá- sonrío triunfalmente, cómo si fuera un gran logro el haber llegado allí, pero cuando ya estamos junto al vehículo me doy cuenta de que no hemos conseguido absolutamente ni una mierda.
-Será mejor que no alcemos mucho la voz ni hagamos mucho ruido...- hablo algo por lo bajo mientras miro alrededor con el ceño fruncido. Apoyo ambas manos en una de las ventanillas y observo el interior del coche pero no parece que haya nada destacable así que le hago un gesto con la cabeza a Sammy para que me siga y andamos hacia los almacenes más cercanos.

Un coche que se acerca, lo unico que puedo hacer es que me freno un poco aunque Dean siempre tan protector como siempre pone el brazo para cubrirme Puedo cuidarme solo, no soy un bebe ya. solo lo pienso mientras le miro de reojo y continuo detras de el todo lo deprisa que puedo para no perderle, sigue haciendo frio y los guantes no me cubren mucho pero menos es nada.

El coche de papa, pero no esta el y no parece que le falte nada, sino Dean lo veria al ver su interior. Asiento y le sigo hacia los almacenes mientras miro a la oscuridad con algo de miedo, ojala papa este bien y solo haya tenido que quedarse haciendo horas extras.

Caminais adentrandoos en el interior de los muelles, despacio, con cautela pero con el nerviosismo en el cuerpo de no saber que habrá en el siguiente paso que deis.

Las sombras revoloteantes que había cuando os habiais empezado a adentrar en los muelles han dado paso a una oscuridad casi total, la luz de la luna ha sido tapada completamente por las nubes. Vuestros ojos no tardan demasiado en acostumbrarse a la oscuridad viendo de nuevo sombras y demás movimientos tenebrosos, aun más para Sam.

No se escucha más que el viento golpeando con las paredes metalicas de algunos edificios.

Y de repente un golpe suena no demasiado lejos, un golpe como si golpeara algo de manera brusca contra una pared, después un sonido de cristales... para retornar el silencio...

Mi ceño sigue fruncido y creo que todavía lo hace más presa de la preocupación. Joder, no debería haber traído a Sammy aquí... Pero dejarlo solo tampoco hubiera sido muy buena idea, supongo.
Le miro y le sonrío con cierto aire burlón, como si estuviera todo bajo control.
-No te estarás cagando de miedo, ¿no? Parece una peli de serie B- le comento en voz baja para intentar relajar el ambiente. Quizá consiga que se lo crea y todo, yo sin embargo estoy alerta a cualquier sonido o "sombra" que se mueva.

De repente se oye un golpe y unos cristales rompiéndose, casi me da un puto ataque pero consigo no gritar, sólo doy un traspiés y empiezo a correr hacia aquella dirección.
Sé que es peligroso, pero también podría ser papá. Me aseguro de que Sam vaya siempre detrás de mí y no me adelante, deteniéndole con el brazo si hace falta.

No tengo miedo, no me asusta nada digo mientras trago saliva y miro a Dean y me encojo de hombros al oir el ruido de los cristales.
Dean se pone a correr y solo puedo seguirle lo mas deprisa que puedo, aunque me quedo un poco atras, no tengo la suficiente resistencia aun como para no despegarme de su espalda. Me sofoco, por la carrera y se acelera mi respiracion y mi pulso
Silencio es lo unico que hay como nuestros pasos chocando contra el suelo encharcado del muelle entre los almacenes.

Correis en la dirección en la que habeis escuchado el sonido, pero después de girar un par de esquinas os dais cuenta de que os habeis perdido, ya no sabeis muy bien de donde provenía el sonido.

Os parais, intentando ubicaros entre tanta oscuridad, cuando empezais a sentir un olor a quemado que penetra dentro de vosotros y os hace buscar el origen.

Una nube de humo se extiende poco lejos de vosotros, girando una esquina os la encontrais. Es un almacen ardiendo en llamas, unas llamas que os hacen recordar vuestro suplicio en el pasado, en vuestra propia casa, con vuestra propia madre...

La luz inminente alcanza vuestra retina ya acostumbrada a la oscuridad haciendo que vuestros ojos se cierren por un momento para poder acostumbrarse a la luz que ahora hay.

Cuando conseguis abrirlos del todo podeis ver una de las ventanas rotas, seguramente la que ha producido el ruido que os ha alertado por la que salen algunas llamas ahora. La puerta queda enfrente vuestra, pero hay algo mas...

Un cuerpo yace por debajo de la ventana rota, desde la distancia en la que estais podeis ver el bulto con forma de cuerpo pero no reconoceis más que una sombra.

Tras correr entre los almacenes un rato me doy cuenta de que nos hemos perdido, lo cuál desde luego no digo en voz alta... Pero entre lo oscuro que está y quizá a causa de los nervios y la preocupación, todas las naves me parecen casi iguales, me cuesta horrores poder orientarme aunque no dejo de comprobar que Sammy sigue detrás de mí todo el rato.
Algo extraño sucede de repente, un olor a quemado intenso y una nube de humo espeso que se va levantando, las llamas iluminan la noche y nuestros pasos hacia el lugar del supuesto accidente.

Una vez delante, mi respiración y mi pulso se aceleran en sobremanera recordando aquel fatídico día, por suerte no creo que mi hermano recuerde nada de eso pero en un instante me siento inseguro y tembloroso.
Aprieto los puños con fuerza, obligándome a mantener el control de mí mismo y de la situación por él. Al menos simularlo.
-Quédate aquí, no te acerques al fuego- le digo mirándolo con seriedad antes de subirme la chaqueta un poco por encima de la cabeza y correr hacia el cuerpo cada vez más agachado.
Intentaré cogerle y arrastrarle fuera del alcance de las llamas. ¿Puede ser papá? De momento me limitaré a apartarle del peligro, es lo importante.

Corro, pero me estoy cansando mas de lo que podria imaginar, Dean corre muy deprisa, demasiado para mi. Creo que nos hemos perdido, pero no se lo dire puede que me equivoce.
Cuando llegamos fuego, me recuerda vagamente a mi infancia a una imagen de cuando era un bebe en los brazos de mi hermano, el mismo dia que se quemo nuestra casa y donde nuestra madre... Sacudo la cabeza y le miro como me habla

Dijiste que no me separara de ti ¿en que quedamos? crei que eso era lo que tenia que hacer y ahora me pides. Y si papa esta dentro, puede que no puedas sacarle tu solo de ahi mi mirada se desvia a la ventana rota y al cuerpo que hay alli. Papa, no puede... me callo y miro Dean, luego a ese cuerpo ¿quien podra ser?

Corres hacia el cuerpo que yace en el suelo, poco a poco las llamas parecen hacerse vivas, no tienes claro si es por motivo de tú acercamiento progresivo o quizás por que realmente el fuego se está avivando.

Cuando te encuentras como a 4 metros de allí una explosión resuena por otra de las ventanas, reventando otro cristal que sale echo añicos y propulsado hacia fuera. Te sorprende y cuando levantas la mirada ves algún cristal que viene directo hacia tí con fuerza como para clavarse en cualquier parte de cuerpo, con habilidad consigues esquivarlo y llegar hasta el cuerpo.

Compruebas con alivio que no corresponde a tú padre. Parece otro hombre, no le reconoces ya que no le habias visto antes, sin embargo puedes ver que está agonizando su muerte. Su cuerpo está lleno de rajas provocadas por los cristales que hacen fluir la sangre con soltura y tiene como quemaduras en los brazos y una parte de la cara, aparte del golpe de la caida.

Aunque te pones a su lado, sigue con los ojos en blanco sin mentar palabra.

Después de las últimas palabras de Dean, este sale corriendo hacia el cuerpo que yace en el suelo, dejandote solo por un momento.

Ahora sin la protección de tú hermano mayor, la oscuridad parece hacerse más profunda, más tenebrosa, más agobiante. Las sombras oscilan detrás tuyas con el tintineo de las llamas saliendo por la ventana del edificio.

Y como surgido de la nada una explosión ocurre dentro, reventando otro cristal y propulsando los mismos hacia el exterior. Compruebas, con alivio que Dean es capaz de esquivarlos con habilidad y colocarse al lado del cadaver.

Ves el edifio que se abre como dando un abrazo en forma cuadrangular que solo tiene entrada por el lado en el que estais vosotros y cercado por el resto, algo que no os habiais percatado antes.

Me sorprendo a mí mismo al esquivar con facilidad esos cristales que estallan cerca de mí. Dicen que la adrenalina provoca reacciones así, supongo que habrá sido eso o simple suerte, no es que vaya a pararme a pensarlo.
El sudor ya empieza a apoderarse de mi frente y mi espalda cuando me doy cuenta de lo herido que está el hombre que no es nuestro padre. Quizá sea egoísta pero no puedo evitar sentirme algo aliviado. Aún así le cojo de las axilas y lo arrastro por el suelo hasta donde está Sammy, respirando aliviado ya que aquí el aire no está tan cargado por el humo.

-Vamos a llamar a una ambulancia, no se preocupe- le digo al desconocido no demasiado convencido de que pueda oírme. Busco el móvil en mis bolsillos y se lo lanzo a mi hermano para que se encargue de la llamada mientras yo chasqueo la lengua mirando al accidentado. No es que sea muy bueno en primeros auxilios...
Paso la manga de mi chaqueta por la frente para secar el sudor que me empieza a atosigar dejando patente mi estado de tensión.
-¿Oiga...? Despierte, joder- sacudo un poco al tipo y finalmente me decido a buscarle el pulso en la yugular. Si está muerto quizá sea el momento de retirarse...

Un escalofrio recorre mi espalda y me giro para mirar hacia atras, solo es mi imaginacion. Una nueva explosion hace que me gire y vea lo que hace el edificio, es como si me llamara. Es muy extraño que se haya abierto asi, que muestre esa disposicion. Me giro al oir de nuevo la voz de mi hermano, me quedo quieto, es lo que me ha pedido aunque me gustaria ir a ayudarle, me lanza el movil, al principio parece que se me va a caer de la mano mientras lo recojo pero lo mantengo. Marco tembloroso el numero de urgencias y espero a que me de el tono para hablar atropelladamente.

Urgencias? necesitamos una ambulancia y a los bomberos en el muelle, hay un hombre herido o muerto y el almacen esta ardiendo..No, no se donde es, solo que hay fuego y que si no llegan pronto morira si no lo ha echo ya

Zarandeas al hombre pero no parece volver en sí. Pero después de un poco no recibes respuesta por su parte, las manos empiezas a tenerlas empapadas de sangre de el, incluso con algún leve corte por entrar en contacto con alguno de los cristales que traspasan su piel.

Buscas el pulso en su cuello y después de un poco te das cuenta de que carece de el. Su cabeza cae hacia atrás como un peso muerto mientras sus pupilas se pierden en algún lugar de su cabeza en el cual ya no puedes verlas.

Sam marca el teléfono de urgencias y espera mientras le da un par de tonos, luego, posterior a un chasquido, una voz femenina aparece al otro lado del aparato.

-¿Diga? - resuena la voz a través del auricular.

Cita:

La mujer al otro lado, parece sopesar tus palabras para luego chasquear la lengua y contestarte.

- Chico, si no me dices donde estais no puedo ayudaros. Además, no ha habido ningún aviso de incendios por la zona. ¿Estás gastandome una broma?. Si es así, no tiene ninguna gracia. Con este teléfono no se juega.

Mi boca se queda seca de golpe al darme cuenta de que el hombre acaba de morir en mis brazos. Mis manso tiemblan, aún sosteniéndole la cabeza con una de ellas incapaz de reaccionar para soltarle. Le miro sin apenas parpadear, saliendo de mi estado de shock cuando oigo a Sam hablar por teléfono.
Carraspeo y dejo la cabeza ya inerte del desconocido en el suelo, cerrándole los ojos antes de incorporarme con firmeza.

-Si es urgencias deberían de darse más prisa que eso... Dile que estamos en el polígono este del muelle, junto a la nave de Viubbi- mi tono resulta cortante y contundente, no estoy en mi mejor momento anímico que digamos y me sigo sintiendo a punto del colapso al no saber dónde peude estar mi padre. ¿Dentro? No, joder, seguro que dentro no. Me obligo a pensar eso negando con la cabeza enérgicamente, dejando que Sammy diga eso por teléfono para empezar a correr nuevamente, esta vez alrededor del almacén incendiado pero a suficiente distancia para que no supongo un peligro.
Quizá veamos a alguien más que necesite ayuda y no sea demasiado tarde para él. De momento la adrenalina es demasiado alta para detenerme a pensar en la muerte.

La mujer no me cree y Dean no se que esta haciendo, ese hombre le ha dejado solo. Escucho una direccion y comienzo a hablar casi con voz temblorosa

polígono este del muelle, junto a la nave de Viubb. Dense prisa, mi padre esta en peligro, hay un hombre muy mal aqui que se esta muriendo las lagrimas comienzan a aflorar en mis ojos, recorren mi mejilla cuando estoy a punto de decir algo a Dean, le veo entrar en el almacen.

Dean, ¡no entres! mi hermano acaba de entrar, se va a quemar, no tarden por favor

Dejas a tú hermano hablando por el teléfono al lado del cadaver del hombre y corres en dirección a la nave.

Como has podido comprobar solo está ardiendo la zona por la que el hombre salió despedido, el resto aún parece que no ha sufrido desperfectos por el fuego, es como si no se extendiera, si solo se focalizara.

Corres de un lado para otro moviendote por las paredes hasta que algo llama tú atención.

Unas pisadas resuenan dentro como golpeando contra un suelo metalico, por la distancia entre golpe y golpe deduces que están corriendo, no tarda demasiado en acompañar a las pisadas alguna voz lejana.

- Marion, acorralalé por ahí. ¡¡Corre!!.

Pronto relacionas la voz con la de tú padre, está ahí dentro. A la tal Marion no la reconoces, no has oido hablar de ella nunca.